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The Firts Kiss (2Min) "Two Shot" por Kang Hyun Soo

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Notas del capitulo:

Encuentros, rupturas, aparicion especial de otros personajes. LEMON

Gracias por sus hermosos mensajes, hoy para algunas habran respuestas.

La habitación es sencilla pero lujosa; cortinas color tinto cubren la puertaventana del balcón, la cama es de caoba, con sabanas de seda color rojo, las mesas de noche a los costados están decoradas con velas aromáticas y la cómoda está repleta de juguetes sexuales que Minho ni siquiera sabía que existían.


Está sentado en el borde de la cama, nervioso; el teléfono móvil suena en el interior del bolsillo de su pantalón, es Chanmin. Su novio está preocupado por su extraña desaparición, por la tormenta que se desborda a torrenciales esa noche y porque Minho simplemente no se retrasa y tampoco olvida un aniversario. El moreno apaga su teléfono móvil y vuelve a guardarlo.


La puerta se abre; Taemin tiene un lazo negro alrededor de su cuello color negro y una tanga color rojo, los ojos perfectamente delineados, el cabello rubio largo bastante desordenado y las orejas horadadas. Ahora sus músculos están un poco más marcados y su cuerpo moldeado por el baile. Enciende el equipo de sonido y la música comienza a sonar y con ella Taemin se empieza a menear.


Pero a Minho no le importa el baile sensual que Taemin le está haciendo, a Minho le importa el hecho de que Taemin ha olvidado su rostro. Taemin gira y comienza a moverse arriba y abajo con sus piernas juntas, de espaldas a Minho; éste, se levanta y lo abraza sujetándolo por la cintura con fuerza. Taemin abre los ojos como platos y separa las manos de Minho de su cuerpo con brusquedad, gira sobre sus talones y lo empuja haciéndolo tropezar con la frontera de la cama provocando que Minho caiga sentado sobre el frio suelo de la habitación.


– ¿Qué haces?, ¿acaso no te explicaron el protocolo?, yo bailo para ti, me desvisto, te desvistes, luego tenemos sexo oral y por ultimo me penetras. En otras palabras es simplemente sexo, no hay caricias, ni besos, ni cursilerías. –Se cruza de brazos–. O sea es solo sexo casual y rutinario, algo de momento y sumamente rápido, ¿entiendes?


Minho baja la mirada y solloza abrazando sus piernas; “cuanto has cambiado mi amor”. Taemin se alarma ante la situación y se acerca a Minho, tomando asiento en el borde de la cama; esto es incómodo pero no hay de otra, asi que se arma de valor y pregunta–: ¿Qué pasa contigo?


– ¿Ya no me recuerdas Tae? –Pregunta Minho con la voz quebrada levantando el rostro–. ¿Ya olvidaste tu primer beso?


Taemin se levanta de la cama hecho un lio, espantado, con la boca abierta y sus manos cubriéndola, tiene los ojos abiertos como platos y le cuesta respirar. Sus ojos se cristaliza y dice con dificulta–: ¿Mi-Minho?, ¿Cho-Choi Minho?, ¿el chico de la cuadra trasera de mi casa?


Minho se levanta y ordena su ropa y camina hasta pararse frente a Taemin pero este da un par de paso atrás y se distancia suplicándole que no se acerque entre sollozos y alaridos queriendo saber porque ha regresado despues de diez años, pero Minho no sabe responder esa preguntas y guarda silencio hasta Taemin grita un “Quiero que te largues de mi vida para siempre”.


 


*****


 


El sonido de las agujas del reloj se escucha en el interior de las cuatro paredes blancas y azules que lo rodean. Las manecillas marcan exactamente las 12:30 am, hace frio, su cuerpo lo siente pero no es capaz de moverse, está en posición fetal y no ha dejado de llorar. Lleva tres días sin salir, comer y dormir. Olvido por completo su trabajo y se ha dejado caer en el vacío y la agonía de una vida mísera llena de recuerdos y promesas rotas.


Ha bajado de peso, Taemin están en el límite de la vida y la muerte tocando fondo. ¿Cuánto tiempo más tiene que pasar para que el reloj se detenga y con él su vida?


El timbre retumba por todo el pequeño apartamento pero Taemin no se inmuta en lo absoluto y lo deja sonar. Nuevas lágrimas corren por su nariz y mejilla hasta chocar con la cama. Parpadea una y otra vez débilmente, con la esperanza mentida en el bolsillo roto de su pantalón. Tiene los labios agrietados y morados, el rostro pálido y el cuerpo desnudo apenas cubierto por su bóxer blanco, está temblando, sabe incluso que tiene fiebre pero su salud le importa un comino ahora. Él solo quiere morir.


La puerta de su habitación se abre de una patada, pero ese acto tampoco lo hace inmutarse, Taemin sabe que se trata de Jongin, su ex y mejor amigo.


– Maldita sea Taemin, ¿qué demonios pasa contigo? –grita Jongin y Taemin lo observa con ojos rojos, dilatados y vacíos.


Jongin toma asiento en el borde de la cama y acerca su mano a la frente del chico que nunca dejara de amar, está ardiendo y se alarma. Saca del interior del closet un par de prendas, una franela manga larga color gris y un mono azul celeste. Entra en el cuarto de baño y prepara la tina con agua caliente, regresa a la habitación y toma el cuerpo de Taemin entre sus brazos para luego acostarlo en la tina y comenzar a bañarlo.


– ¿No vas a decirme nada? –pregunta fregando el pecho de Taemin con una esponja, con mucho cuidado para no lastimarlo–. Me estas matando Taemin. ¡Me estas matando!


– Jongin… –tartamudea–… Jongin, ha vuelto.


 


*****


 


Jongin está vuelto un lio en su interior, caminando desde el sofá de la habitación hasta la puerta del baño, volviendo su vista de vez en vez al cuerpo cubierto hasta la cintura con sábanas blancas; tiene las manos juntas sobre su pecho, mientras una intravenosa está sujeta a la muñeca izquierda y el monitor de pálpitos marca el constante latido del corazón de Taemin.


¡¿Qué debe hacer?! Se revuelve el cabello exasperado y patea el aire, ¿debería buscar al bastardo que le hizo esto? Pero se retracta al instante. Ni siquiera sabe su nombre o domicilio, Taemin lo menciono muchas veces en el pasado pero nunca le dijo su nombre. Sale de la habitación para respirar aire fresco y poner a trabajar su materia gris o se volverá loco.


 


*****


 


– ¡Doctor Shim! –exclama un enfermero a mitad del pasillo llamando la atención del mencionado.


Chanmin se acerca a paso lento y calmado hasta al chico de ojos felinos quien lleva en su etiqueta dorada el nombre de Kim Kibum. El joven se aclara la garganta y arregla su flequillo, mira el historial del paciente y agrega–: Tenemos un paciente por desnutrición en el piso quince habitación cuatro.


– Comprendo. ¿Nombre del paciente?


– Lee Taemin.


El nombre retumba en sus oídos como un mar enfurecido y se percata de quien es. Traga saliva y como una película recuerda la noche en que Minho llego tarde, completamente empapado, con los ojos rojos, temblando de frio y un obsequio de aniversario hecho añicos. Chanmin corrió para ayudarlo preguntando donde estaba pero solo obtuvo como respuesta “Lee Taemin me ha olvidado”.


 


*****


 


– ¡¿Joven Choi?! –dice la secretaria de su agente deportivo desde la puerta de la oficina, con la mitad de su cuerpo apenas a la vista.


– ¿Cuantas veces te he dicho que toques la puerta antes de entrar Sulli? –reclama su jefe a punto de arrancarse el cabello.


– Cálmate un poco Jinki –dice Minho y vuelve su vista a la chica, quien ahora mantiene la cabeza agachada avergonzada–. ¿Qué es lo que pasa Sulli?


– El señor Chanmin está en la línea cuatro.


Minho suspira y asiente, mientras, Jinki rueda los ojos con fastidio y le hace una señal a Sulli con la mano para que se retire. La puerta se cierra y Jinki peina su cabello con una mano, toma una bocanada de aire y agrega–: Tu novio va a terminar por perjudicar tu carrera como futbolista Choi.


– Relájate, yo me encargo de eso.


Minho contesta la llama con demasiada paciencia y escucha detenidamente las palabras de su novio para acabar completamente pálido sobre su asiento con la boca ligeramente abierta y seca. La cabeza le da vueltas siente que se va a desmayar pero su agente le ordena que se calme y respire porque no quiere un muerto en su lujosa oficina. El moreno finalmente se estabiliza y susurra, titubeante, “Taemin está hospitalizado”.


 


*****


 


La brisa de otoño choca con su rostro, mientras corre directo a la entrada del hospital. Minho está desesperado y aturdido, sabe que el horario de visita acabo hace exactamente media hora, solo confía en un milagro. Entra al interior del edificio mirando a los lados sin saber exactamente qué rumbo debe seguir, visualiza a Chanmin a la distancia y jadeante le suplica que lo deje verlo.


Su novio, odiándose asi mismo, asiente y le indica a Minho el rumbo, se lo agradece y sube al ascensor. Los minutos transcurren demasiado lentos, demasiado exasperante y el ascensor no deja de detenerse en cada piso. Finalmente la voz del auto parlante anuncia el piso 15 y Minho es el primero en salir. Corre por el pasillo hasta la puerta de la habitación que tiene en la etiqueta dorada el nombre del paciente, el nombre de Taemin.


Minho abre la puerta de la habitación estrepitosamente alarmando a Jongin, quien yace sentado en el sofá de la habitación leyendo una revista de hace 7 años atrás, estaba leyendo el articulo acerca del accidente del famoso Cho Kyuhyun miembro de Super Junior. Tira la revista sobre la mesa baja de centro de madera con un florero en medio y pregunta–: ¿Qué hace usted aquí?, lo mejor es que se vaya. ¿Acaso no se da cuenta?, Taemin está en ese estado por su culpa.


Minho no está prestando atención a las palabras de Jongin, él está completamente ensimismado observando el cuerpo tendido sobre esa cama inerte; avanza un par de pasos empujando a Jongin para abrirse paso. Se acerca al borde de la cama y toma la mano de Taemin mientras acaricia con su mano libre el rostro huesudo y pálido del chico que ama.


– ¡Perdóname Tae!, perdóname por fallarte hace diez años. –solloza y cae de rodillas al suelo aun sujetando la mano del chico que acaba de despertar–. Yo iba a volver ese verano lo juro, pero todo paso tan rápido, yo no lo entendía entonces y perdí la esperanza… Tae tuvimos un accidente… mi hermano… él… falleció y… yo estuve en coma por tres meses… ¡Oh Tae! Yo de verdad quería regresar.


 


*****


 


– ¿Regresas a China? –pregunta Minho sorprendido ante la escena de un par de maletas y Chanmin ajustando su abrigo.


– Debes hacer tu vida con él, yo estoy de sobra cariño –acaricia el rostro de Minho y sonríe triste.


– ¡Max! –susurra Minho y Chanmin lo abraza con fuerza aspirando su aroma por última vez.


– Disfrútalo mucho y no lo dejes ir. –Besa su mejilla y se distancia, tomando el par de maletas y un bolso de mano.


Minho observa a Chanmin abriendo la puerta, la forma en como vuelve su mirada para sonreírle, y termina sintiéndose como hace diez años atrás. Minho sale del apartamento corriendo escaleras abajo hasta el estacionamiento; enciende su auto y pisa el acelerador. Ya espero demasiado por ese segundo primer beso.


 


*****


 


Taemin ha preparado una fiesta sorpresa de cumpleaños para el nuevo novio de Jongin, un chico alto y con una extraña personalidad llamado Park Chanyeol. Taemin ha prestado su apartamento par el evento; está ultimando los detalles cuando el timbre suena y Jongin grita “Yo voy”. Minho se espanta al ver el rostro de Jongin frente a él apenas vestido con un short de cuadros y sweater gris, no quiere imaginarse cosas pero aun asi no puede evitar que los celos lo invadan y acaba empujando a Jongin contra la pared lateral.


Entra al apartamento hecho una fiera gritando el nombre de Taemin, ordenándole que salga. Taemin sale del interior de la cocina y lo mira estupefacto y horrorizado. Lleva un delantal puesto y el cabello recogido, con unos jeans holgados a la cadera y el torso desnudo.


– Dime que no pasaste la noche con este idiota –apunta a Jongin con su dedo índice y el ceño fruncido sin apartar la vista de los almendrados ojos de Taemin. El menor resopla y ríe con ironía.


– Pasamos la noche juntos, ¿y qué?


– ¡Lee Taemin!


– ¿Qué?


– No mientas.


– Bájale dos a tu tonito y escucha. No es tu problema con quien paso la noche, he pasado casi cinco años de mi vida durmiendo con caras que no conozco y nombres que olvido al siguiente de día. Y tú no vas a venir con un drama a estas alturas de la vida cuando pudiste haberlo evitado hace diez años.


– Ya te explique lo que ocurrió.


– Aun asi, pudiste haber enviado una postal, una carta, algo. Pero no, no lo hiciste y ahora… ¿qué pretendes?, no puedes desaparecer y regresar como si nada hubiera pasado intentando recuperar algo que esta desecho.


Taemin solloza y Minho se acerca intentando abrazarlo pero el pequeño es necio y testarudo y termina golpeando su pecho con fuerza suplicando que se vaya, que lo deje y que no regrese. Minho llora en silencio y se deja golpear hasta que Taemin se cansa y apoya su frente en el pecho del moreno con los hombros caídos. Minho lo abraza con fuerza; Taemin no le corresponde pero tampoco lo rechaza.


Permanecen asi en silencio; Jongin quien ha estado presenciando la escena, inmutado, no mueve ningún musculo de su cuerpo y aguarda en el rincón en espera de que todo acabe y Taemin finalmente perdone al chico que ama.


 


*****


 


Minho se queda en la fiesta, sentando en el sillón individual de la esquina, observando a los amigos de Taemin y Jongin bailando en medio de la sala, y aunque el novio de Jongin es sin duda en pésimo bailarín está disfrutando el evento. Hay chicos chinos entre los invitados y un tal Jonghyun, un chico increíblemente meloso e irritante, risueño y moreno con un cuerpo sin duda excelente pero más bajito que Taemin.


Están bailando bastante cerca y acaramelados; el chico tiene la cintura de Taemin sujeta con su brazo mientras bailan con sus frentes juntas. Minho está sufriendo un ataque severo de celos, su sangre hierve; tiene la mandíbula apretada y el vaso sujeto a su mano se arruga desbordando el licor por su mano hasta tocar su pantalón de mezclilla negro. Minho se levanta del sofá y toma el brazo de Taemin bruscamente alejándolo de Jonghyun.


Camina por delante del menor, llevando un paso bastante apresurado, arrastrándolo literalmente escaleras abajo. Taemin no lleva abrigo y el frio es sencillamente abrumador. Se queja un par de veces y Minho lo ignora, aun esta irritado, no quiere escucharlo pero tampoco va a dejarlo a la deriva en su apartamento, donde una manada de lobos lo codician y enano con cara de dinosaurio estaba a punto de violarlo frente a sus narices. Incluso de solo pensarlo, Minho se siente asqueado.


Se detiene frente a su auto y le ordena a Taemin subir en él; Taemin golpea el asfalto con su pie derecho y se cruza de brazos haciendo puchero, negando repetidas veces con su cabeza. Minho revuelve su cabello y lo toma entre sus brazos como costal de papas y lo avienta en el asiento del copiloto de su convertible, le pone el cinturón y atraviesa el auto por delante para subir en él.


Minho se ajusta el cinturón. Taemin aún se remueve en su asiento, molesto, pero no hará ningún intento por bajar del auto; esta en cierta forma alagado por el arrebato de agresividad y celos que Minho ha tomado. El moreno pisa el acelerador y avanza.


Hay un silencio incomodo, el ambiente es tenso, a tal punto que puede ser cortado por un cuchillo. Taemin presiona el botón del capo y lo hace subir; está muriendo de frio, sus dientes titiritan y tiene la piel de gallina. Por lo visto la idea de que Minho lo arrastra no fue del todo buena, solo lleva un sweater blanco con capucha y unos vaqueros azules, el resto de su cuerpo esta al descubierto mientras, Minho está súper abrigado.


Taemin frunce el ceño y observa al moreno reprobatoriamente y dice–: Me has traído hasta aquí sin abrigarme siquiera, que poco amable eres.


Minho aparca el auto a un costado del puente que están cruzando, se quita el cinturón y desabrocha su chaqueta para luego quitársela y dársela al menor. Baja del auto y sube a la acera, se acerca al borde del puente y apoya sus manos en él, a los lados de su cuerpo. Suspira y observa el horizonte oscurecido, sin una estrella en el firmamento. Agacha la mirada y traga saliva; se pregunta si todo esto es posible, si no se trata de una simple pesadilla, no puede ser que las cosas hayan cambiado tanto y, una vez más se culpa.


Taemin mira la espalda inclinada de Minho desde el asiento del copiloto y baja. Recarga su cuerpo en la puerta del coche y lo escucha sollozar, se estremece y da un par de pasos. Minho sabe, perfectamente, que Taemin está detrás de él y dice:


– No cumplí mis promesas y me odio por eso.


– Minho.


Lo interrumpe.


– No digas nada. Es todo, mi culpa.


– No lo es. Tú te fuiste es cierto, no escribiste ni diste señales de humo pero yo debí esperarte.


– Esto no es una novela Taemin, es la vida real. Era evidente que continuarías tú vida. Exactamente como lo hice yo. –Minho acomoda su postura y se cruza de brazos, aun de espaldas a Taemin y continúa–: ¿Hubiera sido diferente sino me hubiese ido? No, entonces no sabrías si me amarías aun, puede que te hubieras aburrido de mi presencia en algún momento y ahora nos odiáramos, pero tampoco fue bueno que me fuera porque hiciste de tu vida un…


Se detiene y traga saliva; vuelve a poner sus manos sobre el borde y suspira, cierra los ojos y aprieta los parpados dejando escapar algunas lágrimas. Taemin no objeta ninguna cosa y camina un poco más, se para justo detrás de Minho y lo abraza por la cintura pegando su pecho a la espalda inclinada del moreno, cierra los ojos y dice:


– No iba a dejar de amarte, no dejo de amarte y no dejare de amarte. Fuimos hechos el uno para el otro, pude haber tenido muchos hombres antes pero míranos ahora. Han pasado años, conoces lo que hice durante tu ausencia, deberías odiarme por eso y al contrario de lo que yo alguna vez creí. Estas aquí para mí una vez más, amándome como siempre.


– Taemin –susurra y el menor se distancia dejando espacio para que Minho de media vuelta.


El moreno acaricia el rostro de Taemin con la yema de sus dedos y roza los carnosos labios delineando el contorno; tiene su vista fija en ellos y no puede evitar relamer los suyos. Taemin asiente, como si acabara de leer los pensamientos de Minho y el moreno se aproxima, sus respiraciones chocan. Minho muerde su labio inferior, cierra los ojos y traga saliva.


Une sus labios con los de Taemin, es un beso suave y lento, sus labios se tocan, descarada pero tiernamente. La lengua de Minho se introduce en la cavidad de Taemin cuando se lo permite y el beso se funde en pasión y lujuria. Minho baja las manos de las mejillas de Taemin hasta sus hombros, subiendo y bajando; Taemin introduce sus manos entre el pantalón, tocando las nalgas de Minho con deseo y el moreno se estremece.


La falta de oxígeno se hace presente y toman distancia pegando sus frentes. Minho no sabe como pero la mano de Taemin ahora toca su punta y se desliza de arriba abajo, un escalofrió le recorre la piel y no está seguro de a que se deba pero es sencillamente placentero. Taemin susurra en sus labios “subamos al auto” y retira su mano; Minho gruñe por la ausencia y se apresura en subir.


Pone sus manos en el volante no está seguro de que sigue ahora pero espera que Taemin se mueva pronto. El menor retira las manos de Minho del volante y en un movimiento brusco sube a las piernas del moreno poniendo las suyas a los lados de las caderas de Minho, su mano se desliza por el asiento hasta la palanca y lo deja caer. Taemin es un experto en sexo, pero no quiere aprovecharse de eso ahora.


Besa el cuello de Minho con suavidad, moviendo sus caderas sobre las de Minho, haciendo que sus hombrías se rocen. Desabrocha los tres primeros botones de la camisa de Minho y lame desde el cuello hasta la piel expuesta de su pecho. Minho aprieta los muslos de Taemin con sus manos y toma iniciativa, se levanta un poco y besa el cuello del menor chupando un poco, desabrocha la chaqueta y se la quita, seguida del sweater, dejándolo solo con una franela negra con estampado de letras.


Taemin desabrocha el botón del pantalón de Minho y baja la bragueta, su mano presiona la punta del pene de Minho y luego sube; el moreno jadea y se desespera y hace un movimiento rápido. Ahora su mano está masturbando a Taemin pero las prendas estorban y Taemin se levanta chocando su cabeza con el capo del auto, se queja y luego ríen. Finalmente el pantalón es sacado junto al bóxer.


Minho levanta sus caderas y baja su pantalón con el bóxer; Taemin vuelve a sentarse en las caderas del moreno, sin aparta su vista del pene de Minho y agradecer a los cielos por tan maravilloso regalo, muerde su labio inferior y una vez más comienza a mover sus caderas. Ambos comparte fluidos entre el roce placentero. Taemin termina de desabrochar la camisa y lame los pezones de Minho hasta dejarlos erectos; Minho tiene sus manos en el interior de la franela, pellizcando los botoncitos rosados del pecho de Taemin mientras se besan.


Se distancian, Taemin vuelve a masturbar a Minho y el moreno aprieta las nalgas del más joven separándolas un poco e introduciendo su dedo índice. Taemin besa a Minho una vez más y detiene su mano, Minho gruñe por la ausencia y Taemin se levanta para comenzar a introducir el pene de Minho en su entrada. Nada asegura que el acto sea indoloro y Taemin se empuja de lleno, gimiendo por lo alto y comenzando a moverse al instante.


El sol comienza asomarse por el horizonte, ambos llegan al clímax y lo último que Taemin grava en su memoria es el sonido del humedecido pene de Minho saliendo de su interior con el susurro de un te amo en sus labios.


 


Fin

Notas finales:

Bueno como pudieron notar este es el final. Gracias por su apoyo.

Las quiero, espero su amor. :* :*


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