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NO TODO ES LO QUE PARECE por amber0714

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CAPITULO II: UNA INTERESANTE PERSONA

-Entonces Tatsumi-san, como ya dije estoy interesado en su talento. No hay muchas personas en su nivel siendo tan jóvenes y quería tenerlo de mi lado antes que cualquier otra empresa se hiciera de usted- Tetsuhiro continuo la conversación donde la había dejado antes de ser interrumpido.

-Bueno para serle sincero no sé porque esta tan sorprendido de mi nivel, si está más que claro que usted está al mismo que el mío y con conocimiento en otras áreas que yo desconozco. Sin mencionar que es menor que yo.  Decía Souichi de manera clara y relajada por fin había podido entrar en ambiente y los nervios los había dejado atrás. Su manera de ser salió a flote olvídense por unos segundos que estaba hablando con su jefe. Tanto alago le parecía exagerado.

-Hahaha… me gusta su manera de hablar. Por lo general todas las personas me dan por mi lado y jamás me contradicen su sinceridad es bien recibida Tatsumi-san- Se le había escapado una pequeña sonrisa que le hacía lucir encantador, compararlo con un hermoso ángel era muy acertado. Souichi por unos momentos se sonrojo ante la aparecía que logro percibir del su nuevo jefe. Se reprendió mentalmente por esto y por darse cuenta que su lengua se había soltado. En definitiva no iba a dejar una muy buena primera impresión.

-Lamento mi forma tan ruda de hablar, suelo hablar de esta manera la mayor parte del tiempo, hablo lo pienso sin analizarlo primero, perdone por eso. Se disculpó aunque no quisiera, lo único que faltara era que lo despidieran el mismo día en el que se supone hablarían sobre cuando iniciaría su nuevo trabajo-

-No se preocupe como dije prefiero la honestidad y sinceridad que la hipocresía y adulación. En cuanto a mi nivel solo le puedo decir que es necesario de otro modo sería solo un adorno más. Souichi no entendió el significado de esas palabras y el porqué de repente la sonrisa de Morinaga se había borrado dejándolo pensativo. Bueno como sea, en estos momentos estamos hablando de usted y no de mí. El contrato que le estoy ofreciendo es por 4 años si le agrada su trabajo y yo estoy satisfecho con su labor será un placer para mí rehacer el contrato por el tiempo que usted me establezca. En cuanto al lugar de momento será aquí en Tokio, hay sucursales alrededor del mundo pero la central es la de aquí, esa es la razón por la que el mayor tiempo estoy en Tokio. Pero no quiere decir que si en un futuro lo necesito en otra parte no lo vaya a mover, espero que cuando llegue ese momento usted este de acuerdo.

Bien eso no venía escrito en los papeles que le fueron enviados, ósea que estaría de un lado para otro, de acuerdo a lo que el jefe mandará, eso era un inconveniente. Después de todo tenía que estar al pendiente de su pequeña hermana. El haberla dejado en Nagoya con su tía no le pareció correcto, pero no podía sacarla de la escuela para llevársela con él y no le brindara los cuidados necesarios por estar ocupado en su trabajo.

Se quedó callado durante unos momentos, mientras Morinaga analizaba su rostro, al parecer no tomo en cuenta que la Empresa era mundial y existía la posibilidad de estar cambiando de residencia si así lo solicitaba la empresa-Esto representa algún inconveniente para usted Tatsumi-san?- Pregunto Morinaga ya que no recibía respuesta por el peligris, y no quería que se terminará arrepintiendo de tomar el trabajo minutos antes de firmar el contrato. No era mentira cuando dijo que estaba realmente interesado en él, cuando leyó su curriculum que le fue enviado desde la universidad de Nagoya, se quedó asombrado, había leído cosas similares pero en personas ya avanzadas en edad o en alguno que otro científico reconocido.

La posibilidad de perder al pelilargo como futuro trabajador le preocupaba pero tampoco le quería dejar ver que estaba necesitado por que aceptará. Después de todo si rechazaba la oferta lo único que tenía que hacer es seguir cubriendo los trabajos e investigaciones el mismo. En verdad deseaba que se quedará pero después de todo él era Morinaga Tetsuhiro no necesitaba de nadie para salir adelante. Bueno en vista de que tiene que pensar mi oferta que le parece si nos vemos en otra ocasión y me trae su respuesta.

-No hay nada que pensar acepto- Dijo sin más, no desaprovecharía la oportunidad de trabajar al lado de un genio que aparecía cada y nunca. Su curiosidad pudo más que los posibles inconvenientes que le traería más adelante el haber aceptado sin pensar los pros y los contras.

Tetsuhiro feliz (pero sin reflejarlo) abrió una carpeta y la acerco a Souichi, este era el contrato el cual establecía las cláusulas del mismo. Al parecer Souichi sería el encargado del laboratorio de Tokio; la sede principal de la empresa, supervisaría todos y cada uno de los experimentos que se llevarían a cabo dentro de la sucursal así como llevaría a cabo experimentos de diferente índole respecto al desarrollo de la agricultura, sin mencionar el atrayente sueldo que jamás imagino que tendría, pues siendo investigador era más que obvio que no tendría muchos ingresos, pero al ver la suma se sorprendió. Souichi estaba maravillado con lo que leía. Como era posible que un recién graduado tuviera tal oportunidad así sin más. Eso le olía sospechoso.

-Se puede saber que significa todo esto- Ahí iba de nuevo la personalidad tan directa del peligris. Me está diciendo que me va dar la oportunidad que todo científico espera durante muchos años, si no es que toda su vida para que le pase algo como lo que usted me está ofreciendo. Me puede explicar que fue lo que hice para recibir tan deslumbrante oportunidad. Decía desconfiando lanzando la carpeta lejos de él haciendo que llegara nuevamente a las manos de Morinaga. Este la tomo y la puso frente a Souichi para que continuará leyéndolo, no se inmuto ante el comportamiento grosero por parte del peligris pues ya había sido advertido por parte de su profesorado de la universidad a la cual asistía el mayor.

-Las cosas que hizo para merecer este contrato fueron las mismas que me llevaron a querer tenerlo trabajando con nosotros; Un deslumbrante curriculum, recomendaciones admirables, experimentos exitosos y sobresalientes, conocimientos que sobrepasan los de alguien de su edad, experiencia y aportaciones a la agricultura muy valiosas. Ni más ni menos. Y como dije es una oportunidad que le pienso dar, si no me resulta satisfactorio lo bajaré de puesto, como puede leerle en las cláusulas siguientes, además de que yo seré su supervisor así como su mentor en su capacitación como nuevo integrante en nuestra empresa. Decía Morinaga no quería que le resultará sospechoso algo que no era por lo que también le dijo los contras para que viera que no era un engaño o mentira lo que estipulaba el contrato.

-Usted anteriormente mencionaba que teníamos el mismo nivel, en cierta manera estaba en lo correcto, el puesto que le estoy dando es el que yo realizo dentro de la empresa. Pero al no tener quien me sustituya lo sigo haciendo. El haberlo encontrado a usted me quita un peso de encima y me permite utilizar mi tiempo en otras cosas que necesitan de mi presencia. Si aun así le parece sospechoso todo esto, llévese el contrato con usted y dentro de una semana nos reunimos y me dice que le pareció. Si hay algo que no le guste lo discutiremos para estar ambas partes de acuerdo- Le dijo para recargarse en su cómoda silla y poner ambos brazos en los descansos de esta y entrelazar las manos sobre sus piernas. El aura que emitía era la de un hombre de negocios confiado y con experiencia en lo que decía y hacía.

Souichi lo miro durante unos segundos y cerró el folder. A Morinaga lo decepciono un poco tal parece que no se daría la oportunidad de aprovechar esta oferta, que estaba más que claro que era única en la vida, pero en verdad necesitaba de que alguien tomara su puesto. El trabajo aumentaba cada día más y su cuerpo últimamente le estaba pasando factura con jaquecas continuas y cansancio extremo, tenía que hacer algo pronto o colapsaría tarde que temprano y la empresa caería en ruinas y el trabajo de miles de personas se terminaría y quedarían en la calle sin empleo. Tenía que pensar en las demás personas y no solo en él.

Esta era una de las características más sobresalientes de esta persona: bondad y compasión extrema. Algo no muy bueno en el mundo de los negocios, pero gracias a su conocimiento, experiencia y profesionalismo sabía cuándo bloquearlas y cuando tener que hacer uso de ellas.

-Nos vemos dentro de una semana, con su permiso Sr. Morinaga- sin decir más se levantó de la silla, tomo la carpeta y se dirigió a la puerta. Morinaga se sorprendió ante esta respuesta quería decir que lo pensaría, eso le dio esperanzas.

-Una cosa más Tatsumi-san- Dijo para detenerlo antes de tomar la perilla de la puerta-Solo en esta ocasión lo permití porque en estos momentos ni siquiera está trabajando con nosotros, pero para la siguiente cita procure ser más puntual, deja mucho que desear una persona impuntual- Dijo para dedicarle una leve sonrisa.

Por su parte Souichi le dedico una mirada que mataba a quien le fuera dirigida, no pensaba confiar en él hasta que hubiera revisado al derecho y al revés ese contrato.

Morinaga se quedó quieto sin saber que había pasado realmente. Esta persona sí que era peculiar; ruda, directa, inteligente y muy atractiva. Sería divertido el tener a una persona como el dentro de la empresa, en verdad esperaba que aceptara.

Cuando le hablaron de él los profesores de la universidad, considero la idea de ofrecerle una plaza dentro de su laboratorio. Cuando miro su curriculum deseaba que fuera el quien tuviera a esa persona laborando ahí. Ahora que lo conoce anhelaba que aceptará. Valla persona quien diría que se fuera a cruzar en su camino alguien igual a él.

-Que paso no salieron las cosas como querías Tetsuhiro, se veía bastante molesto cuando salió de aquí dando grandes pisadas- Decía Isogai con una pequeña sonrisa en sus labios. Morinaga era alguien extremadamente exitoso, audaz e inteligente, el hecho de que no le salieran las cosas como esperaba le causaba gracia.

Isogai era amigo de Morinaga, él le hablaba de tú cuando estaban a solas y todo el tiempo se la pasaba molestándolo con tal de verlo hacer rabietas cosa que casi nunca conseguía pero eso era lo que hacía divertido el intentarlo. Frente a otras personas le trataba de usted ya que una de las ordenes de Morinaga era que le trataran con respeto, quería que su padre viera que en su empresa lo tomaban como lo que era; una autoridad. No era por ser presuntuoso o querer sentirse superior, pero si no lo hacía así posiblemente su padre lo viera como signo de debilidad y no le tomará enserio el papel que representaba dentro de la empresa que era la del presidente.

Esa era la razón por la que todo el mundo actuaba tan rígido y perfecto a la hora del trabajo, querían transmitir la profesionalidad de la empresa y de quien la lideraba.

-No es que no me hayan salido como yo quería, es solo que es demasiado desconfiado. Bien por él, sobrevivirá dentro de la empresa si decide pertenecer aquí- Decía el peliazul no haciéndole mucho caso al rubio que acababa de entrar y no se había percatado de su presencia, el peligris lo había dejado desconcertado y ahora se encontraba en sus pensamientos. En cuanto Isogai este era uno de sus tantos intentos de hacerlo enojar por lo que no caería tan fácilmente.

-Es muy apuesto me pregunto si tiene novia- Se acercó al vino y comenzó a servirse una copa.

-No lo sé no le pregunte sobre su vida privada. En los papeles que me envió por correo indica que es soltero, así que casado no es. Cosa que no me sorprende del todo conociendo su carácter. A pesar de ser a puesto pone a pensar a las mujeres con ese genio que se carga. Decía Morinaga mientras masajeaba sus sienes, pues en esos momentos tenía dolor de cabeza y cerraba los ojos tratando de apaciguar un poco las punzadas. Mientras se encontraba con el peligris ni siquiera se había dado cuenta de algún tipo de dolor, una vez que se fue este todo le regreso de golpe.

Unos golpes en la puerta hicieron que tomara nuevamente la compostura e Isogai dejará la copa y tomará rápidamente unos papeles que se encontraban sobre el escritorio y se posiciono al lado izquierdo del peliazul.

-Adelante- Dijo Morinaga cambiando su forma de hablar de minutos atrás por una más profesional.

Abrieron la puerta y de ella apareció Dalila, la cual hizo una reverencia y procedió a hablar

-Me disculpo por interrumpir Sr. Morinaga, pero su prometida está aquí y desea pasar a verlo.

 

Notas finales:

Espero les guste y también me gustaria recibir su opinion respecto a él, así que envienme sus reviews comentando sobre lo que piensan Gracias por su tiempo ;)


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