---Kuroko Tetsuya POV---
-Sabes que es la conciencia?...-
Pues por lo que he investigado algunos la definen como; la capacidad de distinguir entre el bien y el mal a partir de la cual se pueden juzgar tus acciones, en cambio otros y por lo general las caricaturas lo exponen como el pequeo angelito que te quiere dirigir por el camino del bien y que te nsita a hacer cosas buenas y el pequeo diablillo que te puede guiar por el camino del mal y que te nsita a realizar malas acciones y ambos aparecen sobre tus hombros.
Pues bien, lo segundo es lo que me ocurre a m, Kuroko Tetsuya un chico “casi” normal, que cada vez que debe decidir entre el bien o el mal, se le aperasen nada ms ni nada menos que; Kise Ryouta, un chico de cabellos rubios, orbes dorados y un pendiente en su lbulo izquierdo, el cual viste traje, corbata, camisa y zapatos de una tonalidad blanca, adems de que posee una aureola dorada y un par de alas, el “supuesto” representante del bien, un ngel, mientras que por el otro lado esta; Aomine Daiki, un chico de cabellos y orbes azules, piel morena, el cual viste traje, camisa, corbata y zapatos negros, adems de que posee dos cuernos de color azul y una cola del mismo color con la punta en forma de flecha, el “supuesto” representante del mal, un demonio.
-Buenos das Kurokocchi-Me saludo el rubio con una enorme sonrisa en el rostro mientras que apareca sentado en la silla junto a mi escritorio.
-Que habr para comer hoy?-como siempre tan malhumorado y maleducado, el peli-azul apareci apoyado en el marco de la puerta observndome con el ceo fruncido.
Y es que para aumentar mi suplicio aquellas “criaturas” aparecen y desaparecen por su propia voluntad, adems de que comen e incluso son ms altos que yo… no las puedo controlar y cranme lo he intentado un milln de veces.
-Buenos das Kise-kun, buenos das Aomine-kun-salude ms que nada por educacin, aunque el rubio no es de mi total desagrado-hoy preparare tempura con arroz-le respond levantndome del lecho.
-Entonces que esperas para dirigirte a prepararlo-aquello no era para nada una pregunta, frunc el ceo.
-No soy tu esclavo ni nada por el estilo-exclame molesto, siempre era tratado as por el moreno-y ahora si me disculpan me voy a duchar-tome mis cosas y al salir, azote la puerta.
---Aomine Daiki POV---
Y aqu me encontraba de nuevo observando dormir apaciblemente sobre el lecho a Kuroko, en mi forma invisible… sonre sin siquiera poder evitarlo al verlo removerse en la cama y es que no poda evitarlo, estaba completa e irremediablemente enamorado de aquel humano que me haban ordenado arrastrar a la oscuridad, pero es que simplemente no lo logre o mejor dicho no pude hacerlo, aquella alma pura me cautivo desde el primer da en que comenz mi trabajo.
Suspire para casi enseguida pasar mi mano sobre su mejilla para acariciarlo un poco.
-Lo despertaras-esa irritante voz otra vez.
El ngel idiota apareci junto a m.
-Tu metete en tus propios asuntos!-exclame molesto y casi enseguida sent como Kuroko se remova y comenzaba a abrir su hermosos orbes celestes.
-Vez te lo dije-hablo nuevamente el rubio para alejarse de la cama y aparecer frente a Kuroko-Buenos das Kurokocchi-ah estaba su saludo irritante.
-Que abra para desayunar hoy?-cuestione frunciendo el ceo y me hice visible, esta vez apoyado bajo el marco de la puerta, aunque este enamorado de el no puedo evitar ser grun.
-Buenos das Kise-kun, buenos das Aomine-kun-saludo-hoy preparare tempura con arroz-me respondi levantndose del lecho.
-Entonces que esperas para dirigirte a prepararlo-aquello no son como una pregunta, ms bien pareca una orden, me arrepent de inmediato al ver su ceo fruncido ya que no haba sido para nada mi intensin.
-No soy tu esclavo ni nada por el estilo-exclamo molesto-y ahora si me disculpan me voy a duchar-tomo sus cosas y al sali de habitacin azotando la puerta.
-Tu siempre asindolo enojar, acaso no puedes ser ms honesto con l y contigo mismo-me regao Kise para casi enseguida desaparecer dejndome solo en aquella habitacin.
Suspire con molestia, que Kise me regaara era molesto, pero de todas formas tena razn, siempre terminaba discutiendo con Kuroko aunque casi nunca era mi intensin. Suspire con resignacin y decid dirigirme al cuarto de bao, deba aclarar las cosas con el peli-celeste, pronto se cumplira un ao desde que me haban asignado a l y creo que va siendo tiempo de que confiese lo que siento, aunque va en contra de toda mi naturaleza.
---Kise Ryouta POV---
Ah estaba otra vez el, observando a Kurokocchi dormir apaciblemente sobre su cama, y es que desde que a ambos nos haban asignado aquel humano de alma pura, el demonio se la pasaba la noche completa observndolo como si el chico fuera lo ms preciado para l y aquello me molestaba profundamente y es que al parecer los dos sentamos exactamente lo mismo por Tetsuya.
Aunque no me molestaba para nada compartir, que Aominicchi no fuera sincero con Kurokocchi y que lo hiciera enojar y que lo tratara con tanta brusquedad, era lo que realmente odiaba del demonio frente a m.
-Lo despertaras-le hice saber apareciendo junto a l.
-Tu metete en tus propios asuntos!-exclamo claramente molesto por que yo estaba ah.
Para casi enseguida ver como Kurokocchi se remova y comenzaba a abrir sus orbes celestes.
-Vez te lo dije-hable nuevamente, para enseguida alejarme de la cama y aparecer frente a Kurokocchi esta vez sentado en la silla de su escritorio-Buenos das Kurokocchi-salude con mi tono de siempre.
-Que abra para desayunar hoy?-cuestiono Aominicchi apareciendo apoyado bajo el marco de la puerta, como siempre maleducado, brusco y con el ceo fruncido.
Lo observe molesto.
-Buenos das Kise-kun, buenos das Aomine-kun-saludo Kurokocchi y mi molestia desapareci por arte de magia, as que no pude evitar sonrerle-hoy preparare tempura con arroz-le respondi a Aominicchi levantndose de la cama.
-Entonces que esperas para dirigirte a prepararlo-aquello claramente era una ordena, no tena claro si realmente esa haba sido su intensin dado sus sentimientos.
Me sent realmente mal por l, al ver el ceo fruncido de Kurokocchi mientras lo observaba.
-No soy tu esclavo ni nada por el estilo-exclamo Kurokocchi molesto-y ahora si me disculpan me voy a duchar-tomo sus cosas y al sali de la habitacin azotando la puerta.
-Tu siempre asindolo enojar, acaso no puedes ser ms honesto con l y contigo mismo-le regae, ya estaba cansado de tener que calmar a Kurokocchi por la culpa del idiota de Aominicchi por lo tanto de alguna forma tena que hacer que el demonio se diera cuenta de que deba ser ms honesto con l y con nuestro humano.
Decid dejarlo solo para que entrara en razn as que no dude en desaparecer, para luego de unos segundo verlos salir de la habitacin en direccin al bao, al parecer haba funcionado mi pequeo regao, pero pese a todo decid seguirlo aun invisible. Aunque el humano era de ambos saba muy bien que si dejaba a Aominicchi tomar demasiada ventaja jams lo compartira.
---Narracin normal---
Kuroko entro al cuarto de bao echando humo, no soportaba a Aomine, el demonio era insoportablemente apuesto, malhumorado, grun y un completo idiota, o quizs l era el idiota, si, realmente l era el idiota y un completo luntico por estar enamorado de un insoportable demonio y tambin de un ngel, que probablemente nadie ms vea.
Suspiro para casi enseguida comenzar a desvestirse, quizs el agua lo relajara. Kuroko se arrepinti enseguida ya que una vez que se haba despojado de su ropa interior frente a l, apareci nada ms ni nada menos que Aomine el cual lo observaba con una sonrisa maliciosa mientras que se lo devoraba con la mirada.
El rostro de Kuroko se torn completamente rojo por la vergenza.
-Esta es la primera vez que me alegro de discutir contigo-le hizo saber el moreno acercndose con paso lento y firme hacia Kuroko, el cual retroceda cada vez que el otro avanzaba-Qu ocurre?-cuestiono aun sin dejar de sonrer-o es que acaso me tienes miedo?-agrego.
-A-Aomine aljate p-por favor-pidi tartamudeando una vez que se vio atrapado entre la pared y el cuerpo del moreno.
-Lo siento pero no cumplir aquella peticin-respondi atrapando suavemente el cuerpo del contrario para darle un clido abrazo-quera disculparme-le hiso saber en un susurro cerca del odo del menor-lo siento por ser tan maleducado contigo, por acert enojar y por ser un malhumorado pero es que en ocasiones no puedo controlarlo, despus de todo soy un demonio, pero a pesar de mi naturaleza tratare de cambiar-agrego aun abrazado al cuerpo desnudo del menor.
Kuroko al escuchar cada palabra esbozada por el peli-azul, sonri ampliamente.
-Acepto tu disculpa-le sonri ampliamente al mayor una vez que este solt un poco su agarre-ahora por favor puedes dejar que me duche-pidi sonrojndose al recordar que estaba completamente desnudo.
-No-respondi seguro-Me gustas demasiado como para dejar pasar esta oportunidad, adems me ahorras la molestia de tener que desvestirte.
El rostro de Kuroko subi an mas de intensidad, mientras que Aomine no dudaba en rodear su cintura con una de sus manos para que no escapara, mientras que con la otra tomaba su mentn para as acortar la distancia entre ellos con un beso demandante y bastante apasionado el cual obligo a Tetsuya a abrir su boca para darle paso a la lengua contraria, la cual no dudo en recorrer por completo la cavidad ajena.
Una vez que el aire les hiso falta a ambos, Aomine separo sus bocas, sonro ampliamente y decidio comenzar a besar aquel cuello que tena frente a l.
-Vamos Aominicchi detente-Kise no dudo en aparecer junto a ambos chicos.
-Tsk-el moreno chasqueo la lengua al ser interrumpido-Qu demonios quieres ahora?-cuestiono sin soltar el agarre de la cintura de Kuroko mientras que frunca el ceo.
-Que me dejes participar-le hizo saber el rubio con una sonrisa maliciosa-tengo entendido que un trio es mucho ms excitante-agrego.
En el rostro de Aomine afloro sorpresa la cual rpidamente se convirti en una sonrisa igual de maliciosa que la que esbozaba el ngel.
-Al parecer los ngeles tambin tienes su lado oscuro-exclamo Aomine sonriendo.
-Y los demonios su lado bueno-respondi el rubio sonriendo-y bien que dices?
-No tengo nada que perder, despus de todo ambos debemos cuidar de Kuroko-respondi con una sonrisa-as que ahora…
Ambos chicos observaron al peli-celeste el cual lo nico que haca era observarlos un tanto asustado.
-Kuroko…
-Kurokocchi-lo nombraron respectivamente-te haremos sentir bien-anunciaron a coro.
Aomine que aun sostena a Kuroko de la cintura no dudo en levantarlo un poco del suelo para retroceder, separarlo de la pared y as dejarle el espacio adecuado al ngel para que se acomodara detrs de Tetsuya.
Kise al ver esto no dudo en posicionarse detrs del peli-celeste y casi enseguida comenz a devorar aquel cuello frente a l, repartiendo besos, lamidas y mordidas sobre la blanquecina piel, logrando as arrancar varios suspiro de la boca de Tetsuya los cuales rpidamente fueron acallados por Aomine el cual no dudo en besarlo, apasionadamente introduciendo nuevamente su lengua en aquella cavidad esta vez comenzando una guerra con la duea de aquella boca.
Cuando el aire se acababa el peli-azul no dudo en dejar aquella adictiva boca y enseguida bajo hacia el pecho de Kuroko, comenzando a estimular los botoncitos de carne de este, mientras que Kise an se encargaba del cuello y lbulo de la oreja del peli-celeste el cual ya se haba dejado hacer al sentir tan exquisitas sensaciones sobre su cuerpo.
Luego de algunos segundos, Aomine decidio dejar aquellas botoncitos y sintiendo la prominente ereccin de Kuroko no dudo en descender hasta arrodillarse frente a esta, por lo tanto y sin dudarlo la introdujo en su boca arrancando un audible gemido de parte del peli-celeste.
Kise al ver que Aomine atenda a Kuroko, decidio llevar sus dedos a la boca entre abierta del peli-celeste.
-Lmelos-susurro mientras lamia sensualmente el lbulo de la oreja contraria.
Kuroko aun gimiendo y suspirando al sentir la cavidad bucal de Aomine alrededor su miembro, decidio hacerle caso al rubio y no demoro en comenzar a humedecer aquellos dgitos utilizando su lengua.
Una vez que Kise sinti que sus dedos se encontraban correctamente lubricados, no dudo en retirarlo de la boca contrarias, para enseguida dirigirlos a la entrada de Kuroko y comenzar a rozarla suavemente con uno solo digito.
-Aominicchi, creo que es momento de comenzar a prepararlo-dijo el “ngel” observando al “demonio” que aun atenda la ereccin del peli-celeste.
-Bien-escucho decir por parte del moreno que sin dudarlo sigui con su trabajo.
-Ser cuidadoso Kurokocchi-le informo al menor, lo hiso inclinarse un poco y de forma sensual comenz a acariciar la zona para lentamente comenzar a introducir un digito en aquella estrecha cavidad.
-A…Ah-gimi con una extraa mescla de placer y dolor Kuroko, ya que las caricias sobre su miembro eran exquisitas, pero la intromisin en su entrada comenzaba a hacer ms que nada incomoda pero tambin dolorosa.
-Kurokocchi, reljate y concntrate en las caricias sobre tu miembro-susurro sensualmente Kise al odo del peli-celeste, volvi a lamer el cuello de este y comenz un sube movimiento en su entrada.
Y solo aquellos movimientos bastaron para que Kuroko dejara escapar su semilla manchando por completo la boca de Aomine, sin lograr siquiera avisarle.
El peli-azul al sentir la semilla de Kuroko manchando su boca, no dudo en levantarse para quedar frente al peli-celeste que lanzaba pequeos suspiro al sentir los suaves movimientos en su entrada y tambin por el resiente orgasmo.
-Delicioso-exclamo con voz ronca y llena de excitacin una vez que se haba tragado la esencia del humano.
El rostro de Kuroko enrojeci de sobre manera al entender lo que Aomine haba hecho, pero aquello paso a segundo plano, cuando sinti un segundo digito abrindose paso en su interior.
Aomine no dudo en acortar la distancia entre ellos y as tranquilizar un poco al menor, mientras que Kise lo preparaba correctamente. Ya que ni Aomine, ni Kise queran lastimar a Kuroko.
Y as entre el beso que mantena con el peli-azul, Kuroko sinti como aquellos dos dgitos se deslizaban dentro y fuera de su cavidad, comenzando a producirle un escalofri de placer por la todo su cuerpo, el cual aumento an ms al sentir que con cuidado se agregaba un tercer dedo.
-A…ah-gimi completamente excitado una vez que se haba separado de Aomine por la falta de aire.
-Ya ests listo Kurokocchi-Kise miro a Aomine con complicidad.
-Bien, tu comenzaras-le indico al rubio.
Kise al escuchar aquello sonri ampliamente, retiro los dedos de la entrada de Kuroko y sin dudarlo desabotono sus pantalones que rpidamente cayeron al piso dejando a la vista su prominente ereccin.
-Reljate Kurokocchi-pidi el rubio para enseguida posicionar su miembro en su entrada y en un rpido movimiento lo penetro.
-Mm-jadeo el peli-celeste al sentir como el miembro de Kise se abra paso en su interior, aunque la sensacin era extraa, solo dola un poco.
-Mm-jadeo ronco el rubio al sentirse completamente en el interior de Kuroko, mientras que la estreches y el calor lo aprisionaban.
Aomine que no haba perdido detalle de las acciones de Kise, decidio besar los labios de Kuroko y as calmarlo, ya que haba percibido el dolor que este haba sentido al ser penetrado.
Pasaron algunos segundos y Kuroko comenz a mover sus caderas para que Kise comenzara con el vaivn, su cuerpo ya solo senta placer.
Una sonrisa depredadora apareci en los labios de Kise y sin querer poder tiempo, hiso que el peli-celeste se inclinara, tomo las caderas de este y rpidamente comenz a envestirlo, arrancando excitantes gemidos de parte de Tetsuya.
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Luego de algunos segundo observando la escena, Aomine no dudo en desabotono sus pantalones, los cuales se deslizaron rpidamente junto con su ropa interior, cayendo al suelo, dejando a la vista su ereccin que cada vez se haca ms grande por la excitacin.
-T turno Aominicchi, o hare que Kurokocchi se corra antes de tiempo-le informo Kise saliendo del interior del peli-celeste ganndose un gemido de protesta por parte de este.
El peli-azul sonri de lado, se sent sobre la alfombra que cubra gran parte de la cermica del piso y le indico a Kuroko que se sentara sobre su regazo.
Tetsuya no dudo en acatar lo que Aomine le indicaba. Por lo tanto el moreno no dudo en posicionar su miembro en la entrada de este, para casi enseguida tomar las caderas del peli-celeste y as comenzar a sentarlo sobre su ereccin y as una vez que el miembro del de orbes azules se encontraba por completo en el interior de Kuroko, el demonio no dudo en tomar nuevamente las caderas contrarias y as comenzar un vaivn que poco a poco se iba intensificando, mientras que de ambos labios se escapaban gemidos de placer.
Kise que an no haba llegado al orgasmo al ver como Aomine as suyo a Kuroko frente a l, no pudo evitar tomar su miembro y comenzar a masturbarse viendo la escena, que ciertamente le pareca bastante excitante.
Pronto las estocadas de Aomine se haban vuelto frenticas ya que con cada movimiento quera que Kuroko gimiera ms alto, por lo tanto dado el placer que sentan y el tiempo que llevaban en ello, ambos se encontraban en su lmite.
-Me corro, no puedo ms!-exclamo el peli-celeste mientras que dejaba escapar su semilla entre ambos vientres, Aomine no tardo en correrse al igual que Tetsuya, pero en el interior de este y finalmente Kise el cual dada la escena y su excitacin no pudo evitar correrse manchando su mano y tambin el piso del bao.
El moreno sonri ampliamente con la respiracin entre cortada.
-Si hubiese sabido que estar con un humano era tan placentero, lo hubiese hecho hace mucho tiempo atrs-exclamo el moreno observando los orbes celeste.
-Yo opino los mismo, Aominicchi-concord con una amplia sonrisa el rubio que se acercaba a ellos.
El rostro de Kuroko se torn rojo nuevamente y con cuidado se levant retirando el miembro de Aomine de su interior.
-Si ya terminaron de hablar, pueden dejar que me d un bao tranquilo-exclamo sonrojado el peli-celeste, aunque lo anterior le haba gustado de sobre manera, de todas formas se senta avergonzado.
Y en el rostro de Kise y Aomine afloraron sonrisas maliciosas.
-Kurokocchi-susurro sensualmente el rubio-porque no tomamos un bao juntos, despus de todo Aominicchi y yo estamos igual de sucios que t.
-Yo tambin estoy de acuerdo con el ngel idiota, adems no me vendra mal repetir lo de hace unos momentos-exclamo con una sonrisa depredadora.
Y luego de decir aquello, el demonio y el ngel no demoraron en acercarse al peli-celeste para comenzar a besar el cuello y los labios de Kuroko, y as volver a repetir lo que haba ocurrido segundo atrs, pero esta vez en la tina, mientras que esta poco a poco se llenaba de agua.