Declaracin: -“Los personajes no me pertenecen son propiedad de Tadatoshi Fujimaki”-.
One-shot n16: -Un hermoso regalo de cumpleaos -. Para: Ale Yaoi.
Pareja: Midorima Shintaro x Kuroko Tetsuya.
Gneros: Romntico, AU.
Advertencias: Lemon, Mpreg.
La noche ya se haca presente en la ciudad de Tokio, mientras que unas dbiles gotas de lluvia comenzaban a caer desde el cielo cubierto de nubarrones grises.
Midorima Shintaro de 27 aos de edad, orbes verdes y cabellos de la misma tonalidad, al ver esto no dudo en dirigirse a su automvil, el cual se encontraba aporcado en el estacionamiento del hospital donde trabajaba como mdico despus de todo ya haba terminado su turno y al fin regresara junto a su adorado— aunque no lo admita mucho —doncel de cabellos y orbes celestes.
Por lo tanto y con paso apresurado Midorima cruzo el estacionamiento, saco las llaves de su bolsillo y como la lluvia comenzaba a aumentar su intensidad subi al vehculo para enseguida poner en marcha el motor.
El trayecto a su hogar era de alrededor de 7 cuadras, pero gracias a que utilizaba su propio transporte no demoro ms de 30 minutos en aparcar el vehculo en el estacionamiento del edificio donde se ubicaba su departamento.
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En cuestin de minutos, Midorima se encontraba entrando al departamento sigilosamente, despus de todo y considerando la hora no quera despertar al peli-celeste que seguramente se encontraba profundamente dormido.
Por lo tanto y con paso lento y sigiloso el peli-verde se dirigi a la habitacin dndose cuenta que estaba equivocado, su novio an se encontraba despierto, aunque si estaba recostado en el lecho, tena la televisin encendida y degustando un… Tazn de frutillas con crema?
—Buenas noches Midorima-kun —saludo observando al mayor con una sonrisa.
—Buenas noches —le devolvi el saludo para enseguida dejar su maletn y la chaqueta sobre la silla del escritorio junto a una de las paredes— considerando la hora… —observo su reloj de mueca para enseguida quitrselo— pens que ya te encontraba dormido.
—Bueno, es que an no estoy cansado —respondi el menor volviendo la vista al televisor.
—Pero el tazn de frutillas no ayudara a que duermas —le regao observndolo con el ceo levemente fruncido.
—Tena hambre y fue lo nico que se me antojo al observar la nevera —se defendi para enseguida comerse las ultimas frutillas en aquel plato.
Midorima solo suspiro para enseguida ver como el menor dejaba el tazn sobre la mesita de noche que se encontraba a su lado de la cama.
—Bien no dir nada ms, pero espero que te duermas, me encuentro cansado —y era cierto, el da haba estado ajetreado.
—Bien —respondi con pequeo mohn, pero despus de todo entenda lo cansado que poda sentirse el mayor luego de terminar su trabajo.
Y as, Midorima se coloc su pijama, dejo sus gafas sobre la mesita de noche y se recost junto a Kuroko— el cual al ver esto —no dudo en sonrer traviesamente y sin pena— cosa rara en l —se subi sobre Shintaro, colocando sus piernas a cada lado de las caderas del mayor.
El rostro del peli-verde no demoro en teirse de un leve rojo al ver esto, mientras que Kuroko sonrea ampliamente.
—Sabes Midorima-kun~ —lo llamo sensualmente— yo conozco una forma para que este menos estresado~ —exclamo sin dejar su tono y su sonrisa traviesa.
Aunque al principio se haba sorprendido por el inusual comportamiento que comenzaba a presentar el menor ltimamente, al escuchar el tono y las palabras dichas por su ahora travieso peli-celeste, decidio sonrer con malicia y con un rpido movimiento se volte quedando esta vez l, sobre su pareja.
— Cul sera esa forma? —cuestiono para casi enseguida acortar la distancia entre ambos con un beso que al principio resulto ser tierno, dulce y repleto de amor.
Aunque muy pocas veces deca con palabras lo que realmente senta por el contrario, aquellos besos eran una forma de decirle a Kuroko que lo amaba.
A medida que los segundos pasaban el beso comenz a volverse desenfrenado y hambriento, ya que Midorima, comenz a recorrer el torso contrario con sus manos y Kuroko abri su boca dejando que la lengua del mayor se introdujera en su cavidad saborendola por completo.
—…ltimamente has estado algo travieso —comento el mayor separndose del contrario en busca de aire, pero la falta de oxgeno no impidi que con sus manos comenzara a acariciar los botoncitos rozados del cuerpo bajo el.
—Ahh~ —gimi el menor, ltimamente era an ms sensible en aquel punto.
—Me gusta —termino de decir Midorima sonriendo de lado para enseguida comenzar a marcar el cuello de Kuroko dejando notorias marcas de propiedad en aquella blanquecina piel.
Cada accin que Midorima realizaba sobre el cuerpo del menor, lograba arrancar varios gemidos y jadeos de placer, ltimamente Tetsuya se encontraba ms sensible de lo habitual y aquello comenzaba a fascinarle a Shintaro que disfrutaba cada gemido.
Una vez que el peli-verde lamio, mordi y beso hasta cansarse aquel cuello decidio descender hasta atrapar con su boca uno de aquello botoncitos rozados que se encontraba semi-erecto por las atenciones con sus manos.
—Mmm~~, Midori~ —gimi con voz ahogada el menor al sentir como uno de sus pezones era mordido suavemente.
El peli-verde al escuchar aquello sonri, realmente escuchar aquellos gemidos y sentir como el cuerpo bajo suyo se estremeca, lo haba puesto duro en cuestin de minutos.
—Voy a comenzar a prepararte —le aviso al menor con voz ronca y cargada de sensualidad, Kuroko por su parte solo asinti en acuerdo, tambin estaba deseoso de sentir a Shintaro en su interior.
Midorima no demoro en bajar el pantaln de pijama que Kuroko llevaba puesto, dejando al descubierto la muy notoria ereccin del menor— Tetsuya estaba igual que l —sonri ampliamente y con rapidez saco del cajn de la mesita de noche una pequea botellita de lubricante y un condn.
Deposito una cantidad en sus dedos y se dispuso a llevar uno de sus dgitos a la entrada del menor, el cual sin ninguna pena abri un poco ms sus piernas para facilitarle el trabajo a su pareja.
—Ah~~ —gimi al sentir como el primer digito comenzaba a abrirse paso en su interior, mientras que una corriente elctrica lo recorra desde la cabeza a los pies.
Midorima ensancho su sonrisa y sin dudarlo volvi a acercar sus labios al del menor, comenzando as un beso hmedo, sus lenguas se rozaban tratando de tomar el control del contacto, aunque la batalla seria ganada por el mayor.
Y as con aquel beso y otras caricias, Midorima logro introducir tres de sus dedos dentro de la cavidad de Kuroko.
—Mido~, quiero… que ests dentro —pidi con un hilo de voz por los jadeos al sentir como el peli-verde mova sus dedos dentro y fuera de l.
—C…Como quieras —sonri de lado y sin esperar ms, despus de todo estaba en su lmite, retiro sus dedos, tomo las piernas del menor para dejarlas sobre sus hombros y acomodo su prominente ereccin cubierta por el pequeo plstico en la entrada de Kuroko.
Tetsuya al ver en la posicin en la cual se encontraban no pudo evitar que su rostro se tiera de un intenso rojo.
—A…Al fin aparece aquel adorable sonrojado —comento el mayor haciendo que el contrario enrojeciera an ms, pero su vergenza se desvaneci de inmediato al sentir como el miembro de Midorima se comenzaba a abrir paso en su interior.
—Mm~ —gimi ronco el mayor al sentirse por completo en el interior de su pareja, siendo recibido por aquella exquisita estreches que lo volva loco y aquella abrumadora calidez.
—P…Por f…favor comienza a moverte —pidi el menor completamente excitado.
Shintaro no dudo en acarar la peticin de su doncel, comenzando un vaivn de caderas que a medida que pasaban los segundos comenzaba a volverse cada vez ms apresurado y con mayor fuerza, ya que los gemidos de Kuroko lo hacan desear llegar cada vez ms dentro de l.
—Ah~ —gimi al Kuroko al sentir como su pareja tocaba aquel lugar que lo volva loco— ah es~ —le hiso saber al mayor siendo complacido de inmediato.
Midorima continuo golpeando ese punto por algunos segundos ms y con una de sus manos, comenz a acaricias el erecto miembro de Kuroko para as ayudarlo a acabar, despus de todo l tambin estaba cerca del clmax.
—M…Me ahh~ voy a correr, ahh~~ —exclamo el menor dejando escapar su semilla en su vientre manchando tambin la mano de Midorima.
—Yo tam…tambin —aviso el mayor, corrindose en el interior del peli-celeste mientras daba la ltima estocada.
El mayor bajo con cuidado las piernas del menor, sali del interior del contrario para enseguida retirar el plstico protector, lo anudo y con maestra lo lanzo al cesto de basura cerca de una de las paredes.
Kuroko rio suavemente.
—A…Aun no has perdido tu habilidad —dijo divertido Kuroko para enseguida sentir que Midorima se recostaba suavemente sobre l.
Midorima al escuchar aquello, tambin sonri pero decidio no decir nada.
—Tetsuya, te amo —susurro con sinceridad al iodo del peli-celestes, luego de uno segundos controlando su respiracin.
—Y yo te amo a ti, Shintaro —y con una infinita felicidad, ladeo el rostro y deposito un tierno beso en la mejilla del contrario.
Cuando sus respiraciones se normalizaron un poco ms, el mayor decidio acomodarse sobre el lecho para as cubrir por completo sus cuerpos y de una vez por todas dormir.
—Buenas noches —se despidi Midorima atrayendo posesivamente el cuerpo de Kuroko al suyo.
—Buenas noches —se despidi recibiendo un beso en la frente.
Y as ambos decidieron cerrar sus orbes para entregarse al sueo, mientras que el sonido de la lluvia los arrullaba.
>>> Al da siguiente <<<
El despertador sobre la mesita de noches comenz a sonar, avisndole al peli-verde que deba levantarse para dirigirse al trabajo, por lo tanto no dudo en removerse un poco en el lecho dndose cuenta de que su pareja ya no estaba junto a l por lo tanto se reincorporo en el lecho, restreg sus ojos, se coloc las gafas y apago el insistente aparato.
—Buenos das Midorima-kun —saludo animadamente el menor entrando a la habitacin con una sonrisa.
—Buenos das —saludo algo molesto, ya que a diferencia del menor el an se encontraba cansado y ms un por lo acontecido la noche anterior.
—El desayuno ya est preparado, as que ser mejor que te levantes o llegaras tarde al trabajo —le aviso el peli-celeste dirigindose al ropero para enseguida sacar un abrigo.
Esto llamo de inmediato la atencin del mayor que ya se encontraba levantado.
— Adnde vas? —cuestiono con sincera curiosidad.
—Al trabajo —respondi ya con su abrigo puesto— hoy debo entrar un poco ms temprano dada las actividades que realizaremos por el aniversario.
—Ya veo —respondi Midorima.
—Por cierto, feliz cumpleaos —lo saludo acercndose para enseguida inclinarse en la punta de los pies y as alcanzar la mejilla de su peli-verde.
Este gesto hiso que en el siempre serio rostro de Midorima aflorara una sonrisa sincera.
—Gracias —y sin dudarlo beso los labios del menor.
Una vez que se separaron del beso, Kuroko no dudo en sonrer ampliamente.
—Bien, nos vemos esta tarde, se me hace tarde —y sin ms se alej de Midorima, tomo su bolso y comenz a caminar hacia la salida de la habitacin.
—Nos vemos —se despidi Shintaro antes de que el menor saliera por completo de la habitacin.
Y as con su sonrisa un en el rostro por aquel simple— pero para el significativo —gesto de Kuroko, entro al cuarto de bao para as alistarse y luego desayunar.
>>> *** <<<
Kuroko por su parte solo demoro algunos segundos en estar fuera del edificio donde viva, cubri su boca con la bufanda que se haba colocado antes de salir del apartamento— el clima estaba bastante frio —y comenz a caminar en direccin al paradero de autobuses, ya que el jardn infantil donde trabaja solo se encentraba a una pocas cuadras de su hogar.
Una vez que se encontraba en el paradero escucho que la vecina de un automvil sonaba.
—Kurokocchi~ —lo llamo el Kise Ryouta, un chico de cabellos rubios, orbes dorados mientras que detena el lujoso vehculo frente al peli-celeste— me ofrezco a llevarte~ —agrego con una gran sonrisa.
El peli-celeste no se lo pens mucho, despus de todo quera realizarle una fiesta sorpresa a Midorima y con la ayuda de Kise y los dems sera ms fcil.
—Gracias Kise-kun —respondi para enseguida abrir la puerta del vehculo y subir de copiloto.
Una enorme sonrisa afloro en los labios de Kise y al ver que el peli-celeste ya se encontraba a su lado, se puso en marcha en direccin al lugar donde trabaja el de estatura menor.
Ciertamente el trayecto no era muy largo y Kuroko se demor mucho menos al viajar en el vehculo de Kise.
—Veo que an no hay nadie —exclamo el Kuroko al darse cuenta de que la institucin se encontraba vaca.
—Cierto —concord el rubio descendiendo del vehculo al igual como lo haba hecho Kuroko.
—Solo tendr que esperar, por cierto Kise-kun —observo al mayor, quien ahora se encontraba apoyado en el vehculo.
— Qu sucede Kurokocchi? —cuestiono observando al menor.
—Me gustara pedirte un favor —respondi observando al rubio frente a l.
— Qu favor? —cuestiono con sincera curiosidad el rubio mientras que sonrea.
—Hoy es el cumpleaos de Midorima-kun y me estaba preguntando si, podras ayudarme a realizarle una fiesta sorpresa? —cuestiono con un leve sonrojo en las mejillas.
Una amplia sonrisa surco los labios de Kise.
— Claro~! —Exclamo completamente emocionado— despus de todo Midorimacchi es mi amigo —agrego sin dejar de sonrer.
—Tambin tena planeado invitar a Kasamatsu-kun, Akashi-kun, Murasakibara-kun, Miyagi-kun…
—Takaocchi, Himurocchi, Kagamicchi y Aominicchi —completo el rubio ensanchando an ms su sonrisa.
—As es —confirmo el peli-celeste sonriendo—Takao-kun y yo salimos del trabajo al medio da, por lo tanto tendremos toda la tarde para decorar el apartamento ya que Midorima-kun trabajara hasta las 10:00 pm, si es que no hay algn inconveniente —le hiso saber al rubio.
—Entonces le avisare a Aominicchi, Akashicchi y Murasakibaracchi para que tambin nos ayuden —exclamo el rubio.
—Bien —respondi Kuroko con una sonrisa.
Y en ese preciso momento al lugar llego Takao, el cual no dudo en saludar a Kise y a Kuroko por lo tanto y al ver que an no llegaba nadie ms al lugar, el rubio y el peli-celeste decidieron comunicarle su plan al pelinegro, Kuzanari al igual que Ryouta no dud en aceptar con una gran sonrisa despus de todo era viernes y una buena fiesta no le vendra nada de mal.
Y as los tres chicos siguieron conversando y para tener todo listo, Kuroko, Takao y Kise no dudaron en sacar sus mviles y de una vez por todas telefonear a sus dems amigos.
Por lo tanto una vez que el director de la institucin al fin se dign a llegar seguida por otros sensei, Kise, Takao y Kuroko ya tenan la confirmacin de todos sus amigos los cuales a eso de las dos de la tarde, se dirigiran al departamento de Kuroko para comenzar a preparar todo.
>>> *** <<<
La maana trascurri sumamente rpido o eso fue lo que le pareci a Kuroko, el cual luego de terminar de trabajar, arreglar sus pertenencias y ayudar a los dems sensei a ordenar los juguetes que los nios haban dejado esparcidos por todo el saln, se dirigan al centro comercial junto a Takao en el vehculo de Kise.
Y as, luego de pasar a comprar algunos adornos para decorar el apartamento y de ir a recoger a Aomine y Kagami, el rubio estaciono su vehculo frente al edificio donde se ubicaba el departamento del peli-celestes, encontrndose con que al lugar ya haba llegado Akashi.
—Buenas tardes Akashi-kun —saludo Kuroko luego de descender del vehculo.
—Buenas tardes Akashicchi~ —saludo animadamente Kise con una amplia sonrisa.
—Buenas tardes Akashi —saludaron a coro Aomine y Kagami.
—Buenas tardes Sei-chan~ —saludo Takao con una sonrisa.
—Buenas tardes —devolvi el saludo el pelirrojo con una sonrisa al ver a sus amigos.
Y as, luego de saludar a Akashi y tomar las cosas del auto, entraron a departamento para enseguida y con la ayuda de todos sus amigos; Seijuro, Kise, Takao, Kagami, Aomine. Kuroko comenz a decorar las paredes y el techo con globos de distintas tonalidades de verde, adems de varias serpentinas de colores, el pastel seria trado por Murasakibara, desde la pastelera en la cual trabajaba y algunas golosinas serian tradas por Kasamatsu, Himuro y Miyagi, por lo tanto y en cuestin de 30 minutos la habitacin se encontraba ordenada y lista para la celebracin.
—Listo~ —exclamo Kise ordenando los ltimos refrescos y golosinas sobre la mesa del comedor que ahora se encontraba junto a una de las paredes.
—Ir a buscar algunos vasos para as servir un poco de refresco —aviso Kuroko dirigindose a la cocina.
—Te ayudo —se ofreci Kagami el cual ya se encontraba sentado junto a Aomine en el silln de tres cuerpos de la habitacin.
Y as, el pelirrojo y el peli-celeste entraron a la cocina, donde luego de tomar 3 vasos cada uno, se dispusieron a volver a la sala, siendo Taiga el primero en salir.
— Qu quieren que les sirva? —cuestiono Kagami dirigindose a la mesa para tomar una botella de soda.
Pero nadie logro responder aquella pregunta, ya que el sonido de cristal rompindose al caer al suelo, llamo la atencin de todos en la habitacin.
Kuroko, el cual haba salido poco tiempo despus de Taiga no pudo continuar su camino, ya que un fuerte dolos en su bajo vientre lo sorprendi, haciendo que soltara lo vasos que ocupaban sus manos para enseguida llevar estas en acto reflejo a su vientre y as tratar de apaciguar el dolor que senta mientras que se dejaba caer de rodillas al suelo.
—Aha… —gimi el peli-celeste no pudiendo aguantar las lgrimas que cayeron por sus mejillas, el dolor de su vientre cada vez se intensificaba un ms hacindolo jadear.
—Kurokocchi, Qu ocurre? —cuestiono el rubio completamente preocupado acercndose a su amigo, al igual que los dems.
—Duele! —exclamo en un jadeo que dejaba claro que no menta, realmente le resultaba insoportable aquellas punzadas y al parecer no pretendan detenerse ya que con cada segundo que trascurra el dolor se intensificaba an ms— Me duele mucho! —volvi a exclamar Kuroko mientras que se aferraba el vientre para tratar de calmar el malestar.
Todos en la habitacin se observaron preocupados, nadie saba lo que le ocurra ya que el menor haba estado bien durante todo el da.
—Llevaremos a Tetsuya al mdico —exclamo completamente serio Akashi— Taiga toma a Tetsuya en tus brazos —ordeno observando al pelirrojo de estatura mayor— Ryouta tu manejaras —agrego observando a los aludidos— pero que esperan, muvanse —exclamo al ver que sus amigos no reaccionaban a sus indicaciones.
—Hai —respondieron a coro Kagami y Kise.
Taiga no dudo en arrodillarse junto a Kuroko y con cuidado tomo al peli-celestes estilo novia, mientras que Kise y Akashi abran la puerta del apartamento para salir en direccin al pasillo, siendo seguidos por el pelirrojo.
—Los seguiremos en un taxi —aviso Takao observando a sus amigos alejarse por el pasillo rumbo al ascensor, despus de todo el vehculo de Kise no era lo suficientemente grande para que todos cayeran en el, adems de que Kuroko no estaba en condiciones para ser transportado con ellos estorbando.
Aomine y Takao se observara preocupados, el malestar de Kuroko era claro, de un momento a otro se haba puesto plido y la muecas de dolor eran evidentes, por lo tanto, Qu era lo que realmente le suceda a su amigo?
—Sera mejor que los sigamos —exclamo Aomine buscando las llaves del apartamento de Tetsuya en el bolso de este.
—Hai —respondi Takao.
Y as una vez que las llaves estuvieron entre las manos del moreno, ambos chicos salieron rumbo a la entrada del edificio para enseguida tomar un taxi que los llevara al hospital al cual estaban seguros que se diriga Kise.
>>> *** <<<
—Kuroko, pronto te sentirs mejor —trato de tranquilizarlo Taiga— ahora nos dirigiremos al hospital.
Kuroko una vez que se encontr recostado sobre el asiento trasero del vehculo, no dudo en hacerse una pequea bolita tratando de encontrar una posicin que calmara el dolor.
Akashi y Kise por su parte no dudaron en subir al vehculo, el rubio como chofer y el de orbes bicolores como copiloto, mientras que Taiga acompaaba al menor en los asientos traseros. Y as Ryouta no dudo en poner en marcha el auto, rumbo al hospital en el que trabaja Midorima.
Por lo tanto y con la prisa, Kise no tardo ms de 10 minutos en aparcar el automvil frente al centro mdico. Kagami al ver esto no pedio ningn segundo y se apresur en tomar con cuidado a Kuroko entre sus brazos para enseguida llevarlo dentro de la institucin.
—Llama a Shintaro —le ordeno Akashi a Kise y sin ms que decir sigui a Kagami dentro del hospital.
Kise decidio acatar la orden de Seijuro, tomo su celular y sin dudarlo marco el nmero de Midorima.
—Midorimacchi —exclamo al escuchar que el aludido contestaba la llamada.
—No seas escandaloso, casi me dejas sordo —se quej el peli-verde apartando un poco el aparato de su odo— para qu me llamas?, viniendo de ti es extrao —cuestiono ahora curioso pero sin dejar el tono molesto.
—Midorimacchi, algo le ocurre a Kurokocchi —le aviso completamente preocupado por el menor.
— Kise que ocurri? —cuestiono ahora preocupado al escuchar el tono repentinamente serio del rubio.
—No lo sabemos, estbamos en el apartamento y comenz a sentir dolor en su vientre, as que Akashi opto por traerlo al hospital en el cual trabajas, por lo tanto estamos en urgencias.
—Voy enseguida para haya —exclamo el peli-verde completamente preocupado y enseguida corto la llamada.
Kise al escuchar el tono que le avisaba que Midorima haba cortado la llamada, guardo el aparato en su bolsillo y decidio entrar a la institucin, encontrndose con que Kagami y Akashi se encontraban de pie junto a una de las paredes de la sala de espera.
— Y Kurokocchi?, Ya lo estn atendiendo?, Qu le ocurri? —Kise no dudo en bombardear de preguntas a sus amigos.
—Se lo acaban de llevar en una camilla —respondi Kagami igual de preocupado que los dems por el peli-celeste.
—Y no nos han dicho nada, por cierto, Shintaro ya lo sabe? —cuestiono esta vez Akashi observando al rubio.
—Si —respondi Ryouta— dijo que vendra enseguida.
Y as los tres chicos se quedaron esperando recibir noticias de Kuroko, esperaban que nada grave ocurriera con su amigo.
— Qu sucedi con Tet-chan? —cuestiono Takao al acercarse a sus amigos una vez dentro de urgencias.
— Qu es lo que dijo el mdico? —cuestiono ahora Aomine entrando junto a Takao.
—An no sabemos nada —respondi Taiga observando a los recin llegados.
—No ha salido ningn medico a decirnos que sucede —hablo Akashi decidiendo tomar asiento junto a Kise.
— Y Shin-chan lo sabe? —cuestiono el pelinegro.
—S, yo le avise pero aun no llega —respondi Kise levantndose, se encontraba demasiado preocupado como para quedarse quieto.
Y luego de aquello, los cinco chicos se quedaron en silencio, esperando pacientemente noticias con respecto al estado de su amigo pero los minutos que trascurran les parecieron eternos, ya que nadie se dignaba a hablar con ellos.
— Los familiares o la pareja del paciente, Kuroko Tetsuya? —cuestiono un mdico de cabellos negros y orbes grises, luego de entrar a la habitacin por la puerta por la cual se haban llevado a Kuroko tiempo atrs.
— Qu es lo que tiene Kurokocchi? —cuestiono Kise acercndose rpidamente al mdico.
— Es usted familiar o la pareja del seor Kuroko? —cuestin el medico completamente serio observando al rubio.
—No —respondi algo temeroso Kise.
—Entonces lo siento, pero no puedo revelar nada con respecto al paciente, el protocolo lo prohbe —respondi observando ahora a los dems que tambin se haban acercado.
—Yo soy su hermano —intervino Akashi observando igual de serio al mdico frente a l, mientras que sus amigos lo observaban completamente sorprendidos por aquella mentira dicha tan convincentemente— y dgame doctor, Qu es lo que ocurre con Tetsuya? —cuestiono ahora con cierto tono de preocupacin en la voz.
El medico pelinegro gurdo silencio por unos segundos, mientras que observaba detenidamente al chico pelirrojo frente a l.
—Si ese es el caso, el seor Kuroko est en muy buenas condiciones, ya que solo entro en labor de parto —respondi el medico observando al pelirrojo de orbes bicolor.
Y ninguno de los chicos logro articular palabra, ni siquiera Akashi lograba decir algo, se encontraban en completo shock, Realmente era posible que el menor estuviera embarazado, si al parecer ni siquiera Kuroko lo saba?
Una pequea sonrisa afloro en los labios del mdico al ver la reaccin de los chicos frente a l.
—Casos como estos son ms frecuentes de lo que se imaginan —se apresur a decir el mdico— ya que hay mujeres y en el caso de su amigo, donceles, que en ocasiones quedan en estado y solo lo descubren cuando entran en labor de parto, sin antojos, nuseas o algn otro malestar que delaten el embarazo, por lo tanto necesito localizar a la pareja del paciente —agrego observando a todos los presentes.
—… —los chicos esta vez s responderan pero en ese preciso momento junto a ellos llego Midorima completamente preocupado por su peli-celeste.
—Soy yo —respondi el peli-verde con la respiracin agitada, despus de todo su lugar de trabajo quedaba al otro extremo del complejo— Nijimura-senpai, Qu es lo que ocurre con Kuroko? —cuestiono con preocupacin en la voz.
Una sonrisa un poco ms amplia surco los labios de Nijimura al ver a Shintaro, Qu expresin podra su siempre serio Kouhai al saber que va a ser padre?... bueno pronto lo sabra.
—Tu pareja entro en labor de parto, por lo tanto acompame —respondi el medico complacido al ver el rostro de confusin y sorpresa de Midorima.
Y sin decir ms, Nijimura comenz a caminar hacia las puertas por donde haba salido anteriormente.
…l era mdico, saba que aquello era posible pero jams se imagin que le estuviera ocurriendo a l… bueno a su pareja, por lo tanto y aun sorprendido, confundido y choqueado por la notica, Midorima decidio seguir a su senpai.
—Por favor coloques esto —dijo una de las enfermeras, una vez que se encontraban en una habitacin anexa a la cual deba encontrarse Kuroko.
El peli-verde no protesto, estaba acostumbrado a llevar en algunas ocasiones ese traje, por lo tanto y con algo de prisa se coloc la tnica y el gorro de color verde. Y as una vez que Shintaro y Nijimura se encontraban con el traje, pudieron entrar a la habitacin donde se encontraba Kuroko, recostado en la camilla.
—Kuroko —exclamo Midorima acercndose rpidamente al peli-celeste.
Ambas miradas se encontraron.
—Midorima-kun, Qu ocurre?, estoy asustado y aun duele —exclamo con una pequea mueca de dolor Tetsuya.
—No te preocupes, todo estar bien —sonri para tranquilizarlo— pronto todo pasara —agrego.
Nijimura en es preciso momento se acerc a la pareja.
—Tuvimos que administrarle un calmante para controlar las contracciones y el dolor, despus de todo aun no estaba listo para el parto, pero ahora, con todo los minutos que aun trascurrido desde que llego aqu, el calmante pronto dejara de hacer efecto y ya est todo listo para recibir al bebe —le informo el pelinegro observando a su Kouhai.
— Bebe? —cuestiono completamente confundido Kuroko.
—Ya abra tiempo para explicaciones, ahora solo necesito que se concentre en pujar cuando yo le indique —decidio decir el mdico, despus de todo el nio o la nia corra peligro de asfixiarse si dejaba que trascurriera ms tiempo del correspondiente.
Y en cuestin de segundos las punzadas comenzaron a ser mucho ms fuerte de lo que haban sido anteriormente.
—Todo listo… por favor a la cuenta de tres comience… 1… 2… 3… Ya —le informo el mdico.
Y as comenzaron los horas ms largos de toda la vida de Kuroko y Midorima, el peli-celeste jams haba sentido tanto dolor en su vida y el peli-verde jams se imagin estar tan preocupado por su novio y ahora tambin por la salud de un bebe que ni siquiera saba que creca en el interior de su pareja.
Y todo el dolor de Kuroko, se desvaneci, cuando el llanto del recin nacido retumbo en toda la habitacin.
—Felicidades es una nia hermosa —exclamo Nijimura para enseguida levantarse del lugar donde se encontraba sentado para entregarle a una enfermera la pequea bebe que lloraba a todo pulmn para que la limpiara, mientras que l se encargaba del resto (limpiar a Kuroko, etc.)
Una vez que el medico se ocup de realizar todos los procedimientos con Kuroko, despus del parto, se dirigi a atender a la nia mientras que el peli-celeste y Midorima no perdan detalle de como Nijimura revidaba a la pequea, dndole la espalda a ellos por lo tanto aun no lograban ver cmo era la bebe.
—Listo —Nijimura luego de unos minutos se acerc a los padres primerizos— est sana y fuerte —felicito con una sonrisa— y sus pulmones lo dejan claro —agrego con una sonrisa de lado, ya que la pequea aun no dejaba de llorar.
Pero una vez que Kuroko al fin la pudo sostener entre sus brazos, la pequea paro el llanto y se acurruco un poco ms en la manta de color vainilla que una enfermera se haba conseguido.
—Es hermosa —exclamo Tetsuya observado cada detalle de la pequea en sus brazos— su cabello… —no dudo en separar un poco la manta que cubra la cabecita de la pequea, dndose cuenta del color de estos— turquesa —susurro con una amplia sonrisa.
Midorima por su parte aun no sala de su asombro al ver a la pequea entre los brazos de Kuroko.
—Doctor —la voz de Kuroko llamando a Nijimura lo saco de sus pensamientos— Por qu no me entere de que Hikari creca en mi interior? —cuestiono observando nuevamente a la pequea.
— Hikari? —cuestiono Midorima confundido.
—As he decidido nombrarla, espero que no te moleste —respondi el peli-celeste sonrindole a Shintaro.
—Para nada —sonri ampliamente— es un hermoso nombre.
Ambos padres sonrieron.
—Y bien doctor, Cmo es posible lo que ocurri? —volvi a cuestionar despus de todo no se explicaba como nunca sinti a su hija crecer en su interior.
—Pues lo que ocurri contigo es ms normal de lo que aparenta ser —comenz a explicar— y ocurre por el simple hecho de que no aparece ningn sntoma, no tienen mareos, nuseas, cansancio, antojos, dolores musculares o cualquier otro sntoma que lo delate, adems de que el crecimientos del vientre simplemente no se presenta, ya sea porque es poco y no lo notas o simplemente piensas que es un aumento de peso normal, por lo tanto el embarazo pasa desapercibido hasta que comienzan los dolores del parto —concluyo.
—Entonces, pese a todo, Hikari se encuentra bien? —cuestiono preocupado.
—As es, est completamente sana —respondi Nijimura con una sonrisa— y pues bien, ahora que est todo aclarado es momento de que te trasladen a la habitacin donde te quedaras por un par de das.
—Hai —respondi Kuroko devolvindole la sonrisa al pelinegro.
La enfermera retirara a la bebe de los brazos de su “madre”, pero el peli-verde decidio hablar.
— Puedo sostenerla por unos momentos? —cuestiono tmidamente Shintaro.
—Claro —respondi amablemente la profesional tomando a la pequea, mientras que Kuroko sonrea al ver el brillo en los orbes de Midorima.
Shintaro no dudo en acatar todas las indicaciones de la enfermera para al fin sostener a su hija entre sus brazos.
—Hikari —susurro enternecido para enseguida ver como la pequea abri perezosamente sus orbes, despus de todo no la dejaban dormir en paz— son verdes —exclamo sorprendido y con una enorme sonrisa al darse cuenta de que el color de los orbes de la bebe eran idnticos a los suyos— sus ojos son verdes —celebro sin dejar de sonrer y con cuidado la acerc a Kuroko para que este la viera.
—Son hermosos —dijo Kuroko con una sonrisa, despus de todo le encantaba la escena frente a l; Midorima con una gran sonrisa, sosteniendo a su pequea hija entre sus brazos.
Y Hikari no dudo en volver a llorar a todo pulmn por tanto movimiento.
—Bien, creo que es momento de llevarme a la pequea, debo vestirla y una vez que usted se encuentre en su habitacin la llevare con usted para que la alimente —y con cuidado la enfermera tomo a Hikari y sali de la habitacin arrullando a la pequea para que dejara de llorar.
Midorima y Nijimura se observaron.
—Sera mejor que vayas a tranquilizar a tus amigos, Kuroko ser trasladado a la habitacin 214 en el segundo piso —le indico para enseguida comenzar a escoltarlo fuera del lugar.
Y en cuestin de minutos, Shintaro se encontraba en el pasillo— suspiro —realmente eran muchas emociones, pero la que predominaba era la felicidad, la felicidad de descubrir que eres padre y la felicidad por sostener a tu pequea hija entre tus brazos, una sonrisa afloro en su rostro y decidio comenzar a dirigirse a la sala donde seguramente aun deban estar sus amigos preocupados.
No demoro mucho tiempo en llegar junto a los chicos, los cuales no duraron en bombardearlo de preguntas, Cmo estaba Kuroko?, realmente haba ocurrido lo que el medico haba dicho? Y si era as, Cmo era l bebe?, era nio o nia?, esa y muchas preguntas ms surgieron de los labios de sus amigos.
Por lo tanto una vez que todas las dudas fueron resueltas, Kise y Takao no dudaron en chillar emocionados y balbuceando cosas como… “debemos comprarle ropa y peluches y lo que necesite”… salieron del hospital a las carreras, dejando a Akashi, Kagami, Aomine y Midorima con una pequea gotita en la cabeza…
Los cuatro chicos que an se encontraban en la sala de esperas, luego de que Takao y Kise los abandonaran, decidieron dirigirse al lugar indicado por Nijimura para conocer a la nueva integrante de la familia Midorima-Kuroko.
>>> *** <<<
Nijimura haba trasladado a Kuroko a la habitacin 214, por lo tanto ahora el peli-celeste se encontraba observando por las ventanas el anochecer, las ultimas horas del da, haban estado repleta de emociones para l, pero pese al miedo que senta por no saber cmo criar a un bebe y lo que este conllevaba, se senta inmensamente feliz, haba quedado extasiado al ver al pequeo cuerpecito entre sus brazos, los pequeos orbes verdes que por un segundo lo haban mirado y aunque ni siquiera saba que aquella pequea nia creca en su interior ahora que la poda ver y tocar, saba que la amaba con toda su alma.
Y el llanto de la pequea no demoro en sacarlo de sus pensamientos, volteo hacia la puerta encontrndose con que la enfermera que se la haba llevado tiempo atrs entraba a la habitacin.
—La pequea tiene unos pulmones increbles —comento divertida la enfermera sonriendo clidamente mientras que dejaba a Hikari entre los brazos de su madre.
—En eso tiene razn —respondi Kuroko sonriendo al tener a la pequea entre sus brazos— por cierto… —observo la chica con un pequeo sonrojo— no tengo ningn tipo de experiencia en amamantar por lo tanto, me preguntaba si… si…
—No se preocupes —la enfermera sonri clidamente y sin dudarlo comenz a ensearle al chico, como deba darle de comer a su pequea nia.
>>> +++ <<<
Hikari luego de zacear su hambre no demoro en quedarse dorma entre los brazos de su madre.
—Gracias por todo —exclamo Kuroko observando a la enfermera que an se encontraba con l.
—No tiene nada que agradecer, estoy aqu para ayudar —respondi la chica de orbes rosados— y pues bien, es momento de retirarme, su pareja debe estar por regresar, nos vemos y recuerde que debe tener cuidado de que no se duerma amantando —le record.
—Hai, gracias nuevamente —la enfermera le sonri y comenz a caminar hacia la salida.
Y poco tiempo despus de que la enfermera saliera de la habitacin, un grupo bastante numeroso entro a la habitacin.
—Kurokocchi~, realmente nos hiciste pasar un gran susto —exclamo Kise entrando a la habitacin primero que todos.
—Kise-kun, baja un poco la voz —le indico— y realmente lo siento —se disculp observando a todos sus amigos que ya se encontraban junto a su camilla.
Los dems sonrieron.
-No tienes que disculparte, somos tus amigos despus de todo…—el pelinegro no dudo en sonrer— es lgico que nos preocupemos, por cierto… Podemos conocer al bebe?-cuestiono Takao sin dejar su sonrisa para enseguida acercarse al peli-celeste.
—Claro —respondi Kuroko destapando un poco el rostro de la pequea que aun dorma.
—Es hermosa —chillaron a coro Kise y Takao con amplias sonrisa.
—Shhh —los silenciaron rpidamente los dems.
—Lo sentimos —se disculparon rpidamente.
—Tetsu, Cmo se llama mi pequea sobrina? —cuestiono Aomine acercndose para ver a la pequea, pues de ahora en adelante iba a consentirla en todo.
Kuroko sonri.
—No es justo —exclamo Kise con su tono infantil de siempre— yo tambin quiero consentirla en todo, por lo tanto yo tambin ser su to…
—Un to bastante escandaloso —exclamo nuevamente el moreno.
El peli-celeste ensancho su sonrisa al ver la pelea entre sus amigos.
—Se llama Hikari, mi pequea luz —respondi con una enorme sonrisa de felicidad interrumpiendo la discusin que se formara entre Aomine y Kise.
Todos; Kagami, Akashi, Kise, Aomine y Takao sonrieron ampliamente.
—Pues bien pequea Hikari-chan, bienvenida a la familia —exclamo Takao acariciando la mejilla de la nia, la cual enseguida abri sus orbes pero no lloro, era todo lo contrario, observo a todos y cada uno de los rostros que tambin la observan— tendrs bastantes tos, algunos que se encuentran aqu y otros que vendrn a visitarte maana, pero puedes estar segura de que te querrn un montn… —agrego Takao observando a la bebe.
—Y tampoco dudes de que te consentiremos bastante y eso comienza ahora —exclamo Kise tomando del brazo al doncel pelinegro para llevarlo a la entrada.
—Akashi-kun —llamo al doncel pelirrojo que se encontraba observando a la pequea que le apretaba tiernamente uno de los dedos de su mano, mientras que Aomine y Kagami le asan gestos para entretenerla.
— Qu ocurre Tetsuya? —cuestiono observando ahora al peli-celeste.
— Midorima-kun sabe acerca de la sorpresa que le estaba preparando? —cuestiono Kuroko.
—Aun no —respondi el pelirrojo de orbes bicolor con una sonrisa al sentir como la pequea apretaba un poco ms su dedo— y no lo sabr, despus de todo Takao y Kise se encargaron de traer ropa para ti y Midorima —agrego.
—Qu bueno, despus de todo esto aun quiero celebrar el cumpleaos de Midorima…
—Aunque ahora celebraremos dos, el de Midorimacchi y el de la pequea Hikari-chan —exclamo Kise acercndose junto a Takao.
El pelinegro traa consigo un enorme oso de peluche de color blanco y algunos globos de helio, mientras que Kise tena un bolso de color rosado adems de que tambin traa dos peluches de oso.
—Feliz cumpleaos Hikari-chan —exclamaron aun volumen moderado para no asustarla.
—No debieron molestarse chicos —exclamo Kuroko con una gran sonrisa al ver los presentes de sus amigos.
—No es molestia, sabamos que no estaban preparado para la llegada de Hikari, por lo tanto todos ayudamos a cmprale algunas cosas que necesitaran por ahora —respondi Akashi.
—Realmente se los agradezco chicos —exclamo Kuroko con unas pequeas lagrimas rodando por sus mejillas.
—No hay nada que agradecer, nosotros somos los tos de Hikari y no dudaremos en consentirla y en ayudarlos a ustedes —hablo esta vez Kagami sonriendo.
—Cierto —concordador los dems con grandes sonrisas.
Y en ese preciso momento a la habitacin llegaron Nijimura y Midorima.
—Creo que es suficiente de visitas por hoy, el paciente debe descansar, maana podrn volver —les informo el pelinegro.
—Bien —respondieron todos a coro.
—Nos vemos Kurokocchi, te dejare el bolso con la ropa de la bebe aqu —dijo el rubio sonriendo y no dudo en colocar el bolso sobre la mesa a los pies de la cama.
—Nos vemos Tet-chan, los peluches los dejaremos en tu departamento —se despidi Takao con una sonrisa.
—Yo tambin dejare alguna cosas en el departamento, nos vemos Tetsuya —se despidi esta vez Akashi.
—Nos vemos maana Tetsu, Kuroko —se despidieron respectivamente Aomine y Kagami.
Y en cuestin de minutos en la habitacin se encontraban solamente Nijimura, Kuroko, Hikari y Midorima.
—Bueno Kuroko-kun, es mejor que descanses, Midorima se pude quedar por esta noche —le informo el pelinegro observado al peli-celeste.
—Hai —respondi Kuroko sonrindole a Nijimura.
Y el medico no dudo en salir de la habitacin dejando solos a la pareja.
—Midorima-kun, por que no sostienes a Hikari, realmente estoy cansado —pidi el menor observado al peli-verde.
—Claro —respondi este, atrajo uno de los sillones que se encontraban junto a la pared y con cuidado tomo a la pequea que nuevamente se haba quedado dormida.
Una vez que le pequea se encontraba entre los brazos de su padre, este se sent cmodamente en el silln, para enseguida ver como Kuroko cerraba los orbes para entregarse al sueo.
Midorima sonri ampliamente, para acercarse un poco al peli-celeste y con cuidado de no aplastar a Hikari depsito un beso en la frente de Kuroko.
—Gracias por entregarme el regalo de cumpleaos ms hermoso de toda mi vida —susurro esta vez observando a la pequea que dorma entre sus brazos, mientras que Midorima sonrea ampliamente.
Shintaro se qued por varios minutos observando a la pequea dormir, hasta que el sueo tambin se hiso presente en l, por lo tanto deposito a le bebe en la pequea cuna de acrlico que las enfermeras haban puesto junto a la cama y decidio acomodarse un poco mejor para dormir.
Realmente estaba feliz— aunque haba sido un gran sorpresa —haba formado una familia con la persona que ama.