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One-shot`s: Todos x Kuroko. por Natsuki Miu

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Notas del capitulo:

Hola! Aquí apareciendo después de alrededor de 3 semanas… pues realmente lo siento, no fue mi intención pero es que ahora no tengo internet fijo y se me complicara un poquito más subir los One-shot T-T

Y pues… esta vez les traigo un One-shot TakaKuro que me gusto escribir y espero que a ustedes también les agrade ^ ^

Declaracin: “Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Tadatoshi Fujimaki”.

One-shot n18: -Una mascota extraa-.

Pareja: Takao Kuzanari x Kuroko Tetsuya.

Gneros: Romntico, Au.

Advertencias: Ninguna.

El lugar era oscuro y se poda percibir el claro olor a humedad en el ambiente, realmente desagradable.

Trato de moverse para desentumir sus msculos agarrotados por estar en la misma posicin pero no pudo, la cadenas que sujetaban sus muecas y tobillos no se lo permitieron por lo tanto suspiro con pesar, Realmente podra salir de ese horrible lugar?... si poda, muerto.

El sonido chirriante de la puerta al abrirse no demoro en llamar su atencin, sus orbes de una hermosa tonalidad celestes se afilaron al reconocer al hombre de bata blanca, cabellos negros y orbes dorados que entraba a la habitacin, el monstruo culpable de que l estuviera encerrado en aquel horrible lugar, en aquella celda de metal.

Buenos das mi querido Kuroko Tetsuya —saludo escalofriantemente el hombre que al fin se haba acercado a la celda con barrotes de metal— listo para volver a sufrir…

Y aquello fue suficiente para hacerlo despertar sobresaltado, con su pelaje erizado y su corazn latiendo descontrolado en el interior de su pecho.

Rpidamente registro la habitacin en penumbras —ya que gracias a su vista gatuna poda ver claramente a su alrededor— suspiro para tranquilizarse al ver que se encontraba a salvo en la alcoba del nico humano que se haba apiadado de l, en mucho, mucho tiempo, Takao Kuzanari; un chico de cabellos negros y orbes de una tonalidad gris, el cual en ese preciso momento se encontraba durmiendo junto a l en el lecho.

El neko aun asustado por la anterior pesadilla, no dudo en levantarse del lugar en el que se encontraba echado y se acerc un poco ms al pelinegro, el cual no demoro en despertar.

Qu es lo que sucede, Kuro? —cuestiono observando al felino de orbes celestes.

Miau —fue la nica respuesta del animal.

Una sonrisa afloro en los labios de Takao y sin demora comenz a acariciar el pelaje del felino, logrando que el pequeo animalito al fin se relajara, volviera a acomodarse y comenzara a ronronear.

Se senta dichoso por tener a un humano como Takao cuidando de el por lo tanto no demoro en caer nuevamente dormido al sentir las constantes caricias sobre su pelaje mientras que su mente recordaba el primer da en que haba conocido a Kuzanari.

Flash Back;

Al fin haba podido escapar de aquel horrible lugar en el que lo tenan encerrado desde hace… —ni siquiera recordaba cuanto tiempo haba pasado— pero ahora aquello ya no importaba, al fin poda ser libre y todo gracias al descuido de uno de los encargados de su vigilancia.

Suspiro para controlar su respiracin agitada por la carrera y enseguida sinti la punzada de dolor en su muslo izquierdo, uno de los guardias no haba hallado nada mejor que dispararle para impedir su huida pero gracias a sus reflejos haba logrado esquivarla recibiendo un rasguo —bastante profundo— pero nada grave o eso esperaba.

Ahora se encontraba deambulando por la calles de la ciudad — Era libre! — pero desde ah nada fue fcil como pensaba, fue perseguido por perros y golpeado por dueos de los locales de comida cuando intentaba conseguir un poco de alimento, adems de que an tena la herida de bala.

“Genial!” —Pens con irona el neko— “Sal de un infierno para entrar en uno peor” —y se dej caer cansado, adolorido y hambriento entre unos botes de basura— “Los humanos son unos monstruos, jams volver a mostrarme ante ellos, como realmente… soy…” —y la inconciencia se apodero de l.

Despert poco tiempo despus ya que la lluvia se comenzaba a hacer presente sobre la cuidad de Tokio.

“Esto no puede ser mejor” —gruo molesto mientras trataba de levantarse para resguardarse de la lluvia, pero le fue imposible dado sus golpes, el cansancio y el hambriento que se encontraba.

Y de un momento a otro la lluvia ya no lo mojaba y no haba parado de llover pues escuchaba perfectamente bien las gotas caer contra el pedimento, entonces, Por qu?.

Levanto la vista asustndose de inmediato, frente a l y acuclillado se encontraba un humano de cabellos negros y orbes de una hermosa tonalidad gris por lo tanto aterrado —dada sus anteriores experiencias— no dudo en levantarse y querer escapar, pero se encontraba acorralado entre la basura, la pared de concreto y el cuerpo del adolecente.

No te asustes —hablo el humano tratando de calmar al felino obviamente asustado— prometo no hacerte dao —agrego con sinceridad— solo quiero curar tus heridas.

“Si supieras todas las veces que escuche eso antes” —dijo en respuesta pero obviamente el chico solo escucho un par de maullidos temerosos.

Djame ayudarte —volvi a decir el humano para enseguida acariciar con cuidado y cario la cabeza del felino.

Y aquello fue suficiente para que el neko se dejara levantar de aquel hmedo piso, el adolecente de orbes grises era la primera persona que se acercaba a l para acariciarlo, no para lastimarlo.

El pelinegro una vez que logro tranquilizar al felino no dudo en tomarlo con cuidado del suelo, lo acomodo suavemente entre sus brazos —para no lastimarlo ms de lo que ya estaba— y comenz a caminar para salir de aquel oscuro callejn en direccin a su hogar bajo la sombrilla que llevaba previamente, ya que la lluvia comenzaba a intensificarse.

Y as, en cuestin de minutos el pelinegro se encontraba caminando bajo las luces de los faroles de la calle notando de inmediato el color del pelaje del felino que carba entre sus brazos; el neko era de una extraa tonalidad gris azulada* casi celeste, adems de que alrededor del cuello llevaba un collar de color rojo con una placa con el nombre: “Negro”.

Kuro? —cuestiono el chico extraado, no encontraba la lgica en aquel nombre pero el felino al escuchar ser llamado no dudo en levantar su cabeza ensendole aquellos hermosos y afilados orbes de una tonalidad celeste.

Una amplia y clida sonrisa afloro en los labios del pelinegro.

Al parecer ese es tu nombre —y la confirmacin fue un maullido por parte del felino por lo tanto el chico no dudo en acariciar la cabeza del neko que se haba acomodado entre sus brazos en busca de calor considerando que se encontraba empapado.

Kuro al sentir las caricias no dudo en comenzar a ronronear, hace mucho tiempo que no senta aquel sentimiento de tranquilidad y confort que aquel chico le entregaba con solo un mimo.

Fin Flash Back.

y desde eso ya haba trascurrido un mes, sus heridas se haban curado por completo gracias a los cuidados y atenciones de Takao, tena 3 comidas al da por lo tanto no pasaba hambre, no pasaba frio ya que Kuzanari lo dejaba dormir con l y lo mejor de todo era que nadie volvera a hacerle dao.

Adems de que se haba encariado de tal forma con Kuzanari que haba considerado en ms de una ocasin mostrarle al chico su verdadera forma, pues el realmente no era un animal, era un tanto diferente pero aunque lo haba pensado seriamente, no encontraba la forma ni tampoco el momento indicado para decirlo… hasta ahora.

Hoy era da viernes, los padres de Takao no llegaran hasta entrada la noche por su trabajo y el pelinegro llegara temprano de la escuela por lo tanto podra contrselo.

Nos vemos esta tarde~ —se despidi animadamente de su madre Takao una vez que haba terminado de desayunar, acaricio la cabeza del gato que se encontraba tomando un poco de leche tibia y salido de la cocina en direccin a su habitacin para enseguida bajar y salir finalmente por la puerta de entrada rumbo a la preparatoria donde cursaba su primer ao.

Prtate bien, Kuro —esta vez fue la seora Takao la que le acariciaba la cabeza y luego sali de la habitacin en direccin a la puerta de entrada para enseguida salir.

Kuroko no demoro en quedarse solo en la enorme vivienda —ya se haba acostumbrado— por lo tanto termino su desayuno, limpio su boca con una de sus patas delanteras y se dirigi a la sala para acurrucarse sobre la alfombra baada en el sol de la maana que entraba por uno de los ventanales.

Lo nico que le quedaba por hacer era dormir ya que Kuzanari no llegara hasta pasado el medioda.

>>> *** <<<

Los pequeos rayos de sol que haban logrado colarse por entre las nubes entibiando un poco el frio ambiente que dejaba el invierno no demoraron en ser nuevamente cubiertos por lo tanto Kuroko no demoro en despertar, estiro su cuerpo para desperezarse y casi enseguida escucho como la puerta de entrada era abierta.

Estoy en casa~ —escucho decir desde la puerta.

“Bienvenido” —saludo en un maullido Kuroko al acercarse a la puerta crispndose enseguida al ver a las personas que seguan al pelinegro.

Con permiso —dijeron a coro los amigos de Takao una vez que se encontraban dentro de la vivienda.

Conque este es el neko —Dijo Miyagi Kiyoshi, un chico rubio de orbes dorados que no dudo en acercarse al minino para tratar de alzarlo.

Miyagi-senpai~ es un poco arisco —le advirti Takao, aunque un poco tarde.

Y Kuroko no dudo en rasguar la mano de Miyagi cuando este haban intentado cargarlo.

Itai! —se quej el rubio para enseguida alejarse del felino que sonrea orgulloso de lo que haba hecho.

Y es por esa razn que los gatos no me agradan —hablo esta vez Midorima Shintaro, un chico con lentes de marco negro, orbes de color verde y cabello de la misma tonalidad.

Es que a Shin-chan~ ningn animal lo quiere~ —agrego el pelinegro retirndose las zapatillas completamente divertido.

Cllate Takao! —exclamo el peli-verde un tanto molesto.

Creo que a m tampoco me agradan los gatos —exclamo Miyagi revisando el rasguo en el dorso de su mano— por cierto, Cmo se llama la bola de pelos? —cuestiono observando al felino que mova su cola de un lado al otro en seal de clara molestia.

Kuro~ —respondi Takao sonriendo y luego de aquello los tres chicos comenzaron a dirigirse a las escaleras mientras comenzaban a conversar de trivialidades.

Miau —decidio decir para llamar la atencin del pelinegro que desapareca por las escaleras— “Me ignoro por completo” —gruo completamente molesto mientras que segua moviendo su cola de un lado al otro.

Y sin querer perder ms tiempo, comenz a dirigirse a la habitacin del pelinegro para demandar un poco de su atencin.

Kuroko no demoro mucho tiempo en llegar a la habitacin del de orbes grises, entro a la alcoba encontrndose a Miyagi, Midorima y Takao conversando animadamente sentados en el suelo mientras que el ltimo encenda la consola para jugar videojuegos.

Miau —maull el neko pero nuevamente fue ignorado— Miau —volvi a decir Kuroko esta vez acercndose a Takao para enseguida subirse a sus piernas y restregar su pelaje en el cuerpo del pelinegro para llamar la atencin de este.

Ms tarde te dar de comer —le aviso al minino y enseguida se levant con Kuroko entre sus brazos para dejarlo fuera de la habitacin cerrando la puerta para que este no volviera a entrar.

El felino al ver que lo haban dejado fuera de la habitacin bufo molesto y no dudo en echarse frente a la habitacin.

“Al parecer mi plan no podr realizarse” —pens para enseguida cerrar sus orbes y agudizar el odo para no perder detalle de lo que los chicos dentro de la habitacin conversaban.

Takao, Dnde se encuentra el bao? —cuestiono el peliverde luego de algunos minutos de conversaciones triviales, videojuegos y burlas entre los tres ocupantes de la alcoba.

Shin-chan~, es la puerta al final del pasillo~ —respondi Takao con su tono animado de siempre.

Vengo enseguida —volvi a hablar Midorima y enseguida abri la puerta pasando junto al felino, sin molestarlo ya que no le agradaban los Nekos por la simple razn de que siempre terminaba rasguado sin siquiera provocarlos.

Kuroko por su parte tambin ignoro por completo al peliverde y no se movi ningn centmetro del lugar donde se encontraba recostado con los orbes cerrados y las orejas alzadas.

“Que aburrido” —se quej luego de algunos segundo ms ah echado— “Creo que bajare por un poco de comida” —se levant pero antes de que siquiera diera un paso, dentro de la habitacin escucho algo que no le gusto para nada.

Kuzanari —el rubio no demoro en llamar la atencin del aludido— me estaba preguntando si… si te gustara salir conmigo en una cita —se atrevi a confesar.

Hubo un pequeo silencio por parte de Takao.

Pero… —no lo poda creer— si quiere una cita conmigo, eso quiere decir que…

As es Kuzanari… t me gustas —confirmo Miyagi— por lo tanto, Te gustara salir conmigo? —cuestiono con completa sinceridad y seguridad el rubio.

“No si yo puedo evitarlo!” —gruo Kuroko completamente celoso para sin dudarlo comenzar a correr en direccin a la habitacin de los padres de Takao.

Donde una vez dentro de la habitacin decidio transformarse.

Kuroko en cuestin de segundos haba dejado de ser un neko para convertirse en un bello chico de estura baja, con piel blanca, hermosos y alborotados cabellos celestes y orbes de la misma tonalidad, pero a pesar de tener todas las cualidades de un adolecente an conservaba las uas un tanto afiladas, sus dos orejas que combinaban con el color de su cabello y su cola, la cual se mova de un lado al otro considerando lo molesto y tambin nervioso que se encontraba al pensar que poda perder a la nica persona importante para l en el mundo.

Por lo tanto ahora en su forma “normal” comenz a buscar rpidamente una tenida de ropa del padre de Takao, despus de todo se encontraba completamente desnudo. Y as Kuroko no demoro en encontrar una camisa que gracias a dios no le quedaba grande y un par de Jean negros que se ajustaban bien a su cuerpo, Y qu hara con la cola y las orejas?... pues apto por esconder sus orejas y gran parte de su cabello dentro de un gorro de color negro y enrollo su cola alrededor de su cintura para enseguida ocultarla bajo la camisa.

Veremos si ese rubio trata de salir con MI Takao luego de que me conozca —se dijo a s mismo en un susurro y con paso apresurado sali de la habitacin rumbo a la alcoba de Kuzanari.

Aunque al principio no estaba acostumbrado a caminar en dos piernas —dado todo le tiempo que se haba ocultado como un neko— de todas formas logro llegar al cuarto de Takao, se detuvo frente a la puerta, suspiro un par de veces para calmarse y giro el pomo de esta.

Realmente siento llegar tarde Kuzanari-kun —hablo al abrir la puerta encontrndose con que Midorima, Miyagi y Takao lo observaban— oh, veo que invitaste a Midorima-kun y a Miyagi-san —agrego observando a los aludidos— Buenas tardes —saludo cortsmente con una pequea sonrisa.

Buenas tardes —devolvi el saludo Midorima el cual no dudo en levantarse para saludar al recin llegado— eres amigo de Takao? —cuestiono curioso.

No te habamos visto antes —dijo Miyagi un tanto desconfiado— Realmente lo conoces Kuzanari? —cuestiono observando al pelinegro que se vea claramente confundido.

Pues claro que me conoce —respondi Kuroko haciendo que el rubio lo observara— despus de todo soy su… soy su novio —agrego sonrojndose tiernamente.

Miyagi y Midorima no pudieron evitar que sus rostros mostraran clara sorpresa por la confesin del chico frente a ellos.

Ya veo —Midorima fue el primero en hablar— debiste haber confiado en nosotros, despus de todo somos amigos y tu novio es bastante lindo —agrego sonriendo el peli-verde.

Shintaro tienes razn —hablo esta vez Miyagi tratando de sonar normal— ya que cremos que es genial que tengas a alguien a tu lado.

Y en ese preciso momento el celular de Midorima comenz a sonar por lo tanto este no dudo en sacarlo del interior de su bolsillo.

Hablando de novios —el peli-verde sonri— Creo que es momento de que me marche, o se molestara conmigo, nos vemos Takao —se despidi el de orbes verdes.

Takao que no entenda absolutamente nada, al escuchar a Midorima reacciono, no negaba que el peli-celeste era lindo como haba dicho su amigos pero, Quin rayos era?

Nos vemos, Shin-chan~ —se despidi tratando de sonar lo ms natural posible— y tienes razn, lamento no habrselos comentado, realmente lo siento~ —sonri apenado.

No te preocupes Kuzanari —Esta vez hablo Miyagi— por cierto, Cmo te llamas? —cuestiono observando esta vez al peli-celeste.

Mi nombre es Kuroko Tetsuya —respondi con una sonrisa— es un gusto conocerlos —agrego cortsmente.

Pues para mi tambin es un gusto concert Kuroko y pues ahora me retiro, tengo que ir a visitar a Akashi o me matara —lo ltimo lo dijo con algo de miedo.

Nos vemos Midorima-kun —se despidi esta vez Kuroko y el peli-verde se dispuso a salir de la habitacin.

Shintaro —llamo Miyagi— Me ir contigo —le aviso— tambin debo marcharme ya que se est haciendo tarde —decidio levantarse del lugar donde se encontraba para enseguida tomar su bolso— nos vemos Kuzanari —trato de sonrerle— por cierto, puedes olvidar lo que te dije tiempo atrs —observo al peli-celestes— tambin es un gusto conocerte Kuroko-kun —y luego de decir aquello sali de la habitacin junto a Midorima, el cual lo observaba un tanto confundido pero decidio no preguntar nada referente a lo que el rubio le haba dicho a Takao.

Y as en cuestin de minutos Kuroko y Takao se quedaron en la habitacin, el pelinegro no entenda absolutamente nada, pues jams en su vida haba visto al chico frente a l.

Dado el silencio que se haba instalado en la habitacin Kuroko y Takao no demoraron en escuchar el sonido de la puerta de la entrada avisando que Midorima y Miyagi se haba marchado.

Ahora, Quin rayos eres t y que es lo que acaba de ocurrir?! —cuestiono completamente molesto y tambin confundido el pelinegro.

Kuroko suspiro, realmente no haba tenido ninguna intencin de revelarle de aquella forma su verdadera identidad a Takao pero no quera perder a la nica persona que se haba preocupado por el, por lo tanto Tetsuya volvi a suspirar y rpidamente se quit el gorro dejando a la vista sus orejas que se encontraban hacia atrs y desenrollo su cola, la cual comenz a moverse de un lado al otro con nerviosismo por la reaccin del pelinegro.

Takao agradeci estar aun sentado sobre el piso de la alcoba ya que si hubiese estado de pie se hubiese cado por la impresin que le causo ver aquellas orejas y la cola que se movan a voluntad de su portador pero la sorpresa no dudo mucho, ya que al observar detenidamente al chico frente a l pudo darse cuenta de que era realmente atractivo con aquel color de ojos y piel, adems de que las orejas hacia atrs y la cola movindose con evidente nerviosismo lo hacan ver endemoniadamente tierno.

Son de verdad? —cuestiono an son aquella duda.

Hai, son verdaderas —respondi Kuroko esta vez observando al suelo— recuerdas al neko que encontraste en aquel callejn? —cuestiono el peli-celeste.

Y al fin logro recuperarse por completo de la sorpresa al recordar a su gato, el color de cabello no tenan la misma tonalidad, pero aquellos ojos afilados y de una atrapante tonalidad celeste eran iguales… Acaso eso eran la misma persona o animal o…? ni siquiera saba que era exactamente el chico frente a l, quizs se estaba volviendo loco!, pero Midorima y Miyagi lo haban visto incluso haban conversado con aquel chico… Aquello realmente era posible?!

C…Claro que lo recuerdo —decidio responder— es el gato ms inteligente, un tanto arisco, pero tambin carioso que he conocido —agrego observando al peli-celeste frente a l.

Pues ese felino en realidad soy yo… —agrego Kuroko agachando un poco ms las orejas y observando el piso, tena miedo de la reaccin de Takao.

Realmente esto est ocurriendo?...

Si!, Soy de verdad —y sin siquiera dudarlo Kuroko se acerc a Takao y se arrodillo frente al pelinegro para observarlo— soy un humano de carne y hueso como t —agrego para enseguida tomar las manos del contrario sonrojndose un poco.

Salvo por las orejas y la cola~ —comento esta vez Takao divertido mientras que una pequea sonrisa afloraba en sus labios, al parecer podra acostumbrarse a la extraa situacin.

Creo que tienes razn —una amplia y hermosa sonrisa surco los labios de Kuroko dejando que Takao pudiera apreciar sus colmillos, los cuales tampoco haban desaparecido.

Pues bien~, esto es lo ms extrao que me ha ocurrido en la vida —decidio decir Takao— y ya que al parecer me estoy volviendo loco~ podre acostumbrarme a que al gato que crea una mascota normal pueda transformarse en humano~ —agrego con su tono animado de siempre mientras que sonrea, no podra correr a la calle a Kuroko pues l no era una mala persona aunque la situacin fuera completamente anormal.

Y Kuroko no poda creer lo que acababa de salir de la boca de Takao, ciertamente haba esperado lo peor, hace mucho tiempo atrs haba hecho exactamente los mismo y lo haban tachado de fenmeno, la segunda vez que lo hiso fue encerrado —por la persona que crey la ms importante en su vida— en aquel horrible laboratorio y ahora, Kuzanari lo aceptaba, Realmente lo estaba aceptando por lo que realmente era?

Es enserio? —cuestiono esta vez Kuroko sin crerselo— No est asustado o me dirs que soy un fenmeno o me mandaras a encerrar en un laboratorio? —cuestiono con un deje de tristeza en la voz que Takao percibi claramente.

El pelinegro no demoro en fruncir el ceo al escuchar aquello.

Por qu crees que hara algo como eso? —cuestiono algo molesto el pelinegro— me he encariado mucho contigo este ltimo mes por lo tanto y aunque no niego que esto es extrao no podra hacerte dao como neko ni mucho menor ahora como humano —agrego observando al peli-celeste completamente seguro de sus palabras.

Y la emocin que Kuroko estaba sintiendo en ese momento era tanta que no pudo controlar sus instintos y sin dudarlo salto sobre Takao por lo tanto en cuestin de segundos Kuzanari se encontraba recostado por completo sobre el piso de la habitacin y el peli-celeste sobre el a horcajadas.

Takao al ver a Kuroko sobre el con una hermosa sonrisa no demoro en sonrojarse un poco por la cercana de ambos rostros.

K…Kuroko, puedes bajarte esto es un poco incmodo —tartamudeo al ver lo tierno que se vea el chico sobre l.

Oh —un amplio sonrojo surco las mejillas de Kuroko al darse cuenta de lo cerca que sus rostros se encontraban— r…realmente lo siento, es que no pude controlar…

Pero antes de que pudiera continuar hablando o siquiera alejarse sinti la mano de Takao posarse sobre su mejilla, aquel contacto no demoro en hacer que su corazn comenzara a latir descontrolado en el interior de su pecho y que su respiracin se cortara por unos segundos.

Era oficial, Kuroko para Takao era endemoniadamente tierno y aquel sonrojo en sus mejillas, aquella orejas y la posicin en la que estaban comenzaban a hacer que pensara en cosas nada correctas considerando el poco tiempo que el chico llevaba siendo humano por lo tanto el pelinegro decidio tratar de controlarse para no cometer ninguna estupidez, aunque de todos modos llevo una de sus manos a la mejilla del peli-celeste, quera salir de una duda, la cual ayudara a distraer un poco sus hormonas de adolecente.

Esto es real? —cuestiono el pelinegro quera distraerse su mente por lo tanto y dejndose guiar por la curiosidad llevo la mano sobre la mejilla de Kuroko hacia los labios de este tratando se tocar aquellos colmillo que tanto haban llamado su atencin.

Kuroko por su parte se encontraba completamente inmvil, aquella manos en sus mejilla y el brillo de curiosidad y algo ms en los orbes grises de Takao lo haban tomando por sorpresa por lo tanto solo se dej hacer e incluso abri su boca para que el pelinegro pudiera investigar sus colmillos.

Ahora si crees que son reales? —cuestiono el peli-celeste saliendo de su pequeo transe al ver que Takao retiraba la mano de su boca pero al parecer la curiosidad del peli-negro iba ms all, ya que Kuroko no demoro en estremecerse de sobre manera al sentir como Kuzanari haba comenzado a acariciar una de sus orejas de neko.

Ahora estaba en problemas!, cuando era un gato las caricias sobre sus orejas no eran problema pero ahora que era “humano” aquel lugar era extremadamente sensible y hacia que cierta parte de su cuerpo despertara por lo tanto Kuroko, sin querer llegar a ms, quito la mano del Takao de su cabeza y rpidamente se levant para alejarse un poco del pelinegro con un enorme sonrojo en sus mejillas.

Te lastime? —cuestiono Takao ahora extraado incorporndose del suelo para observar al contrario.

No es eso exactamente, es solo que mis orejas son un poco sensible —“En realidad muy sensible” —finalizo la oracin en su mente— por cierto, Kuzanari-kun —decidio cambiar el tema aunque tambin quera estar seguro de que su pasado no se repetira, tena miedo de ser traicionado nuevamente— puedes prometerme que guardaras este secreto —pidi con preocupacin mientras que observaba fijamente los orbes grises estando de pie frente a Takao.

Takao que ahora se encontraba sentado sobre el suelo no demoro en suspirar no revelara el secreto, adems de que estaba seguro de que nadie le creera.

No te preocupes guardare tu secreto —respondi con sinceridad mientras sonrer— pero, de qu tienes tanto miedo? —cuestiono ahora preocupado.

El peli-celeste no demoro en suspirar para enseguida tomar asiento sobre el lecho, realmente le contara aquello a Takao?... bueno ya no tena nada que perder ya que este ya conoca su verdadera forma.

Kuroko volvi a suspira.

Hace mucho tiempo atrs tambin le ensee mi verdadera apariencia a una persona que realmente cre que estaba enamorado de mi —Takao se encontraba confundido por aquella confesin por lo tanto Kuroko no demoro en explicarse— el encuentro con aquella persona fue distinto al que tuve con Kuzanari-kun, ya que lo conoc mientras era humano ocultando mis orejas y cola como lo hice enfrente de Midorima-kun y Miyagi-san por lo tanto me enamore perdidamente de l y cre que el tambin lo estaba de m, cuando llevbamos unos meses saliendo me arme de valor y decid que ya era tiempo de ensearle mi verdadera forma pens que me aceptara pero me equivoque —Kuroko apret sus puos— al principio pareci aceptarme pero todo era mentira, ya que una tarde me invito a quedarme a su departamento, despus de un da increble cenamos y al parecer coloco algunos somnferos ya que ca inconsciente sobre el silln de la sala… —suspiro con pesar— cuando despert estaba en un lugar extrao y oscuro, mis tobillos y muecas se encontraban encadenados dentro de una jaula con gruesos barrotes de metal… realmente no recuerdo cuanto tiempo paso desde que llegue a ese horrible laboratorio, en el cual no solo haban ms chicos y chicas con la habilidad de transformarse en felinos sino que tambin haban ms personas con habilidades, algunas ms raras que otras, pero en ese lugar todos tenamos algo en comn… ramos monstruos que deban ser investigados, torturados y en el peor de los casos asesinados… —no pudo controlar las lgrimas que comenzaron a caer de sus orbes celestes, haba pasado un mes desde que haba escapado de aquel infierno pero no haba tenido la oportunidad de desahogar todo el dolor que haba vivido encerrado en aquel lugar… por lo tanto una vez que se sinti estrechado contra el pecho de Takao en un clido y reconfortante abrazo, las lgrimas comenzaron a salir con mayor intensidad de sus orbes.

Takao que escuchaba con toda su atencin aquel doloroso relato, comenz a sentir molestia, como podan haberle hecho aquello a Kuroko, apret sus puos y sinti la enorme necesidad de abrazar, reconfortar y proteger de todo y de todos a aquel chico por lo tanto una vez que noto las lgrimas caer de esos hermosos orbes celestes no dudo en rodearlo con sus brazos quedndose junto a Tetsuya hasta que este se calamara por completo.

Kuroko una vez calmo su llanto decidio quedarse entre los brazos de Takao ocultando si rostro en el pecho contrario percibiendo aquel exquisito aroma que tena Kuzanari, aquel aroma que lograba calmarlo desde que se haban conocido aquella tarde de lluvia.

El pelinegro al sentir como Kuroko corresponda su abrazo no dudo en sonrer ampliamente ahora que conoca aquel horrible pasado que tena Tetsuya, no lo dejara solo, lo cuidara y protegera por lo tanto Takao no dudo en llevar una de sus manos a la cabeza del contrario y le acaricio con carios los cabellos celestes.

Desde hoy no volvers a ser lastimado~, te lo prometo Tet-chan~ —decid decir con su tono de siempre pero completamente seguro de sus palabras.

Una sonrisa surco los labios de Kuroko y con un gran sonrojo en las mejillas aparto su rostro del pecho contrario.

Realmente no me equivoque —exclamo tmidamente pero de igual forma feliz apartando la vista de los orbes grises mientras que sus orejas se encontraban levantadas y su cola se mova de un lado al otro.

En qu? —cuestiono Takao completamente curioso por la actitud del menor.

En confiar en Kuzanari-kun —respondi Kuroko para enseguida agregar— y lo ms importante… en enamorarme de ti… —el rostro de Tetsuya no demoro en sonrojarse a un ms.

Takao se haba sorprendido gratamente al escuchar aquello, aunque Miyagi-senpai se la haba confesado ese mismo da, no haba sentido lo mismo que lo que sinti al escuchar a Kuroko, ya que con las palabras del peli-celeste su corazn comenz a acelerarse al punto de que pensara que se saldra del interior de su pecho, por lo tanto no dudo en sonrer ampliamente.

El pelinegro aun con la sonrisa en sus labios no dudo en levantar el mentn de Kuroko, observo aquellos hermosos orbes celestes por unos segundos y acorto la distancia de sus bocas en un beso tranquilo y tierno, aquellos labios eran deliciosos, su corazn se aceler an ms de lo que ya estaba y su estmago se llen de cientos de mariposas.

Kuroko abri sus orbes a ms no poder por la sorpresa y aun sin creerse del todo lo que ocurra correspondi el beso de Takao, mientras que se senta completamente feliz, ya no le caban dudas, Kuzanari era su persona especial y no la dejara.

El aire les hiso falta a ambos luego de algunos segundo por lo tanto Takao no dudo en separar sus bocas para observar a Kuroko el cual se encontraba completamente rojo.

Es oficial, prometo proteger a Tet-chan~ y tambin tratar de corresponder sus sentimientos~ —decidio decir Takao luego de algunos minutos recuperando su aliento.

Una amplia sonrisa afloro en los labios del peli-celeste.

Y yo prometo no alejarme de Kuzanari-kun —dijo Kuroko para enseguida abrazar a Takao el cual no demoro en sonrer correspondiendo el abrazo.

Conocer la forma “normal” de Kuroko al principio le haba parecido extrao y descabellado pero ahora estaba a gusto con l, se haba encariado de sobre manera con aquel felino que haba encontrado bajo la lluvia, con su verdadera forma no crea que fuera distinto y quizs con el tiempo, formar otro lazo?... pues quera que fuera as.

 

 

Gris azulada*: Pues en la realidad si hay una raza de gato que tiene este color de pelaje ^^

Notas finales:

Les prometo actualizar lo antes posible y cumplir los pedidos que me han hecho con anterioridad…

Muchos saludos!


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