La maana recin estaba comenzando y aunque era da sbado, Kuroko Tetsuya un chico de cabellos y orbes celestes se encontraba sentado en la sala de su vivienda observando la televisin mientras que se serva un tazn de cereal con leche. Haba trascurrido alrededor de una semana desde la derrota del instituto Seirin contra el instituto T, lo cual lo haba afectado notoriamente, tanto en los otros dos partidos, como en los entrenamientos y su estado de nimo, y quedarse en casa tampoco le ayudaba mucho, aunque tampoco tena los nimos suficientes como para salir a distraerse.
El de orbes celestes suspiro, termino de comer y deposito el tazn sobre la mesita de centro para casi enseguida escuchar que su celular-el cual se encontraba entre los mullidos almohadones-comenzaba a sonar, avisando que estaba entrando una llamada, el peli-celeste no le dio demasiada importancia al nombre, prefiriendo no leerlo y solo contestar.
-Hola Kurokocchi~!-exclamo Kise Ryouta al otro lado de la lnea.
-Hola Kise-kun-saludo con su tono de siempre Kuroko.
-Ug!, Aun te encuentras deprimido?-al escuchar el silencio por parte de Tetsuya decidio continuar-Kurokocchi~, te llamaba para subirte el nimo~-exclamo con emocin el rubio-te gustara salir conmigo~?-cuestiono con la misma emocin anterior-hay un parque de diversiones solo por este fin de semana y me encantara que me acompaaras~-agrego.
Pero antes de que Kuroko pudiera contestarle a Kise, el timbre de sus vivienda se hiso presente.
-Kise-kun, Puedes esperar un momento?-cuestiono el peli-celeste levantndose de su asiento-tocan el timbre.
-Claro~-respondi el rubio.
Al escuchar aquello, Kuroko abri la puerta con su celular cerca de su odo, grande fue su sorpresa al ver quien era la persona que lo haba ido a visitar.
-Buenos das Kuroko-saludo Midorima Shintar, un chico de cabellos verdes y cortos, piel blanca, ojos verde claro que utiliza gafas de marco color negro y en su mano derecha traa su amuleto de la suerte para ese da, un cangrejo de peluche.
-Esa es la voz de Midorimacchi?!-se escuch al otro lado de la lnea, lo suficientemente alto como para que Shintar lo escuchara y para que Kuroko tuviera que apartarse el aparato de su odo-Kurokocchi!, Qu hace Midorimacchi en tu cada!?-cuestiono el rubio con cierto tono de molestia que no pudo ocultar.
En el rostro de Midorima se form un sonrojo imperceptible al verse descubierto por Kise.
-Lo siento Kise-kun, pero te llamo luego-hablo el peli-celeste al ver como Midorima se arreglaba sus lentes en seal de nerviosismo.
-Kuro…-pero antes de que siguiera hablando el de orbes celestes corto la llamada.
-Midorima-kun, Qu haces aqu?-cuestiono dirigindose al peli-verde mientras que introduca su celular en el bolsillo de su pantaln, Kuroko se encontraba completamente extraado ya que jams se haba esperado aquella visita.
-Puedo pasar primero?-cuestiono Midorima con su rostro serio, ya que quera disimular su vergenza.
-Claro, adelante-respondi Tetsuya apartndose de la puerta para que Shintar entrara a la vivienda.
Midorima no dudo en entrar, para luego de ver como Kuroko cerraba la puerta seguirlo hacia la sala.
-Kuroko, Cmo ests?-cuestiono el peli-verde una vez que ambos se encontraban sentados en los sillones de la sala.
El rostro de sorpresa de Kuroko cambio rpidamente a uno de tristeza y por lo que tena entendido, Midorima no haba asistido a aquel partido, aunque estaba convencido de que Takao le haba comentado que Seirin haba perdido.
-Bien-minti para enseguida tratar de sonrer, lo cual no le resulto muy bien.
-No te hagas el fuerte-exclamo Midorima con su rostro completamente serio-se lo que duele perder, adems de que para ti debi ser ms duro al darte cuenta de que tus pases no sirvieron de nada contra Aomine-agrego observando fijamente los orbes celestes.
El rostro de Kuroko volvi a convertirse a uno de sorpresa.
-Cmo sabes lo que ocurri, si Takao-kun me dijo que tu no haba asistido?-cuestiono aun sorprendido, adems tampoco crea que Kuzanari le hubiese contado todos los detalles, o es que acaso Midorima…-o es que… si fuiste-aquello era ms que nada una afirmacin.
En el rostro de Shintar se volvi a formar un sonrojo, el cual oculto volviendo a mover sus anteojos.
-Pasaba por ah y decid entrar a ver-le hiso saber aunque aquello era mentira-en fin, lo importante aqu no es como me entere-agrego serio-Cmo te sientes?-volvi a cuestionar.
Al escuchar todo lo anteriormente dicho por Midorima, Tetsuya se qued sorprendido y al procesar todo, ya no le quedaban dudas, Shintar haba ido a verlo jugar y ahora mostraba preocupacin por el, aunque este no quisiera admitirlo abiertamente. En el rostro de Kuroko afloro una sonrisa sincera.
-No te preocupes Midorima-kun, estoy bien-respondi el peli-celeste aun sonriendo.
El peli-verde por su parte observo detenidamente a Tetsuya por unos segundos, siempre le haba molestado no poder descifrar lo que este estaba pensando, o eso era lo que le deca a todos los dems, pero lo que realmente ocurra era que el peli-celeste se esforzaba en ocultarle sus emociones a el ms que a nadie, por lo tanto aquello era lo que le molestaba… pero pese a todo la tristeza de Kuroko era completamente notoria para l.
Midorima suspiro para enseguida levantarse y quedar frente al peli-celeste el cual lo observaba confundido.
-Entonces me estaba preocupando por nada-aquella confesin sali de su boca sin que pudiera evitarlo.
Kuroko abri sus ojos a mas no poder por la sorpresa que le haban causado aquellas palabras, mientras que su rostro se formaba un notorio sonrojo, Midorima al reparar en lo dicho, no pudo evitar sonrojarse tambin-pero menos perceptible-y ya que haba evitado observar los orbes de Tetsuya, esta vez poso sus orbes en los contrarios para observar la reaccin de este, quedando encantado con el rubor que se notaba en las mejillas del peli-celeste, ya que en su opinin era realmente tierno y hermoso.
El peli-verde suspiro, ahora era el momento, Kuroko se encontraba solo en su casa, nadie los interrumpira, haba escuchado la voz claramente molesta de Kise por el celular y l no era idiota como para no darse cuenta de que tanto Ryouta como Kagami estaban interesados en Tetsuya y el, pues tambin… volvi a suspira, solo por unos momentos dejara a un lado su Tsunderismo para confesar de una vez por toda, sus sentimiento por la actual sombra de Seirin.
Midorima suspiro para as armarse del valor suficiente para decir aquellas simples pero a la vez difciles palabras de pronunciar.
-Kuroko-trato de asegurase de que Tetsuya le prestara atencin-Me gustas, quieres ser mi novio?-cuestiono con completa sinceridad aunque aquello le era realmente difcil dada su personalidad.
El rostro de Kuroko se tio de un intenso rojo, su corazn se descontrolo por completo en el interior de su pecho y su estmago se llen de “Mariposas”, aunque aquello realmente lo haba sorprendido ya que escuchar aquellas palabras de la persona que dice detestarte solo porque tu signo y tipo de sangre no son compatibles es realmente sorprendente, pero tambin le alegraba inmensamente escuchar aquello y como no, si el senta exactamente lo mismo por aquel chico que ahora se encontraba frente a l… suspiro jams se haba esperado aquello y ahora no saba cmo reaccionar.
El peli-celeste guardo silencio por unos minutos, suspiro nuevamente y decidio responder para que al mayor no malinterpretara su silencio.
-Midorima-kun-Tetsuya llamo la atencin de Shintar, mientras que se levantaba de su asiento quedando de frente al peli-verde.
Midorima al ver que Kuroko se levantaba decidio mirar hacia un lado.
-No es necesario que me respondas enseguida-le hizo saber el peli-verde, jams lo admitira en voz alta, pero estaba completamente asustado al pensar que Kuroko pudiera rechazarlo.
-Pero yo si quiero responder, estoy completamente seguro de mi respuesta-le hiso saber Tetsuya.
El peli-verde al escuchar aquello sinti como su corazn se comenzaba a acelerar y como su estmago se llenaba de “mariposas”, aunque tambin quera comenzar a prepararse para ser rechazado, ya que en todo el tiempo que lleva sintiendo aquello por Kuroko, este no le haba dado motivos para saber que era correspondido, Shintar suspiro para enseguida asentir con la cabeza para que el peli-celeste continuara hablando.
-T tambin me gustas-respondi dejando a Midorima completamente sorprendido, el cual no pudo evitar fijar su vista, (antes observando hacia un lado) en los orbes contrarios-aunque jams me imagine que fuera t el que se me confesara, yo siempre cre que este sera un amor no corres…-pero Tetsuya no pudo terminar aquella frase ya que los labios de Midorima se estamparon contra los suyos en un beso suave.
Kuroko sinti como su corazn de descontrolaba an ms en el interior de su pecho al sentir los suaves labios de Shintar sobre los suyos, aun no crea por completo lo que estaba ocurriendo, pero cuando sinti que la boca de Midorima comenzaba a moverse suavemente, decidio dejarse llevar, correspondiendo el beso, mientras que en su interior comenzaba a crecer un sentimiento de felicidad, aquel amor que crey no correspondido durante la mayor parte de la secundaria, ahora finalmente se aclaraba.
Luego de algunos segundos Midorima se separ de Kuroko por falta de aire, su corazn lata descontrolado y se encontraba completamente feliz, al fin haba tenido el valor para confesarse y su alegra haba crecido an ms al saber que era correspondido por aquel pequeo peli-celeste.
-Midorima-kun-el peli-celeste llamo su atencin-si quiero ser tu novio-respondi ya que el peli-verde no lo haba dejado terminar de hablar.
En el rostro de Shintar se form una amplia sonrisa, sorprendiendo gratamente a Kuroko ya que el peli-verde no esbozaba una de esas sonrisas desde que “la generacin de los milagro” haba cambiado por sus victorias consecutivas. Midorima por su parte y aprovechando que el peli-celeste se encontraba aun de pie frente a l, rodeo con uno de sus brazos la cintura contraria, mientras que con la otra levantaba el mentn del de orbes celestes para as acortar la distancia de sus cuerpos como la de sus bocas.
Esta vez era un beso completamente apasionado y hambriento, ya que tena todas las intenciones de recorrer con sus manos y boca aquel cuerpo que se encontraba frente a l, por lo tanto Midorima no dudo en profundizar el beso introduciendo su lengua en la cavidad ajena, saborendola por completo.
Cuando el aire les hiso falta a ambos, Shintar separo sus labios de los de Kuroko, pero no se detuvo ah, ya que comenz a bajar dibujando un camino de besos y lamidas desde el mentn contrario hasta el cuello y finalmente los hombros de Tetsuya, donde se entretuvo mordiendo suavemente, lamiendo y besando de manera provocativa toda aquella extensin de piel mientras que arrancaba de los labios del peli-celeste varios jadeos y tambin gemidos.
Luego de algunos minutos provocando a Kuroko, Midorima dejo aquella piel y sin dudarlo volvi a besar los labios contrarios introduciendo de inmediato su lengua en la cavidad ajena donde inicio una excitante guerra con la contratara. Pero mientras que sus bocas seguan unidas, el peli-verde decidio descender con sus manos hasta llegar a los glteos de Tetsuya, una vez ah decidio apretarlos un poco, sonriendo internamente al lograr arrancarle un gemido al de estatura menor, el cual se ahog en su propia boca y sin dificultad completo su intensin.
Shintar coloco sus manos en los muslos de Kuroko y sin ninguna dificultad lo levanto en el aire, logrando que el peli-celeste enredara sus piernas en sus caderas.
El peli-verde se separ un poco de los labios de Kuroko.
-D…Dnde est tu habitacin?-cuestiono con la respiracin entre cortada por la excitacin.
-Arriba-respondi Kuroko jadeante-pero al final de este pasillo-sealo el pasillo que se encontraba junto a la escalera-hay una habitacin-le informo.
Midorima sonri de lado y sin dudarlo acorto la distancia nuevamente entre ellos con un beso igual de demandante que los anteriores, mientras que comenzaba a caminar hacia la habitacin anteriormente sealada por Kuroko.
Giro el pomo de la puerta con algo de dificultad, pero al lograrlo no dudo en entrar con Kuroko aun aferrado a sus caderas. Una vez dentro cerr la puerta con la ayuda de uno de sus pies y se acerc a la cama para enseguida depositar con cuidado a Kuroko sobre esta.
Cuando el de orbes celestes se encontraba sobre la cama solt el agarre de la cintura del ms alto, y levant la vista para encontrarse con los orbes verdes de Midorima.
-Te ves adorable con ese rubor en tus mejillas-confeso observando los orbes contrarios, pero al ver que esos ojos lo observaban con duda y miedo, el peli-verde no dudo en sonrer clidamente para tranquilizarlo, despacio se posiciono a ahorcadas sobre el menor y le regalo un beso dulce, tierno y corto-No tengas miedo, no are nada para lastimarte-agrego sin quitar la vista de los ojos celestes.
El peli-celeste suspiro para controlar su corazn descontrolado, aquellas palabras por parte de Shintar lo tranquilizaban.
-Lo s-respondi luego de escuchar lo dicho por Midorima, mientras que tambin esbozaba una sonrisa.
El peli-verde al escuchar aquello, beso nuevamente los labios del peli-celeste, esta vez el beso era ms apasionado, el menor al ver que Shintar cerraba sus orbes verdes para entregarse al beso, decidio hacer lo mismo, decidiendo as dejarse llevar por el calor que en ese momento senta por todo su cuerpo. Kuroko sin dudarlo pas sus brazos alrededor del cuello del mayor y abri un poco ms su boca. Midorima al ver esto no dudo en introducir su lengua nuevamente en la cavidad contraria para profundizar el beso.
-K…Kuroko-tartamudeo Shintar cuando separaron sus bocas por la falta de oxgeno-Puedo seguir?-cuestiono con su voz cargada de deseo.
El de orbes celestes al escuchar al mayor abri lentamente los ojos, grande fue su sorpresa al ver que su camisa se encontraba desabotonaba, pero decidi no darle demasiada importancia.
-H…Hai-respondi sin dudarlo.
Midorima sonri y sin pensarlo demasiado continuo besando a Tetsuya, pero esta vez solo fueron unos segundos ya que separo sus bocas y comenz bajar lamiendo nuevamente el cuello del peli-celeste asiendo que este se estremeciera y lanzara pequeos gemidos, Shintar al escuchar aquellos excitantes ruidos sonri, para luego llegar a la clavcula contraria y darle un pequeo mordisco de propiedad, haciendo que esta vez se escuchara un sonido ms fuerte.
-T…Te gusta?-pregunto el peli-verde con la respiracin agitada, mientras levantaba la vista para ver los orbes celestes.
Pero la imagen que vio fue demasiado para l, Kuroko se encontraba sonrojado con la boca entre abierta, y sus ojos celestes se encontraban llenos de deseo.
-H…Hai-respondi Tetsuya mientras que se su boca se escapaba otro suspiro por las caricias que las manos de Midorima le proporcionaban a su torso.
Aquello fue suficiente para que Midorima se dejara llevar por sus emociones, comenz a besar todo el pecho del contrario, ya que quera recorrer cada centmetro de aquellos msculos que recordaba haber visto varias veces, pero desde lejos cuando ambos se encontraban en secundaria cuando el peli-celeste se cambiaba en los vestidores despus de los entrenamientos, pero ahora los tena tan cerca que no dejara pasar la oportunidad, quera marcar cada centmetro de piel, para as decirle a los dems, no solo a Kise y Kagami que aquel bello peli-celeste ya le perteneca-sonri al escuchar otro gemido por parte del de orbes celestes.
-Midori-mmmh-dijo en un suspiro cuando la boca de Shintar atrapo uno de sus pezones para lamerlo, mientras que con una de sus manos acariciaba el otro.
Tetsuya no poda creer que estuviera haciendo aquello con Midorima, con el chico que deca detestarlo, pero a pesar de todo saba que aquello era una farsa para ocular sus verdaderos sentimientos y ahora estaba completamente seguro de aquello, ya que el peli-verde se lo estaba demostrando con acciones, con aquellas caricias que le estaban encantando, que lo hacan sentir en las nubes y ya no le quedaban dudas, estaba completamente seguro de que no se arrepentira de lo que hara esa da-volvi a lanzar un gemido cuando Shintar volvi a morder suavemente su cuello.
El peli-verde solo poda sentir su miembro crecer al escuchar a Kuroko producir aquellos sonoros gemidos que retumbaban por la habitacin.
Y en un rpido movimiento desabotono el pantaln de Tetsuya y sin dudarlo lo bajo junto la ropa interior, dejando libre aquel el erecto miembro. El peli-celeste que no haba perdido detalle de los movimientos de Shintar al ver que este haba llegado a su pantaln, al verse expuesto no hiso ms que sonrojarse hasta las orejas, haciendo sonrer a Midorima con sus acciones.
El peli-verde aun con sus sonrisa en los labios no dudo en llevar una de sus manos a aquel miembro, para rozarlo haciendo que el de estatura menor suspirara al sentir un escalofri de placer recorrer su espalda. El de orbes verdes al ver las reacciones de Kuroko, tomo con su mano aquella extensin de piel y sin esperar mucho comenz a moverla lentamente para que su acompaante se acostumbrara a las caricias.
-Mido-rima ms rapi-do-dijo entre jadeos Kuroko para luego gemir de placer al sentir como Shintar cumpla su peticin.
Luego de algunos minutos de sentir aquel movimiento sobre su miembro, el placer que recorra su cuerpo y tambin debido a la falta de experiencia en aquello, Tetsuya solt su semilla en la mano del peli-verde, mientras que tambin manchaba su vientre.
-E-so fue ra-pido-dijo Midorima con la respiracin entre cortada, mientras llevaba uno de sus dedos a su boca para saborear la esencia en su mano, todo esto bajo la atenta mirada de Kuroko.
El peli-celeste al ver aquello se sonrojo, haciendo que Midorima sonriera.
-K…Kuroko puedo continuar?-pregunto tratando de normalizar su respiracin mientras miraba los orbes celestes.
Tetsuya lo pens por unos minutos, para ser sincero no quera que Shintar se detuviera, adems de que ya haban llegado hasta ese punto.
-H…Hai-respondi con seguridad.
Al escuchar aquellas palabras Midorima acomodo las piernas de Kuroko, dejndolo en una posicin cmoda para lo que se vena a continuacin, humedeci dos de sus dedos en la esencia del peli-celeste que an se encontraba en el vientre de este, aquello servira como lubricante. Cuando supuso que los dgitos estaban lo bastante lubricados, procedi a llevar uno a la entrada del menor.
El peli-celeste se estremeci de dolor al sentir aquel dedo abrindose paso en su interior y unas cuantas lgrimas se escaparon por sus orbes, el peli-verde al ver esto se inclin hacia Kuroko para besarlo tiernamente.
-S-Si qui-eres me detendr-susurro al separarse solo un poco de los labios de Tetsuya.
-N-No-dijo Kuroko abriendo los ojos, encontrndose con la mirada esmeralda-me acostumbrare.
Shintar sonri, para luego besar nuevamente los labios del peli-celeste y comenzar a mover su dedo simulando lentas estocadas. El de orbes celestes al sentir aquello comenz a lanzar pequeos suspiros, los cuales se ahogaban en la boca contraria, el dolor poco a poco disminua.
El de cabellos verdes al sentir que la entrada de Kuroko se encontraba menos estrecha, decidi introducir otro de sus dedos, no aguantara mucho tiempo haciendo eso pero quera y deba hacerlo para no lastimar a peli-celeste. Cuando el menor sinti otra intromisin se estremeci, aun senta dolor pero ya no era tan fuerte como al principio, ahora el placer comenzaba a apoderase de su cuerpo, Midorima al ver que el menor se haba acostumbrado al segundo digito, comenz a simular estocadas esta vez ms rpidas, para luego abrir sus dedos como tijeras y as dilatar correctamente aquella abertura.
-K…Kuroko, ya ests listo P…Puedo hacerlo?-pregunto Shintar con su autocontrol al lmite.
-H-Hai-tartamudeo al contestar, estaba completamente excitado al sentir los dedos de Midorima dentro de l, pero pese al placer, aquello ya no le bastaba, quera sentir a Midorima, quera ser uno con aquel peli-verde.
Al escuchar la respuesta de Kuroko, Midorima quito sus dedos con cuidado, se levant de la cama, se quit sus pantalones junto con la ropa interior y se posiciono entre las piernas del peli-celeste, tomo su miembro erecto colocndolo en la entrada del de orbes celestes.
-Kuroko no te muevas-ordeno Shintar para luego comenzar a abrirse paso por la estrechas paredes internas del peli-celeste.
El de orbes celeste al sentir la penetracin por parte de Midorima, se estremeci, aquello era placentero, pero tambin doloroso y unas cuantas lagrimas se resbalaron por sus mejillas al sentir al de orbes verdes completamente dentro suyo, Shintar al ver las lgrimas se inclin hacia Kuroko para besarlo y lograr que este se olvidara un poco del dolor y se acostumbrara a la intromisin.
El beso al principio era tierno y suave pero a medida que los minutos pasaban, se comenzaba a convertir en un beso apasionado, frentico y hambriento, adems de que Midorima poda sentir el calor y la estreches del interior de Kuroko.
El peli-celeste por su parte, ya no se senta adolorido, aquello ya haba sido sustituido por el placer necesario para comenzar a disfrutar y al no aguantar ms comenz a mover sus caderas. Shintar al ver los movimientos de Tetsuya, no dudo en comenzar a envestirlo lentamente.
-mmmm K-Kuro eres tan es-trecho-susurro Midorima al sentir como Tetsuya apretaba su miembro con sus paredes internas.
-Mido-rima m-ms ra-pido-exclamo Tetsuya entre jadeos al sentir como el placer recorra su cuerpo.
Shintar no dudo en cumplir la orden de Kuroko y comenz a envestirlo para llegar cada vez ms profundo dentro de este, mientras los minutos pasaban las estocadas comenzaban a ser ms intensas.
-Mido-mmmm-Kuroko levanto la voz al sentir que el peli-verde con cada estocada llagaba ms profundo en l, tocado un punto que lo hiso estremecer de placer.
Midorima al ver que Kuroko se estremeca, sonri y no dudo en comenzar a realizar estocadas frenticas mientras golpeaba el punto con el cual Kuroko lanzaba sonoros gemidos. Ambos chicos estaban perdidos en el placer que les brindaba el otro, adems de que saban que pronto llegaran al clmax.
Luego de unas cuantas estocadas ms Tetsuya sinti como un calor en su bajo vientre comenzaba a indicarle que su clmax se aproximaba.
-Mido-rima me ven-ngo!-exclamo Kuroko con la respiracin entrecortada para luego dejar escapar su semilla por segunda vez en su vientre, manchando esta vez la polera de color caf que traa Shintar.
El de orbes verdes por su parte al sentir como Tetsuya apretaba exquisitamente su miembro con sus paredes internas, no pudo evitar correrse.
-Y-Yo tam-bien-exclamo para proporcionarle la ltima estocada a Kuroko y venirse llenando por completo el interior del peli-celeste.
Midorima al terminar, sali con cuidado del interior de Tetsuya para no lastimarlo, dejndose caer sobre el colchn junto al peli-celeste.
Ambos pechos suban y bajaban por el cansancio as que decidieron esperar para hablar correctamente, pero mientras tanto ambos se acomodaron en la cama. Cuando Midorima se encontraba acostado, Kuroko no dudo en acurrucarse entre sus brazos, para despus taparse con el cobertor.
El peli-verde sonri al ver como Kuroko se abrazaba a l y cerraba sus ojos por el cansancio que les haba producido lo anteriormente ocurrido.
-Aunque no lo parezca, Te quiero Kuroko-susurro Midorima cuando sus respiraciones se haban regularizado, despejo los cabellos que se encontraban pegados a la frente de Kuroko por el sudor y se sorprendi al ver que Tetsuya ya se encontraba dormido-quizs no lo escucho-pens para s mismo.
Pero de todos modos sonri sinceramente, aunque haba llegado a aquel lugar con las intenciones de saber cmo se senta Kuroko, ahora estaba realmente contento del giro inesperado que haban tenido las cosas, ya que al fin saba que era correspondido y tambin saba que tendra a Tetsuya solamente para l.
-Realmente… Te quiero Kuroko-y con aquello en mente el peli-verde beso la frente del peli-celeste con ternura.
Luego de aquello cerr sus ojos y decidio entregarse al sueo al igual que lo haba hecho su novio.