Las calles de Tokyo se encontraban con los faroles encendidos ya que el sol se haba ocultado hace ya una cuantos minutos, pero aquello poco les importaba a los 10 chicos que se encontraban jugando baloncesto en una de las tantas canchas del barrio donde la mayora viva.
El marcador de dicho partido se encontraba empatado 45 a 45 y solo faltaba un minuto para que el partido finalizara, por lo tanto ambos equipos; el azul conformado por Aomine Daiki, Sakurai Ryo, Kuroko Tetsuya, Imayoshi Shoichi e Izuki Shun y el rojo conformado por Kagami Taiga, Kise Ryouta, Midorima Shintar, Takao Kuzanari y Teppei Kiyoshi, daban lo mejor de s para as desempatar y que alguno de ellos se llevara la victoria.
La chica de cabellos y orbes rosados de nombre Momoi Satsuki, la cual se encontraba encargada del tiempo, los puntos y las faltas, al ver que finalizaba el 4to cuarto dio por terminado el partido sonando el silbato, en el mismo instante en que Midorima encestaba uno de sus espectaculares tiros de tres puntos.
-El partido finaliza con una puntuacin de 48 a 45, la victoria es del equipo rojo-exclamo Momoi con una sonrisa.
-Demonios!-exclamo Aomine con una sonrisa, mientras que trataba de regular su respiracin agitada por el ejercicio anterior.
-Otra victoria para nosotros!-exclamo Taiga con una enorme sonrisa.
-Ja!, el prximo partido lo ganaremos nosotros-le hizo saber Daiki al pelirrojo para luego sonrerle.
-Ustedes no podrn contra mis tiros-intervino Midorima moviendo sus lentes mientras que sonrea de lado.
-Quieres apostar Shintar-le desafo el peli-azul.
-Claro-respondi el peli-verde con una sonrisa de lado.
Los dems chicos al ver como Midorima y Aomine se daban la mano en seal de una apuesta para ver quin sera el ganador del prximo partido, sonrieron divertidos.
-Vamos Shin-chan~, reljate-intervino Takao con una sonrisa divertido golpeando suavemente la espalda de su novio-aunque yo tambin quiero apostar-el pelinegro observo a Kuroko.
El peli-celeste al darse cuenta lo observo confundido.
-En el prximo partido te detendr, Tet-chan~-le advirti ganndose una sonrisa por parte del peli-celeste.
-Bueno ahora que ya todo est apostado para el prximo partido, yo he Izuki tenemos que irnos-les aviso Kiyoshi observando su reloj de mueca-ya es tarde-agrego.
-Yo tambin tengo que marcharme-hablo esta vez Kuroko embozando una pequea sonrisa.
-Entonces es hora de que todos nos vayamos-hablo esta vez Momoi acercndose a los chicos.
-Momoi tiene razn-concord Kagami observando a su novio rubio, el cual le sonri en acuerdo.
-Nos vemos en el prximo partido Aominicchi~-se despidi Kise Ryouta observando al peli-azul-nos vemos-se despidi de los dems.
-Nos vemos-y as cada uno de los diez chicos y Momoi comenzaron a despedirse.
-Chicos-esta vez fue Daiki el que llamo la atencin de sus amigos antes de que se comenzaran a alejar-Tengo un nuevo departamento el cual comparto con Ryo, por lo tanto ambos queramos invitarlos a una pequea fiesta de inauguracin, aceptaran ir?-cuestiono el peli-azul sonrindole a los dems mientras que Sakurai tambin los observaba.
-Yo y Takao…-hablo Midorima para enseguida ser interrumpido por su novio.
-Asistiremos!-completo la frase con emocin y una amplia sonrisa el pelinegro.
-Yo tambin asistir con Kagamicchi~-confirmo Kise con una sonrisa mientras que Taiga tambin sonrea.
-Yo tambin ir-informo Momoi sonriendo-Aunque puedo invitar a Riko?-cuestiono la peli-rosa.
-Claro-respondi Daiki sonriendo.
-Aomine-kun, Sakurai-kun si ir-informo el peli-celeste con una pequea sonrisa.
-Yo he Izuki tambin-respondi Teppei sonriendo.
-Y t Imayoshi?-cuestiono Aomine mirando a su senpai.
-Claro, no tengo problemas-respondi el pelinegro con una media sonrisa.
-Genial, entonces los vemos maana a las 20:00 pm en esta direccin-y sacando su celular tecleo la direccin y rpidamente les envi un mensaje a cada uno de los chicos que se encontraban frente a l.
-Hai-respondieron a coro todos los dems-Nos vemos-se despidieron para enseguida comenzar a dispersarse en parejas hasta sus respectivos hogares.
Al da siguiente….
Solo faltaban 20 minutos para que fueran las 8 en punto, por lo tanto Tetsuya caminaba despreocupado en direccin en la que se encontraba la nueva vivienda de Aomine.
-Buenas noches Kuroko-kun-saludo una voz que Kuroko conoca bien.
-Buenos noches Imayoshi-kun-saludo el peli-celeste observando al pelinegro que se encontraba apoyado contra uno de los muros de las viviendas del barrio.
-Qu suerte que nos encontremos-exclamo Shoichi y al ver el rostro de confusin de Kuroko decidio aclararse-Aomine me acaba de enviar un mensaje diciendo que la fiesta de inauguracin se cancelaba, y si t vas en esa direccin, me imagino que no has recibido ninguno, O me equivoco?-cuestiono acercndose un poco ms al peli-celeste.
-No, no me ha avisado-el peli-celeste hiso una mueca para enseguida sacar su celular de su bolsillo, se supone que Aomine lo llamara o le enviara un mensaje para avisarle algo como eso, entonces Por qu?.
-Quizs se qued sin saldo-dijo Imayoshi con una sonrisa-y bueno, ya que los dos estamos aqu y que no tenemos nada que hacer, Te gustara ir a comer algo conmigo?-cuestiono mirando al de estatura menor.
El peli-celeste lo pens por unos segundos.
-Est bien-respondi sonrindole al mayor despus de todo no tena nada que hacer y con Aomine hablara luego.
-Conozco un lugar, donde la comida es realmente buena-le informo Imayoshi comenzando a caminar junto a Kuroko.
El peli-celeste decidio seguirlo con una sonrisa.
>>>> 20 minutos ms tarde… <<<<
Ambos chicos se encontraban frente al restaurant que Imayoshi haba sealado, pero haba un problema… en la puerta de este se encontraba un gran letrero con letras rojas donde se lea lo siguiente; “CERRADO POR REMODELACION, SENTIMOS LAS MOLESTIAS”.
El pelinegro suspiro.
-Lamento hacerte caminar hasta aqu por nada-se disculp volteando para observar los orbes celeste.
-No te preocupes-el peli-celeste le sonri, despus de todo se haba divertido charlando con Shoichi-despus de todo si me divert-agrego haciendo sonrer al pelinegro.
-Aunque puede que no todo este perdido-agrego mirando los orbes celeste, que ahora lo observaban confundido-mi departamento queda cerca, te gustara ir?-cuestiono sonriendo.
El peli-celeste dudo unos momentos, jams le haba gustado dirigirse a los departamentos de otras personas que no fueran sus amigos de “la generacin de los milagros” y de los del instituto Seirin, pero Imayoshi no pareca una mala persona y era amigo de Aomine despus de todo.
-Claro-respondi, haciendo sonrer al pelinegro.
Y as Kuroko comenz a seguir a Imayoshi hacia un edificio de alrededor de 20 pisos, donde al entrar fueron recibidos por el recepcionista que los saludo amablemente.
-Buenas noches-saludo el adulto con una sonrisa calidad.
-Buenas noches-saludaron a coro ambos chicos para casi enseguida comenzar a caminar hacia el asesor que se encontraba junto a las escaleras.
Imayoshi apret el botn para llamar al ascensor y en cuestin de minutos las puertas de este se encontraban abiertas, ambos chicos entraron y el pelinegro apret el botn con el piso nmero 18.
El ascenso trascurri en silencio por parte de ambos chicos y cuando las puertas se abrieron nuevamente, Kuroko sigui a Imayoshi por el pasillo hacia su departamento.
-Quieres algo de tomar antes de que comamos?-cuestiono el pelinegro una vez que ambos se encontraban en el interior de la vivienda.
-Claro-respondi el peli-celeste con una sonrisa.
-Enseguida te sirvo-Imayoshi se dirigi a la sala y encendi el televisor-por cierto, toma asiento, yo vuelvo en seguida con algo de tomar-aviso para enseguida entrar a la cocina.
-Est bien-respondi Kuroko para enseguida tomar asiento en uno de los sillones y as prestarle atencin al partido de la NBA que en ese preciso momento trasmitan.
El pelinegro tardo solo unos minutos en volver a la sala trayendo en cada una de sus manos un vaso con jugo, a criterio de Kuroko de frutillas.
-Solo tena de frutillas-le informo entregndole el vaso al peli-celeste.
-Gracias-dijo al recibir el vaso, para enseguida darle un sorbo, el cual se convirti en un largo trago, ya que al parecer tena ms sed de lo que esperaba-gracias nueva…mente-repiti entre cortado, ya que al inclinarse para dejar el cristal sobre la mesita de noches, su vista comenz a nublarse y sus parpados comenzaban a sentirse pesados-Por qu…?-no pudo terminar la frase ya que en cuestin de segundos cayo inconsciente sobre el silln en el cual se encontraba sentado.
Imayoshi al comprobar que Tetsuya se encontraba completamente inconsciente sonri complacido, al parecer Haizaki no le haba mentido y aquella droga en el jugo de Kuroko actuaba en cuestin de minutos. Ensancho su sonrisa, tomo su celular y rpidamente tecleo un mensaje para Aomine. Una vez listo el texto, lo envi.
Departamento de Aomine…
En la nueva vivienda de Daiki y Ryo, se encontraban Taiga, Kise, Midorima, Takao, Izuki, Teppei, Riko y Momoi, los cuales esperaban que Imayoshi y Kuroko hicieran acto de presencia y as comenzar la pequea fiesta.
-Llamare a Kurokocchi~-les hizo saber Kise a todos los dems, sacando rpidamente el celular de su bolsillo, pero antes de que pudiera teclear el nmero, el celular de Aomine comenz a sonar avisando que haba recibido un nuevo mensaje.
El peli-azul tomo su celular que se encontraba sobre la mesa de centro.
-Imayoshi y Tetsu me masajearon-minti abriendo el mensaje.
Remitente: Imayoshi.
Asunto: Te debo una.
La idea que me diste funciono de maravilla, por lo tanto ahora yo y Kuroko-kun nos encontramos en mi departamento… luego te digo cual fue su respuesta.
Al terminar de leer en su rostro afloro una sonrisa la cual oculto volviendo a su semblante habitual, cerr la pantalla de los mensajes y se dirigi a los dems.
-Imayoshi y Tetsu no vendrn-dijo el peli-azul levantndose de su asiento para dirigirse a la cocina-aunque ninguno de los dos me dio sus motivos-agrego aunque aquello era una mentira a peticin de su senpai.
Departamento de Imayoshi…
El peli-celeste comenz a abrir lentamente sus ojos, sus parpados an se sentan pesados y su vista an se encontraba borrosa. Kuroko trato de mover sus manos y as restregar sus ojos para desvanecer aquella molesta neblina que un le impeda ver a su alrededor, sorprendindose al darse cuenta de que no poda hacerlo, el peli-celeste volteo el rostro para as enfocar la vista a sus manos, asustndose al ver que estas se encontraban amarradas por correas de cuero a la cabecera del lecho, aunque aquello no era todo ya que al intentar mover sus piernas y al enfocar la vista sobre estas se dio cuenta que se encontraba completamente desnudo y que sus pies corran la misma suerte que sus manos.
Rpidamente observo a su alrededor, tratando de buscar al responsable de aquello, pero no tuvo suerte ya que en aquella habitacin no haba nadie ms, aunque an no recordaba cmo haba llegado a aquel lugar y tampoco estaba seguro de quien era el dueo de aquella alcoba.
>>>>> *** <<<<<
Mientras Kuroko trataba de recordar aquello, Imayoshi abri la puerta de su habitacin, sonriendo al darse cuenta de que los orbes celestes de Tetsuya se posaban en l.
-As que ya despertaste-en el rostro del pelinegro afloro esta vez una sonrisa maliciosa.
-Imayoshi-kun-exclamo el peli-celeste asustado-Por qu estoy desnudo y…?-intento mover sus piernas y manos sin demasiada suerte-atado a la cama?.
La sonrisa en el rostro de Shoichi se ensancho, Kuroko a su parecer era hermoso y verlo asustado, indefenso y a su total merced le encantaba. El pelinegro ignoro los cuestionamientos del peli-celeste, cerr la puerta detrs de l y con paso lento y decidido comenz a acercarse a la cama donde se encontraba inmovilizado Tetsuya.
-Kuroko-el pelinegro no dudo en subirse al lecho, para enseguida comenzar a gatear sobre esta hasta acomodarse entre las piernas del aludido-No te imaginas todas las veces que te he imaginado as…-Imayoshi se inclin colocando sus manos a los costados del peli-celeste.
Kuroko al ver cada movimiento por parte del pelinegro trataba de zafarse de las correas que aprisionaban sus muecas y tobillos, sin tener ningn xito.
Shoichi al ver las intenciones de Kuroko, ensancho un poco ms su sonrisa maliciosa y se inclin un poco ms, quedando a escasos centmetros del rostro de Tetsuya, el cual tuvo que tomar con una de sus manos para que el peli-celeste lo observara.
-Indefenso y sometido-continuo Imayoshi-tal como estas ahora puedo hacer lo que yo quiera-y sin decir ms el pelinegro libero el rostro de Kuroko y comenz a delinear el levemente marcado abdomen del peli-celeste con su mano (la otra la tena apoyada sobre el colchn para sostenerse) hasta llegar a la hombra contraria.
-Mmm~-suspiro el peli-celeste sin que pudiera evitarlo ya que aquello lo haba tomado por sorpresa.
Al escuchar aquel sonido proveniente de los labios de Kuroko, Imoyoshi esbozo una sonrisa de satisfaccin y sin dudarlo comenz a acariciar con mayor intensidad el miembro ajeno.
-I-Imoyoshi-kun, por ahh~ favor, detente Mmm~-pidi entre cortado el menor al sentir como las caricias aumentaban.
El pelinegro ensancho su sonrisa.
-Tu cuerpo me est diciendo lo contrario-dijo Shoichi ya que poda sentir como el mimbro que se encontraba entre sus manos aumentaba de tamao con cada caricia-aunque djame decirte que jams me imagine que te excitaras tan fcilmente al estar de esta forma-murmuro con una sonrisa igual de maliciosas que la anterior.
-Ahh~-un sonoro gemido broto de los labios de Kuroko mientras que tambin se estremeca y arqueaba levemente la espalda al sentir como la mano ajena presionaba su miembro.
-Veo que te gusta la brusquedad-exclamo Imayoshi comenzando a aumentar un poco ms las caricias sobre el miembro del peli-celeste causando que de los labios del contrario brotaran pequeos suspiro que trataba de controlar.
El pelinegro al ver los intentos de Kuroko por acallar los sonidos de su boca sonri de lado, y sin detener los movimientos con su mano se reincorporo y con su mano libre comenz a desabotonar su pantaln dejando de una vez por todas libre su propio miembro el cual ya se encontraba bastante erecto.
-Hoy de una vez por todas sers mo, te hare gemir mi nombre y que pides ms-declaro el pelinegro sonriendo de lado.
-Que!? No… por favor Imayoshi-kun no me hagas esto-pidi aunque saba que era intil tratar de defenderse ya que despus de todo sus manos y piernas se encontraban atadas a la cama, pero de todos modos no quera entregarse tan fcilmente.
-No me importa cunto me pidas que me detenga, simplemente no lo hare-el pelinegro que haba detenido las caricias sobre el miembro de Kuroko, no dudo en inclinarse hasta la mesita de noche para sacar del pequeo cajn una pequea botellita de lubricante, pese a todo no quera lastimar al peli-celeste.
Una vez que aquella botella se encontraba en sus manos, volvi a incorporarse, dejo caer un poco del contenido en su manos y unto un poco sobre su miembro erecto para acto seguido tomar las caderas del peli-celeste.
-Por favor Imayoshi-kun-volvi a pedir Kuroko con la respiracin agitada.
Imayoshi no hiso ni el ms mnimo caso y de un solo movimiento se introdujo dentro del peli-celeste, quien lanzo un fuerte gemido de dolor, al ser penetrado por su entrada. Un leve jadeo escapo de los labios del pelinegro al sentirse completamente en el interior de Tetsuya.
-Estas estrecho y caliente-murmuro con voz ronca y llena de deseo.
El peli-celeste haba mordido su labio inferior y ahora por la comisura de su boca corra un pequeo hilillo de sangre, sus orbes celestes se encontraban fuertemente cerrados y de ellos comenzaban a caer lgrimas.
-Aunque ahora es doloroso, lo vas a disfrutar y terminaras rogando por ms-susurro el pelinegro y sin compasin comenz a envestirlo guiando las caderas contrarias con sus manos.
Los gemidos con una extraa mescla de placer y dolor no se hicieron esperar por parte de Kuroko.
Mientras que para Imayoshi aquellos sonidos eran para l la representacin de un dolor placentero por parte de Kuroko. Saba que lo estaba disfrutando y no pensaba detenerse, pues el mismo senta un enorme placer, ahora aquel chico era suyo, aunque tambin estaba consciente de que aquello no haba sido la mejor forma de hacerlo, no poda controlar sus gustos en la cama.
Las lgrimas caan por las mejillas de Tetsuya, mientras gema. Le costaba respirar pues el mayor no le estaba teniendo consideracin alguna.
-Mmm~ Ahh!~ ahm~-aquello gemidos eran una mescla clara de dolor y placer, y lo peor de todo era que haba llegado a sentir placer al estar siendo violado-D-Detente… Imayoshi!...
Al escuchar su nombre y al contrario pedir que se detuviera. Aumento la fuerza de sus movimientos plvicos, hacindolos casa vez ms fuertes y marcados. Mientras que sus manos recorran las caderas ajenas y se posaban sobre los glteos, los cuales apret y separo, sin detener por ningn motivos sus embestidas.
-V-Voy a hacerte rogar por ms-exclamo con una media sonrisa y su respiracin agitada.
-Ahh~, No quiero!-Gimi Kuroko, no le dara tan fcilmente a Imayoshi lo que quera, pondra tanta resistencia como pudiese.
Imayoshi sonri complacido, entre ms se resistiera Kuroko, el senta ms satisfaccin. Por lo tanto el pelinegro mantuvo el ritmo de las estocadas mientras leves jadeos escapaban de sus labios. La sensacin era cada vez mejor.
-Mmm~-gimi el menor de ambos mientras trataba de acallarlos mordiendo nuevamente su labio inferior, aunque no lograba tener xito ya que cada vez se hacan mas fuerte sincronizndose con los movimientos de la pelvis del pelinegro. Sus mejillas ardan por un sonrojo y pequeas lgrimas rodaban por sus mejillas sin que pudiera evitarlo. Lo peor de aquella violacin, era que le estaba gustando, senta placer, aunque despus de todo el s senta ciertos sentimientos por Imayoshi Shoichi, el senpai de su mejor amigo.
Las manos de Imayoshi bajaron un poco ms las caderas de Kuroko, profundizando las embestidas que se volvan inevitablemente ms fuertes y profundas. Contino con sus movimientos, marcando un ritmo ms fuerte mientras que se inclinaba para as acercarse al odo del peli-celeste.
-Eres exquisitamente estrecho-murmuro con voz ronca y mordi levemente aquella zona.
-Ahh~-gimi el peli-celeste mientras que sus caderas eran obligadas a acompaar aquel movimiento, que profanaba su interior.
Kuroko comenz a sentir que el clmax se acercaba, amenazando con invadirlo con demasiada intensidad. Un par de envestidas ms lograron arrancar un sonoro gemido de sus labios, a la vez que se arqueaba, alcanzando el orgasmo.
El pelinegro sinti como las paredes internas del menor presionaban su miembro y sin poder evitarlo se corri dentro de l. Llenndolo con su espesa esencia mientras jadeaba por aquello, y al ver que Kuroko se encontraba igual de agotado que l, se inclin para as poder besarlo. Lo beso con intensidad, casi con desesperacin, aunque haba estado con ms chicos anteriormente, ahora senta algo ms, Kuroko para l era especial, ya que jams haba tenido la necesidad de poseer a alguien como lo haba hecho y aunque saba que haba estado mal llegar hasta el punto de obligarlo, esa era su naturaleza. Imayoshi decidio buscar la forma de introducir su lengua de un solo movimiento en la cavidad contraria.
La sorpresa invadi al peli-celeste ante la accin de Imayoshi. Abri su boca casi a la fuerza debido a la forma en que lo haba besado y pronto sinti una lengua rozando la suya. Cedi su lengua entrecerrando sus orbes celestes, la sensacin no era mala, sino tono lo contrario. Ya no poda resistirse admita que aquello le haba resultado ms gratificante de lo que haba imaginado, dejndose llevar por el beso.
El aire les hiso falta a ambos e Imayoshi separo sus bocas, sonri complacido al ser correspondido, para casi enseguida levantar las caderas de Kuroko provocando que su miembro saliera. Tetsuya al sentir aquella sensacin de vaco jadeo un poco. El pelinegro luego de estar liberado no dudo en inclinarse para liberar de una vez por todas, el amarre de las manos y piernas del peli-celeste.
-Sera mejor que descanses-declaro el peli-negro para casi enseguida levantarse de la cama y arreglar sus ropas.
Kuroko al sentir que sus brazos y piernas eran liberados no dudo en sentarse sobre el lecho, para enseguida sentir una punzada de dolor en sus caderas. Pero de igual forma observo a Imayoshi el cual se haba acercado al armario que se encontraba al otro extremo de la habitacin.
-Aqu tienes tu ropa-el pelinegro dejo sobre el colchn las ropas que esa tarde Kuroko haba llevado puestas-ahora me retiro.
-Imayoshi-kun-llamo el peli-celestes antes de que el pelinegro saliera de la habitacin.
El pelinegro se sorprendi al ser llamado y sin dudarlo volteo para observar a Kuroko.
-Por qu hiciste esto?-se atrevi a preguntar sin despegar la vista del contrario.
-La respuesta es simple, quera proclamarte completamente mo-respondi el pelinegro sonriendo de lado.
Kuroko lo observo confundido, Imayoshi tena una manera muy extraa de acert saber que le gustas.
-Y t sientes algo por m, despus de esto?-cuestiono el pelinegro mirando los orbes celestes.
Kuroko bajo la vista, mientras que pensaba alguna respuesta y es que realmente no lo saba, aquellas eran demasiadas emociones por un da por lo tanto aun no procesaba todo lo que senta.
-Sera mejor que descanses-exclamo Imayoshi al ver que el peli-celeste guardaba silencio.
Y as Kuroko se qued completamente solo en aquella habitacin. El peli-celeste al ver esto no dudo en tomar su ropa interior, se visti con esta y enseguida se arropo con las sabanas y el cobertor, mientras varias casas pasaban por su mente.
Deba estar completamente loco, ya que nadie en su sano juicio sentira atraccin y querer por la persona que haba abusado de ti, pero el si lo senta, a l si le gustaba Imayoshi y desde mucho antes de que sucediera aquello.
-Al parecer soy un completo masoquista-se dijo as mismo para casi enseguida quedarse dormido, despus de todo estaba completamente exhausto.