CAPÍTULO 7— EL MONSTRO PROTECTOR.
Miró por segunda vez su celular, ya era hora de que fuera al gimnasio a cumplir con su rol de encargado. Odiaba el hecho de haber estado de acuerdo en tomar esa responsabilidad, no era solo el hecho de la responsabilidad, no, de hecho podría llegar a disfrutarlo. El problema era que Sehun estaba ahí. Cuando tomo el lugar, lo hizo por el simple hecho de estar más cerca de Myungsoo, ahora ya no estaba seguro de ello.
Tirando a un lado sus problemas e inquietudes, caminó hasta el lugar donde el equipo de basquetbol entrenaba. Al parecer habían empezado sin importarle si él estaba presente. “Bueno, tampoco es como si aportara algo.” Aunque pensándolo bien, Luhan hacia más como el sirviente de Sehun que como un encargado, eso era algo ¿no?
Luhan se abofeteo mentalmente, tres veces.
—Vaya, miren quien se dignó a honrarnos con su presencia—Luhan rodo los ojos.
—¿Qué haces aquí? —el no andaría con rodeos.
—Kyungsoo será el nuevo encargado, bueno, el segundo encargado. Él te ayudara—dijo un sonriente Jongin mientras miraba a Kyungsoo, este solo lo ignoraba.
—Gracias, pero puedo yo solo con el trabajo—el cargo cansaba en ocasiones, especialmente cuando Sehun decidía tomarlo como su sirviente, pero no dejaría que nadie lo viera como un debilucho, en especial Kyungsoo.
—No lo hago por ti, hyung—el pelinegro sonrió al ver el ceño fruncido de Luhan.
—De cualquier manera puedo yo solo—gruño Luhan.
—No tienes por qué ponerte celoso, hyung—le dijo Sehun mientras ponía uno de sus brazos en los hombros del cobrizo y lo atraía hacia él—Nadie te quitara tu lugar—Luhan se sonrojo cuando Sehun le sonrió, ¿Qué mierda le estaba pasando?
—Como sea, ahora hay dos encargados. Así que hay que comenzar.
Luhan no terminaba de entender porque el odio de Kyungsoo iba dirigido a él. No le había hecho nada, no que él recordara, pero estaba seguro que si las miradas mataran, ya estaría en el infierno.
Respiró profundamente y se alejó de Sehun, necesitaba su espacio. Comenzó tomando las botellas de agua vacías y las remplazo por botellas nuevas. Su plan de ese día seria ignorar a Kyungsoo, se estaba haciendo más fácil de lo que pensó, ya que el más bajo no se despegaba de Sehun.
Todo lo que Sehun pedía, Kyungsoo estaba a su lado para cumplirlo. No sabía exactamente por qué sentía que su sangre hervía o por qué sus dientes rechinaban, o quizás sí, pero no quería decirlo ni pensarlo.
Habían personas tan obsesivas en la vida.
La práctica se había alargado un poco, según Myungsoo el campeonato regional estaba por empezar, y como todos los años, el capitán quería llevar a la universidad hasta el campeonato nacional.
Luhan estaba más que cansado, había pasado todo el día llevando agua, toallas, bebidas, etc. Mientras que el ojón no se despegaba de Sehun. Yixing y Baekhyun se habían ido luego de que la práctica se alargara por dos horas más.
Y para ponerle la cereza al pastel, los chicos le habían pedido que fuera por algo de comida, quiso decir que no, que no era el sirviente de nadie. Pero luego de ver sus rostros cansados, no pudo decir que no. Quiso tragarse su orgullo y pedirle a Kyungsoo que fuera con él, ya que ambos eran los “encargados” pero este se había ido por unas bebidas y nunca llego.
El muy desgraciado quizás ya se había ido a su casa mientras que Luhan era usado como mula de carga. A Luhan no le gustaba maldecir, pero con mucho gusto lo haría.
Pensó, que quizás su anemia estaba causando estragos en él, se sentía un poco débil, sus brazos dolían y la comida no era liviana, y como lo sería si los del equipo tragaban más que una manada de leones.
Siguió maniobrando con la comida mientras caminaba hasta el gimnasio. Estaba tan sumido en su mundo, cuando escuchó golpes que provenían de los casilleros del otro lado del pasillo. Si había algo que Luhan odiaba, era su curiosidad.
Lenta y silenciosamente camino contra la pared para poder observar que era el ruido que había escuchado. Mientras más se acercaba, más fuertes se escuchaban los golpes. En el momento en que Luhan se alarmó, fue cuando sintió un gemido, ¿estaban golpeando a alguien? Dejo la comida en el suelo y camino un poco más rápido, lo que vio lo paralizo.
No era fanático de la violencia, es por eso que soltó un pequeño grito cuando vio a Kyungsoo en el suelo mientras unos chicos lo golpeaban. Los que golpeaban a Kyungsoo murmuraban algo sobre la “Bienvenida” a los alumnos de primer año. Luhan quería ayudarle a pesar de todo lo sucedido entre ellos, pero sabía que sería inútil, lo único que lograría es que les patearan el trasero a ambos.
Lo único lógico que encontró, fue correr hasta el gimnasio y pedir ayuda. Corrió tan rápido como pudo, ignorando el dolor en sus piernas, no importaba nada de eso, solo importaba que alguien pudiera ayudar al chico.
Sus pisadas resonaron por todo el lugar haciendo que los del equipo se giraran y lo observaran.
—Por fin llegas, Lu. Me muero de hambre y…—Luhan corto a Chanyeol.
—¡Unos chicos están golpeando a Kyungsoo! ¡Tienes que ayudarlo!
Luhan sintió un tirón en su hombro cuando Jongin pasó a su lado, este casi tropezaba con una de las mochilas que estaban en el suelo, fue entonces cuando todos en el gimnasio reaccionaron y salieron tras Jongin. Luhan tomo aire y corrió también. Solo esperaba que Kyungsoo estuviera bien.
*
Sehun sintió como la ira recorría su cuerpo, odiaba que molestaran a los demás solo porque si, Kyungsoo podría ser molesto, pero aun así, Sehun le tenía cariño al chico. Sabía que Kyungsoo se portaba de esa manera arrogante por todo el maltrato que sufrió en la escuela.
Esto era como revivir aquellos recuerdos, como cuando conoció a Kyungsoo. El chico estaba en la misma situación en la que se encontraba ahora, siendo golpeado. Desde el momento en que Sehun lo ayudo, Kyungsoo desarrollo cierto afecto hacia el peli-plata.
Sintió como su puño impacto con la mandíbula de uno de los agresores, resoplo cuando los tipos corrieron luego de no soportar los golpes de sus amigos. Observó como Luhan trataba de ayudar a Kyungsoo a ponerse de pie, pero este lo alejaba con manotazos. El orgullo del pequeño era más grande que él.
—Vamos, Kyungsoo—dijo acercándose a él ayudándolo a ponerse de pie.
—No puedo caminar, Sehun—lloriqueo Kyungsoo.
—¿Te torciste el tobillo? —preguntó un tanto preocupado, ignorando a Jongin y a Luhan.
—No, no lo creo, pero no puedo.
—Está bien, te llevare a casa. Vamos—cargó a Kyungsoo al estilo princesa y se dispuso a caminar.
—Yo los acompaño—dijo Luhan recogiendo las cosas de Kyungsoo, muy en el fondo quería ayudar a Kyungsoo, pero muy, muy, muy en el fondo no quería despegarse de Sehun.
—Yo también—bisbiseo Jongin.
—No, está bien, puedo yo solo—corto Sehun caminando en dirección a la salida, dejándolos con las cosas de Kyungsoo.
—Parece que el monstruo protector de Kyungsoo ha vuelto—susurro Chanyeol detrás de ellos mientras Tao asentía con la cabeza.
—¿Monstruo protector? —preguntó Luhan observando el par que se iba.
—Sip, cuando estábamos en el instituto Kyungsoo era un blanco fácil para las burlas y el maltrato. Cuando Sehun lo encontró mientras los de tercer año lo usaban como saco de boxeo, se prometió así mismo cuidar de él de todo aquel que quisiera dañarlo.
—Sehun puede parecer de piedra, pero si hay algo que odia es el maltrato sin razón. Kyungsoo ha sido su protegido desde entonces, le tiene un gran cariño al chico, cariño fraternal que Kyungsoo ha confundido. Lástima que Sehun no le corresponde—lo secundo Tao ganando un codazo de parte de Chanyeol. Tao quiso golpearse al ver el rostro triste de Jongin… y Luhan—Lo siento—susurro.
—Como sea—resoplo Chanyeol—Tenemos que ir a dejarle las cosas a Kyungsoo, ¿quieren acompañarnos?
Todos asintieron. Luhan estaba un poco aturdido por todo lo que pasaba. De vez en cuando observaba a Jongin que tenía la mirada un poco distante, ignorando completamente al par que iba a delante gastándose bromas.
Ahora entendía porque la obsesión de parte de Kyungsoo hacia Sehun. Se preguntaba si Sehun también tenía sentimientos hacia el chico. No tenía que ser un genio para poder descifrar la mirada de Jongin, el chico gustaba de Kyungsoo, era una lástima que el ojón no lo notara. Luhan se compadecía de Jongin, él más que nadie sabía acerca de eso.
Pararon frente a una casita muy bonita ante los ojos de Luhan, la casa no era demasiado grande, pero lucia lo bastante acogedora. Las luces estaban apagadas haciendo que Luhan se preguntase si estaba en la casa correcta.
—¿Crees que están en casa? —pregunto Tao.
—Es lo más probable, quizás estén en la cocina o algo así. Ya sabes cómo es Kyungsoo—los chicos asintieron, todos menos Luhan—Hay que ir por atrás, vamos.
Siguieron a Chanyeol en línea recta, como las hormigas. Cuando llegaron a la parte trasera, las luces estaban encendidas, como Chanyeol lo había dicho. Ellos se encontraban en la cocina. Luhan frunció el ceño, Kyungsoo no se veía muy convaleciente, o inclusive con dolor excesivo como se veía antes de que Sehun se alejara con él.
Kyungsoo reía por algo que Sehun había dicho, Luhan veía como Sehun sonreía. Lo había visto hacerlo un par de veces, en su opinión –de Luhan- Sehun tenía una sonrisa muy hermosa, tierna y hasta adorable cuando no le sonreía de esa manera petulante.
Aunque si tenía que admitirlo, le gustaban ambas.
Pero lo que no le gustaba, era el hecho de que ellos compartieran tanto. Sehun podía tener un monstruo protector, pero Luhan estaba sintiendo como su Monstruo de los celos empezaba a hacer su aparición después de años de inactividad. ¿Algún tiempo lo tuvo? Luhan no estaba seguro, pero no iba a pararse y analizarlo. Observo a Jongin, quien tenía su misma expresión.
—De acuerdo, será mejor que nos vayamos, al parecer está bien.
—Muy bien diría yo.
—Tao—reprendió Chanyeol.
—Ya lo siento.
Si Luhan también lo sentía. Miro por última vez al par y se dirigió a su casa. Tenía muchas cosas que pensar.
*
Sehun giro la llave lentamente, cuando la cerradura cedió entro sin hacer el menor ruido. Victoria le había dado la llave en caso de que él quisiera ir a su casa y ninguno de ellos se encontrara. Claro, la mujer no había dicho que entrara en la noche a escondidas pero una vez al año no hacía daño, ¿cierto?
Caminó por el pasillo cuidando de que el piso no crujiera, si bien entendía, éste era el pasillo que conducía hasta el cuarto de Luhan. No sabía porque, pero tenía la urgencia de ver al más bajito. Cuando dejo a Kyungsoo en su casa a salvo, las ganas de ver a Luhan le carcomían, era una extraña necesidad de verlo, tan extraña como necesaria, como un vampiro anhelando sangre.
“Te estás poniendo cursi y estúpido con los días, Sehun.”
Cuando por fin llego a la habitación, giro el pomo con delicadeza. Eran aproximadamente las doce y media, no estaba seguro que Luhan estuviese dormido ya, para su suerte o desgracia, Luhan estaba pacíficamente dormido.
Sehun cerró la puerta y camino hasta la cama. Con sumo cuidado se sentó en el suelo, frente a Luhan. Sehun estaba seguro que si Luhan usara peluca, jamás en su vida creería que el mayor fuera un chico. Tenía unas facciones delicadas, se veía bastante relajado. Su nariz era pequeña y respingona, sus labios eran delgados, el superior un poco más delgado que el inferior.
Sehun se acercó hasta quedar centímetros cerca del rostro de Luhan. No lo había podido notar, pero Luhan tenía una cicatriz en su labio. El peli-plata frunció el ceño preguntándose quien había sido el culpable de la cicatriz.
Luhan se removió un poco haciendo que Sehun se quedara quieto, aguantando su respiración. Luhan se removió un poco más, dándole la espalda a Sehun. A Sehun enarco una ceja cuando vio que Luhan solo dormía con una camiseta unas tallas más grande que la de él. Era blanca con un estampado de… ¿Hello Kitty? Sehun quiso reír, por lo adorable que se veía.
Pero toda sonrisa se fue siendo remplazada por los fuertes latidos de su corazón y su respiración entrecortada. La sabana se había arrastrado un poco revelándole el hecho de que Luhan dormía solo en bóxeres con su camiseta.
Trato de controlarse y se centró en el espacio que había en la cama de Luhan. Quizás, sería bueno que descansara unos minutos antes de irse a casa. Así tendría más fuerzas para caminar un largo recorrido hasta su casa.
…Sip, sería bueno descansar por un Momento…