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Tu más grande fan por Jess M

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Notas del capitulo:

¡Volví!

 

-Tío ChanYeol, ¿Cómo está? ¿Recuerda cuando le dije a mi padre que el pay de manzana que horneo había desaparecido cuando fue usted quien se encerró en mi armario y se lo termino en silencio? bueno quizá hicimos un par de cosas incorrectas esta noche, hum eso.

 

ChanYeol se quedó sin moverse de su sitio, tuvo que correr y por tanto se cayó de rodillas y esperando la llamada de alguien más para escuchar a su sobrino pidiendo ayuda no contribuyo a una respuesta rápida y positiva.

 

 -Tío… ¿está ahí?

 

ChanYeol suspiro.

- ¿Dónde estás? -sonó un grito de victoria por el intercomunicador tan fuerte que tuvo que alejar el teléfono de su rostro, por alguna razón no pudo evitar frotarse la sien con desespero. Ese sobrino suyo era problemático en el peor momento. Configuro la llamada en altavoz y comenzó a colocarse el saco gris.

 

-En la comisaría, necesitamos que traiga alguna identificación y dinero.

 

ChanYeol frunció el entrecejo ¿dinero? Estuvo a punto de preguntar pero su sobrino se adelantó y explico entre risas.-Bueno, dinero para pagar la fianza somos cuatro y quizá alguien de aquí hizo demasiado ¿no BaekHyun?

El consejero abrió los ojos y sintió como su corazón se aceleraba apenas menciono su nombre, se quedó estático sin saber qué hacer, lo que más lo dejo con ese sentimiento de completa destrucción fue escuchar como KyungSoo insistía a que BaekHyun tomara el teléfono. ChanYeol no supo cómo reaccionar frente a las palabras que salieron de la boca de BaekHyun, su voz era tropezada y arrastraba las palabras.

 

- ¿ChanYeol? Hace mucho que no hablo con ese maldito.-ChanYeol pudo ser capaz de escuchar cuando BaekHyun hablo a la distancia y de alguna manera sintió como la piel se le erizaba con su sola voz aun si no era capaz de pronunciarlo correctamente o de que dijera algo precisamente bueno.

 

Pero ChanYeol era un soñador enamorado, incapaz de olvidar esos orbes marrones y esa sonrisa coqueta que lo inquietaba y al mismo tiempo le hacía olvidar cuales eran los planes del día. No podía dejar de pensar en las noches en esas piernas que se cruzaban con presuntuosidad, esa mirada arrogante que analizaba cada movimiento de cada estudiante maquinando mil maldades. O el dulzor de esa boca altanera que comenzaba a ser un recuerdo amargo.

 

A ChanYeol no le importaba la vanidad, petulancia y orgullo de BaekHyun, de igual manera estaba rendido ante sus pies.

 

KyungSoo carraspeo la garganta y continúo hablando, pero ChanYeol estaba perdido y lo único que fue capaz de captar fue la dirección, ya sin tomarse demasiado tiempo en cuanto KyungSoo colgó salió disparado a su auto, en el camino sus manos temblaban al sostener el volante. Era la primera vez que aquello sucedía, era extraño que se sintiera como esa ocasión en que asistió a ese show de talentos donde tocó la batería.

 

Cuando llegó dio un leve asomo a su reflejo en el espejo frontal y quiso azotar su cabeza contra el volante o quizá ahorcarse con su propia corbata. Se veía fatalmente, no fue capaz de recordar que los seres humanos normalmente se cepillan el cabello y duermen correctamente para evadir las bolsas en los ojos.

 

Salió del auto a regañadientes, se fijó en su reflejo en las ventanas de su auto y como pudo ser capaz se dedicó a acomodar decentemente su cabello y al estar seguro de que por más intento que hiciera no cambiaría nada se dio cuenta de que estaba estacionado como si lo hubiera hecho con los pies.

 

Estuvo a punto de intentar arrancarse el cabello por su reciente torpeza pero recordó que su cabello era un desastre y si se dejaba llevar por la rabia entonces no sería nada bonito quedar calvo, no quería arriesgarse a que BaekHyun lo rechazara por su calvicie. Se sonrojo al tan solo pensar en BaekHyun.

 

A ese extremo había llegado después de tanto tiempo de evasión total. Ese Byun BaekHyun se estaba comiendo su cerebro. Alzó la cabeza y se adentró a la comisaría, sintiendo como su corazón se aceleraba más y más a cada paso que daba. ¿Olía bien? ¿Se veía bien? Se insultaba mentalmente por no dar esos retoques a su aspecto personal.

 

Cuando llegó un oficial lo detuvo y el respondió que estaba a para pagar la fianza de los jovencitos problemáticos, le mostro su identificación y el oficial le indico el camino a seguir para firmar unos documentos y pagar antes de dejarlos libres. ChanYeol estaba nervioso pero como todo profesional experto en el comportamiento humano fue capaz de controlarse por lo menos hasta que al terminar el papeleo fue acompañado por un oficial distinto para llevárselos.

 

El aire comenzó a faltarle y sintió como el techo se hacía más chico a él con la intención de aplastarlo, en ese justo instante fue capaz de reconocer esas sensaciones humanas que frente al ojo científico y racional era una creación del cerebro como mecanismo de defensa y que en ese instante le hacía sentirse un completo estúpido porque no era capaz de controlar esas sensaciones cuando era un experto en ello.

 

Al llegar sus ojos fueron automáticamente al bulto en la esquina, un ser pequeño abrazado de sus rodillas con la cabeza gacha y el cabello castaño dorado en pequeños y perfectos mechones. KyungSoo fue el primero en gritar su nombre al verlo llegar y todos que se encontraban distraídos se centraron en saltar de la emoción y mencionarlo con constantes agradecimientos. Solo alguien no se movía de su sitio y ese alguien era el ser que se encargaba de ser el reciente motivo de un dolor inhumano y desgarrado del consejero.

 

Todo pasó muy rápido, el oficial abrió la celda y les indico su libertad mientras los amenazaba sobre evitar crear más problemas pues una fianza no sería suficiente para pagarlo. KyungSoo saltó y abrazo a su tío mientras le agradecía en reiteradas ocasiones y donde había mencionado que dejaría que se terminara cuanto postre que su padre cocinara con ridículo esmero. Pero había una persona entre todos los demás que era incapaz de caminar correctamente pues en cada paso se balanceaba y estaba a un poco de caerse. ChanYeol aparto a KyungSoo y corrió a socorrer a BaekHyun, se decidió por llevarlo en brazos, su pequeño cuerpo era tibio y su aroma era una mezcla de alcohol y el perfume de BaekHyun, uno de vainilla sutil. Sintió como ese aroma invadía su cuerpo y le regresaba la energía que perdió aquellos tristes días.

 

Todos veían la escenas, y con todos se resumían a los únicos tres chicos de los que había corrido la cuenta que pago hace momentos, sorprendentemente SeHun, JongIn y BaekHyun se encontraban en un mismo sitio con KyungSoo sin desatar una guerra mundial, aunque JongIn era un muy buen amigo de su sobrino era peligroso reunir a KyungSoo y BaekHyun en un mismo sitio. BaekHyun no ha tenido reparo alguno en mencionar esa especie de desagrado que tenía por su sobrino.

 

Para la sorpresa y mala suerte, KyungSoo, SeHun y JongIn le dejaron encargado a BaekHyun, LuHan había llegado para llevárselos a todos.

 

-Tío, no hay manera de llevar a BaekHyun, sería desastroso llegar con BaekHyun todo borracho y correr el riesgo de que sus padres lo vean en ese estado, podría cuidarlo hasta que se le pase el alcohol ¿sí?

 

ChanYeol aun con BaekHyun en brazos se dedicó a verlos con detenimiento ¿estaban quedándose con él? ¿Era jodidamente enserio?

-Y ¿Por qué no lo cuida alguno de ustedes?

 

Todos se vieron mutuamente y negaron con la cabeza.

-Consejero Park, nosotros aún no nos vamos a casa, apenas está comenzando la noche ¿sabe? -menciono JongIn con una sonrisa en el rostro.

 

-BaekHyun fue quien se pasó de copas demasiado temprano, además de que él fue quien inicio el pleito que nos llevó hasta acá, estábamos tranquilos antes de que él golpeara a quien se le pusiera enfrente e insultara al bartender en reiteradas ocasiones. Tío sé que está ocupado pero era la mejor opción, SeHun quería llevarlo con su primo.

 

-Es verdad, mi primo ha estado enamorado de BaekHyun por tanto tiempo que hace cualquier cosa por él, lo cuidaría muy bien. Pero KyungSoo insistió en que fuera usted quien se quedara con él.

 

ChanYeol hizo una mueca y asintió con la cabeza.

-Pues en ese caso, hicieron bien en hacer caso de KyungSoo. Soy un profesional y nadie mejor que yo para cuidar de alguien borracho, como sea, KyungSoo-menciono y dedico una mirada a su sobrino, una de advertencia. -No quiero tener que decirle a tu padre que su hijo ejemplar comienza a ser un peligro para la ciudad ¿está bien?

 

KyungSoo se mordió el labio inferior.

-No les dirá a mis padres sobre esto ¿verdad tío bello? -ChanYeol sonriendo negó con la cabeza, a lo que KyungSoo celebro con mil y un apodos cariñosos a su tío, después de ello todos se despidieron y se fueron en el auto plateado que LuHan manejaba.

 

No culpaba a KyungSoo por divertirse y tratar de disfrutar su juventud y por eso mismo se había convencido de no mencionar nada a nadie, sobre todo la ridícula suma de dinero que tuvo que pagar por los cuatro. Pero si lo culpaba por dejarlo con BaekHyun, sería difícil intentar mantener la distancia sobre todo si lo tenía de esa manera, siendo hermoso, siendo BaekHyun en esencia. Siendo su más gran debilidad. Siendo su más grande fan.

 

Se dirigió a la puerta del copiloto de su auto y como pudo ser capaz de dedico a acomodar a BaekHyun en el asiento y una vez que estaba allí quizá se quedó demasiado tiempo viendo su rostro en una expresión de completa paz. Era como si BaekHyun fuera un ángel que irradiaba una luz tan propia. Suspiro y negó con la cabeza.

 

Cerró con cuidado la puerta y entró a su lugar como piloto, se quedó viendo el volante. ¿Sería correcto cuidar de él? ¿Sería correcto ignorar como su corazón iba muy rápido al tan solo imaginar tener de nuevo a BaekHyun? Arrancó el auto mientras trataba de respirar con más calma.

 

Sería una noche muy larga.


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