Tu más grande fan por Jess M

 
 
“Querido Chen.
Tengo muchas noticias que darte, hace mucho tiempo que no te escribo porque pasa y resulta que el trabajo consume mucho de mi tiempo y no lo digo con la intención de que creas que soy un charlatán que balbucea sobre su agenda apretada, sino que este chico, Baekhyun. ¿Lo recuerdas? El chico que no puede mantener las manos alejadas de los rostros de las personas, el mismo me ha generado ciertos problemas con la directiva, Tuve que aumentar los horarios de sesiones porque ellos piensan que mis capacidades que con tanta dedicación estuve puliendo eran dudosas.
¿Puedes creerlo? Supongo que a estas alturas yo también he tenido dudas sobre mí, llevó alrededor de 3 meses sin conseguir algún cambio en el chiquillo, juro por la madre de mi madre que no hay libro de psicología y sociología que no haya consultado ya, inclusive he agotado las fuentes en internet, no encuentro solución alguna.
 
Realmente necesito algo que me dé una pista, el chico es como un rompecabezas y parece ser que hay piezas perdidas…”
 
 
Escribía casi con furia, estaba frustrado, Si había algo en el mundo que repudiara era el hecho de que dudaran de su capacidad para tratar con sus paciente, es decir, no había pasado casi 6 años de su vida sumido en libros, en estudios y prácticas para que de la nada llegara un jovencito de 17 años con notorios problemas de ira que hiciera dudar de su trabajo.
Sus pensamientos se disiparon en el aire cuando la puerta sonó. 
 
-Adelante- minimizo el documento en que estaba escribiendo y dirigió su vista a la puerta, donde como esperaba entró el presidente estudiantil con Baekhyun, Chanyeol le dedicó una mirada neutral, esta ocasión no se encontraba de ánimos para sonreír, asintió con la cabeza y sin decir palabra alguna el presidente se fue.
 
Con una sonrisa de medio lado el chico tomo asiento  la silla de cuero, casi inconsciente de la mala cara que le daba su ya cansado consejero estudiantil, estaba ensimismado en sus ojos, grandes y expresivos. ¡Diablos! Como amaba esos ojos que al sonreír formaban sutiles arrugas bajos de este, eran brillantes y casi juguetones pero al mismo tiempo llenos de inteligencia y experiencia.
 
-Cuéntame ¿Cómo fue esta ocasión?-Pregunto el mayor, abriendo el segundo cajón donde se encontraba el pequeño cuaderno forrado de azul marino y franjas rojas con el nombre “Baekhyun” escrito en el, tomo su bolígrafo inspeccionando las reacciones del castaño.
 
 
-> Sonriente, casi risueño.
->Baja la mirada periódicamente.
-> No demuestra nada de arrepentimiento.
-> Juega con sus manos, casi inquieto.
-> Ningún cambio radical en su comportamiento.
 
 
Baekhyun sentía que el corazón se le iba a salir del pecho, realmente no podía controlar su ritmo cardiaco, temía encontrarse con esos ojos brillantes y sobretodo expertos que analizaban cada uno de sus movimientos, no es que lo incomodara del todo, temía que vieran a través de él, así que lo único que atinaba a hacer era a sonreír y hablar aparentando comodidad, tratando de ocultar los nervios que lo inundaban en ese instante.
 
-La clase de Biología fue bastante aburrida, y ese chico, Jae Sun, enserio que no paraba de mirarme, no era la clase de mirada de “Woah es guapo” sino una que te hace pensar que eres una clase de fenómeno ¿Sabe?- Se detuvo, se quedaba sin aliento sobre todo al ver una sonrisa pequeña en el rostro casi infantil de su consejero, este asintió con la cabeza, a lo que el castaño prosiguió.- No encontré más remedio que mirarlo fijamente para que supiera que estaba consciente de lo que hacía, se asustó, tal vez debí dejarlo hasta ahí, pero usted sabe, existen personas que no tienen suficiente con quedarse calladas y abren la boca aun si no tienen nada que aportar.
 
Sus ojos se posaron en el bolígrafo del consejero, azul marino igual que la libreta, para después pasar a las manos que lo sostenían y realmente imagino lo que se sentiría ser tocado por ellas.
Trato de alejar esos pensamientos pues debía continuar.
Chanyeol vio el cambio de color en sus mejillas, el chico estaba sonrojado pero el pelinegro no entendió a que se debía esto, así que decidió apuntar su hipótesis sobre el repentino cambio
 
-> Posible atracción a Jae Sun o amigos.
 
 
*****
 
Sehun se deslizaba con ligereza, parecía levitar entre pasos ligeros y brazos extendidos, danzaba con una gracia tal que era inevitable para las chicas no cruzar los muros del colegio y crear escaleras sobre ellas mismas para echar un vistazo a la magia en el baile del rubio.
 
Pero que más daba nunca podrían tenerlo, el nunca sostenía la mirada en ninguna chica por más de dos minutos, parecía no encontrar alguna digna de su atención, la razón de todo esto era porque ya le gustaba alguien más.
 
Aquel chico del coro, con rostro dulce y sonrisa hechizante, Sehun se estremecía pensando en su voz ¡Oh!, Definitivamente amaba espiarlo después del ensayo general, siempre se escabullía de la sala de baile para esconderse y ver a Luhan sostener esos altos que callarían la boca de cualquiera.
 
También era consciente de que jamás podría estar con él, no era un secreto que Luhan detestaba a Sehun y a Baekhyun, ya que en palabras del cantante “Eran unos aprovechados con complejo de narcisistas, ¡Insoportables!”. Sehun sabe que el chico jamás se fijaría en él porque Luhan era inteligente y muy precavido, también sabe que este nunca se metería con él por miedo a ser herido, lo que el ciervo no sabe es que el bailarín jamás lo jugaría con él.
 
El chico levanta la mirada y observa su reflejo en el espejo de la sala, realmente odiaba ser objeto de odio de su única debilidad, odiaba esa expresión despectiva de su pero lo que más odiaba era el hecho de que su propia actitud era la causante del distanciamiento entre él y la única persona que lo hacía soñar despierto, aquella que le hacía soltar largos suspiros.
 
Se detuvo y observo su reloj dorado, eran ya las 12:30, el ensayo del coro era pronto, apagó el estéreo, subió a sus hombros su mochila y con una toalla seco el sudor que caía de su rostro.
 
 
*****
 
 
“Sehun-ah, ¿Quieres por favor dejar de esconderte para ver a Luhan Hyung? Si me preguntas es muy patético que tú busques alguien que definitivamente no se fijara en ti.”
 Byun Baekhyun.
 
Observó el mensaje y solo se limitó a gruñir en la pantalla como si fuera el castaño.
 
Alzó un poco la cabeza y se cercioro de que el chico que lo volvía loco estuviera ahí, porque curiosamente no escuchaba nada, lo vio sentado observando detenidamente la letra de la canción con una expresión de completa concentración.
 
¡Ah! Enserio amaba ver su rostro concentrado.
 
 
“Hyung, no creo que este en condición de hablar, cuando le gusta el consejero escolar que es seis años mayor que usted, es un hombre maduro, dudo mucho que se fije en alguien como Hyung.” 
Oh! Sehun.|
 
De pronto escucho a Luhan ensayar un vibrato, aunque Sehun no sabía absolutamente nada de canto también sabía que el chico lo estaba haciendo bien ya que su piel se erizo al escucharlo, pero claro, esto siempre sucedía al escucharlo.
 
Su teléfono sonó, leyó el mensaje con incredulidad, su amigo nunca se había visto tan seguro. Sonrió, recostó y cerró los ojos dejándose envolver por la voz de Luhan.
 
“Se fijara en mí.”
Byun Baekhyun.