-ha… ha!
El sonidos rechinante que hacia la cama al moverse inundaban todo el cuarto, pero lo acompañaba con otros dos ruidos, gemidos para ser exactos.
-thor… ha… muévete más! – el joven pelinegro le suplicaba al rubio que lo invistiera más fuerte y más profundo. El dios le dio lo que pedía, separo más las piernas del joven.
-… ha! – sus ojos toparon con los verdes ojos de Lucas. Su cabello oscuro tapaba un poco sus bellos ojos, él hecho su cabella hacia atrás y luego su mano fue acariciando su rostro.
“loki” decía en su cabeza.
Capítulo especial. “…y si Lucas no es loki?”
Thor, les conto todo, la relación que tenia con él. Los vengadores no sabían que pensar al respecto, pero eso era lo de menos, lo importante era escuchar las razones del porque el dios desobedeció las ordenes. Ahora, ya lo tenían más que claro, Aunque algunos miembros se quedaron con el asombro de que el dios del trueno tiraba para los dos *bandos.
(*Me refiero a tanto tener una relación con mujeres y hombres)
-thor. – habla, tony, muy serio. – No puedes ir a enrollarte con este tío solo porque piensas que es loki.
-Es loki. Lo comprobé al estar con él.
-no puedes apostártelas solo porque tuviste una aventura con él. Fue tonto al verte involucrado sin saber si era loki, o no - dijo Steven
-ya me canse de sus nefastos intentos por ocultarle la verdad. No importa si es loki, tiene derecho a saber lo que sucede, y Algo más, encuentro que este asunto no le corresponde a los vengadores. Este es un tema entre mi hermano y yo.
-no! – dice, steven. – Mientras, loki, sea categorizado como criminal el asunto está en manos de los vengadores. Ahora estamos atados de manos con el incidente del museo, tenemos que aclarar todo ahora… – antes de que continuar la discusión. Wanda junto con Stephen entraron al salón.
-ya hemos regresado. – hablo el doctor.
-Dr. extraño, Wanda, averiguaron algo? – pregunto el cap
-averiguamos más de lo debido, Steven, y con fe les digo que sus sospechas sobre loki son… inciertas…
Todos se sorprendieron, más thor, quien era que tenía mas fe de creer que el, era su hermano. Antes de que alguien preguntara, tony, se adelanto…
-justamente esperaba decirles que, sí, hubo un error de comparación. Olvide que h.o.m.e.r ha tenido uno fallos en su programación. – todos miraron al hombre de hierro. – Cuando lo repare volví hacer la comparación y resulto que daba negativo. No es loki; y pido perdón por eso. – fija su vista a los miembros de los x-men que estaban en el lugar.
Charler, hablo – bueno, un error lo comete cualquiera. Me alegro que todo se haya arreglado y que todo fuera un mal entendido.
La sorpresa fue tal que, thor, se retiro del salón si decir algo y fue a parar hacia el jardín. Ahora que sabía esto, como lo llevaría con este nuevo sentimiento.
-estas bien, thor? – pregunto, iron-man. Sentía que era su culpa por lo que estaba pasando. – no sabía que tenias un fuerte sentimiento de amor hacia loki. Aunque sé que no son hermanos, se me hace un poco extraño la idea de que tuvieran algo. Lo lamento por…
-no es tu culpa de todo, tony stark. – suspira. –tiene razón, no debí precipitarme pensando que era mi hermano, pero La idea de pensar que era loki me entusiasmaba. No pensé con claridad, y ahora… - no dijo nada y se quedo en silencio.
Tony y él escuchan el ruido de turbinas. Era el jet-x despegando y se iba, no hay que decir que se llevaron al pelinegro.
Thor, no sabía qué hacer en esta situación.
---Pasa una semana.---
El pelinegro se encontraba en su balcón mirando el cielo nublado. Los pequeños copos de nieve caían en toda la ciudad, bebía chocolate caliente mientras observaba como iban cayendo. Pensaba en el rubio, hace una semana que no lo ha visto ¿Por qué?
Un día estaban mostrando todo su amor y al otro desaparece ¿Por qué? Se preguntaba.
-puede que haya ido a una misión de muchos días. Siendo él un vengador no me extrañaría… - agacha la cabeza. – vuelve pronto.
Pasan más días y el vengador no se ha hecho su aparición en frente del pelinegro, pero un día se canso de esperar y fue a buscarlo.
Se dirigió a la mansión de los vengadores, toco el timbre que y por un parlante le contesta un señor, que era el mayordomo. El pelinegro pregunta si thor se encontraba…
-él, ahora no se encuentra. – le contesta
-sabe a qué hora lo puedo ubicar?
-ho joven, eso sería difícil de saber. El viene y va, no tiene un horario fijo.
-ok. Gracias señor… he puede dejar un recado.
Al otro lado jarvis saco una pequeña libreta y anota lo que le dictaba. El pelinegro se despide y se marcha. En tanto el mayordomo fija su vista al rubio.
-si quiere un consejo, señor. No puede esconderse para siempre.
Era cierto, uno de estos días el chico lo iba a encontrar. Fue así como un día de pelea contra aliens, querían conquistar el planeta, la batalla dejo mucha destrucción en la zona. El grupo de héroes se dio la tarea de rescatar a la gente y, justamente, bajo el suelo personas que tomaron el metro se encontraba atrapadas dentro de los vagones.
Thor junto con el cap, ayudaban a sacar escombro por escombro y encontrar la puerta del vagón. Al encontrarla la abren y de apoco la gente fue saliendo, pero en eso el rubio de cabello largo se sorprende a ver a Lucas dentro del tren.
El pelinegro se alegra de verlo y thor… escapa volando.
-THOR! – el joven no entendía porque se fue así de la nada. Mira al capitán, él tampoco dice nada.
“Esto ya era el colmo” dijo el pelinegro. El rubio insistía en no velo y no le daba una explicación de ¿por qué? ese comportamiento con él ¿acaso se estaba arrepintiendo? ¿Se estaba arrepintiendo de haberse acostado con un hombre? no lo sabía pero muy pronto lo sabrá
“no sabes con quien te has metido thor” dijo mostrando una cara siniestra.
Si thor, no venía a él y arrancaba en verlo, pues hay que hacer que venga a él sin que escape…
El plan era este…
-ayuda… ayuda!!! – grita una mujer que estaba siendo asaltada.
Por suerte de la mujer un héroe se encontraba cerca. Thor, escucho los gritos de la mujer que pedía auxilio a todo pulmón. Fue a su rescate, tomo por los hombros al ladronzuelo y le quita la máscara, pero para su sorpresa se trataba de una mujer de cabello castaño y chasquilla teñida de blanco
-…rouge!? – dijo sorprendido el dios.
-sorpresa cariño. – le dijo. Voltea y ve que la mujer, que simulaba peligro, era nada menos que la rubia amiga de Lucas.
Rápidamente, picara, puso sus manos en el rostro del dios, absorbiendo su energía. El otro tira un fuerte grito, sentía como su fuerza se desvanecía lentamente. Cuando se zafa del agarre lanza un puñetazo, pero la chica detiene el golpe con su mano, ya que al absorber su fuerza adquirió la misma fuerza que él y también habilidades; con la otra mano de la castaña le da un golpe en la barrilla enviándolo hacia el portal que hizo Claudia.
Al traspasar el portal, lo cierra de inmediatamente. Claudia se comunica. – esta echo. – escucha un gracias por el otro lado del comunicador.
.
.
.
Thor, de apoco se da cuenta que se encontraba dormido. Reacciona rápidamente y se levanta del duro suelo. De pronto unas luces brillantes se prenden en toda la extensión de la habitación blanca. Mira por todos lados buscando alguna puerta. En eso, enfrente a él, una figura oscura se acercaba.
-hola, thor. Mucha luz para no reconocerme – ya sabía quién era, por la emboscada. - pues bien, empecemos el interrogatorio. Nivel de dificultad cinco. – las luces se vuelven rojas y una cantidad de armas aparecen en las paredes disparando al dios del trueno. En tanto el joven pelinegro miraba por la cabina de control toda la acción desde arriba.
-¿por qué me evitabas? – pregunto desde el micrófono.
Él estaba concentrado por evitar los ataques y derribar las armas. Cuando ve que el rubio estaba tomando ventaja. – nivel de dificultad siete. Hologramas de mutantes clase cincuenta.
Las armas dejaron de disparar. Pero si algo se dispuso a disparar contra la espalda del rubio arrojándolo al suelo. Frente a la presencia del rubio; magneto, mistic, mr. Siniestro, leviatán y sabretooth estaban listos para pelear.
-vas a seguir evitándome? – pregunto el pelinegro. El rubio no contesto y dio un salto contra ellos, golpeando su martillo contra el suelo lanzando rayos. El pelinegro apretó sus manos y las golpeo contra los controles. –me quieres tomar aprueba? Muy bien.
Se levanto de su asiento, fija su vista en un maletín blanco que estaba en el cuarto. Toma la malta y la abre, el contenido de ella una armería con su traje de operaciones especiales.
-Si crees que solo me dedico a forjar la pedagogía. – saca una pistola y la recarga. – He luchado, thor, contra toda cosa viviente, hasta inexistente.
El dios termina esta pelea lanzando un último golpe eléctrico contra el suelo, si suposición es cierta esto sería la cámara de entrenamiento y, al igual, que la de los vengadores se puede desconectar si golpeas el suelo. Su teoría fue acertada los hologramas desaparecieron y se apagaron las luces.
La única luz prendida era la cámara de controles. “la salida” se dijo. Estaba dispuesto a salir, pero algo callo entre sus pies y estalla. De repente las luces se encienden ocultando la salida.
-crees que esto es la mansión vengadora!? – se aparece Lucas, totalmente equipado. – Te vi pelear en esta cámara, te grave y estudie con cuidado tus movimientos. – muy enojado mira al dios del trueno. – dame un golpe, thor, te lo devolveré a todo gusto.
No quería enfrentarse contra él. Además de encontrarse agotado con… bueno, fue absorbido hasta la mitad de su fuerza, se enfrento contra disparos, luego mutantes y ahora algo que jamás se estaría preparado.
-por favor, Lucas. – se levanta y con cuidado piensa lo que dirá. – no hagas esto.
-entonces no me evites y dime de una vez ¿qué diantres, thor, te pasa ahora? hicimos el amor y luego me evitas. Dime que pasa contigo ¿es así como tratas a tus amantes? – lo apunta con el arma.
Thor, no estaba dispuesto a decirle las razones. El pelinegro, tampoco estaría dispuesto a tener una pisca de paciencia. Se lanzo contra él.
Diez minutos de peleas fue lo bastante agotador para el dios que ya estaba más que el límite. No quería lastimarlo más de lo ya lastimado por su parte, solo estaba dejando que lo lastimara por desquite. Otra granada le lanza y le estalla, se golpe contra el muro.
-eres rudo… midgardiano. – entierra el cuchillo en la pared cerca de su cabeza.
-a que juegas, dios del trueno? ¿Por qué no pelea? – se saca uno de los guantes y le muestra su nudillo con heridas sangrante. – tu cuerpo, pareciera que golpeara concreto y aunque te llenara de plomo, eres inmune a las balas. – suspira. – ¿porque me evitas? – Pone su mano en el cuello y acerca su rostro hacia su cara. – tú no me amas…?
Junta sus labios contra los de él. Se aferra contra su cuello – porque me evitas!? – grito con angustia.
-porque no eres él… – el pelinegro se sorprende ¿Por qué no era él? ¿Quién era ese él? – no eres loki… por eso te evitaba. – el dios del trueno no se atrevió verlo de frente.
-me… me querías porque me parecía a esa persona!?
-es más complicado… - con sus manos toma los brazos del joven para desprenderse del agarre y lo mira.
Así fue como el rubio le conto todo como esto empezó y Lucas lo escuchaba atentamente, sintió como su corazón desfallecía y las ilusiones se rompían a pedazos. Jamás conoció a una persona como thor, era su príncipe azul de los cuentos. Lamentablemente la realidad era otra.
Cuando termino las explicaciones debidas, Lucas, presiona un botón. Se forma un rectángulo en la pared donde era nada menos que la salida.
Ambos estaban parados mirándose el uno al otro.
-antes de que te vayas y no me vuelvas a ver ¿Por qué no fuiste sincero en contármelo desde un principio?
- no quería herirte. No quería que pensaras que te tome por simple lujuria, yo en verdad puse mucho sentimiento al estar contigo, solo que… no eras quien pensaba quien fueras – dice con mucha tristeza en su corazón.
-y te arrepientes de haber tenido algo con este desconocido? – agacha la cabeza, no quería saber la respuesta.
-lo siento.
Fue lo último que supo de él…
…Pasan los días…
Navidad…
-haa… debe ser una tradición comprar los regalos a último momento. – dice Claudia, que había olvidado comprar el regalo para su amigo secreto. Lucas la acompañaba, el también olvido comprar el regalo.
Se encontraban en el centro comercial.
-que crees que le guste gambit? – pregunto el pelinegro
-no sé. Quizás un perfume o un mazo de cartas. De todas formas el no es tan complicado como a quien me toco. – le muestra el papel de quien fue el elegido en comprarle su regalo. Luca pone una sonrisa y se ríe un poco, porque quien le toco era una persona muy complicada de hacerlo feliz en esta fecha.
- no es tan complicado comprarle el obsequio de logan. Hay que solo pensar como él.
-y como lo hiciste tu el otro año que te toco?
-le compre dos botellas de licor y una caja llena de carne seca. Me dijo, que es el mejor regalo que han recibido en su vida.
-mejor le compro una camisa decente. – miro las tiendas por si encontraba algo adecuado para el hombre lobo y, bingo, vio algo que le parecía adecuado para él. Entro a la tienda mientras Lucas la esperaba afuera.
Unos niños jugaban con sus juguetes y por estar distraídos divirtiéndose, uno de ellos choco contra el pelinegro.
-lo siento, señor. – dijo el pequeño de solo diez años. No fue tan fuerte el impacto pero aun así le dolió un poco al pelinegro, pero más le dolió en ver que en las manos del niño tenía una figura de juguete de un vengador; y no cualquier vengador.
El profesor bufo y solo se limito a decirle al pequeño que tunga más cuidado.
A pasado cuanto, una o dos semanas? Y aun seguía pensando en él. En verdad que ese hombre entro como una bola demoledora penetrando su corazón.
En los vídriales de las tiendas, se miraba el reflejo de su rosto.
Suspira. – no todo en la vida tendrás al hombre de tus sueños. – en eso alguien le tapa los ojos. – Claudia, no esto de ánimo.
-ni siquiera animo de verme. – Lucas, le quita las manos. Ya sabía de quién era esa voz. – valla, serrure, es navidad porque tan amargado?
-navidad, si estás aquí debe ser que estar robando los regalos de navidad; o no robbin? – el chico de cabello negro y de vestimenta roquera le sonríe.
-no, está ves me quiero portar bien, y ya que te pille por aquí ¿Tienes planes esta noche? – lucas, ya sabía de las intenciones del muchacho ladrón… pero…
-sí… aunque, voy a estar compartiendo hasta la madrugada ¿Por qué tienes algo en mente para esta noche?
-mis muchachos estarán parrandeando toda la noche y quizás hagan algunos destrozos en la ciudad La caverna estará vacía ¿te apetece pasar una ratito conmigo?
-¿no vas a acompañarlos?
-si estás conmigo.
Echa un suspiro. – que valga la cena que me prepares y, por favor, que la cama no tenga agujeros donde pueda dormir…
---fin---