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El destino dirá si vuelves a mí por lalocadelacartera2

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Notas del capitulo:

Doy un resumen corto y breve sobre este evento “dinastía m”

La bruja cambio la realidad creando un mundo gobernado por mutantes y los humano son considerado la raza inferior. Todo lo héroe que conocemos tiene vidas distintas pero conservando sus respectivas razas (es decir humano y mutante).

Y bueno, de eso va a tratar la historia. De lo que le sucedió a la vida de lucas en esta realidad, sin que el lo supiera.

Recordar que Donald Blaker es el alterego de thor que cambian de cuerpo para ocultar su identidad. 

nada, disfruten el primer capitulo. 

Capitulo uno. Mundo cambiante.

 

New york. Diez de la mañana.

Consultorio del Dr. Blake.

-abra la boca. – dice el doctor Donald. Introduciendo un palito para observar la garganta de su paciente, un anciano veterano de guerra. – todo en orden señor Steven Rogers. Creo que su malestar estomacal se debe a que consume muchas pasas al día. 

-buen, es el único alimento que me ayuda a mi indigestión. Ya a mis noventa años mi cuerpo no era como antes, siempre a los niños les digo que aprovechen su juventud mientras puedan o terminaran como yo. jeje. –se ríe

-le daré algo para la indigestión y por favor coma pequeñas porciones a la semana. – va a su escritorio para escribir la receta.

-como le va a su esposo ¿escuche que adoptaron una niña? Es bueno que crezca la familia.

-algo parecido. Alquilamos un vientre. La chica tenía el poder de mesclar el ADN de cualquier persona, incluso darle rasgos que quisiéramos, y formar una vida en su útero. Nos costó una fortuna pero cada centavo lo valió y ahora somos una familia completa. Y si se pregunta dónde está el. La paternidad no es motivo para seguir trabajando.

Y precisamente hoy tenía motivos para trabajar…

 

----Industrias Stark (investigaciones científicas) ----

-damas y caballeros…

 En un enorme auditorio donde el joven de cabello negro y bata blanca presentaba su mayor investigación durante sus diez años.

–…el hombre, digo, el mutante a buscado por generaciones una forma de que los tratamientos médicos logren una efectividad más rápida y eficiente para curar ciertas enfermedades o miembros faltantes, que en algunos caso, no se puedan curar o restaurar. Cáncer, extremidades faltantes, VHI, tejidos muertos y más, todo eso curado en un solo tratamiento. Les presento…  – En una mesa, en el centro, cubierto por sabanas. Lucas extiende su mano para quitarla y mostrar una especie de maquina complicada de explicar cómo funciona. – el primer prototipo que curara toda clase de enfermedades y regenerativas gracias a los rayos gamma. – todos echaron palmas.

Narra Lucas: Si crees que me estoy robando las investigaciones del Dr. Banner es porque de seguro no me conoces de todo. Mi nombre es Lucas Banner, y no es coincidencia el apellido, fui adoptado por uno de los mayores genios del planeta y con el tiempo me volví en su pupilo. Seguí su investigación de los rayos gamas para ayudar a las personas. El estaría muy orgulloso de que su investigación finalmente logre ayudar a los otros.

Fuera de las instalaciones de la compañía…

-por tu cara veo que te fue viene en la junta, amor. – habla Donald, sus esposo, que entre sus brazos llevaba la pequeña hija del fruto de su amor.

-está en fase el proyecto, aun no hemos hecho pruebas en mutantes y solo he mostrado el prototipo. Estoy feliz de que el proyecto sea un completo éxito y lo estén apoyando, pero estoy más feliz por ver a mi familia. Hola bebe. – le acariciaba la pequeña naricita. La pequeña no llevaba más de tres semanas de nacida y ya se podía ver un poquito su color de ojo, verdes, al igual que su papá.

-de que color crees que será su cabello. – pregunto el doctor.

-pues rubio, mi amor. Quiero que tenga algo de ti.  

-no lo sé. Tu cabello es hermoso.

-lo mantengo para ti, mi Donald. Ahora, que tal si festejamos mi éxito con un poco de pastel. – se lanza a sus brazos acercando sus labios con los de él, tratando de no aplastar a su pequeña que estaba al medio de los dos.

Narra Lucas: el es Donald, mi esposo, nos conocimos en la universidad. Ambos estudiábamos medicina, claro que mi campo era la ingeniería biomédica pero eso no significa que teníamos clases compartidas de nuestras áreas y fue en una clase que nos conocimos.

Donald es… atractivo en su forma de ser. No es muy atleta, tiene musculatura pero si hablamos de medir fuerzas yo llego a levantarlo sin tanto esfuerzo, él en cambio… casi le da una etnia cuando me levanto para llevarme a la cama. Fue su corazón lo que me enamoro, tímido e inseguro, creo que todo eso fue cambiando al conocerme. En un principio la relación fue un poco extraña, a Donald le costó admitir su homosexualidad en cambio yo no me daba problema lo que dirá la gente, tenía bastante con que mis colegas me discriminaran por ser sapien.

Cuando nos graduamos, él, de inmediato, abrió un consultorio con todo el dinero que ahorro trabajando, y ese mismo día que lo inauguro me pidió matrimonio. Todo el prejuicio lo olvido y se enfoco por nuestra felicidad. Claro que di el sí, ese hombre estaba desesperado por cazarse conmigo que, incluso ese mismo día nos cazamos. Fue una boda muy improvisada, no me importo tener una boda espectacular, fue lindo por ese detalle. A la mañana siguiente, la luna de miel en Hawái, primera vez que tomo jugo de coco en un coco.

Tres años de casados y yo con mí obsesión de trabajar en el proyecto de mi vida. seguí los pasos del doctor banner con respecto a los rayos gamma, con la excepción que el hiso una bomba  para los militares que trajo consecuencias… le vi potencial la investigación de los rayos gamma para regenerar tejido o restaurar extremidades perdidas, pero debía estudiar físico nuclear. Me tome un curso completo por tres años, soy bueno con los estudios y me considero un “nerd cool” nadie me tomaba muy enserio por mi cara bonita y mi singular manera de hablar otros temas que no tenga que ver con ciencia. Pero cuando hablaba de ciencia era el amo de la materia con respecto a las variables de hipótesis de diferentes áreas,  y tal vez por eso fui my fanático de las investigaciones del científico Red Richard.

Bueno de que hablaba, a si de mi matrimonio… por un punto le veo sentido porque Cristóbal Colon no se caso. El matrimonio es como una partícula de agua, 2 partículas de hidrógenos y una de oxigeno que conforman el agua, sin esos compuesto no pueden formar agua y solo son partículas independiente. Yo soy el hidrogeno y donald mi oxigeno, se necesita otra partícula de hidrogeno para que esto funcione. La dedicación y amor es esa partícula, no puedo ser un independiente ya que hay alguien en mi vida pero tampoco quiero dejar de lado por lo que he trabajado por casi la mitad de mi juventud. Decisiones, la gente toma solo un camino porque en sencillo deshacer y concentrarse lo importante, para mí las dos eran importante. Por eso tarde tanto en mi investigación, aun así no tenía prisa en dejar mi huella en el mundo. Para un sapien es difícil destacarse si está regido por mutante, las políticas son diferente debes seguir la misma línea. Qué futuro me espera si continuo en tratar de demostrar mi grandeza. Fue por uno de mi especie, Tony Stark, quien le intereso mi proyecto. Obtuve lo que quería, un poco de reconocimiento, pero cuanto durara hasta que todos me vean lo que soy.     

 

…Esto no es real (dice una voz misteriosa)

 

-noticias. Un extraño hombre de metal llamado a sí mismo como “iron-man” amenazo a lord magnus, nuestro líder, con ser el nuevo protector de los sapiens. Hasta el momento se dice que el extraño hombre de hojalata tenga relación con el millonario anthony stark. Su padre, haward stark, no ha querido dar declaraciones al respecto… ya estaremos informando…

-apaga eso, no quiero saber de héroes. – dice Lucas entrando al cuarto de los dos. Se dirigió al doctor seximente para sentarse a su lado – acabo de dormir al bebe, quiere que te haga un masaje en la espalda. – le susurra en la oreja.

-qué tal si nos saltamos esa parte y vamos a la acción. – lo toma rápidamente y lo arroja boca baja posicionándose encima de él.  Lucas, extiende su brazo para apagar la luz de la lámpara.

 

---- un año después----

La familia Blaker, fue a un día de campo afueras de la ciudad. Los tres estaban sentados y comiendo emparedados, excepto la pequeña, ella estaba comiendo papilla echa en casa. El pequeño bebe, ahora, un poquito más crecido con sus ojitos verdes brillantes y su pelito dorado, Lucas estaba muy contento que los genes de ambos hayan dado a esta tierna creatura. En eso el joven de pelo negro saca un objeto de su mochila.

-te presento mi nuevo invento. Taran. – la pequeña llamada Matilde, su hija, aplaude con sus pequeñas manitos. Donald, en cambio puso una cara de no saber de que trataba el invento ya que era un avión de juguete que le compro a su hija. Su esposo saco un control remoto y el objeto en cuestión empezó a volar.

-lo modificaste para que volara? – pregunto el doctor. La pequeña reía de alegría al ver volar el objeto y trataba de pararse.

-mira como se alegra. Tu papi es un genio de la ciencia, he pequeña. Respecto a tu pregunta, amor, es el nuevo invento del profesor Mccoy con objetos gravitacionales. Me llamo para probarlo y que modificáramos algunos desperfectos. Si tu pregunta es ¿el objeto está volando? En cuestiones científicas no, es algo más complejo e incuso podría ser la respuesta para los saltos en viajes interestelares ¿quieres que te lo explique? 

-no. me basta con que me digas que no está volando y no es seguro para los niño. Dime, como te va con el proyecto?

-bien hasta hora. Logramos restaurar tejidos de quemaduras, falta las pruebas de restaurar extremidades. Estimo que en tres años más, aproximados, el funcionamiento de la maquina será un completo éxito. Sin embargo, aun lo probado con humanos y no nos dan autorización en probarlo con mutantes, hasta que este del todas las pruebas faltante hechas. – muestra una cara de preocupación y el su marido lo nota.

-¿Qué te aflige?

-que el proyecto no sea un éxito y…

-hapi…! - los dos quedaron atónito al escuchar esa palabra de la boca de su hija.

-dijo papi. Dijo papi! Ya mi hija está hablando. – Lucas mostro su felicidad en el rostro y Donald compartió esa alegría. La tomo en sus brazos y la abrazo. – no importa si no tiene éxito el proyecto. Este me salió con mucho más éxito. – refiriéndose a su familia. 

 

----Pasan, tres meses.----

Lucas se encontraba hablando sobre su invento con el profesor Mccoy. El mismo profesor tenía sus dudas si su invención tenía fallas en las variables para aplicarla en los mutantes.

-una. Solo pido una prueba con un mutante, tengo un colega que está dispuesto hacer de conejillo y…

-NO. – dijo firmemente el mutante. – oye. Yo se que este proyecto significa un avance mas que extraordinario para la ciencia médica, más de lo que piensas y le tengo mucha fe en su éxito. Te apoyo en tu trabajo, eres de admirar con todo lo que has logrado siendo lo que eres. Pero escúchame… - suspiro no quería contarle sobre esto pero no tenía otra opción. – hay una falla que debes revisar antes que la apliques en algún mutante pero eso también implique que el proyecto solo pueda usarse como reparador de tejidos menores. Quiero que le eches otra mirada a tu investigación y entenderás porque te insisto en decirte que no.

-esto no es por el hecho de ser un sapine, verdad? – dentro de Lucas se siente traicionado por su colega. – de todos los que trabajan jamás pensé que serias un celoso, Mccoy. No quieres que ponga aprueba mi investigación porque salvaría un infinidad de vidas, en especial a los mutantes. Jamás quieren ver que un sapien supere a su especie.

- piensas que lo digo por ¿celos? Te pensé un chico más inteligente pero veo que cometes los mismos errores que un principiante al momento de creerse la gran cosa. Escucha alguien que a trato de romper barrera y no resultan nada prometedoras si no ves el error a la vista. No hagas nada que no te este permitido hacer, solo te pido que revises tu investigación antes de cometer un error…

mas tarde. En el hogar de los blaker...

En la cocina.

-aquí viene el avión. – Donald, le estaba dando de cena a su hija. En eso fija su vista el reloj. - Ya debería haber llegado del trabajo, que lo estará retrasando. – estaba preocupado. En su mente pensaba que se habrá entretenido haciendo más experimentos científico, pero cuando lo hace llama para decir que llegara tarde.

Pasaron las horas, y ninguna llamada de su esposo. Trato de llamar él pero el celular de Lucas se encontraba apagado. Espero en el sillón de la sala.

Medianoche. El rubio se quedo profundamente dormido sin escuchar que la puerta principal de apoco se abre. Lucas camina unos pasos por el pasillo y ve que su esposo se encontraba en la sala y dormido. El pelinegro se acordó que no lo llamo, se cinto un mal por eso. Dejo su mochila de trabajo en un costado y fue a despertarlo. 

-Donald. –le acaricio la cabeza y pronunció muchas veces su nombre, pero el hombre no despertaba. Aunque el rol en ellos estaba definido, no quería decir que Lucas se una persona debilucha. Lo tomo en brazos y lo llevo al cuarto. De apoco lo recostó en la cama, le saco los zapatos y desprendió su camisa. Le puso el piyama y luego lo arrapo. Antes de que se fuera a dormir quería ver a su pequeña hija. Entro al cuarto de la niña y recordó el día que su esposo y él pintaros la habitación. Fue directo a la cuna y beso la frente de su hija, se quedo unos minutos observándola.

Relata Lucas: tiempo atrás. Nos enteramos que una mutante tenía la capacidad de dar niños mesclando el ADN de quien sea los genes que quisieran mesclar. Nos costó mucho contactarnos con ella como también el precio del alquiler. Juntamos dinero, debimos reducir gastos, me dio mucha risa cuando Donald trabajara de payaso en un cumpleaños por el dinero, también tuve que trabajar horas extras y pedimos un préstamo de un millón, era eso o vender un órgano. Logramos juntar el dinero y la chica nos dijo que debíamos esperar cinco meses, cosa extraña ya que los embarazos son de nueve meses. Donald y yo discutíamos de cómo se llamaría nuestro bebe, a pesar de que no estábamos muy de acuerdo con los nombres propuestos en algo si congeniamos y era que nuestro primer hijo debía ser una niña. De ojos verdes, cabello rubio y… en un punto, si queremos pensar por el futuro de nuestros hijos lo mejor es que su vida fuera la vida que le espera, si lo acepta o no. No importa, la seguiré amando quien quiera que sea en el futuro.

Se va del cuarto y regresa a su habitación.

A la mañana siguiente.

El doctor se encontraba haciendo el desayuno y a la vez entreteniendo a su hija en la cocina. Mientras que el pelinegro dormía en el cuarto, su esposo no lo despertó para el desayuno ya que desconocía la hora que llego.

-buenos días. – escucho la vos de su durmiente esposo, que por su cara no parase que durmió muy bien anoche.

-buenos días. Deseas jugo para el desayuno.

-si, por favor. – bosteza y se sentó en la silla. Mira a su hija que estaba masticando el biberón. – buenos días Matilde ¿dormiste bien? – le acaricia la cabeza. –claro que dormiste bien, a ti no te preocupa nada.

-toma. – le acerca un vaso de jugo de naranja al joven. – hice huevos con tocino ¿Te apetece comerlos o vas a seguir durmiendo?  

-solo tostadas. Debo ir a trabajar.

-Lucas. Es domingo.

-lose. – dio unos sorbos a su jugo.

-anoche ¿Qué hora llegaste?

-a la una de la madrugada.

-te llame…

-estaba descargado mi celular.

-…y te espere.

-no volverá a ocurrir. Lo siento. – Donald, miraba en los ojos de Lucas y sabia que algo no andaba bien.

-tú me dijiste que entre nosotros jamás debe de haber secretos, ni mentiras. Se cuando mientes y lo veo en tus ojos ¿Qué paso anoche? ¿Por qué no contestaste? ¿Paso algo con el proyecto?

Todas esas preguntas las quería evitar. Lucas se levanta de su asiento – no quiero hablar de eso. Me iré a dormir, me siento muy cansado.

-no me evites, Lucas  – el también se levanta de su puesto para detenerlo tomándolo del brazo. – me preocupe mucho anoche. Creí que algo malo te había pasado, que te habían tomado detenido por el toque de queda.

-no quiero discutir, Donald. Ni enfrente de nuestra hija. Llegue tarde porque fui a tomar unas copas de más y…   

-que paso? – mostro su cara de preocupación.

-¿Por qué… es tan difícil? – de apoco una lagrimas brotan en el rostro del pelinegro. El mayor lo abraza y lo consola con palabras dulces. – se que… sé que es más importante mi familia, pero… siempre uno se amara más que a los otros. Perdóname Donald. Yo no quería poner mis ambiciones como primera prioridad, solo quiero un poco de reconocimiento sin que me juzguen por quién soy. – se abrazan con más fuerza.    

Dejando de lado los problemas, el rubio propuso ir a la playa para que despejara sus dudas e inquietudes. El sonido de las olas calmaban un poco el corazón del pelinegro, la briza y el olor le dejaba la mente en blanco. El de ojos azules esperaba a que su amado le explicara todo lo que sucedió ayer, pero no tenía prisa por saberlo a sí que se dedico a darle un beso en la frente.

Se saco las zapatillas el rubio para tocar el mar con sus pies. El agua estaba muy heleada, se agacho para que su hija tocara el agua con sus pequeños pies. Eso conmovería a cualquiera incluso para Lucas que no quería pensar en nada más que en ellos dos. También se saco las zapatillas y los acompaño.

Caminaron por toda la extensa playa tomados de las manos. Lucas, más tranquilo, decide contarle lo que sucedió ayer. 

-así que el proyecto quedara como un tratamiento solo para nuestra clase. –dice el rubio

-era eso o una maquina de curación de tejido menor. La decisión la tomo mi jefe, el señor Stark.

-y encontrarte el error que te menciono Mccoy?

-no, y eso fue lo frustrante. Revise mis notas por horas y no le encontré ningún desperfecto. Fui a beber para despejar mi mente y no vi la hora. Camine desde el bar hasta la casa lo más rápido posible antes que los poli me agarraran. Si, debí llamarte pero no estaba de ánimo para hablar con alguien. Lo siento.

-bueno, algo es algo. A lo menos demostraste que la maquina era competente ¿o no?

-para una minoría que a mi jefe le costara una fortuna. Nadie va a soltar un peso por esa máquina, Donald. El sueño de toda un la vida hecha añicos.

-no es cierto. –lo abraza de lado. – ¿sabes quien estaría orgulloso? Banner. El te diría que no solamente lo intentaste, lograste un avance para la ciencia. y eso lo enorgullecería.   

-lo echo de menos. – suspiro un poco y se puso triste en pensar en él. – Supiste que ahora es el  presidente de Australia.

-y que recibe refugiados humanos. Nadie se atreve enfrentarlo por, ejem… nadie quiere verlo enojado. – se rieron un poco.

-tienes razón. Logre lo que me propuse y será efectivo, al menos para los seres humanos comunes.

-yo comprare tu maquina. Será un buen uso en mi consultorio ¿no es muy caro, verdad?

-amm… puedes pagarlo en cuotas de quinientos dólares. – casi se desmaya el rubio, no quería enterarse cuanto valía la maquina. – pero puede que te salga gratis. – le sonríe.

 

---Pasaron otro año---

La pequeña de los blaker ya estaba empezando a caminar, aunque debes en cuando se tropezaba, pero de apoco  llegaría a caminar bien, era gracioso por el hecho que el rubio debía prestar atención donde caminaba la pequeña. Observaba a su hija jugando con sus juguetes en la sala pero no veía rastro de su esposo.  Lo llamo varias beses sin recibir alguna contestación, reviso cada cuarto de la casa teniendo a la bebe en sus brazos. En eso escucha un ruido en el sótano, era posible que este en su laboratorio.

Bajo las escaleras y abrió la habitación. Se encontró con una sorpresa que no se esperaba. Lucas con una llave stilson golpeaba duramente a la maquina que el invento hace años. Donald, lo detuvo pensando que se había vuelto loco.

-porque estas golpeando mi maquina que tu fabricaste. Ya hablamos de esto, Lucas ¿no me digas que otra vez…

-lo arruine. Debí verlo, debí imaginarme que podría pasar no pude ver el error que estaba cometiendo. Dios mío, lo arruine. – puso sus manos en su cabeza mirando asía el piso. Su acompáñate no entendió que estaba diciendo. Puso su mano en el hombre de su pareja.

-Lucas… - antes de decir algo se escucho el sonido de teléfono móvil. 

-si? Sí. Ya están por irse. Gracias por la ayuda. – con quien hablaba? Se dijo el rubio. – Donald, debes irte con la niña. Hay un auto afuera que los llevara al puerto donde…

-que!? De que hablas, Lucas! – grito Donald. – yo no me muevo hasta que me expliques que está sucediendo ¿con quién hablaste? ¡Qué está pasando!

- Mccoy tenía razón, había un error en mi invento. Se arrepiente de no habérmelo dicho antes pensó que siendo una maquina solo para curar a los humano no habría problema en tenerlo en circulación en venta. Pero se equivoco y me llamo para advertirme ¡estamos en peligro Donald! Y es mi culpa. Quiero que tu y el bebe se vallan a Australia, haya estarán bien. Envié una carta al Dr. banner donde los recibirá con gusto y…

-que pasara contigo?

-no voy a involucrarte, solo te diré que mi vida acaba aquí. Mi invento no solamente es una revolución en la ciencia médica si no que también es la pista de cómo curar el “gen x” y ya sabes lo que significa. Cometí una alta traición y vendrán a casarme, los agentes de s.h.i.e.l.d vendrán por mí. – pone sus manos en el rostro de su esposo. –gracias por darme una vida feliz. Vete ahora.

-no. no voy a dejar que te separen de mi lado. – le entrega a la niña. –no fue tu culpa. Tu no sabía que podía hacer eso, la maquina.

-Donald, ellos no me creerán. Cuando vengan lo que harán conmigo no entrara en un juicio, me dictaran la sentencia en el momento en que me vean, apuntando sus armas. Por eso te pido que te vayas antes que ellos lleguen, no te quiero involucrar. – rápidamente el rubio sale del laboratorio y se dirige al armario donde guardaban cosas inservibles. En eso saca un bastón. – que piensas hacer?

-ya lo veras. No voy a dejarte solo. – dijo con firmeza en sus ojos. – somos un matrimonio, estamos juntos en esto.

Ambos escuchan un ruido que provenía del pasillo, sonaba como destrozaban parte de su casa y caminaban por todo el cuarto. Ya estaba aquí.

-mantente con el bebe y ponte detrás de mí. Entendiste. – le dijo al de ojos verde que estaba asustado y su hija se inquieto que se puso a llorar. Por los llantos los agentes escucharon el ruido que provenía del sótano. Al bajar se encontraron con una puerta semi abierta. 

-¡quietos! – gritaron una orden a los sujetos que se encontraban en el cuarto. –están arrestado por alta traición a la raza mutante. – apuntan sus armas.

El rubio de ojos azules levanta sus manos que una de ellas sostenía el bastón y se pone delante de su esposo.

-no dejare que se lo lleven. – dijo con firmeza

Estaban por disparar, en ese instante Donald golpea su bastón contra el suelo.

A lo lejos, en un edificio. Un sujeto ve un rayo cayendo hacia una casa a pocas cuadras donde se encontraba él.

-creo que veo a nuestro siguiente recluta. – dijo wolverine. Junto con algunos vengadores,  x-men y héroes que conocía recuperaron la memoria de lo sucedido en genosha. 

Notas finales:

Bien, lo confieso. Me gustan los romances mesclados con acción.

Bien, lo que sigue es algo triste. no al nivel del pobre spiderman (llora) joder, porque hacen sufrir al pobre.

a si que nos vemos en el siguiente capitulo. 


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