Sentí como suavemente Changmin me abraza y me decía que todo estaría bien. No podía dejar de llorar, aquel beso hizo que mundo diera un gran giro, me hizo hasta imaginar una familia, en la que estuvieramos Yunho, el bebé y yo. Hace mucho que no pensaba en esa idea, realmente no la pensaba desde aquel día en que vi a otro chico en nuestra cama. Últimamente había pensado en una familia que se compusiera por Changmin, el bebé y yo... Se que no suena bien, ya que él es mi amigo y temo terminar enamorado de él, pero mi corazón no me escucha y de a poco comienzo a sentir maripositas cuando él esta cerca.
-Hey no debes llorar, todo estará bien -me sonrió dulcemente, mientras me abrazaba con delicadeza- yo estoy aquí y nunca te dejaré...
-Min por favor nunca lo hagas -lloraba sin consuelo, mi corazón dolía demasiado-
-Jae no llores, eso le hará mal a nuestro pequeño -me sonroje al escuchar aquella palabra. Había nombrado al bebé como nuestro, como si fuera de ambos- vamos a casa... debes descansar -se separo suavemente de mí, para luego tomar mi mano y caminar a la salida del baño-
Realmente estaba confundido ¿acaso me estaba enamorando de Changmin? ¿De uno de mis mejores amigos? Y aún peor... También era amigo de Yunho. Yunho nunca me perdonaría esto. Espera un momento, no debo pensar en Yunho, solo en el bien de mi bebé y en mi bien. Después de todo yo estaba solo con mi bebé y debía luchar por él. Al llegar a casa preferí no hablar con Changmin o podría terminar enamorado de él, cosa que realmente no quería. Fui directo a la habitación y decidí quedarme estudiando toda la tarde. Al llegar la noche decidí dormir, por lo que baje a la cocina y me serví un vaso de leche, debía cuidar mi alimentación. Escuche unos pasos, por lo que voltee y vi a Min que me miraba sonriendo. Le devolví la sonrisa y comencé a beber del vaso, mientras él se me acercaba hablandome. Yo realmente no le prestaba atención ya que últimamente me había dado cuenta de que Min había crecido demasiado, lo conocía desde que eramos niños y nunca me había fijado de que tenía unos bellos ojos y labios. ¡Jae detente! No debo pensar en eso. Él me trajo al mundo real al decir que no lo escuchaba, cosa que negué rotundamente, aunque fuera la cosa más cierta del mundo. Deje el vaso sobre la mesa y me acerque a Min abrazandolo por el cuello. Él me miro de manera extraña pero solo se rió suavemente. Me acerque de a poco a él y le di un suave pero delicado beso, sin apuro alguno. Cerré de a poco mis ojos dejandome llevar por el fantastico momento, los labio0s de Changmin eran suaves como los de Yunho. Sentí suavemente como él se alejaba y se me quedaba mirando. ¿Qué había hecho? Acaba de besar a mi amigo y a él no le había gustado al parecer. Bajé la cabeza y caminé rápidamente en kla habitación encerrandome. Aún no sabía que había hecho ¿Qué sucedería conmigo si es que él no me hablaba nunca más? Yo quería muchyo a Min y no debí haber hecho esp. Me quede acariciando mis labios suavemente suspirando. Sus labios eran únicos. ¡Jae basta! No quiero enamorarme de Min... Yo no podía enamorar de mi amigo, del único que siempre ha estado allí.}