Passion... or Love?
Eran ya muchas las veces en que pasaba algo como esto, pero eso no significaba que no me sorprendiera...
Estuvimos todo el día juntas y no es de extrañar, pues hace mucho que no nos veíamos y nos extrañábamos...
luego de un largo día recorriendo cualquier parte y charlando de nuestros días lejos, llegamos de nuevo a su casa, y al entrar notamos que estaba más silenciosa que de costumbre, Yuma no pudo evitar sacar de su bolsillo su celular y mirar la hora, la cual era 07:00 P.M.
El día estaba más claro que de costumbre y se apreciaba la claridad en su casa, entramos un poco sorprendidas y vimos un cuaderno abierto en la mesa...
Yuma lo tomo con rapidez y leyó en silencio, tras hacer esto ella entra al baño, dejándome leer a mí:
"hija, tu abuela, la Maira y yo nos hemos ido a casa de tu tío a cuidar su casa, cuida la casa, volvemos en unos días.
Pórtate bien, lava lo que ensucies...
Te quiere tu mama..."
Me quede mirando la nota sintiendo como mi cuerpo se calentaba y escalofríos lo recorrían, en medio de estos siento a Yuma salir del baño, me mira tras unos segundos siento que camina, solo alcanzo a ver su espalda al verla cruzar la puerta de la cocina al irse a su pieza, me quedo tratando de controlar los escalofríos y la sigo, veo como conecta su celular en el plasma y como pasa canción tras canción, hasta colocar la que buscaba, el silencio es un poco incómodo, ella toma su cuaderno y comienza a dibujar, no puedo evitar mirar como traza líneas rectas y curvas para que finalmente empiece a tomar forma el dibujo, me acerco a su lado y le hablo:
-Yuma, ¿quieres que me quede a acompañarte?-
-(tu nombre), no tendrás problemas-veo como se la ansiedad y la alegría en sus ojos.
-no te preocupes, les llamare a (los que se hacen cargo de ti) y les diré que te acompañare, algo les inventare y veras que no habrán problemas.
Salgo de la habitación antes de que me diga otra cosa y llamo a (los que se hacen cargo de ti), luego de unos minutos charlando con ellos, me quedo.
Al entrar ella lo primero que hace es preguntar:
-¿no se molestaron?-
-no, como crees, en realidad mañana no tengo nada que hacer, tampoco los otros días, así que pedí quedarme hasta que llegue tu familia… no quería que quedaras sola-susurro la última frase y me sonrojo.
Siento sus pasos llegar y sus brazos abrasarme.
-gracias-dice en un susurro, y siento su risa-estas como un tomate.
-baka-digo-vayamos a tomar once que es tarde ya.
Salgo de la pieza, pero siento como mi rostro arde, sus palabras y acciones me habían avergonzado de nuevo.
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Terminamos de tomar once y ya era tarde, ella se sentía algo cansada y fue hasta su pieza, yo me quede rezagada de nuevo, pero esta vez porque estaba dibujando…la, debo decir que me gustaba dibujarla, es casi como una obsesión, pienso que el motivo es que ella me gusta.
Quince minutos después voy hacia la habitación y al entrar escucho música triste, entro con preocupación y curiosidad y veo como esta duerme… en la cama que supuestamente debía dormir yo.
-¿eh?, Yuma…-digo en voz baja.
-vamos (tu nombre), no te molestara que duerma contigo-dice con burla.
-no-digo por obstinación, no me gusta cuando me molestaba de esa forma,
-entonces ven, que ya es tarde-
Apago la luz, y me desvisto, tomo un pijama que ella me había indicado que yo ocuparía, y me acuesto a su lado.
Siento su mirada en mí, mis pómulos se sonrojan por enésima vez ya en un día, y siento acercarse su rostro, es ahí cuando siento el brillo en sus ojos y su aliento cálido en mi rostro, dejo llevar por sus ojos y acerco mi boca a la suya en un beso de re-conocimiento y pasión.
Nuestras bocas y labios se juntan en deseo, y siento sus manos sobre mi piel, la cual se estremece, baja más y siento como entra por debajo se mi pollera, acariciando mi espalda y mandado descargas de placer por todo mi cuerpo, suelto un gemido que se ahoga en nuestras bocas, las cuales no queremos separar por el beso tan lujurioso y candente, mis manos no se quedan quietas y le tomo del cuello, mis pulmones que exigían oxigeno con furia me obligan a separarme de tan delicioso beso y me separo del cuello para dejar que ella me quite mi pollera.
Siento el aire frío de la noche, deberían de ser mas de las 12:00 A.M. y la luna brillaba llena en el cielo…
Sabía que significaba eso…
Sería una gran noche.
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Nuestros labios se acariciaban en un ritmo que era tan suave y a la vez tan salvaje, sabía que solo ella podia dar aquellos besos, sus manos en mis muslos los acariciaban de forma lenta, sabia que estaba dejandome llevar de mas, y mi mente me preguntaba por que, me empecé a cuestionar y siento en mi cuello una mordida que me hizo soltar un fuerte quejido:
-no quiero que te distraigas pensando en cosas insignificantes, esta noche quiero ser yo la única que este en tu mente-susurra en mi oído, para luego bajar sus besos hacia mis pechos, sus manos subían a la parte interna de mis muslos y yo no sabia que mas hacer, no podía pensar y mi mente se quedaba lentamente en blanco...
Sus manos acariciando mis muslos suben lentamente hacia arriba, y sus besos suben de ritmo, acelerando el ritmo y llevando lentamente mi cordura, ya ni sabia mi nombre y mi cuerpo se estremecia, lo único que sabia era su nombre...
-Yuu, no... Agh, pa-para...-gimo aferrándome a sus hombros.
-¿por qué?, ¿si ambas sabemos que te gusta?-susurra lamiendo de forma lenta mi oído.
De forma más lenta e intima sus manos comienzan a acariciar mi intimidad y los expertos dedos acarician cada vez más insistentes... Mis gemidos ya no podía acallarlos y salían libremente de mis rojos e hinchados labios, mi rostro ardía y su lengua acariciaba mi cuello, suaves gotas de sudor recorrían, y su caliente saliva enfriándose en mi cuello con el frescor de la noche lo helaba mandando suaves y persistentes escalofríos a mi columna.
Lentamente finos hilos de fluidos caen por mis muslos desnudos y los dedos que se habían dedicado a acariciar se internan entre las paredes de mi intimidad, una sacudida en mi estomago y siento unas palpitaciones en mi parte baja... Los gemidos cada vez mas escandalosos, y Yuu ríe en mi oreja, su aliento cálido incendia cada vez con más mi cuerpo que siento de un momento a otro quedara resumido en cenizas de pasión, mi caderas comienza a ayudarla con las mebeztidas que dan sus dedos, y ella ya no se niega el lamer y morder mis pezones, siento una ligera molestia al saberme la única que disfruta, y mis manos cerradas en puños sujetas en sus hombros bajan hasta sus piernas ya desnudas, comienzo con cierta vergüenza a masajear la suave y plana zona, mis manos temblando solo atinan a acariciar de forma repetitiva esa zona, y ella aun suspira en mi hombro, busco su cálida y dulce boca para besarla nuevamente, su adictiva boca me besa de forma apasionada y lenta, mis dedos se introducen nuevamente y suelta un jadeo sorprendido, le sonrió retadoramente y nos besamos.
Acaricio con mis piernas las suyas y nos entrelazamos, le acaricio con mis mojados muslos y ella me besa, acercamos nuestras intimidades y deseosas comenzamos un a danza apasionada, nuestros gemidos se alzan de tono y nos sabemos sonrojadas, pero la libido ya gano la batalla y simplemente nuestra liberación nos fue consedida luego de un largo y alto gemido, el beso sello nuestra noche, pero una duda no salia de mi cabeza.
-Yuu... Nosotras... ¿que somos nosotras?... ¿esto es amor... O solo pasión?-siento su cuerpo tensarse, y rápidamente se viste con el pijama, al levantarse un pesar llena ki pecho y mis lágrimas cristalizan mis ojos, un nudo se hace en mi cuello, ahogo un sollozo.
-buenas noches, (tu nombre)-se sube al camarote y dinero el frío de la noche, soledad me rodeo, no de forma física, pero se que esto que siento en lo pecho es abandono, me ha rechazado de la forma más sutil y delicada posible, pero es un rechazo. Mi cuerpo convulsiona de forma entrecortada y me cuesta ahogar mis sollozos, gruesas lágrimas bajan mis mejillas... No puedo más y me levanto, vistiendo mi pijama que me envuelve con su dulce y doloroso olor, cruzó sin el clásico temor el pasillo para llegar a la cosina, y hay pongo la tetera, son las tres de la mañana y se que el sueño ma ha abandonado por completo.
En el baño observo mis ojos enrojecidos, mis labios hinchados y temblorosos, y no puedo evitar pensar cuan patética me veo, el agua solo me refresca poco, y el papel higiénico limpia el rastro del crimen cometido, siento la frialdad del ambiente y voy a buscar un abrigo a la ha citación cuando escucho un susurro:
-mierda-es su voz y entiendo como se ha de sentir, yo me siento igual y se que la pregunta a sido un error garrafal, pero nada se puede hacer para cambiar el presente...
Abro la puerta y hago como si no oí nada, salgo igual de rápido y se...
Que no me pude equivocar más con mi anterior pensamiento...
Fue la peor noche para ambas...