Ronald le había explicado al bibliotecario sobre el posible patrón en las muertes que ocasionaba la calamidad, y que tal vez, solo tal vez, puedan descubrirlo y usarlo a su favor para evadir a la muerte que les perseguía. Tanto a Danny como a Jonathan, no les esperanzaba mucho la idea, pero intentarlo no les haría daño, cualquier intento que les acercara a una solución les ayudaría, más ahora que debían mantenerse a salvo durante tres meses. El hombre de cabellos grises y lentes se acerca a su escritorio, tomando papel y lapicera azul y roja. Vuelve con los dos chicos, sentándose en frente y viendo a Ronald con la lapicera azul en mano.
Jonathan: Muy bien, empecemos- Ronald asiente, Danny aún dibujaba.
Ronald: Entonces comenzó en Mayo-
Jonathan: Con exactamente un mes de retraso- dice mientras escribe.
Ronald: Los primeros fueron Tiana y Jimmy-
Danny: Fueron las dos muertes de Mayo- menciona el menor, con voz lúgubre y aniñada.
Jonathan: Después, la hermana de Jeffrey-
Ronald: Suzie, y también Harley-
Danny: Las dos muertes de Junio-
Jonathan: Luego el señor Kingsley, siguiéndole Jerry y Zack-
Danny: Las tres muertes de Julio-
Ronald: Y…el mes anterior, primero Marlon-
Jonathan: Curtis-
Ronald: Hannah y Lilly-
Jonathan: Finalmente, Spike- termina de anotar los nombres y apellidos en la hoja con tinta azul.
Danny: Las cinco muertes, de Agosto-
Jonathan: Bien, entonces, un total de doce muertes hasta ahora, fueron dos en Mayo y Junio-
Danny: Sin embargo, aumentaron a tres en Julio-
Jonathan: Y el mes anterior…-
Ronald: Aumentaron hasta cinco-
Danny: … ¿y qué?- dice el niño de parche blanco.
Jonathan: Pues…oh esperen- al instante toma la lapicera roja, y empieza a hacer algo en la lista que acababan de hacer, muy rápidamente bajo la atenta mirada del de cabellos marrones, y ahora, también llamando la atención del peli negro, termina de trazar, y le extiende la hoja a Ronald -¿esto te dice algo?- el chico toma la hoja, viendo.
Ahí escrito el hombre resaltaba en rojo, el hecho de que las muertes efectivamente aumentaban con el paso de los meses, las primeras dos muertes de Mayo tuvieron que ver con los Carpenter, las dos muertes de Junio tuvieron que ver con Jeffrey, y tres muertes de Agosto tuvieron que ver con Xavier, sin quitar el hecho de que la familia Stuart se vió involucrada también. Ronald esto lo tenía claro, pero no sabía a qué se refería.
Tiana Carpenter (Mayo 30, Accidente)
Jimmy Carpenter (Mayo 30, Accidente)
Suzie Dendes (Junio 10, Accidente)
Harley Marquez (Junio 11, Enfermedad)
Kingsley Jewels (Julio 14, Suicidio)
Jerry Peeks (Julio 21, Enfermedad)
Zack Bell (Julio 22, Suicidio)
Marlon Mantony (Agosto 1, Enfermedad)
Curtis Horton (Agosto 6, Accidente)
Lilly Collings (Agosto 7, Accidente)
Hannah Morrison (Agosto 7, Accidente)
Spike Stuart (Agosto 8, Accidente)
Ronald: ¿Esto qué significa?- Jonathan se levanta de su asiento, cruzándose de brazos.
Jonathan: Después de que…comenzara la calamidad, al igual que tú, muchos otros estudiantes buscaron algún tipo de patrón en los fallecimientos del año por la calamidad- cierra los ojos –a partir de eso, surgieron varias teorías-
Ronald: ¿Teorías?-
Jonathan: Sí, como que cada mes moría un grupo de amigos, o una familia, o incluso por la edad o alfabéticamente, suena algo ridículo, ¿no crees?-
Ronald: Un poco-
Jonathan: Bueno, a lo que voy con esto es que hubo una teoría más resaltante que las demás, la del estudiante sufrido-
Ronald: … ¿y cómo…?-
Danny: La teoría indica…- habla el niño de repente, tomando la atención de los dos –que aleatoriamente, si “eso” tiene ganas por así decirlo, escoge a un estudiante de la clase 3, ya sea simplemente porque sí, porque rompió las reglas, o porque personas cercanas a él se enteraran de la calamidad, cosa que nunca debe pasar, una vez que se escoge al estudiante, la muerte empieza a llevarse a sus seres queridos o cercanos-
Jonathan: Exactamente-
Eso explicaba mucho. Ronald recuerda perfectamente aquel día, en el que Jimmy le gritó que no mencionara a Danny, al hacerlo, técnicamente rompió la regla de mantener a un estudiante inexistente, causando que la calamidad se llevara primero a su madre, y luego a él. Y con la horrible culpa que le causaba, también se dio cuenta que fue un terrible error involucrar a Suzie, al hacerlo hizo que la calamidad atacara a Jeffrey, mató a su hermana y luego a su novio Harley, ahora todo el tiempo ese chico se sentía devastado, y le destrozaba pensar que pudo haber sido su culpa. Otra cosa le llamó la atención, la siguiente persona sufrida, sería Xavier, pues Curtis era su persona cercana, más aun, Hannah y Lilly también, pero eran enemigos, nada cercanos en el sentido de cariño como los demás, eso significaba que otra cosa debió hacer ese rubio para que las dos se involucraran, sería posible, ¿Qué Xavier les haya revelado sobre la calamidad aun sabiendo que podría poner sus vidas en riesgo?, ¿llegaría a ser tan desgraciado?
Danny: Sé lo que piensas- voltea a ver al niño –Xavier involucró a las dos a propósito, creyendo que todo era un asunto de poca importancia, ahora, está destinado a sentir la culpa-
Eso explicaría el hecho de haberlo visto en la escena del accidente que mató a Hannah y Lilly con los ojos cristalizados, significaba que él mismo sabía que tenía la culpa, quizás no tenía tales intenciones, pero al ver que se volvió realidad, no le sorprendería verlo quebrado.
Ronald: Entonces…el estudiante sufrido es real, ¿cierto?-
Jonathan: Lamentablemente, parece que sí, podría ser coincidencia, pero las probabilidades de eso son muy bajas-
Ronald: Lo sé-
Jonathan: Ya que Spike fue el último en fallecer, significa que Xavier ya no es el estudiante sufrido-
Ronald: Entonces si alguien más muere, lo cual espero no pase, debemos buscar con quien se relacionaba de la clase, y procurar proteger a sus personas más cercanas y familiares-
Jonathan: Es lo más razonable, pero como dices, esperemos no pase- dice mientras se retira a su escritorio al fondo de la biblioteca.
Ronald mira el cuaderno de Danny, notando que ya acababa el dibujo de ese ángel, lo curioso y extraño, era que las alas no estaban cubiertas de plumas blancas, eran solo huesos afilados oscuros como garras o patas de araña, una apariencia escalofriante a su parecer, Danny detiene el lápiz sobre el papel.
2:30 de la tarde, mismo día, 12 de Septiembre del 2008
Ronald y Danny estaban sentados en una banca del jardín de la escuela, simplemente disfrutando del paisaje y el aire fresco, el de cabellos marrones usaba su gorra aunque el sol ya era tapado por las nubes, mientras que las hebras oscuras del menor volaban con las repentinas brisas que de un momento a otro llegaban. Aún quedaba una media hora libre, los demás deberían estar o en el aula o recorriendo la escuela, sabía que sus amigos seguirían en la azotea, desde que decidieron reunirse en ese lugar ya era algo cotidiano ir ahí para los seis, no quería que Danny dejara eso, lo necesitaba cerca, no sabía muy bien por qué, pero así era lo que sentía.
- Oye…antes de ser, el estudiante “inexistente”, ¿eras igual de solitario?- pregunta sin ver a Danny.
- …sí-
- ¿No tenías algún amigo?-
- …no…a veces Finn o Jimmy se me acercaban…pero no los llegué a considerar más que compañeros de aula-
- Pero, ¿no te sientes muy solo?, creo que a nadie le debe gustar mucho no tener compañía, no tiene con quien hablar, ni a nadie que te escuche-
- Muchas veces me siento así, fuera de la escuela, así que aquí no es muy diferente, no muchas personas valen la pena para que uno las escuche-
- Ah…yo no te hago sentir acompañado ¿cierto?- exclama con algo de tristeza, sin siquiera haberse dado cuenta.
- …no sé…estando contigo…me siento muy tranquilo…….tanto que siento que no es necesario hablar para estar a gusto…………es raro- observa el cielo, que con el paso del rato se volvía nublado.
- Creo que conformo con eso- sonríe, antes de seguir la vista del pequeño hacia el firmamento.
- ¿Tú tienes muchos amigos?-
- No diría muchos, me llevaba bastante bien con mis compañeros en la escuela privada de Sidney en Australia, pero solo unos pocos era amigos verdaderos-
- Ah… ¿les echas de menos?-
- Mmm…algo, pero ahora estoy bien, tengo amigos aquí también-
- ¿Quiénes?-
- Pues Jerome, Yuushin, Felix, Ayden, Antonio, Brandon, Luciano, Sunny, Keith, supongo que Ian…y tú-
- Son muchos para ser amigos de total confianza-
- Lo sé, solo Jerome, Yuushin, Felix, Ayden y Antonio son cercanos, también tú, a pesar de que no hablamos mucho-
- Ahora estamos hablando, ¿no?- Ronald suelta una pequeña risa.
- Creo que sí-
- …no es tan malo a veces-
- ¿Cómo ahora?-
- …sí…tal vez-
- Ya veo, me alegro-
- ¿Por qué?-
- Porque creo que te agrado un poco- sonríe inconscientemente, Danny voltea a verle unos segundos, antes de volver a mirar el cielo.
- Ah…….me alegro- repite.
De manera rara, algunas nubes se disiparon, dando paso a algunos rayos de sol, que iluminaron tenue pero bellamente el jardín, un ambiente pacífico, y tranquilo para los dos. Pero Danny se sentía igual, esa tranquilidad y calma, no se compraba en nada cuando estaba cerca del chico de gorra azul, para otros, era el primero que rompió la regla, pero para Danny, era el primero que notó su existencia. La calma reinaba en aquellos corazones, como en la infinidad de tonalidad agua sobre la ciudad de Empher.
2:55 de la tarde, mismo día, 12 de Septiembre del 2008
El chico de cabellos marrones caminaba tranquilamente por los pasillos de la escuela hacia el aula, solo faltaban cinco minutos para que acabaran las clases, así que mejor ir por sus cosas para no tener que hacerlo a última hora, Danny había ido a la biblioteca a recoger sus cosas, las había sacado iniciando el segundo receso pues planeaba quedarse ahí a dibujar, pero Ronald le cambió los planes, no de mala manera claro. Mientras subía las escaleras recordó que Danny no llegó a responderle su pregunta sobre quien le había ordenado alejarse de él puesto que Jonathan entró y terminaron cambiando la conversación, no le culpaba obvio, pero eso de que no se le acercara no sonaba nada lindo algo así, le volvería a peguntar más tarde. Había quedado en ir a casa con Jerome, Yuushin y Felix, Ayden y Antonio debían toma otro camino, supuestamente Dimitri podía acompañarles también pero el peli azul le había contado que desde ayer se quedaría más tiempo en la escuela y que debería irse solo, sospechaba que se quedaba a hablar con Luciano e Ian, buscando alguna contramedida alternativa. No muy conforme Jerome aceptó, Ronald no tenía nada en contra del chico de lentes, pero la inquietud le llegaba, pues no intercambiaban palabras para nada, y desde lo del peli rosado, sentía algo de culpabilidad, seguía sintiendo algo de remordimiento, ya muchas veces le habían repetido, “no es tú culpa”, no entendía porque no podía creerlo. Se encontraba tan sumergido en sus propios pensamientos, que no detectó los pasos que se acercaban a él.
Al subir terminar de subir al segundo piso, voltea para tomar la escalera hacia el tercero, pero algo le sorprende, una mano le cubre la boca para evitar que gritara y la otra le toma el brazo fuertemente. Sin poder evitarlo termina siendo arrastrado hasta atravesar una puerta, la del baño, en todo ese trayecto no pudo ver de quien se trataba, solo veía el pasillo vacío que dejaba. Al estar dentro del baño es soltado de manera algo brusca provocando que su gorra se soltara de su mano cayendo al suelo frío, seguidamente escucha el sonido del seguro de la puerta, alarmándose un poco, además de que las luces estaban apagadas y solo la luz que entraba por la pequeña ventana de la pared iluminaba.
“¿Qué diab…?” antes de poder decir algo un cuerpo lo aprisiona contra el muro, pero no de la manera que esperaba, una mano se coloca en su pecho, la otra junto a su cuello, y el cuerpo contrario se pega lo más que puede, con la pierna entre las de Ronald, de manera algo provocativa. “¿Qué…” al ver mejor, mientras sentía la respiración contraria, se encuentra con ese rostro, Xavier. El rubio le tenía aprisionado, y sin embargo, su sonrisa era la de una traviesa, y sus ojos tenían esa mirada felina decisiva, le ponía nervioso.
- ¿Xavier?, ¿qué estás…?- el chico le cubre la boca con su mano.
- No digas nada ¿sí?, así es más divertido- descaradamente eleva su rodilla, chocándola contra la parte baja del de cabellos marones, cosa que inevitablemente le hace estremecer.
- …- agita la cabeza hasta que Xavier retira su mano –¿qué te ocurre?- por fin logra formular una pregunta, Xavier sonríe, acercándose a su rostro.
- No mucho, solo quiero un poco de diversión- sabía a qué se refería, por algo había cerrado con seguro.
- No gracias, ¿por qué no haces esto con Trevor?- el rubio chistea.
- Me aburre, antes era divertido porque eran dos- dice refiriéndose a Curtis, cosa que hace enojar a Ronald –no me conformo solo con uno, ¿no quieres unirte también?- empieza a meter su mano por debajo de la camisa del chico –cada vez que quieras vienes conmigo-
- No me interesa, déjame-
- Por favor, los dos sabemos que siendo varones tenemos necesidades, no me digas que tú eres la excepción- se acerca al oído izquierdo de Ronald, susurrando –puedes hacerme lo que quieras- le muerde el lóbulo incitándolo.
Ronald no aguantó más de eso, no de la excitación porque no lo estaba para nada, con sus fuerzas eleva los brazos y fuertemente aleja el cuerpo del rubio lejos de él, tanto que este termina chocando contra los fregaderos algo adolorido y confundido.
- Si intentas hacer que sea el reemplazo de Curtis pues olvídalo, no me interesa para nada ser un juguete para ti, y pues fíjate que no, no tengo necesidad de hacerlo con el primero que se me insinúe…y mucho menos de ti-
Xavier se queda callado, y con los ojos abiertos. Ronald se agacha tomando su gorra del suelo, sosteniéndola en mano, se gira solo para darle una última mirada al rubio y decir “si tan poco te importa Curtis, pues no sé si alguien llegue a quererte” se coloca su gorra, abre el seguro de la puerta y se va sin decir más. Xavier una vez solo, se recuesta contra la pared soltando un suspiro pesado, deslizándose hasta quedar sentado sobre el piso, abrazando sus piernas, odiaba cuando lograban sacarle emociones de esa manera, la tristeza, y esa horrenda ansiedad otra vez más le regresó.
3:16 de la tarde, mismo día, 12 de Septiembre del 2008
Ronald sacaba de su casillero el cambio de calzado obligatorio, cambiándoselos rápido antes de volver a cerrar el pequeño cubículo, a su lado le esperaba Danny, con su carita neutral de siempre, y detrás Jerome y Felix que igual terminaban de cambiarse el par de zapatos de la escuela por los de calle.
Ronald: ¿Antonio y Ayden ya se fueron?- pregunta mientras esperaba a los otros dos que guardaban algunos libros en sus casilleros.
Felix: Sí, hoy tienen trabajo de voluntariado- responde, viniendo de esos dos le parecía algo lógico que fueran serviciales.
Ronald: ¿Qué hay de Yuushin?-
Jerome: Se fue antes- cierra el cubículo recostándose contra el muro de casilleros –tenía práctica de gimnasia y el tal Austin le llamó- recordaba a ese chico, pero no entendía porque el peli azul le mencionó con ese tono.
Ronald: Mmm…bueno-
Felix: Listo- termina de dejar sus materiales y cierra con la pequeña puertita de metal -¿nos vamos?- Ronald asiente.
Los cuatro salen del lugar, el sol ahora volvía a ser ocultado por las nubes, el frío no llegó, a diferencia de la apariencia algo helada de la ciudad y las calles. En el trayecto fueron hablando, de cualquier cosa, no querían tocar el tema de la calamidad, por lo menos por un rato, Danny en ese rato caminaba al lado del de cabellos marrones, sosteniendo su pequeña mochila negra con sus manitos, y viendo el cielo con sus ojo avellana vivo, cuanto desearía poder apreciarlo con los dos ojos, nada podía hacer, quejarse para él no servía de nada, se conformaba con eso.
Jerome: ¿Matthew y Connor?, me vomito- bromea luego de que Ronald le contara lo que vió hace poco.
Felix: La verdad era un poco obvio, últimamente se la pasaban muy juntos, me alegro por Matthew, quizás su humor mejore ahora-
Jerome: Si sigue soñando- rueda los ojos –cambiando de tema, tres meses ¿eh?- Ronald asiente.
Ronald: Sí, como nos dijeron, la empresa de buses que nos daría el transporte no funcionará sino hasta diciembre, ¿pero no podemos hacer que otra empresa nos lleve?-
Felix: No hay otra empresa, solo es una aquí en Empher, lo peor es que también controla las salidas y entradas de la ciudad, ya sea fuera de la misma, o solo a la zona de bosque más lejana, si no funciona bien eso significa que siendo estudiantes menores de edad no podremos ir fácilmente ya que esa empresa también verificaba permisos e identificaciones-
Ronald: ¿Tanto hace una sola empresa?-
Jerome: Empher es una ciudad pequeña, no necesitamos más de una que controle lo principal-
Felix: Hay otras secundarias, pero no tienen la suficiente garantía para llevar a toda una clase-
Ronald: Oigan, si ese lugar al que vamos es un bosque, ¿no significa que estaremos a salvo en ese sitio por estar fuera de la ciudad?- los dos niegan.
Danny: Según la ubicación de ese lugar, no se encuentra en la ciudad, pero si en el bosque de Empher, técnicamente conforma parte del territorio, por desgracia-
Ronald: Ah, entonces también tendremos que tener cuidado al ir- los otros dos asienten.
Danny: En realidad deberíamos tener cuidado justo ahora…- dice llamando la atención de los otros tres -…la calamidad no se detiene aún…fácilmente podría hacer una jugada ahora, y enviarnos a los cuatro a la otra vida- esto hizo estremeces a los tres de la misma forma, sonaba muy fantasioso, pero era cierto.
Felix: Tiene razón- baja la cabeza.
Jerome: Oye Felix, ¿Catherine te ha dicho algo más en estos días?- el peli gris niega.
Felix: No, y prefiero que sea así, ya que la involucré en esto al hacer que nos diga sobre Andrew, sería muy peligroso hacer que recuerde más y arriesgarla a convertirse en otra de las muertes de la calamidad-
Ronald: Es lógico-
Apoya el chico, por desgracia sabía bien que él involucró a Suzie en todo eso desde el principio, pero en ese entonces no sabía que el simple hecho de hacer que alguien averigüe sobre la calamidad también le ponía en peligro, si lo hubiera sabido jamás le hubiera pedido información sobre el niño del parche, más bien sobre Danny, tenía la idea de que él haya sido el culpable de convertir a Jeffrey en el estudiante sufrido, si resultaba cierto, no sabría cómo perdonarse a sí mismo. Pero aceptaba que había sido un total y gran error el que no lo informaran sobre la calamidad desde un principio, tal vez porque pensaron que no les creería, pero intentar, nuevamente repetía, no hacía daño alguno, sea como sea, no culpaba a nadie, aunque no sabía si culparse a sí mismo.
Jerome: Viendo el lado bueno…hasta ahora han pasado 11 días y medio de septiembre y nadie ha muerto aún- menciona.
El vidrio se rompe en pedazos…
Jerome: Quizás nadie muera este mes, y la calamidad pare-
Los gritos de la gente…
Ronald y Danny, no creían eso, aunque ambos lo desearan.
El celular de Felix empieza a sonar. Los cuatro se detienen en medio de la acera viendo al peli gris, quién mete su mano al bolsillo, mira la pantalla, “llamada entrante: Papá” sentía nervios, con la mano temblándole, contesta. “¿Hola?, ¿papá?” dice con la voz angustiada, Ronald y Jerome se miran, para que luego el de cabellos marrones conectara su vista con Danny, quien extrañamente, también sentía unos raros nervios.
“Hijo…ven rápido, ocurrió un accidente”
Felix siente, como su corazón empieza a latir del miedo.