Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

The Extra, The Class 3-3 por kpoploveever

[Reviews - 147]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Bueno, aqui esta el segundo capitulo del fic, este capi no es muy largo en realidad, es algo corto, es como un capitulo especial, el tercer capi lo subire mañana o mas tardado pasado mañana

Ojala les guste

La pequeña ciudad empieza a iluminarse, pasando poco más de las cinco de la mañana, el cielo tenía una capa de neblina opaca, que obstaculizaban el paso de algunos rayos del sol, pero la madre naturaleza regala una sábana de luz sobre algunas partes del lugar, pero era nada, así como el sol daba la cara nuevamente, la gente lo hacía también al levantarse y despertar en un nuevo día en Empher. La ciudad era rodeada por unas cadenas de montañas, en las cuales había autopistas, que eran la única forma de salir al mundo exterior, los caminos, carreteras y demás formaban la imagen parecida a una araña deforme desde el cielo, con un río atravesando todo, hasta acabar en una presa al final, las plantas no eran escasas, mucho menos los pequeños animales que convivían con las personas, edificios y casas se elevaban sobre la tierra pavimentada, pero cada uno con su propio pedazo de naturaleza, combinando árboles y flores en un bello paisaje, junto a las parvadas de pequeñas aves que cantaban, la brisa fresca y el baile de las hojas, podría decirse que esa ciudad, era como el vivir en lo natural al aire libre.

 

A un lado de la agraciada ciudad, una pequeña pero acogedora casa estaba construida, no era mucho, pero muy linda, paredes color cremas, techo de madera con calaminas encima, como en esos lugares llovía de vez en cuando, era normal ese tipo de estructuras. Una gran mampara de vidrio tipo ventana estaba a cada frente de la casa, dando vista interna, a un lado había un bello árbol de grandes ramas y hojas, al lado estaba estacionado el auto de la familia color rojo y de un modelo algo viejo pero útil, y finalmente el jardín que cubría tanto la parte de adelante como la de atrás de la casa, estaba compuesto por arbustos en forma de bolas decorados con flores de todos los colores, helechos bastos de distintos tonos de verde, uno que otro árbol pequeño, varios tipos de flores, comunes y exóticas, varias piedras formaban una especie de cerco alrededor de ambas florestas y rosaledas, caminos hechos con piedras planas también decoraban el ambiente, todo para serenar el entorno de la vivienda. Pero la atmósfera apaciguada se esfuma al escucharse una voz, una punzante y algo torpe, lo que era normal.

 

-          ¡Hola!, ¡Chip!, ¡Hola!...-

 

La pequeña ave de tonos oscuros y ojos de canica, con plumas amarillas y una bella presencia mueve su cabecita dentro de su pequeña jaula, posándose sobre el diminuto columpio que tenía en su pequeña morada, el ave curiosa seguía repitiendo sus movimientos, hasta que nuevamente vuelve a entonar su no tan común vocecita.

 

-          ¡Hola!, ¡Chip!, ¡Hola!... ¿Cómo estás?-

 

Pregunta sin siquiera saber lo que dice, pero orgullosa de poder imitar la tan peculiar habla que oía decir a sus dueños.

 

-          … ¡buenos días!... ¡buenos días!-

 

El sonido obstinado de un teléfono empieza a hacerse presente en medio del ambiente, quitándole el lugar al pájaro en hacer ruido. El ruido proviene de uno de los cuartos del único piso de la casa, el reloj encima del escritorio marcaba, 5:28 de la mañana, 6 de Mayo del 2008, el bullicio del pequeño aparato móvil por fin se detiene, y el cuerpo cansado del chico que dormía en la cama se sienta para empezar a hablar, aún con algo de cansancio y los ojos cerrados por el golpe de la inesperada de la mañana a tan tempranas horas del día. El cuarto no era la gran cosa, algo normal, una cama a un lado, un escritorio con silla, lámpara, una pequeña laptop, que parecía no ser usada muy a menudo, y varias cajas a un lado que faltaban desempacar y ordenar. Ronald soltó un bostezo al aire, abriendo ligeramente sus ojos para ver la gran ventana que tenía a un lado, la luz y la sombra de las hojas de los árboles estaban plasmadas en la tela blanca, así que era muy temprano, y eso le bastaba a él para quejarse de no poder dormir un poco más. Coloca el teléfono en su oído.

 

-          ¡Hola!, buenos días, ¿cómo te va campeón?- pregunta la voz masculina y alegre del otro lado de la línea. Ronald se toma unos segundos para responder.

 

-          Buenos días…-

 

-          ¿Qué tal hijo?, son las dos de la mañana por aquí, y antes que estaba tan caliente ahora me estoy muriendo de frío- exclama divertido.

 

-          Ah bueno sí, ¿ocurre algo?-

 

-          No, tranquilo, ¿hoy empiezas a ir a la escuela no?, mira que te llamo para desearte suerte, ¡agradece Ronald! Jajaja-

 

-          Oh claro, gracias-

 

-          ¿Estás bien?, ¿Qué tal las cosas desde que saliste del hospital?-

 

Pregunta con clara preocupación de un padre por la salud de su hijo, pero el sonido por el teléfono empieza a ser irregular y sonar bastante extraño distorsionando la voz del hombre, “¿me oyes?... ¿Ronald?...”, el chico antes esto se levanta de su cama, algo pesadamente pero ya despejándose un poco más y quitarse el sueño de golpe, así siempre era, “la señal es mala, espera”, estirando un poco sus brazos, empieza a caminar hacia la puerta del cuarto, saliendo y dejando notar la camisa y pantalón de dormir color celestes. Luego de cerrar la puerta se encuentra con el pasillo con la gran mampara a un lado, abriendo una de las puertas corredizas para dejar entrar mejor la señal y de paso que el aire mañanero terminara el trabajo de despertarlo.

 

-          Me siento bien pa, no te preocupes- responde mientras abre la puerta del panel.

 

-          Sí, un pulmón colapsado no es el fin del mundo jaja además yo también tuve uno cuando era niño-

 

-          ¿En serio?, no lo sabía- habla curioso dejando la puerta a medio abrir.

 

-          Nunca te lo había dicho, y no quería que te dijeran que es hereditario-

 

-          ¿Lo es?- termina de abrir la puerta quedando de pie frente al gran jardín trasero de la casa.

 

-          En realidad lo tuve dos veces, pero después ya nunca más jajaja así que si es hereditario, ya está hecho-

 

-          Eso espero jeje-

 

-          Piensa en eso como que ya es del pasado, porque lo es, solo ve y disfruta de tu vida Ronald-

 

-          Claro, gracias papá-

 

-          Ese es mi chico jajaja, bueno salúdame tus abuelos y a tú tía por mí-

 

-          Si papá, que te valla bien-

 

-          Por supuesto hijo, ¡aish genial ahora hace mucho calor!- y se corta la llamada.

 

Ronald mira la pantalla de su celular, efectivamente la llamada se cortó, lanza un suspiro al aire, antes de dejar el aparato a un lado y sentarse en frente del espacio libre de la mampara para admirar el gran jardín abrazando sus piernas mientras pensaba, claro que su mente tenía muchas cosas en fila para analizar, debería pasar un año de esa forma, si no fuera por su condición médica hubiera respondido de una manera más cálida a su padre, pero las órdenes habían sido claras, nada de agitarse ni de hacer esfuerzos demasiado agotadores, no era buena para su saluda, y eso lo tenía muy claro, pero odiaba estar así de quieto. De repente escucha de nuevo esa vocecita chillona.

 

-          ¡Hola!, ¡Chip!, ¡hola!- se escucha de nuevo la voz del ave, algo molesta pero tierna.

 

-          Chip es tu nombre ya to le dije cien veces- le dice al pájaro.

 

-          ¡Alégrate!, ¡Anímate!-

 

-          Jaja claro, gracias Chip- le responde al ave divertido y con una sonrisa.

 

Pov’s Ronald

 

Jajaja a veces pienso que esa ave me lee la mente, y pues tiene razón en cierto modo, el animarme o alegrarme es bastante difícil, tampoco es que esté deprimido o algo por el estilo, es que el sentirme vivo y feliz es salir afuera, correr saltar trepar los árboles que me encuentre en el camino, podrá parecerles aburrido de seguro, pero eso ha sido toda mi vida, desde siempre me ha gustado eso, y pues los planes que tenía este año en una ciudad tan al natural como esta se vieron aplastados al caerme enfermo por este tonto pulmón, bueno…creo que de todas formas lo necesito para vivir así que no es tan tonto. Al menos ese pájaro me anima un poco, se llama Chip, se lo he dicho miles de veces desde que llegué y sigue como siempre, él es una Gracula Religiosa, y como ven pues puede hablar como los papagayos, por eso a mis abuelos les gusta tanto, además de su apariencia graciosa, parece que tiene un collar amarillo jaja pero es tierno así que no importa.

 

En fin, el ánimo es lo que más me falta ahora, pero puedo fingir sonrisa como cualquiera y ya, no debe ser tan difícil, ah…desearía que mi padre estuviera aquí, lo extraño, además con él siempre me divierto, a pesar de no hacer algo arriesgado, el simple hecho de tenerlo conmigo es bastante, mi madre no es menos que él, pero la verdad nunca hemos hecho muchas cosas juntos, o sea jugar, ir a pasear, claro que a veces si se toma un tiempo para estar conmigo, ambos son muy especiales, pero para estar algo mejor con esta situación los necesito conmigo, ¿ya que le voy hacer?,  también tengo a mi tía, pero no comparto mucho con ella, y no recuerdo mucho cuando era pequeño que era el tiempo cuando pasaba más tiempo a su lado. Dejando de lado toda esa necesidad, hoy recién empiezo mis clases en Empher del Norte, no creo que me valla mal, siempre me adapto a cualquier cosa, bueno, menos a estar tan quito y sin nada que hacer, pero mi mamá y mi tía me aconsejaron bastante, como esta sería mi primera vez en una escuela pública están preocupadas de que no me adapte.

 

 

“Otra cosa que necesitas saber es que siempre debes respetar las reglas de la clase” me dice mi tía, mientras yo y mi madre estamos sentados en el sillón doble de la sala tomando el desayuno. Le respondo con un “está bien” aunque no estoy muy seguro de a que se refiere “las cosas podrían ser diferentes en Sidney allá en Australia, pero aquí debes saber que lo grupal, es más importante que lo individual sí?” bueno, eso no creo que sea un gran problema, puedo manejarlo, solo necesito agradarle a la mayoría y ya, ¿no?, no puede ser tan malo, “además sabes que estaremos ahí contigo para apoyarte en lo que necesites cariño, tu tía y yo trabajaremos ahí” bueno, mi mamá consiguió trabajo como profesora en la clase de medicina de la escuela, y mi tía será asistente de mi profesor y coordinadora de actividades, no sé si es algo bueno o algo malo que mi mamá y mi tía estén en el mismo ámbito social que yo, ni modo, siempre está la opción de decir “no la conozco” jajaja es en serio, creía que eso era todo, hasta que mi tía vuelve a hablar “Ah, otra cosa que necesitas saber es…”

 

-          Ronald!- la voz de mi abuela me saca de mis recuerdos, haciéndome volver a despertar –¡el desayuno está listo!- me avisa, aunque antes de poder encaminarme otra voz conocida me habla, y no no es el pájaro otra vez.

 

-          Desayuno, dice tú abuela, Ronan- me dice la voz cansada de mi abuelo, su cuarto está hasta el otro lado, que raro, parece que ya lleva un buen rato despierto.

 

Me asomo por la puerta corrediza del cuarto en el que está el cual es una habitación con un santuario, para mi hermano, que ya falleció hace mucho, a mis abuelos les afectó mucho, en especial a mi abuelo Darío, quien ya lleva cerca de un año con su demencia senil, me da mucha pena eso, pero supongo que es algo inevitable, que bueno que mi abuela lo sigue amando de la misma forma, hasta creo que más. Mi abuelo esta arrodillado en un cojín aun con su ropa de dormir en frente del santuario, con la cabeza gacha, seguramente otra vez entristeció por recordar lo de mi hermano, eso no es bueno para su salud, es la razón por la que a veces me dice Ronan, en lugar de Ronald, así se llamaba mi hermano.

 

-          Buenos días abuelo-

 

-          …buenos días… ¿vas de nuevo al hospital hoy?- pregunta con su voz, notablemente decaída.

 

-          Am no, ya me dieron de alta y pude salir, empiezo la escuela hoy-

 

-          Ah…la escuela…ya estás en la secundaria… ¿eh?…ya veo…ya veo…me alegro por ti-

 

-          Bueno, estoy en el 9no grado ahora, o tercero de secundaria como dirían en otro lugar, estaré en preparatoria el año que viene-

 

-          …- él se queda callado nos segundos, hasta que noto como empieza a temblar un poco –si tan sólo eso no le hubiera pasado a Ronan…-

 

Ah…otra vez con eso…

 

-          Ronald!, el desayuno!- me repite mi abuela.

 

-          Ya voy!- respondo dejando a mi abuelo solo, creo que tiene que estarlo a veces.

 

¿Por qué?, Chip, ¿por qué?- oigo decir a Chip antes de irme.

Notas finales:

Si se que es muy pero muy corto, ah y por cierto el yaoi y el shota empiezan recien en el siguiente capi que como dije subire mañana o pasado mañana

Gracias por leer

PS: Si no les gusta el fic lo dejo no se preocupen :)


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).