Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

100 pasos. por imhangover

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

El final feliz que tod@s queriamos... Aclaro que también tendrá un final alternativo.
~Enjoy it~.

Hidan como siempre llegaba en el momento justo. El tráfico había mermado por fin. Sasori corrió, tomó a Gaara entre sus brazos, y lo llevo al auto de Hidan.
Los cuatro fueron al hospital. De inmediato atendieron a Gaara.
Hace unas horas no tenían noticias. Deidara estaba histérico. Se sentaba, se paraba, daba vueltas por la sala de espera. En un momento Sasori no aguanto más el movimiento de Deidara. Lo tomó de un brazo y lo atrajo a su cuerpo. Deidara cayó en las piernas de Sasori.
-Todo va a salir bien.-Dijo mirando a su… digo, a Deidara a los ojos.
-¿Me lo prometes?
-Te lo juro.-Sonrió y abrazó al rubio, este le correspondió el abrazo.
Llegó una enfermera a la sala.
-¿Los familiares del señor Sabaku no Gaara?
-Nosotros-dijo Sasori mientras se acercaba.
-Su estado es grave. Pero sin ningún riesgo vital. Podrá irse dentro de una a dos semanas si todo va bien. Hicieron muy bien en traerlo inmediatamente, un par de minutos más, y la realidad sería otra.
-Señorita, ¿Podemos verlo?
-Pasen con cuidado, está dormido. Habitación 258.
-Gracias.
Sasori, Hidan y Deidara entraron con cuidado a la sala, sin hacer ruido alguno. Pero el muy… idiota de Hidan, se tropezó con quien sabe que (Una hormiga cabezona probablemente), y quedó con la cara estampada en el piso.
Al menos no despertó a Gaara.
Deidara trató de aguantar la risa, pero era imposible.
-¡VISTE COMO SE CAYÓ!- Vociferaba mientras se tomaba el estómago, que a estas alturas le empezaba a doler por reírse tanto.
-¿D-Dónde estoy?
Deidara en un segundo dejó de reírse y se acercó a Gaara.
-En el hospital.
-¿Qué hago aquí? ¿Y ustedes que hacen aquí?
-Rasa te disparó, ¿no lo recuerdas?-Dijo Sasori.
Gaara se quedó en silencio por unos segundos.-Si, ahora lo recuerdo mejor.
-Me salvaste la vida Gaara.
-Tu a mí también ¿O se te olvida?
El rubio como pudo abrazó a su amigo.
La enfermera entró a la sala.
-Se acabó el horario de visitas, por favor, retírense de la sala.
-Pero…
-Nada de pero, vámonos rubia. Que estés bien rojito, nos vemos mañana.-Hidan jaló a Deidara para que saliera de ahí.
-Adiós…
Sasori, Hidan y Deidara volvieron al  auto.
-No son las 12 todavía y ya arruinamos una boda, casi matan a alguien y para variar, estamos con traje los 3…-Comentó Hidan.
-Creo que ha sido uno de los días más raros que he vivido.
-Dei…
-¿Qué pasa?
-Te quiero. ¿Vuelve conmigo?
-S-Sasori… Y-yo, o sea, no, digo, si, eh…
-No tienes que hacerlo ahora si no quieres, tienes todo el tiempo de mundo.
En serio, cuando te vi entrar por la puerta de la iglesia, no pude creer lo que estaba viendo. Mi mente no comprendía exactamente todo lo que estaba pasando. Y sé que dijiste que solo querías solo un día conmigo, y besarme una vez, pero yo no quiero eso… Quiero estar contigo toda la vida, quiero besarte siempre, ¿Me lo permitirías?
Deidara abrazó a Sasori con todas sus fuerzas. –No vuelvas a soltarme. Por favor- Le susurró en el oído.
-No lo haré por nada del mundo, lo juro.-
Hidan miraba la escena asombrado. “Esos dos se aman, en serio. Konan tenía razón” pensó mientras sonreía.
Hidan fue a dejarlos a la casa de Deidara, y se fue de vuela a su departamento.
-¿Y tu mamá?
-Está viviendo en la casa de mi abuela por un tiempo. Así que vivo solo por ahora…
-¿Solo?- Sasori lo miro insinuándole algo…
-Totalmente solo…
Sasori no se resistió más y besó a Deidara con todas sus ganas. Se le había hecho eterno el tiempo sin su rubio.
Se separaron por la falta de aire. Después de unos segundos Deidara habló.
-Sasori…
-¿Qué pasa?
-Quiero estar contigo para siempre.
-Si tú lo quieres, así será.
-Te…-Deidara se acercó al oído de Sasori- Te amo.
-Te amo Dei, te amo, te amo, ¡TE AMO!
El rubio le tapó la boca a su acompañante. -¡No grites!
-Tú también estás gritando- Dijo después de liberarse de la mano de su amante.
-¿Qué somos ahora?
-Así que cambiando el tema…
-Ya, en serio, ¿Qué somos?
-Tal vez ya es hora de pedírtelo… -Sasori se puso de rodillas enfrente de Deidara y tomando su mano dijo- Deidara, ¿Quieres ser mi novio?
-S-si… ¡Si quiero! –El rubio se abalanzó hacia Sasori, tirándolo al piso, y besándolo en ese mismo lugar. Ya nada importaba, ya nadie los separaría.

Sasori’s POV.
Tal vez, solo tal vez, eso es lo que más extrañaba de Deidara. Su personalidad es tan explosiva, poco le importa lo que pase a su alrededor, o con quien esté. Está completamente loco, y yo estoy loco por él. No hay nada que hacer, esto ya está hecho. Y espero que sea para siempre.

Dos semanas después, dieron de alta a Gaara. Ya era hora de decirle lo que estaba pasando.
Iban en el auto, Sasori, Gaara y Deidara.
-Gaara, hay algo que tengo que decirte.
-Volvieron ¿O me equivoco?
-Espera, ¿Cómo supiste?
-Yo no le dije-Dijo Sasori anticipadamente.
-Solamente es mirarlos. Los dos, se ven felices, sus ojos brillan. Ahora sí, tienen todo mi apoyo.
-Gracias…-Deidara abrazó a Gaara- Eres el mejor.
-¿Y yo qué?
-A veces.-Deidara sonrió como si nada pasara.
-Bueno, así nos vamos…
-Te amo-Dijo el rubio y le besó la mejilla a su novio.

Digamos que de aquí hacia adelante, todo fue bien. Rasa quedó en la cárcel por el resto de su vida por maltrato hacia su esposa, y por intento de homicidio contra Gaara.
En cuanto a Kakuzu y Hidan, ya se veía venir, están juntos y felices. Aunque siempre discuten, al final del día todo vuelve a estar bien.
A Gaara, como siempre, le importaba un carajo el amor, y decía que estaba bien solo. No era algo que impresionara a la gente que lo conoce.

Un par de meses después, cierto pelirrojo, se dio cuenta que había pasado exactamente un año desde que conocía a cierto rubio.  Y tenía un plan, y en ese plan estaba incluido Gaara.

Entonces Gaara llamó al rubio.
-Hola, jm.
-Deidara, ¿Quieres venir a mi casa?
-¿Ahora?
-Sí, ahora. Ya voy para allá.
Gaara tenía la misma costumbre que Sasori, cortar el teléfono sin despedirse.
Deidara apenas pudo vestirse o hacer algo parecido a eso.
El pelirrojo tocó la bocina de su nuevo auto. Deidara salió de la casa y se dirigió al auto.
-¿A qué se debe tu repentina invitación?
-¿Ahora no puedo invitar a mi mejor amigo a mi casa?
-Tienes razón… Además, hace tiempo que no veo a tu mamá, soy un ingrato.
-Sí, desgraciado.
Deidara había aceptado solamente porque creía que Sasori estaría ahí. El rubio parecía no está enterado de nada, pero sabía que día era. Un año desde que conoció a su novio.
Una vez llegaron, pasaron rápidamente, en especial Deidara, buscando a la madre de Gaara.
-¡Señor Carura!
-¡Dei! Hola hijo, ¿Cómo has estado?-Dijo mientras lo abrazaba.
-Bien, bien. Perdón por no haber venido en tanto tiempo.
-Cariño, solo fue un mes.
-Fue mucho.
-Deberías tratarme de suegra al menos, me haces sentir vieja si me dices señora.
-Bueno, suegra.
-Así está mejor.
-¿Y Sasori?
-No lo he visto hoy.
-Oh, bueno. Voy a ir con Gaara arriba.
Deidara estaba levemente decepcionado, después de todo era un día “especial” para el al menos.
Como siempre, Gaara estaba tirado en su cama, leyendo en el celular quien sabe qué cosa.
-Rojito, ¿No está Sasori?
-No me interesa donde esté, si fuera por mí que no viniera.
Sasori, que  había estado todo el tiempo ahí, estaba escuchando detrás de la puerta. Esa era la señal.
-Gracias por tu bienvenida hermanito… ¿Y él quién es? ¿Por fin superaste tu fase de anti-social?
-No jodas Sasori.
A Deidara le costó un segundo darse cuenta, están actuando como cuando se conocieron…
-Hola, jm…Me llamo Deidara y soy el mejor amigo del “anti-social”-
-Ja, ¿Cómo alguien tan lindo como tú puede ser amigo de este idiota?

-¡SABAKU NO SASORI, NO MOLESTES A TU HERMANO!
Sí que se estaban esforzando para recrear ese día. Deidara no puedo evitar sonreír idiotamente.
-Deidara, ¿te gusta mi hermano?
-No… ¿Qué estás hablando?
-Para tu mala suerte, él tiene novio hace nueve meses, y lo ama bastante.
-No, no me gusta, es un cretino.-Deidara estaba tan feliz que no podía evitar sonreír.

-¡GAARAAAAAAAAAAA!
-¡YA VOY! Deidara, espérame.
-No tengo nada mejor que hacer, jm.
Deidara se reía nerviosamente, sabía que en cualquier segundo llegaría Sasori.
Pero antes, whatsapp.
-Canoso ¿Cuándo vas a venir?
-Voy en camino
-¿QUÉ? ¿Y POR QUÉ MIERDA NO ME DIJISTE? NI SIQUIERA ESTOY EN MI CASA.
-PORQUE NO VOY A TU CASA, RUBIA.
-BUENO DESGRACIADO.
-Te quiero imbécil <3
-Yo también asqueroso  <3
Y ahí, escucho esa risa. La risa de su amado.
-Que linda relación con el tal “canoso”
-No es algo de tu incumbencia, jm.
-Estoy tratando de ser amable.
-Pues no quiero tu amabilidad.
-Ahora entiendo porque eres amigo de Gaara-Cerró la puerta tras de sí- Y porque me gustas tanto.
-Un año ¿no?
-El primero de muchos.
-Y mañana es el concierto de MSI. No sé cómo conseguiste las entradas para mi cumpleaños.
-Sí, y vamos  a ir juntos. No dejaré que nadie te toque.
-Solamente tú me tocas, jm.
-Sí, porque eres mío.
-Posesivo…
-Me amas de todas formas.-Dijo Sasori arrogante.
-¿Eso crees?
Sasori se lanzó a besar a Deidara.
-¿Y ahora qué dices?
-Mm… tal vez.
-Amameeeeee- Dijo el pelirrojo con cara de perro abandonado.
-¿Cómo pretendes que no lo haga?-Deidara abrazó a Sasori.
Pasaron un rato abrazados, recordando estupideces que habían pasado durante todo este largo año. Como una vez que a Sasori le pico una abeja en la lengua y no pudo hablar bien por dos semanas.
-Dei… ¿Recuerdas cuando te dije mi “mayor secreto”?
-Lo de tu matrimonio…
-En realidad eso nunca lo fue.
-¡ME MENTISTE DESGRACIADO!-Grito como toda una Drama Queen.
-Mi mayor secreto en realidad es que… siempre me han gustado los hombres. Rasa pensaba que yo estaba “descarriado” por eso me comprometió con Sakura. Bueno, y sus desgraciados negocios también influyeron.
-Al fin y al cabo, teníamos el mismo secreto, jm.

Eran un par de idiotas, pero un par de idiotas que se aman a más no poder. ¿Creen en el destino? Yo sí, y tal vez ellos estaban destinados a estar juntos por siempre.

Era su segundo año de relación, como pasa el tiempo. Ya estaban viviendo juntos, Sasori trabajaba en una de las empresas que le había dejado el inútil de su padre. Dei estaba en el primer año de universidad.
Deidara apenas podía mantenerse en pie con todo el cansancio que tenía. La universidad lo estaba volviendo loco. Y tener a un maniático sexual como novio, tampoco lo ayudaba mucho más. Por lo menos era feliz.
Era viernes, y como nunca, no tenía ganas de ir a ningún lado.
-Dei, te tengo una sorpresa.
-No quiero hacer nada.-Deidara se tapó hasta la cara con la sábana. Eran las 9 y tenía sueño.
-Por favor, aparte mañana es nuestro aniversario y…
-Entonces mañana.
-Dei, mi amor, por favor.
-Ven, quiero un abrazo.
Sasori se acostó a su lado, quedando frente a frente. Lo abrazó acurrucándolo en su pecho.
-¿Estás muy cansado?-Dijo Sasori con cierta tristeza en su voz.
-Solamente quiero quedarme en casa hoy.
Sasori planeaba pedirle matrimonio esa noche, y justamente a Deidara se le ocurría no querer hacer nada.
-Voy a ir a comprar algo, vuelvo en un rato. Duerme mi amor.-Se levantó, y le dio un beso en la frente a Deidara.
Ya que el plan de sacarlo para llevarlo abajo no había funcionado, llamó a Hidan, cosa que no tenía mucho sentido, porque eran vecinos.
-Canoso. Dei no quiere salir, ¿Qué carajo hago?
-Si no puedes llevarlo, tráelo.- Hidan era cómplice en todo esto. Al ser el mejor amigo de Deidara, conocía mejor que nadie al rubio, y eso le ayudo a Sasori a escoger la canción que iba a dedicarle, y cantarle para pedirle su mano.
-Tienes razón… Pero tienes que ayudarme.
-Bueno, yo llamo a la gente, tú encárgate de los músicos.
-Te debo una, viejo.-Como siempre, corto el teléfono.
Sasori ya tenía todo listo. Los músicos instalados, la gente, todo. Para su suerte, vivían en el segundo piso, así que Deidara escucharía de todas formas.
Y empezó. “With me” de Sum 41.
Deidara en su profundo sueño, escuchó un ruido, era música, y provenía de abajo.

I Don’t Want This Moment
To Ever End
When Everything is Nothing, Without You
I Wait Here Forever Just To,
To See You Smile
Cause Its True
I Am Nothing Without You

Despertó, sin duda era Sasori. Cantándole la canción que siempre quiso para que alguien le pidiera… matrimonio. NO PODÍA ESTAR PASANDO. Bajó corriendo las escaleras del edificio, y poco le importó estar despeinado y en pijama.
Through It All
I’ve Made My Mistakes
I’ve Stumble And Fall
But I Mean These Words
Por fin bajó. Ahí estaba Sasori, cantando. Se le paró el corazón por un segundo.
I Want You To Know
With Everything, I Won’t Let This Go
These Words Are My Heart And Soul
I’ll Hold On To This Moment You Know
As I Bleed My Heart Out To Show
And I Wont Let Go
Paró de cantar, aunque la música seguía.
-Sé que no es el mejor día, ni la mejor hora, ni nada. Pero no puedo esperar más. Te amo, y te voy a amar para siempre, así que Deidara…-Se puso de rodillas y sacó una cajita de su bolsillo. Abriéndola dijo: ¿Quieres casarte conmigo?
-No… Si claro. ¡Quiero, quiero, quiero! – Deidara abrazó a Sasori.- Te amo.
-Pero yo te amo más.
-Cállate.-Dijo besando al pelirrojo.
Ya pueden imaginar cómo terminó todo.
No mucho después, se casaron, después de todo, el matrimonio homosexual era legal.  Y también adoptar niños.
Sasori y Deidara adoptaron dos niños, gemelos, sus nombres eran Ryu y Hajime. Los cuatro eran muy felices. Aunque los que se veían más felices con los niños, extrañamente, eran Hidan y Gaara. Konan iba a visitarlos frecuentemente.
Al final, todos fueron felices.
Gaara había encontrado a alguien, un chico que conocían bastante poco, Sai es su nombre.
Era hora que todos fueran felices, y lo eran.
¿Qué podría ser mejor? Si ahora ni siquiera 100 pasos los separaban.
FIN.

Notas finales:

Gracias por esperar, y por leer.
Nos leeremos en la próxima. 
-M~.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).