—Entonces, ¿Estas tomando en cuenta mi solicitud para ocupar el puesto?. —Chanyeol pregunto, mientras movía los dedos suavemente por el pelo en la base del cuello de Baekhyun, enviando escalofríos por el cuello y la columna vertebral de Baekhyun.
—Yo lo estoy considerando. —Dijo Baekhyun en voz baja. Su gran ira contra Luhan por su pequeño juego fue agotándose poco a poco al darse cuenta de que Chanyeol podría realmente en serio aceptar salir con él. Aún así, era un poco difícil de creer que un hombre tan perfecto como Chanyeol si quisiera salir con él.
—¿Qué haría falta para convencerte de que yo soy perfecto para el puesto? —Chanyeol susurró a su vez, su voz se hacía más profunda y un poco ronca mientras hablaba.
Baekhyun miró a los ojos a Chanyeol, antes de afirmar con timidez.—No mucho.
—Entonces, permíteme que te lleve a cenar. —Chanyeol le suplicaba con los ojos que le dijera que sí. Baekhyun no lo podía creer, pero se encontró asintiendo con la cabeza lentamente, sin apartar sus ojos de Chanyeol.
Su aliento se atascó en su garganta cuando Chanyeol se acercó y pasó el dedo a través de los labios de Baekhyun. —Bien. —Murmuró en voz baja. En aquel momento Baekhyun lo supo, Chanyeol podría hacerle lo que él quisiera y él le daría la bienvenida con los brazos abiertos. Esto era casi demasiado bueno para ser verdad.
Chanyeol tomó un dedo de la mano de Baekhyun, frotándole el pulgar sobre una de sus uñas. — ¿A qué restaurante te gustaría ir a comer? ¿Francés? ¿Japonés?.
—En cualquier lugar estaría bien, supongo. O simplemente nos podría preparar algo en mi casa, si quieres. —Baekhyun se sentiría un poco fuera de lugar. Él había oído hablar de esos lugares. ¿Quién no lo había hecho? Eran presentados como una muestra de un modo de vida totalmente diferente a la de él. Había que hacer reservaciones con meses de anticipación solo para un asiento en el bar. Pero nunca había estado allí. Él ni siquiera sabía si tenía algo lo suficientemente adecuado para llevar a uno de esos lugares.
—Mejor dicho quiero llevarte fuera y demostrar que salimos. —Chanyeol dijo.
—Oh, bueno supongo que eso estaría bien también. —Baekhyun miró su camisa y pantalones. —Yo, uh, yo no sé si estoy vestido adecuadamente para un lugar así.
Chanyeol levantó la cabeza de Baekhyun con la mano. —Tú te ves hermoso simplemente por la forma que tienes, te lo prometo.
Baekhyun sintió que su cara ardía. Oh, este chico sabía decir todas las cosas correctas. Baekhyun solo esperaba que continuara. Kyuhyun había sabido muchas palabras adecuadas, también, y mira la forma en que todo había salido.
Él miró con fascinación como Chanyeol abrió su teléfono celular e hizo una llamada telefónica. Un momento después tenían reservación en el restaurante japonés. Otra llamada telefónica y estaba la limusina de Chanyeol en la entrada. ¡Wow! Al parecer, tenía una cita con un hombre rico.
Chanyeol se deslizó del asiento y le tendió la mano a Baekhyun. Tan pronto como Baekhyun se puso en pie, Chanyeol pasó un brazo alrededor de él y lo escoltó hacia la barra. Él se inclinó y habló brevemente con Jongin, inclinó la cabeza hacia Luhan, y empujó suavemente hacia la salida a Baekhyun.
—Oh, espera, ¿Qué pasa con Luhan?. —Baekhyun le preguntó mientras miraba hacia atrás y veía a Luhan riéndose de algo que Jongin le estaba diciendo. A Luhan no parecía importarle en lo más mínimo quedarse atrás.
—No te preocupes por él. Jongin se va hacer cargo de él. Esta noche es solo para nosotros. Solo siéntate y deja que me ocupe de ti, ¿De acuerdo?.
Baekhyun le dio una última mirada a Luhan, luego se volvió hacia Chanyeol con un encogimiento de hombros. —Está bien.
Él empujó levemente a Baekhyun hacia la limusina y mantuvo la puerta abierta para él. Hmmmm, ¿un romántico?.
En el coche hasta el restaurante, la conversación estaba un poco rancia, pero no tan mala como lo había sido en el club. Ellos hablaban de cosas mundanas, el tiempo, los acontecimientos actuales, el club de Chanyeol, cosas por el estilo, nada profundamente personal.
Una vez que llegaron al restaurante, Chanyeol caminó derecho con Baekhyun, hasta el principio de la fila de espera. Ellos fueron recibidos de inmediato y llevados a una de las mesas más populares en la terraza. La vista era genial. Estaban sentados junto a un hermoso estanque con peces Koi, por debajo de bellos colores por los faroles. Era un ambiente muy romántico.
Cuando la camarera se acercó para tomar su orden, Baekhyun se sorprendió más cuando Chanyeol la saludó por su nombre.
—Hola, Soyou, ¿Cómo sigue tu madre? ¿Se siente mejor? ¿No tiene efectos secundarios a largo plazo?.
—Ella está genial, Sr. Park. Le diré que usted preguntó. Le encantaron las flores que le envió. Eso fue muy dulce de su parte.
—No hay problema, Soyou. Se lo merece. Ella trabaja muy duro. Dile que no puedo esperar para verla de nuevo, pero que se tome su tiempo. Su trabajo estará aquí para ella, y no me importa cuánto tiempo tome. No quiera verla en el trabajo hasta que esté completamente recuperada.
—Yo se lo diré, Sr. Park . Ahora, ¿qué puedo hacer por usted y su invitado?.
—Soyou, este dulce hombre es Baekhyun. Si tengo suerte, lo verás seguido por aquí. Esta noche, estoy solicitando el puesto para ser su novio. Por lo tanto, tenemos que mostrarle mi mejor lado.
Soyou se echó a reír. —En ese caso, ¿Por qué no deja que Jongdae los sorprenda a los dos?.
Chanyeol miró a Baekhyun preguntando. —¿Está bien para ti?.
Baekhyun se limitó a asentir, sorprendido por lo que Chanyeol le estaba diciendo a la camarera.
—¿Puedo traerle algo para beber mientras tanto? ¿Un vaso de soju tal vez? ¿Un poco de champagne?.
—Yo quiero soju, Soyou. Baekhyun no bebe, así que no estoy muy seguro de lo que quiere. ¿ Baekhyun?.
—Yo también quiero soju, gracias, Soyou.
—Si me permite sugerirle, recientemente comenzamos a servir una maravillosa limonada de fresa. No tiene absolutamente nada de alcohol. Está muy buena.
Baekhyun se encogió de hombros. —Bueno, voy a probarla. — Sonaba bien.
—Sí, yo también quiero uno de esos, gracias, Soyou.
—De acuerdo. —Dijo ella mientras cogía sus menús. —Ya regreso con dos limonadas de fresa.
Después de que Soyou se fue, Baekhyun se inclinó hacia Chanyeol. — Parece conocerte muy bien. Debes de venir mucho por aquí.
Chanyeol sonrió. —Te contaré un pequeño secreto. Es mío el lugar.
Baekhyun se acomodó en su silla, con la mandíbula colgando por la sorpresa. —¿Tu eres dueño del restaurante?.
Chanyeol asintió con la cabeza. — Si, Jongin y yo lo pusimos en marcha hace unos años. Este lugar, el club, y un par de otros pequeños negocios.
—De acuerdo ustedes….., ¿Tu y Jongin tienen alguna relación?.
—Si, él es mi pequeño hermano por cinco minutos.
—Oh… ustedes son gemelos, Genial.
—¿Y tú? ¿Tienes hermanos?.
La sonrisa desapareció de la cara de Baekhyun. —Si. Tengo dos hermanos y una hermana. Aunque yo no los veo mucho estos días. Creo que todos estamos tan ocupados, ya sabes. Todos ellos están casados y tienen sus propias familias.
—¿Y tus padres? ¿Qué pasa con ellos?.
—Papa es vicepresidente de una firma contable muy grande, y mi mamá es ama de casa y voluntaria de la comunidad. No los he visto en mucho tiempo. Todos ellos viven en Busan y todos están tan ocupados con sus trabajos y familias. Yo soy el único aquí en Seúl.
—¿Cuándo fue la última vez que se reunieron todos?.
—Ya ha pasado un tiempo. Pero está bien. Tienen algunas dificultades para entender mi estilo de vida. Por mucho que los extrañe, me niego a cambiar para satisfacer sus expectativas. Lo hice mucho mientras crecía.
—Oh, yo lo siento, Baekhyun. Creo que mi experiencia es un poco diferente a la tuya. Mi padre murió cuando yo era muy pequeño, pero mi mamá siempre aceptó mi elección. Ella solo quería que yo fuera feliz. Tal vez puede que te lleve a conocerla pronto. Ella va adorarte.
—Si, vamos a esperar primero y ver qué es lo que sucede entre nosotros antes de ir y reunirnos con tu madre. Todavía no he decidido si obtienes el trabajo.
Chanyeol se acercó y cubrió la mano de Baekhyun mientras le dedicaba una gran sonrisa. —Tú ordenas. Tengo plena confianza en que puedo llenar el cargo.
Baekhyun tragó saliva audiblemente. —Sí, eso es lo que me da miedo. —Él murmuro, tragando saliva de nuevo.
Soyou apareció un momento después, con sus bebidas. Su comida le siguió poco tiempo después, preparada por el chef principal del restaurante, Jongdae. La comida estuvo excelente. La compañía fue aún mejor. Baekhyun estaba en el cielo.
Chanyeol era coqueto, atento, y magnifico para la vista. En el momento en que fue a dejar a Baekhyun a su departamento. Baekhyun posiblemente ya estuviera enamorado, o por lo menos cayendo rápidamente.
Chanyeol besó la parte superior de ambas manos de Baekhyun antes de preguntarle si podía llamarlo al día siguiente, a continuación, se despidió.
Baekhyun lentamente entró en su apartamento en un sueño. No se molestó porque Chanyeol no trató de darle un beso. Eso demostraba que Chanyeol quería tomarse su tiempo y conocer a Baekhyun antes de llegar a ese paso. Baekhyun no podía recordar a nadie haciendo eso antes. Eso era tan dulce.
Al día siguiente Chanyeol le mandó un gran ramo de flores mixtas a Baehyun, junto con una pequeña nota que simplemente decía:
“Gracias por lo de anoche.
Chanyeol”.
Todas las chicas en la tienda de ropa donde trabajaba se volvieron locas. Quería saber todo acerca de Chanyeol. Baekhyun estaba en el cielo.
Cuando Chanyeol lo llamó esa noche, estaba tan nervioso, que apenas podía sostener el teléfono.
—Hola, bebé, ¿Cómo te fue hoy?. —Chanyeol preguntó.
—Se acaba de poner mucho mejor. ¿Y el tuyo?. — Baekhyun se hundió de nuevo en los cojines de su sofá, su puño cerrado con fuerza alrededor del teléfono. Las horas desde que había visto por última vez a Chanyeol parecían una eternidad.
—Se pone cada vez mejor. ¿Vas a venir al club esta noche y dejarme verte?. —Chanyeol le preguntó
—Simplemente trata de detenerme. — Baekhyun se echó a reír, ya estaba planeando su traje. Tenía que parecer tan sexy como pudiera.
—¿Puedo pedirte un pequeño favor? —Pregunto Chanyeol vacilante.
—Por supuesto. —Oh hombre, ¿Que le iba a pedir?.
—¿Podrías usar esta noche algo azul? He soñado contigo con algo azul. —Susurró con lujuria, por lo que los cabellos de la parte trasera del cuello de Baekhyun se erizaron. —Si no quieres, está bien, de verdad. No quiero pedirte que hagas algo que no quieres. Solo pensé que… —Casi tartamudeaba mientras continuaba.
—¡Chanyeol! Está bien. Puedo ponerme algo azul. De hecho, tengo el traje perfecto en mente. — Baekhyun quería reír. Pero no lo haría, para no herir los sentimientos de Chanyeol. Había pensado que Chanyeol le pediría que suavizara un poco el tono. Pero Chanyeol lo había sorprendido pidiéndole que usara un color diferente.
—¿Realmente no te importa todo el color que me pongo?. —Él preguntó.
—Infiernos, no. ¡Es caliente! Me gustan sobre todo tus ojos. No puedo esperar para ver lo que te pones esta noche. —Chanyeol se echó a reír.
—Si alguna vez te molesta, me dirás, ¿verdad?.
—Baek, me gustas tal y como eres. No quiero que cambies nada. Además, yo nunca te pediría que fueras alguien que no eres. Tú eres extravagante, excéntrico y salvaje. Eso es lo que eres. ¿Podrías creer que eso fue lo que me atrajo de ti en primer lugar?.
—¿En serio? — Baekhyun sabía que sonaba inseguro, pero no podía evitarlo. Nunca nadie, a excepción tal vez de Luhan, lo había aceptado tal y como era, salvaje y todo.
—Si. Ahora, por desgracia, tengo que irme si quiero conseguir hacer un poco de trabajo antes de que llegues aquí esta noche. Nos vemos pronto ¿No?.
—Bueno, no estoy muy seguro de que tan pronto pueda llegar. ¿Tú en verdad no crees que ponerse sexy es fácil? ¿Verdad?. — Baekhyun bromeó —Se necesitan horas para arreglarse. Tú no consigues la perfección debajo de un sombrero.
Chanyeol se echó a reír. –Baek, no me cabe la menor duda que tú estarás sexy no importando lo que te pongas. No necesitas ayuda. Estoy bien seguro de que naciste de esa manera.
Baekhyun se rió. Chanyeol iba a ser muy bueno para su ego. Baekhyun seguía esperando que el encanto se rompiera.
—Muy bien, Baek, tengo que irme. Nos vemos esta noche, ¿de acuerdo?.
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Baekhyun estaba cada vez más nervioso mientras estaba en la línea exterior del Club. Le había llevado menos tiempo de lo normal prepararse porque quería llegar allí lo más rápido posible, pero había hecho como Chanyeol le había pedido. Esta noche el color principal era azul. Llevaba ajustados pantalones blancos, zapatos blancos y una camisa de seda casi transparente azul eléctrico. Él había tenido especial cuidado con el delineador de ojos. Solo esperaba que a Chanyeol le gustara.
Tardó menos de veinte minutos para llegar al frente de la línea. Él saco su entrada y la llevó a la mano del portero, que lo miró con atención. Baekhyun sentía como si estuviera en exhibición.
—Lo siento, amigo, tal vez la próxima vez.
—Pero… tengo que entrar —Dijo Baekhyun.
—Como ya te he dicho, quizás la próxima vez. Ahora bien, si no te importa… —Le hizo a Baekhyun un gesto para que se moviera a un lado. Baekhyun se limitó a mirarlo en estado de shock.
—Tú no entiendes.
—No, eres tú el que no entiende. Yo decido quien entra, y esta noche tu no. Ahora, tú puedes salir de la fila o puedo llamar a la policía. —El hombre se puso de pie, amenazadoramente. Baekhyun dio un paso atrás.
Baekhyun caminó un par de pasos más atrás ya que fue expulsado de la línea, la gente seguía en la línea. Había lágrimas en sus ojos mientras volvía por las escaleras. ¿Ahora que se suponía que iba a hacer?. Chanyeol lo estaba esperando. ¿Cómo se suponía que iba a entrar?. Él ni siquiera podía llamarlo. Él no tenía el número de su teléfono celular.
Sus hombros se desplomaron al cruzar la calle para sentarse en el banco de la parada del autobús. No sabía qué hacer. ¡Demonios! Él debió de haberle pedido el número celular a Chanyeol. ¿Cómo podía haber sido tan estúpido?.
Baekhyun se sentó frente a la calle del club, el aire frio se filtraba en sus huesos mientras veía una persona tras otra ser admitida en el club. ¿Por qué el portero no lo dejó entrar? ¿Fue su ropa? ¿Estaba vestido muy escandalosamente?. Él casi salto de su piel cuando su teléfono sonó. Rápidamente lo sacó de su bolsillo y lo abrió. —¿Baekhyun? Bebé, ¿Dónde estás?. Te he estado esperando desde hace un buen tiempo.
—¿Chanyeol?. Oh, estoy muy feliz de que me llamaras. Estoy fuera, en la calle de enfrente del club. He estado sentado aquí por siempre. El portero no me dejó entrar, y yo no tenía tu número celular para llamarte y… —Baekhyun casi lloraba al teléfono cuando escuchó la voz de Chanyeol en el otro extremo.
—¿Qué? ¿Qué quieres decir con que el portero no te dejó entrar? ¿Cómo, cuanto tiempo has estado sentado allí? —Chanyeol gritó en el teléfono.
—No sé, desde hace tiempo, está haciendo frio, Chanyeol. Puedes… puedes… ¿venir en este momento? —Preguntó vacilante.
—Voy a estar ahí, bebé. Nos vemos en la puerta. —Baekhyun puso su teléfono lejos y se fue al otro lado de la calle hacia la puerta. El portero se reunió con él, bloqueando su camino.
—¿No te dije que te fueras? ¿Realmente tengo que llamar a la policía para que te lleven?. —Se puso de pie entre Baekhyun y la puerta, sus enormes brazos cruzados sobre el pecho mientras miraba a Baekhyun, con su cara llena de disgusto.
—No, Chanyeol…
—Le aconsejo que se vaya ahora, señor. No queremos a los de tu tipo por aquí.
¿Mi tipo? ¿Qué diablos significa eso?
Baekhyun tragó saliva y se armó de valor, dando un paso hacia la puerta.
—El Sr. Park…
—Escucha, tu pequeño rarito, o te vas ahora o yo les marco a los policías. Y no voy a decirlo otra vez. Ahora ¿Qué vas a hacer?.
Baekhyun iba a razonar con el gran hombre cuando fue agarrado por el brazo y empujado hacia atrás con tal fuerza que se cayó, raspándose una rodilla con un fuerte golpe. Baekhyun se sentó pesadamente y acunó su herida rodilla entre sus manos, haciendo una mueca al ver que la sangre se filtraba a través de sus nuevos pantalones blancos.
Infiernos, él quería verme caliente esta noche. Pensó mientras veía sus pantalones rotos.
—¿Baekhyun?.
Baekhyun alzó la vista para ver a Chanyeol corriendo por las escaleras, con Jongin. Chanyeol lo sentó rápidamente en la escalera a continuación tomo a Baekhyun y lo acunó en su regazo.
—¿Qué paso? —Chanyeol preguntó.
—Lo siento, Sr. Park —el portero comenzó. —Le pedí que se fuera, pero él no lo hizo. Yo incluso lo amenace con llamar a la policía si no se iba. Pero el insistió en que le permitiera entrar. Luego trató de abrirse paso hacia adentro.
—Tu imbécil. —Chanyeol gruñó mientras miraba para arriba a un portero en shock.
—Señor, yo solo estaba haciendo mi trabajo. Usted me contrató para evitar que los indeseables entren en el club. Usted no quiere a los de su tipo aquí.
—¿Su tipo? ¿Su tipo?. —Chanyeol gritó mientras se levantaba, con Baekhyun todavía en sus brazos.
—¿Qué hay de malo en su tipo?.
—Bueno, solo mírelo, señor —El portero alegó.
—Uno, me encanta la forma en que se ve. Dos, él me pertenece. Es…
—¿Chanyeol?. —Dijo Baekhyun en voz baja. —¡Podemos entrar ahora? Tengo mucho frio. —Baekhyun se sintió ridículo. Estaban haciendo una escena. Todo el mundo estaba mirándolos. Enterró su rostro en cuello cálido de Chanyeol.
Chanyeol inclinó la cabeza hacia abajo y beso en la cabeza a Baekhyun. —Por supuesto, bebé. Vamos a conseguir que te calientes en muy poco tiempo. —Miró a Jongin, mientras llevaba a Baekhyun al interior. — ¡Trata con esto!.
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Chanyeol cuidadosamente bajó a Baekhyun en su escritorio y sostuvo su pierna mientras él inspeccionaba la lesión en su rodilla. Parecía que no tenía gran cosa, solo una raspada y unos pocos arañazos. Sin embargo era necesario limpiarlo.
Tomó a Baekhyun entre sus brazos y lo puso en píe. —Vamos Baek, necesitas que te limpie. Quítate los pantalones.
La cara de Baekhyun se puso roja, él tuvo que inclinar la cabeza por la vergüenza.
Chanyeol tomó su botiquín de primero auxilios y se volvió hacia BaekHyun, esperando hasta que él estuviera listo. Cuando Baekhyun se quedó allí, con la cara enrojecida, Chanyeol lo miro con curiosidad. — ¿Está algo mal?.
Baekhyun murmuró algo en voz baja. —¿Qué? No he entendido nada, Baek.
Baekhyun dejó escapar un profundo suspiro. —Yo no llevo nada debajo de mis pantalones. —Le gritó con los dientes apretados. Chanyeol se congeló en su lugar. ¿ Baekhyun no llevaba nada debajo de los pantalones?. El pensamiento fue para Chanyeol como una roca dura sobre su cabeza. Él trago saliva. —Tú no tienes… tu no… —Infiernos, ni siquiera pudo terminar de decirlo. Él tenía problemas.
—Uh, déjame conseguir algo para cubrirte. —Chanyeol miró desesperadamente alrededor de la habitación. Tenía que encontrar algo que cubriera todos las partes y piezas de Baekhyun. Simplemente algo para no tener al hermoso hombrecito desnudo frente a él. Iba a ser bastante difícil solo mantener su mente en el trabajo, sabiendo que Baekhyun iba desnudo debajo, sin hablar de estar a solas con él.
Chanyeol encontró rápidamente una toalla y se la entregó a Baekhyun antes de darle la espalda para que pudiera desvestirse. —Bien —Murmuró Baekhyun en voz baja.
Chanyeol se dio la vuelta para encontrar a Baekhyun sentado en su escritorio, la toalla cubriendo sus piernas y sus pantalones abajo alrededor de sus tobillos. Se sentó en la silla, agarró la pierna de Baekhyun y empezó a limpiar su herida.
Sus ojos se desviaron hasta el creciente bulto cubierto por la toalla azul. Tuvo que tomar varias y profundas respiraciones, para controlarse mientras vio el bulto crecer ante sus ojos hasta que hubo una impresionante tienda de campaña en el regazo de Baekhyun.
Miró a Baekhyun, que tenía un rubor cubriendo sus mejillas, mientras trataba de ocultar su cara inclinando la cabeza. Rápidamente termino de limpiar y vendar la rodilla de Baekhyun antes de deshacerse de las cosas usadas en la papelera, cerrando el botiquín de primeros auxilios.
Poniéndose de pie se acercó más a Baekhyun, lo miró hacia abajo con la cabeza inclinada y le sonrió. Su hombrecito se sentía avergonzado. Era adorable. Antes de que Baekhyun pudiera detenerlo, metió la mano bajo la toalla y tomó la polla dura de Baekhyun en su mano y comenzó a acariciarlo. Baekhyun dejó escapar un gemido cuando agarró la muñeca de Chanyeol para ponerle fin a sus movimientos.
—Shhhhh, bebe, está bien.
—Estoy tan avergonzado. —Baekhyun murmuró, mordiéndose el labio mientras Chanyeol comenzaba a acariciar su carne caliente de nuevo.
—No tienes por qué sentirte avergonzado. Yo estaría enojado si no consiguiera encenderte. Ahora, simplemente siéntate y disfruta. Permíteme hacer esto para ti, ¿Por favor?. —Chanyeol declaró. La respuesta de Baekhyun fue quitar su mano de la muñeca de Chanyeol e inclinarse hacia atrás sobre sus codos. Chanyeol vio cruzar el placer en la cara de Baekhyun cuando empezó a acariciarlo en serio. Oh, Baekhyun era glorioso. Sin embargo, Chanyeol quería más. Quería verlo.
Chanyeol tomó la toalla con la otra mano y jaló fuerte para quitarla de alrededor de Baekhyun. Su respiración se volvió un gemido de asombro al mirar hacia abajo y ver su mano alrededor de Baekhyun. ¡Él era perfecto! De grosor y lo suficientemente largo para que Chanyeol lo tomara con su mano grande.
—Oh, cielos, bebé, eres tan hermoso. —Chanyeol susurró mientras acariciaba la polla de Baekhyun. Se agachó y con la mano libre, comenzó a masajear suavemente el sedoso saco de Baekhyun. Los pequeños gemidos procedentes de Baekhyun solo hacían mejorar la experiencia.
Chanyeol de repente se sentó en su silla y se deslizo hacia delante hasta la ingle de Baekhyun llevando su cara hacia abajo. Tenía que probarlo. Inclinándose paso su lengua por la cabeza en forma de zeta, prestándole especial atención a la pequeña hendidura en la parte superior.
Baekhyun se volvió loco, subió sus piernas sobre los hombros de Chanyeol. Sus gemidos se hicieron más fuertes hasta que llenaron la habitación con su placer. Chanyeol nunca había experimentado algo tan maravilloso en toda su vida.
Levantó su cabeza para mirar hacia Baekhyun. Baekhyun estaba descansado de nuevo sobre sus codos, y la cabeza sobre el escritorio. Él se veía muy sexy.
—Córrete para mí, bebe. —Él le demandó mientras trabajaba rápidamente en un frenesí a Baekhyun, su mano experta manipulaba la carne ansiosa de Baekhyun.
Baekhyun comenzó a gemir, sus caderas empezaron a moverse hacia arriba y abajo para seguir con los movimientos furiosos de Chanyeol.
—Chanyeol, oh cielos, no te detengas. —Baekhyun gritó mientras su cuerpo de repente se puso rígido. Chanyeol tomó rápidamente la toalla, anteriormente desechada y usarla para limpiar el líquido blanco que brotaba de la polla de Baekhyun cuando se corrió.
Continúo acariciándolo hasta que Baekhyun se detuvo. Chanyeol rápidamente limpió a Baekhyun, entonces su propia mano, antes de dejar caer la toalla al suelo. Se inclinó sobre un Baekhyun relajado, con el cuerpo jadeante, mientras capturaba sus labios, recordándole las molestias de su caída. Miro hacia abajo a los aturdidos ojos de Baekhyun.
—Eso fue hermoso, mirarte, sentirte. No sé si habrá algo mejor en la tierra.
Cuando Baekhyun llegó a su cierre, Chanyeol le agarro la mano, para detenerlo. —No bebé, estoy bien.
Baekhyun miró a Chanyeol con confusión. —Pero tú no….
—Es suficiente el placer de verte a ti. No necesito más. —Puso a Baekhyun de pie y tiro sus pantalones. —Vamos, es tiempo de vestirse. Tenemos que ir a una fiesta.
Baekhyun observó a Chanyeol con confusión. Podía ver el bulto duro sobresalir de los pantalones y supo que Chanyeol todavía no se había corrido. Lo que no podía entender era por qué Chanyeol no le permitía cuidar de él.
Mientras se colocaba los pantalones y lo abotonaba, pensó al respecto. Tal vez porque ninguno de ellos lo había hablado. Eso explicaría por qué Chanyeol no le había dado una mamada completa y solamente lo había acariciado para que se corriera. Eso fue sensato. Realmente no sabían mucho acerca del uno u otro. No es que él creyera que Chanyeol le mentía, pero aún así, siempre es mejor prevenir que lamentar.
Baekhyun sonrió mientras tomaba la decisión de hacerse exámenes tan pronto como pudiera, para que Chanyeol supiera que no tenía nada de qué preocuparse. Y entonces ambos podrían disfrutar el uno del otro por completo.