Capítulo 3: ¡¡Todo fue culpa de....!!/ Gema, la intrusa.
N/A: Mangel solo tendrá acento en los diálogos.
Mangel
Desde ayer, aunque más concretamente hoy, me sentía hecho mierda. Todo se había quebrado, y todo por una puta llamada de teléfono. ¿Cómo algo así puede cambiar tu vida en un solo mísero segundo?.
Cerré los ojos mientras abandonábamos la casa y nos encontrábamos con Chetto y Alexby en la Puerta del Sol, donde siempre nos reuníamos. Se que esto va a ser duro para mi, pero no me iba a echar atrás. No después de... eso.
-Chetto, ¿cumpliráh lo que ayeh me dijihte?- Pregunté por lo bajo, ya que no quería que Rubén escuchara nada, aunque se lo mereciera.
-Claro, Mahe.- Me dió una palmada y siguió andando al lado de Alex. Rubiuh me miró un par de veces, pero yo le ignoraba, lo llevaba haciendo desde esta mañana, pero a mi forma de ver todo esto era una puta hipocresía, ¿de qué sirve que me mire, si lo único que quiere es abandonarme por aquella puta?.
Flasback.
Estabas en el sillón, con tu novio entre tus brazos, Rubén, que estaba medio dormido. Mientras le acariciabas el pelo dulcemente, escuchabas como su respiración se hacía más y más profunda, hasta que se hizo completamente pesada, y dedujiste que se había quedado dormido.
-Ya mismo... haremos un año juntos- Comentaste con el aire.- ¿Qué pensarán si lo confesamos?- Te cuestionaste internamente, como tantas otras veces lo habías hecho. Y, aunque una parte de ti, por muy minúscula que fuese, tenía miedo, otra gran parte quería gritarlo, confesar que llevabais juntos desde hacía casi un año, y que todo el mundo supiese que él era tuyo al igual que tú lo eras de él. Suyo y solo suyo...
¿Posesivo?, para nada, solo orgulloso de tu amor por este 'ijoputa'.
Estabas a punto de quedarte completamente dormido cuando el teléfono de Rubén se puso a sonar como loco. Te obligaste a ti mismo a levantarte de aquel cómodo sillón y abandonar el calor de tu novio, para mirar quién 'cojoneh' era.
Llegaste a coger el teléfono, pero habían colgado, así que lo volviste a poner en su lugar. Pero, de nuevo rompiendo tu tranquilidad, a los pocos minutos el teléfono empezó a sonar de nuevo.
-¿Quién cojoneh eh?- Preguntaste algo cansado de todo eso antes de coger el móvil que seguía sonando sin parar.
-¿Hola?- Preguntaste inseguro.
-Hola, ¿está Rubén?- Era la voz de una 'tía', y de una extraña forma, eso no te daba buenas vibraciones. ¿Qué quería esa tía con Rubius?.
-No...-Dudaste en contestar, aunque te parecía bastante absurdo. ¿Y si era su prima, o alguna cosa parecida?. No sabías porqué, pero tu cuerpo te impulsaba a alejar a 'aquella tipa' de TU novio.- Pero dime, ¿Quién eres y qué quiereh?- Tenías mucha curiosidad, demasiada a decir verdad, y sonaste bastante borde por ello.
- Soy Gema,- Aquel nombre te sonaba, y más si tenía que ver con Rubén- y nada, simplemente dile que estoy esperando que me llame, que ya ha llegado aquí su ropa, aclarale, por favor, que sus calzoncillos de...- Río antes de continuar- Bob Esponja están aquí.- ¿S-su ropa?. ¿Qué mierda era todo eso?, aunque la pregunta más importante es, ¿quién coño es esa tía?, ¿de qué te sonaba tanto?. Ella seguía hablando de Rubén y algunas cosas, pero tu no podías concentrarte en nada más.- Por cierto... tu eres....- Mierda, Mangel relájate, pensaste, quizás... quizás no es lo que piensas.
-Yo soy su... amigo- Dudaste- Su amigo Mangel.
-¡¡Me suena un montón ese nombre!!- Hizo un sonido de pensar, pero ni tan siquiera le diste importancia a todo aquel conjunto de letras que salía de su boca, estabas demasiado shockeado.-Bueno, ok. -Querías finalizar aquella conversación, y replantearte todo ese gran momento extraño- Solo dile eso y que estoy esperando que me llame, que todavía estoy esperando que venga a dormir conmigo, y que me debe una salida desde aquella vez en el cine.- ¡¡¡¿Qué cojones?!!!.
-¿P-Perdona... qu-qué?- De pronto se te había olvidado la capacidad de hablar, y querías preguntar tantas, pero tantas cosas que el haberte quedado sin palabras para ti era una crisis más que sumarle a esto, mas lo que realmente tenías interés en saber es... ¿qué tipo de relación tendría Rubén con ella?. ¿Te...te estaba engañando?.
-Neh, tú solo dile que si quiere que le ayude a preparar eso en lo que él tiene tanto empeño, que me localice, que tenemos cosas que resolver, ¿ok?.Bay, bay.- Te colgó dejándote perplejo.
'Su ropa ha llegado'.
'Dormir juntos'.
'Aquella vez en el cine...'
'Gema'.
-¿Qué... qué acaba de pasar?- Estabas estático, tu respiración era irregular, tus pulmones habían olvidado la capacidad de respirar, tus piernas temblaban y te sentías muy mareado.- Rubén... ¿me está engañando?.
“Pues la única chica por la que yo realmente me he colado, se llamaba Gema, y fue mi mejor amiga durante mucho tiempo. A los 11 se años me enamoré como gilipollas de ella, hasta los 15 años más o menos”.- Recordaste que Mangel te comentó acerca de eso un día en el que estabais hablando de 'viejos amores'.
¡¡No!!- Te negaste a ti mismo, él no te podía estar engañando. Rubén te quería.
Fin Flasback.
Seguí caminando al lado de Chetto, y mis nervios aumentaban cada vez más y más, pero cada vez que recordaba aquello, me recordaba que... debía intentar olvidar a Rubén por todos los medios, total, estaba muy claro que él ya no me quería, aunque una parte de mi te decía que quizás... aquello no era lo que parecía, pero entonces recordé aquello... que me aclaró todo.
Tras una mirada a Rubén me sumergí en aquel recuerdo de ayer en la mañana.
Flasback.
Al cabo de los días intentaste olvidar todo aquello, e intentaste actuar igual.
-Mangel, debo irme, he quedado.- Te dijo, mientras se levantaba de la cama- Adiós- Te besó y salió corriendo. ¿Cómo se había levantado sin despertarte?. ¿Desde cuándo él madrugaba?.
-¿Con quién?- Preguntaste sin obtener respuesta.
'Y si....'- Te vestiste corriendo e hiciste todo lo posible por seguirlo sin que se diera cuenta. Si, te sentías como una novia celosa y con mucho miedo. Pero es que eso eras, aunque claramente la parte del femenino no iba mucho contigo.
-Lo sabía- Gritaste en mitad de la calle.
Y allí, ante tus ojos estaba la muestra de que todos tus temores eran reales. Frente a ti estaban ellos. Tu supuesto novio, quién 'te quería' , y una chica morena, alta y, aunque te jodía mucho, muy atractiva, cogidos de la mano, mientras ella lo arrastraba a él.
Te giraste para caminar en el sentido contrariocuando los vistes que se acercaban el uno al otro. ¿Se iban a besar?.
'¿Cómo puede tener tanta cara de ir paseando con ella en mitad de la ciudad, sin tener cuidado alguno?. ¿Tan poco me valora?'- Miles de cosas pasaban por tu mente en ese momento, pero sobre todo el dolor punzante, la frustración, el enfado... y la decepción. Contigo mismo y con él, el dueño de tu corazón, ilusiones y al parecer... la persona que te había roto en pedazos.
Te lo negaste cada segundo mientras caminabas hacía el parque, aquel donde habías estado hace pocos días con Rubén, tu novio en ese momento, eso solo hizo el dolor más intenso.
'¿Qué te hecho yo para merecer esto?'.- Preguntaste al aire, suplicando una respuesta.
“¿Entonces, por qué esa tía iba a tener su ropa, o a dormir con él?. ¿Por qué quedó con ella sin decirme nada?. ¿Por qué estaban cogidos de la mano?. ¿Por qué...?. Además... él llevaba algo de tiempo algo nervioso, aunque no le di importancia. ¿Quizás era por eso, por qué me estaba engañando y no sabía como librarse de mi?, además, él se tiró mucho tiempo enamorado de ella, y mi mama solía decir que donde hubo fuego... cenizas quedan. ¿Y si las cenizas se convirtieron en fuego y ellos están juntos?. ¿Y si...?”.
Seguías pensando y pensando, mientras el dolor, la frustración, la decepción y todos aquellos sentimientos teñidos de negro se acumulaban en tu interior.
Fin Flasback.
No pude evitar mirarlo y quedarme embobado.
“¡No!”- Me recordé a mi mismo. Eso-se-ha-acabado. Eso jamás volverá a ser.
Pero mi mente seguía preguntándose en qué me había equivocado, que qué había hecho yo para eso, pero no encontraba respuesta. También, una parte de mi estaba preocupado por saber que iba a pasar con nuestra amistad; ¿terminaría de tal manera después de tantos años?. En cambio, otra se sentía completamente enfadada respecto al comportamiento que había tenido conmigo, si se había cansao' de mi, solo había tenido que decirlo... y yo me fuese marchado de su vida, pero no me habría matado de la forma en la que la había hecho.
-Hey, Mangel- Me llamó Rubius.
“Que te pireh”
Simplemente no contesté, ni tan siquiera le di importancia a aquel llamado, en ese momento lo que menos quería era estar cerca de él, aunque por desgracia habíamos tenido que salir juntos.
Entré al bar dispuesto a una cosa: A olvidarme de Rubén por completo, aunque tuviese que conocer a todas las personas del mundo.