Aioria abrió los ojos lentamente, se sentía débil y adolorido. miro a su alrededor; estaba en su recamara.
-cuando fue que llegue hasta aquí?-Aioria intento levantarse, pero aún estaba muy débil. Se vio asimismo al parecer alguien lo había ayudado a salir del acantilado, lo había traído hasta su cabaña y también había curado sus heridas.
-tengo que…-aioria nuevamente intento ponerse en pie, pero una voz lo detuvo.
-no te levantes, tus heridas aún están abiertas y podrías hacer que sangren nuevamente.-aioria volteo a ver en dirección a esa voz, vio a un muchacho, parecía de su misma edad, tenía un atuendo nada habitual al de su región, pero lo que más le llamo la atención era que mantenía los ojos cerrados.
-yo….gracias por….-el muchacho se acercó a aioria y le ofreció un vaso.
-ten, bebe esto te hará bien. -aioria recibió el vaso algo desconfiado, pues no estaba de más pensar que podría a verle colocado veneno. Por órdenes del patriarca claro.
-por qué me vez así?-aioria se sobre salto al oírle decir esas palabras.
-acaso puedes ver con los ojos cerrados?- pregunto aioria acercando su rostro al del muchacho, el otro solo asintió levemente mientras se alejaba de aioria en dirección a la salida.
-bueno, es tu decisión si tomas o no él te que te hice, con permiso.-
-¡espera! Yo…no quise ofenderte es solo que….perdóname- aioria se veía algo avergonzado pues a pesar de su desconfianza no tenía porque pensar eso de el pues él lo había ayudado.
-no es nada.-cuando shaka estaba por salir de la habitación, aioria le pregunto.
-tu…eres nuevo por aquí, verdad?-
-sí, acabo de arribar de mi tierra natal.-
-bienvenido a Grecia.-aioria le tendió la mano y este solo lo miro confundido.
-gracias, y mejor ya me voy porque el patriarca solicita mi presencia en el santuario.-dijo shaka al momento de hacer una leve reverencia ante aioria cosa que sorprendió de sobre manera a aioria.
-¡espera!...cómo te llamas?-
-bueno, mi nombre es shaka.- shaka volteo a verle.
-¡ah! Una cosa más.-shaka saco de entre se ropa el collar perteneciente a aioria y se lo entrego.
-lo encontré al rescatarte, es tuyo?-aioria lo miro sorprendido y asintió.
-sí, muchas gracias por…por todo.-shaka solo asintió y salió de la recamara, aioria lo miraba confundido y asombrado a la vez.
-shaka.-repitió su nombre mientras se volvía a poner el collar, tomo la taza con el té que shaka había preparado y se la bebió completa.
-ahhh, que dulce y delicioso. -aioria olio el aroma del brebaje, era agradable.
-gracias, Shaka.-aioria se recostó de nuevo e intento descansar puesto que sus heridas aun necesitaban cicatrizar como shaka le había dicho.
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En el templo principal shaka se hallaba rindiéndole sus respetos ante el patriarca quien sentado en el trono lo miraba algo molesto.
-shaka, me dijeron que arribaste a noche a Grecia, dime, porque no te presentaste ante mí en cuanto llegaste?-
-tuve un pequeño percance, pido me disculpe.-saga lo miraba molesto pues su respuesta no le era suficiente, pero la verdad, tampoco le importaba.
-bien shaka, te perdono. Ya puedes ir a tu templo y cumplir con tus labores correspondientes como caballero dorado de virgo. Se bienvenido.-saga veía atentamente cada gesto y movimiento de shaka.
-gracias su santidad y con su permiso.- shaka asintió hizo una reverencia y se marchó ante la mirada penetrante de saga.
Tras la partida de shaka, saga decidió quitarse el casco y la máscara. Tras quitárselos respiro aliviado, le era muy insoportable e incómodo el tener que llevar puesto ese artefacto tan molesto todo el tiempo.
-es increíble que un niño como ese haya ganado la armadura dorada de virgo.-Saga sonrió para sí mismo.
-será verdad que su poder es increíblemente destructor y poderoso? casi como el de un dios, eso me gustaría averiguarlo.- saga se puso en pie y comenzó a rodear el trono principal, sonrió, era suyo y de eso no tenía la menor duda, le gustaba el poder y el sentirse importante y respetado .
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Cuando Shaka llego a su templo miro a su alrededor todo estaba tan solitaria y vacío.
Acomodo sus pertenencias con cuidado y cuando todo estaba en orden se relajó y se dispuso a meditar tranquilamente bajo la estatua de buda.
Por un instante pensó en aioria y recordó lo que paso con él la noche anterior
Lo miro a la distancia y veía como era acosado por ese par de muchachos, pensó que eso era un simple entrenamiento, pero al ver a aioria en desventaja y la rudeza que usaban con aioria supo que eso no estaba bien. Se dio cuenta cuando el más grande y robusto de los dos le quitaba el collar y lo arrojaba lejos, tras ver que los tres muchachos se alejaban shaka decidió seguir a aioria sin que este se diera cuanta. Lo observo y vio el deplorable estado en el que se encontraba tras la caída que sufrió sabía que si lo dejaba ahí moriría desangrado así que tras verlo herido y delicado lo cargo y lo llevo a su cabaña, obviamente pregunto por la morada del mismo y le sorprendió mucho como los demás se refirieron a él, luego de curarlo y recostarlo en su cama salió en busca del collar, el que Aioria buscaba, lo encontró fácilmente pues como él estaba acostumbrado a hacer todo a oscuras sabia usar a la perfección sus otros sentidos. Decidió velar su sueño y cuidarlo hasta que despertara.
-Aioria.-shaka echo un suspiro, no sabía porque lo había ayudado ni porque le importo, pero se sentía mejor tras hacerlo, esbozo una leve sonrisa, pero se le borro de inmediato tras sentir un cosmos extraño aproximándose a la casa de virgo.
-Ding Dong.-Shaka volteo en dirección a su nuevo acompañante.
-vaya creo que me equivoque de templo…o acaso tu eres el nuevo custodio de virgo?-
-así es caballero de cáncer.-death se sobresaltó al oírlo si ni siquiera se conocían. Como rayos sabía que era el custodio de cáncer?
-vaya, quien diría alguien como tu ganara la armadura dorada de virgo, eso sí que es sorprendente.-shaka ignoro su comentario pues sabía que a lo que él se refería era a su apariencia.
-te doy permiso para que pases por esta casa caballero.-death lo miro algo molesto.
-me corres?....pero si por un tiempo yo voy a ser la única compañía cercana que tendrás.-death se acercó a shaka.
-bueno, ya que aún no han elegido custodio en leo y el caballero de libra está ausente, supongo que así será por un tiempo.-a shaka por alguna razón no le agradaba la presencia de ese caballero, tenía un aura maligna y despiadada. Quiso que se retirase lo más pronto posible.
- en eso tienes razón aún falta el custodio de leo, yo sinceramente espero que el nuevo custodio sea cualquiera, menos aioria, créeme que si eso llegase a pasar, si aioria legase a ganar la armadura de leo, habrá un gran descontento e indignación por parte de todos los que habitamos aquí.-shaka volteo a ver a death mask intrigado por su comentario.
-porque dices eso, digo, cualquiera puede pelear por la armadura dorada y solo mejor tendría que ganarse tal honor y deber.-death miro a shaka y sonrió ampliamente.
-cualquiera menos aioria, claro, como tu recién llegas no sabes quien es el, verdad?-shaka lo miraba confundido y molesto a la vez pues él no era una persona que le gustase andar de curioso ni andar oyendo chismes sobre los los demás.
-pues te cuento, ese tal aioria es nada más y nada menos que el hermano menor de aioros de sagitario, si sabes quién es él y que fue lo que hizo, o me equivoco?-shaka no dijo nada, pero era obvio que la respuesta era, si, si conocía a la perfección la historia del caballero de sagitario pues su maestro le comento lo que paso. Y a para alguien como shaka eso era deplorable e indignante, le parecía lo más deshonroso y repudiable que un caballero pudiese cometer, y aioria era el hermano de ese hombre ahora entendía muchas cosas o por lómenos porque los demás lo trataban con repudio y desprecio.
-no es más que basura, al igual que su maldito hermano, no te parece?- death miro a shaka quien solo permanecía callado.- O acaso tú crees que alguien como el merece una oportunidad para ganar la armadura de leo, he? Esta maldito, tiene esa asquerosa sangre en sus venas y si lo aceptáramos seria como aceptar lo que hizo su hermano y eso nunca va a pasar. Es más, yo mismo lo hubiera matado hace mucho, pero prefiero ver como todos aquí lo humillan y lo denigran jajaja es lo que se merece jajaja.-death reía abiertamente, shaka en cambio se sentía algo decepcionado, no entendía porque se sentía así.
-bueno, ya no te molesto más #compañero#, hasta luego.-
-claro.-shaka hiso una leve reverencia, death se fue mirándolo con una sonrisa pues había logrado descifrar las reacciones de shaka tras hablarle sobre aioria y lo que descubrió le resulto muy interesante.
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-miren nada más que tenemos aquí, y con el mismo horrible collar de siempre.-aioria solo ignoro a rhuy siguiendo con su entrenamiento.
-que patético, entrenando sin maestro que lo instruya, no les parece algo estúpido.-Rhuy no dejaba de molestarlo, pero aioria actuaba como si no estuviera ahí.
-mira que en unos cuantos días será la pelea por la armadura de leo y estoy seguro de que tú no figuraras en la pelea por ella.-aioria se detuvo y lo miro.
-eres patético como el inútil y estúpido de tu hermano.-esa fue la gota que derramó el vaso, aioria rápidamente se abalanzo sobre rhuy derribándolo de un solo golpe, los demás se sorprendieron al ver la rapidez y la destreza con la que lo hizo.
-no vuelvas a hablar mal de mi hermano o te juro que…-
-pero porque no, si el solo dijo la verdad. -aioria soltó a rhuy y volteo a ver a milo quien portaba su armadura dorada, apretó los puños molesto.
-vamos aioria, es la verdad, tu hermano se creía un ser intachable y correcto, pero resultó ser un vil y deplorable traidor.-milo se acercó a aioria.
-que dices?- aioria miraba a milo con desprecio.
- que tu querido hermano solo aparentaba ser un buen, digno y honorable caballero, pero no era más que una rata, una inmunda y asquerosa rata.-aioria sin pensarlo le tiro un golpe a milo sin importar que ahora fuese un caballero dorado y que al atacarle se le consideraría una ofensa grabe. Los demás miraban la escena anonadados.
-¡maldito! como te atreves a golpearme si tú no eres más que un aspirante a caballero, y yo, yo soy un caballero dorado.-milo, rápidamente se puso en pie y confronto a aioria.
-¡!no me importa!! Para mí no eres nada, nada.-aioria sentía como la rabia y la ira contenida lo invadía.
-además esa armadura la ganaste hace solo un mes, y créeme que cuando yo gane le mía te aseguro que no voy a consentir que nadie vuelva a hablar mal de mi hermano.-aioria quiso retirarse y volteo en otra dirección, pero fue grande su sorpresa al encontrarse con shaka.
-shaka.-aioria sonrió al verlo, milo furioso como nunca antes sujeto a aioria del brazo haciendo que voltease a verle a los ojos.
-como te atreves maldito, sabes que si me deshago de ti en este momento nadie dirá nada pues a nadie le importaría, es más, voy a ser reconocido con muchos méritos por acabar contigo y a la vez con la pestilente sangre que llevas en tus venas.-aioria intento soltarse, pero la desigualdad de fuerzas era obvia por la armadura dorada que milo portaba.
-¡suéltame!- grito aioria, milo sonrió y volteo a ver a shaka, quien miraba todo en silencio
-dime shaka, acaso tu no opinas igual, acaso no crees que esta rata merece morir.-milo golpeo a aioria contra el suelo y puso su pie sobre la espalda de aioria.
-eso no me importa caballero de escorpio, yo solo vine a informarle que el patriarca solicita tu presencia y la mía en el salón principal. -shaka seguía sereno e indiferente ante lo que presenciaba. Milo en cambio pateo a aioria y lo sujeto de los cabellos
-muy pronto Rhuy ganara la armadura de leo y entonces tu vida y tu presencia aquí ya no serán necesarias.-milo sonrió satisfecho, shaka solo le dio la espalda y se fue alejando milo al ver esto lo siguió.
Aioria los miraba alejarse, shaka ni siquiera volteo para verlo, sintió tanta rabia, creía que por lómenos uno de esos caballeros dorados sería diferente que lo trataría diferente, pero se equivocó.
-todos son iguales…unos unos…..les voy a demuestras que yo sí puedo que yo si soy digno de portar leo y voy…voy a…a.. .-aioria se aguantó las ganas que tenia de llorar, pues su ex amigo y su salvador lo habían tratado como la peor basura de todas y eso, eso le dolía en el fondo, le dolía demasiado. Golpeo el piso frustrado, miro al horizonte, se puso en pie y se alejó en dirección a su cabaña.
CONTINUARA……..