Capítulo 13.
El apuesto jefe del pabellón.
-La práctica que ustedes han tomado es la clínica central de Chicago -el profesor miró una vez más a los cuatro chicos frente a él y volvió sus ojos a los papeles. -Será bueno que se dirijan allí, el director a cargo los supervisará. No cometan errores. Recuerdan que practican para fuuros enfermeros y doctores, un error puede costar una vida.
Ji Yong miró a su amigo, este simplemente sonrió grandemente, como era usual en él. El profesor volvió a darles algunas indicaciones y los demás asintieron.
Ji Yong todavía no podía quitarse de encima el olor del perfume de Seung Hyun y su cálido pecho que él usaba para dormir. La noche había sido menos fría a su lado sin duda, y esperaba con todas sus fuerzas volver a dormir con él esta noche. Aunque si fuera por él, le encantaría despertar todos los días con él. Era genial despertarse y mirarlo, menos hasta el momento en que Seung Hyun se despertaba y le dedicaba un delicado y amable: "¿Piensas bajar encima de mí? Tengo cosas importantes que hacer sabes." Sí. todo era bueno hasta que se despertaba. Pero dejando de lado su caracter de idiota, adoraba dormir encima de él y sentir sus manos sosteniendo su cintura toda la noche. Aunque esa mañana con suerte se despidió antes de irse porque debía llegar temprano a Dios sabe dónde.
-Te veo perdido -comentó el castaño a su lado recogiendo sus libros.
-Ah... no, estaba pesanndo algunas cosas.
-Um...
-¿Te sucede algo, Dae?
Generalmente el castaño no era tan distante con él, pero hoy no le hablaba demasiado y parecía más ignorarlo que cualquier cosa, como si quisiera evitar hablar con Ji Yong.
-No sé, eso mismo te pregunto -su amigo le miró serio.
-¿De qué hablas?
-De que no me escuchas cuando hablo. No contestas mis llamadas, no devuelves mis mensajes, pero me dejas mensajes para decirme que si tus padres llaman que diga que te quedas en mi casa. Y no me quieres decir en qué andas metidoy me he estado preocupando, pero tú no lo estás. Y como tú no quieres decirme, asumo que no confías lo suficiente en mí o simplemente no quieres decirme, así que no quiero entrometerme ni molestarte.
Ji Yong le quedó mirando unos momentos. Nunca quiso hacer sentir así a Daesung, sabía que había cometido equivocaciones con él. Le miró unos momentos, ahora entendía porque lo veía serio, y en él ser serio era raro.
-Lo siento, Dae -el castaño le miró y tomos sus libros para salir de la sala, Ji Yong le siguió de cerca. -No quería que pensaras así. Tú no eres estorbo para mí, eres mi mejor amigo. Lo sabes.
-Pero no me incluyes en tus cosas.
-Lo sé, y lo siento -el castaño asintió lentamente, él tampoco quería obligar a Ji Yong a decirle todo, simplemente debía nacerle. -Sé que no he tenido mucho tiempo para ti, es porque he estado con alguien...
-No quiero que te sientas obligado a contarme, Hyung -Daesung le miró preocupado, Ji Yong sonrió.
-No, está bien, creo que deberías saber. Daesung, conocí a un chico.
-¿Tienes novio? ¿Estás saliendo con alguien?
-Estamos "saliendo", pero no somos novios -Dae frunció el ceño. -Es que... bueno, no somos nada, pero...
-¿Pero? No entiendo.
-Bueno, verás... mantenemos relaciones... y bueno, nos quedamos juntos y todas esas cosas.
-Son novios.
-No.
-Amigos con ventaja, o con derecho -Daesung rodó los ojos. -Hacen de todo pero no son novios. Lo que hacen es no ponerle formalismo y ya.
-Es que es un poco más difícil... verás... -Daesung le miraba atento, no entendía mucho. -No hay sentimientos de por medio... sólo...
-Sólo tú estás enganchado.
-Sí... ¿qué? ¡No! -Ji Yong dejó de caminar y subieron al bus que les llevaría a la clínica. Se sentaron en los últimos asientos, el menor no dejaba de mirarme curioso. -Yo no... es que-
-Hyung, se te nota a lo lejos que andas de enamoradizo.
-Pues... ah, un poco.
-¿Y él?
-Es complicado.
-Ya me dijiste, pero ¿por qué?
-Es que él no quiere a nadie, Dae -el castaño ladeó la cabeza y frunció el ceño. -Nunca ha querido a nadie.
-¿Es un ogro?
-¡No! -Ji Yong recordó el dibujo del payaso donde lo ponía de ogro. ¿Por qué lo veían como uno? ¿Acaso Ji Yong era el único que lo veía como alguien precioso por dentro y por fuera? -Sólo... tuvo una infancia terrible.
-Ya veo..
-Dae, Seung Hyun fue violado por su papá y su mamá lo abandonó. Esa es suficiente razón para no querer estar con nadie con sentimientos involucrados.
-Ji Yong Hyung, no quiero ser pesado, pero creo que no te conviene.
-¿Por qué dices eso? -Ji Yong frunció el ceño.
-Es una persona dañada... si vas a estar con él, debes aceptar su pasado y tratar de mejorar su presente. Debes apoyarlo y ayudarlo a superarlo. Es una persona rota, en pocas palabras, tendrás que recoger sus pedazos e intentar pegarlos de nuevo, si es que se puede, si es que él te deja hacerlo. Y pagar los pedazos de un vaso roto es casi imposible.
-No voy a dejarlo, Dae... Y quiero ayudarlo, quiero que se sienta querido. Yo lo quiero.
El bus se detuvo afuera de la clínica. Ambos se miraron, Daesung le sonrió cálidamente y entonces acarició su hombro lentamente.
-En el proceso de querer unir las partes rotas de una persona podemos cortarnos con los trozos -Ji Yong le miró y luego bajó su mirada. -Y como buen amigo, estaré aquí para curarte si llegas a cortarte.
Ji Yong le miró. Ambos sonrieron y luego compartieron un abrazo apretado. Ji sentía el apoyo del castaño y agradecía su comprensión y sus pocas preguntas. Daesung lo apoyaría hasta el final, sin importar nada.
Caminaron en silencio en la entrada de la Clínica con sus otros dos compañeros, uno de ellos era mujer, bueno, en todo grupo siempre había una chica, aunque ella era muy callada, así que no molestaba mucho. En la oficina se encontraron con el director general de enfermeros y él les tendió sus delantales blancos que desde ese día ocuparían durante seis meses que duraba su primera práctica. Ji Yong estaba nervioso, aunque le habían dicho que por el momento no debía ni pinchar ni nada, simplemente tomar presiones, fiebre y cosas básicas.
-Bien, les mostraré la clínica y también a los doctores jefes de las distintas áreas. Ustedes todavía no han decidido en qué área especializarse, por lo que deberán hacer caso de todo lo que os pidan los diferentes doctores de las áreas.
Los chicos asintieron y le siguieron en silencio por el establecimiento. Ji Yong intentaba memorizar todos los nombres de los jefes de cada unidad de la salud, comenzando por el Pediatra jefe hasta el doctor de medicina general. Sería difícil, considerando que habían demasiados especialistas en ese lugar. La chica de cabello negro que venía con ellos levantó la mano mientras aquel médico hablaba, este le miró atento mientras le daba la palabra.
-¿No existe algún libro o lista con los nombres de los doctores jefes? Creo que sería más fácil aprenderlo.
-Buena pregunta -el hombre sonrió y luego miró a la chica nuevamente. -¿Cúal era tu nombre?
-Hye Yoon. Choi Hye Yoon.
-Bien. Sí lo hay, Hye Yoon, pediré una lista para cada uno de ustedes con los nombres de las áreas de medicina y sus doctores generales para que tengan mejor conocimiento. También vendrán especificadas las ubicaciones de dichas áreas para que no anden perdidos por las plantas de la clínica.
-Gracias.
Los demás también sonrieron. Eso ya era un alivio para todos. De pronto unas grandes puertas blancas que decían "no entrar" se abrieron estrepitosamente. Tres enfermeros traían una cama y lo que parecía ser una mujer gritando sobre ella. Todos detuvieron sus pasos y se quedaron observado aquella imagen. Daesung miró de reojo a su amigo, este simplemente levantó los hombros haciéndole saber que no sabía qué sucedía. Los enfermeros avanzaban a paso rápido por los pasillos, parecían dirigirse a otro lugar. Llegó un doctor mientras ayudaba a mover la camilla, se giró y observó en dirección de donde estaba el grupo de estudiantes, y al encontrar su objetivo lanzó un grito suficientemente fuerte para alertar a la planta entera.
-¡Está comenzando!
-¿Cuánto lleva así?
Los estudiantes se giraron y se hicieron a un lado dándole paso a más enfermeros. Ji Yong abrió inmensamente sus ojos y sintió su corazón dejar de funcionar. ¿Estaría soñando? ¿O quizás imaginando cosas? Daesung tomó del brazo a Ji Yong para correrlo de la mitad del pasillo donde el chico estaba en shock. Si sus ojos no le fallaban ese era Seung Hyun. El mismo Seung Hyun con el que había despertado esta mañana. Pero ahora andaba con una bata blanca y caminaba a toda prisa observando la camilla y al otro doctor. ¿Seung Hyun era doctor? ¡Claro que lo era!
-¿Qué te pasa? -Daesung movió a su amigo rapidamente.
-Dae... es él -Ji Yong le apuntó lentamente casi sin aliento. Su corazón nuevamente parecía querer salir corriendo de su pecho para ir con él.
-¿El chico del que me hablaste? ¿Él?
-Sí, Dae, él es Seung Hyun.
-¿Por qué no me dijiste que trabajaba aquí, qué era doctor?
-Me vengo enterando.
Aquella mujer en la camilla lanzó otro chillido alto haciéndolos salir de sus pensamientos. Prontamente Seung Hyun llegó hasta ella y verificó, luego la enfermera a su lado le pasó algunas cosas y él las tomó rapidamente.
-¿Cuál es su estado?
-Viene 1 cada 5 minutos. Ha estado así casi 40 minutos y ya no reciste los dolores. No ha podido bajar por sí solo.
-No bajará a estas alturas -el doctor le miró y Seung Hyun puso el cubre boca sobre sus labios lentamente. -¡Preparen el pabellón, vamos a intervenirla!
-¡Sí, doctor!
La enfermera a su lado desapareció rápidamente casi corriendo. Las otras dos enfermeras con el otro doctor partieron con la camilla por el pasillo derecho . Seung Hyun se giró para ir hacia el pasillo cuando el doctor que guiaba a los alumnos en práctica le saludó.
-Doctor Choi, te veo con trabajo.
-Está a punto -comentó el pelinegro poniéndose el gorro blanco en su cabeza.
-Me hubiera gustado presentarte a los alumnos en práctica que han llegado esta mañana, pero tendrá que ser luego.
-Eso creo. Si todo sale como lo esperaro en dos horas y media estaré fuera de la sala de operaciones -el pelinegro explicó mientras pasaba los guantes blancos por sus manos rápidamente.
El doctor guía le palmeó el hombro en señal de despido y comenzó a caminar. Los cuatro alumnos se quedaron observando. Ji Yong todavía no caía en su asombro. ¿Seung Hyun era doctor? ¿Quizás cirujano? El pelinegro sonrió y dio una reverecia. Cuando terminó con sus guantes levantó la mirada y lo primero que se encontró fue los ojos cafés de Ji Yong mirádole casi desvanecido.
-Hey, ¿qué veo? -Seung Hyun bajó la máscara de su boca y sonrió de medio lado. -¿No es la carita bonita? ¿Qué hay, Yongie?
Ji Yong frunció el ceño. Seung Hyun sonaba fresco, como si nada. Como si no hubiera descubierto el menor que era doctor, como si no estuviera a punto de operar a una persona. Lo peor del asunto es que Ji Yong se perdía en él. Se veía aún más precioso a ojos del menor con su atuendo de Doctor. El delantal le venía bien, al igual que la mascarilla y los guantes. Ji Yong tragó saliva y le miró fijamente.
-¿Eres doctor?
-No, quería disfrazarme para celebrar Halloween adelantadamente.
-Sí serás idiota. Hablo en serio.
-¿Tú crees que estoy parado aquí vestido de esta manera para bromearte? Tienes una frente grande, pensé que eras más inteligente, mi amor.
-¡Oh, cállate! -Ji Yong se cruzó de brazos y luego le miró de nuevo.
-Luego rogarás porque te hable de nuevo y te ponga atención... como anoche.
-Contigo no se puede, no se te quita lo maldito.
-Gracias por el cumplido, cariño -Seung Hyun subió nuevamente su cubre boca. -Hazlo bien en tu primer día, nos vemos luego.
Y comenzó a caminar rápidamente por donde habían llevado la camilla minutos atrás. Ji Yong se giró rápidamente e hizo un puchero.
-¡Pero yo quería saber en qué te especializas!
-¡Descúbrelo!
Le guiñó un ojo y pasó por el pabellón que decía: "Zona de operaciones, no pasar."
Ji Yong volvió su camino hacia los demás. Daesung le miraba atento, cuando sus ojos se cruzaron este se rió.
-Vaya, es muy amable y cariñoso.
-Cállate, Dae -Ji Yong se quejó mientras seguía caminando. Esa había sido la peor primera impresión para su mejor amigo, el idiota de Seung Hyun le había dejado humillado y avergonzando. Aunque no se esperaba nada menos de él.
-Ya veo por qué es "complicado" como dijiste. ¿Siempre es así?
Ji Yong miró a su amigo frunció el ceño.
-Por desgracia, sí.
Daesung se rió. Ji Yong simplemente guardó silencio y agradeció silenciosamente a Daesung el que se burlaran de él.
El resto de la mañana se la pasó pensando en él. En su semblante serio al dar indicaciones y su apresurado andar hacia pabellón. Se imaginó que era cirujano. Había estado toda la mañana tomando presión, revisando termómetros y recibiendo indicaciones de algunos doctores que les pedían ayuda con bandejas o para tratar a alguien. Había visto muchas cosas, desde una señora que llegaba gritando que se desmayaba, hasta un chico que traía un pie roto por haber caído de s skate.
Ji Yong soltó un bostezo y se dejó caer en el banco. Le había dado sueño, no todos los días se levantaba a las 7 am, pero gracias a Dios la hora del almuerzo llegó y pudo descansar un poco. Daesung conversaba amenamente con algunos enfermeros mientras Ji Yong miraba hacia todos lados. ¿Habría salido Seung Hyun de aquel pabellón? ¿Y si lo buscaba? Se puso de pie cuando vio al doctor guía de la mañana acercarse con un papel, este se lo entregó y sonrió.
-Esos son los nombres y áreas de los doctores, es una referencia. Así no estarán tan perdidos.
-Gracias -el hombre se iba cuando Ji Yong le detuvo. -Doctor, ¿le puedo preguntar algo?
-¿Sí?
-El doctor que vimos esta mañana, cuando caminábamos por la planta dos hacia pabellón...
-¿El doctor Choi? -El hombre pensó unos momentos, Ji Yong asintió enérgicamente.
-Sí, él -el hombre parecía atento-, ¿sabe si ya ha salido del pabellón?
-Claro, salió hace más de cuarenta minutos, ¿por qué preguntas? ¿Conoces al doctor Choi?
-No... -Ji Yong intentaba pensar rápidamente en una excusa. -Sólo quería que me conversara un poco de su área, me interesa seguirla... -mintió. Nunca sería cirujano, eso era demasiado difícil y problemático. No entendía cómo Seung Hyun con su cabeza de chico idiota podía hacerlo.
-Pues, debe estar en su oficina. En la misma planta que la mañana, de hecho, él es jefe del pabellón dos.
-Oh... -Ji Yong abrió mucho sus ojos. -Gracias...
-No te preocupes. Puedes ir, pero recuerda que debes volver cuando termine la hora de almuerzo.
-Claro.
Ji Yong rápidamente se puso en camino hasta el elevador, marcó el 2 piso y esperó pacientemente para que llegara. Al salir se encontró con los pasillos vacíos. Debió suponer que a la hora de almuerzo no todos se encontraban en sus puestos. Caminó por todo el lugar hasta llegar al final donde pudo ver la puerta blanca a la vista. Pensó unos momentos antes de entrar, el sólo leer "Dr. Choi Seung Hyun" en el marco de entrada le prvocaba una extraña sensación y su corazón latía aún más de lo normal. Tocó despacio con sus nudillos y tragó saliva.
-Pase.
Su voz ronca resonó hasta afuera de su oficina. Ji Yong miró a su alrededor y al no ver a nadie entró sigilosamente, como si quisiera esconderse de todos. Cerró la puerta lentamente, Seung Hyun se veía concentrado en unos papeles. Ji Yong se quedó de pie en aquel lugar hasta que el mayor levantó su vista. Ninguno de los dos dijo nada, el pelinegro medio sonrió y se echó hacia atrás en su asiento negro mientras se cruzaba de piernas y miraba al menor acercarse lentamente.
-¿Sabes dónde estás, cierto?
-No. -Ji Yong ignoró su pregunta y se sentó frente a él en su escritorio. -Sería genial si me dijeras tú.
-¿Qué te trae por aquí? ¿Ya me extrañabas, es eso?
-Justo cuando pensé que no podías ser más cretino me sales con esto. -Seung Hyun le ignoró y volvió sus ojos a sus papeles. -¿Por qué no me dijiste que eras doctor?
-¿Por qué decirlo?
-¿Por qué no?
-¿Por qué usas tu linda boca para irritarme? -Ji Yong le miró y rodó los ojos. -Mejor úsala para algo más productivo.
-¿Quieres un besito?
-No vendría mal.
A Ji Yong no le molestaba la idea, pero se suponía que no venía por eso. Suspiró intentando calmar su corazón y miró nuevamente a Seung Hyun.
-¿Te especializaste para cirujano?
El mayor levantó su rostro, parecía divertido con él.
-¿Realmente quieres saber?
-Sí.
-No te diré. Adivina.
Ji Yong frunció el ceño. Debió advertir que no sería fácil sacarle información, nunca lo había sido. Entonces sintió que una ampolleta en su cabeza se prendía. Seung Hyun era doctor, por Ley no podía negarse a revisar a una persona que se sentía mal.
-Sabes, Seung... -el mayo le miró y dejó los papeles. -No me siento bien.
-¿Te duele el trasero? -Ji Yong sintió infinitas ganas de golpearlo, pero se abstuvo y simplemente bajó su rostro.
-No sé, me siento raro... me duele el cuerpo...
-Te vas a morir.
-¡Seung Hyun! -El mayor se echó a reír. -¿Podrías echar un vistazo?
-Muy inteligente, Yongie.
-En serio, sabes... desde la mañana que siento que me desmayaré en cualquier momento.
Seung Hyun ladeó su cabeza y entonces sonrió de medio lado mientras alzaba una ceja.
-Vale -Ji Yong evitó sonreír. -Súbete a la camilla y quítate la camiseta.
Ji Yong se quitó el delantal blanco y dejó la hora encima del escritorio mientras se quitaba la camiseta y se sentaba encima de la camilla. Seung Hyun se acercó lentamente y se puso muy serio. Sacó un palo de helado y una pequeña linterna e hizo al menor abrir la boca, Ji Yong hizo caso y luego él revisó lentamente. Seung Hyun apagó la linterna y luego botó aquel palo. Ji le miraba facinado, amaba verlo así. Seung hyun pasó sus manos por la espalda de Ji y puso el Estetoscopio en su espalda mientras oía atentamente su respiración lenta.
-Ji Yong, ¿cuándo fue la última vez qu fuiste al doctor?
-Creo que hace seis meses.
Sung Hyun no dijo nada. Ahora sacó el Otoscopio y lo puso en su oído revisando la zona. Luego suspiró y volvió a ponerse su Estetoscopio y esta vez lo pasó por el pecho del meor. Ji Yong sentía que su corazón reventaría por la cercanía del mayor. Le encantaba esto que estaba ocurriendo.
Seung Hyun dejó escuchar y le pasó su camiseta a Ji mientras le miraba serio.
-Deberías revisarte con un cardiólogo.
-¿Qué?
Ji Yong miró al mayor, este se veía serio. Nada de risa, nada de broma, nada de juego. De pronto sintió un pánico sobre él, Seung Hyun cerró sus ojos y le miró muy seriamente.
-Ji Yong, creo que tienes problemas en el pecho. Deberías revisarte con un especialista en el área.
-¿Bromeas? Siempre he sido muy sano.
-Pero no te haces un chequeo hace seis meses -Ji Yong abrió mucho sus ojos. Seung Hyun sabía, por lo menos más que él en el área de la salud. No podría mentirle con algo así. -Mira, en el tercer piso está la planta del cardiólogo, el doctor Kim te puede revisar. Yo sé que es muy buen doctor. Aprovecha la hora de almuerzo.
-Debe ser una broma... -Ji Yong se puso se camiseta y luego nuevamente el delantal mientras tomaba la hoja.
-No estoy seguro, pero es mejor prevenir que lamentar, ¿no?
Ji Yong asintió. No dijo más, salió rápidamente de la oficina. Necesitaba revisarse con urgencia. Caminó rápidamente hasta el elevador y bajó en el piso que le había indicado Seung Hyun. Vio la puerta del doctor a la vista, pero antes de llegar sintió que lo jalaban.
-¡Aquí estás!
-¡Daesung!
-¿Qué haces? -El castaño le sonrió.
-Dae, creo que estoy enfermo.
-¿Crees? ¿Cómo es eso?
-Daesung, al parecer tengo una enfermedad y no me he dado cuenta... tengo miedo. -Ji Yong se veía asustado.
-Espera, cálmate, ¿de dónde sacas eso?
-Es que fui con Seung Hyun y le pedí que me revisara por puro capricho y me hizo un chequeo y encontró algo mal con mi corazón.
-¿Con tu corazón? ¿Estás seguro?
-Sí, Dae. Seung Hyun es especialista.
-¿Dónde dices que te revisó?
-En el pecho, la garganta, la espalda y los oídos. -El castaño entrecerró los ojos y luego asintió.
-Qué raro, debería haberte revisado la próstata.
-¡Daesung! -Ji Yong le dio un golpe fuerte algo enojado. -¡Te pueden escuchar idiota! Además, no fui con él para nada más que conversar.
-¡Pues yo hablo en serio!
-Deja e jugar, ¿ya? Necesito encontrar al doctor Kim y pedirle una revisión de corazón.
-Para, para -Dae lo sostuvo de nuevo. -Creo que no tienes nada.
-Ya sé que me veo sano, pero quizás tengo algo y-
-Te preguntaré una cosa, Hyung -Ji Yong le miró atento. -¿Leíste la hoja que nos entregaron con los nombres y áreas de los doctores?
-No.
-Ahí está el problema.
-¿Ah?
-Porque si la hubieses leído sabrías que el Doctor Choi Seung Hyun es Genecólogo. Por ende, lo único que podría revisar son vaginas. A lo más podría revisarte la próstata, pero ni siquiera eso, porque ese trabajo es del Urólogo. Más bien creo que tu novio no novio te jugó una broma.
-¿Qué?
Ji Yong se quedó en shock unos momentos.
-Y no sólo eso. Es jefe del pabellón de maternidad. En pocas palabras, saca bebés es los vientres. La mujer que gritaba hoy por la mañaba venía en trabajo de parto. Hoy por la mañana él hizo una cesarea a aquella mujer. Es decir, trajo un bebé al mundo. A eso se dedica. A traer bebés y revisar mujeres. Por ende, revisarte a ti fue solamente cumplir tu estúpido capricho, Hyung. No estas enfermo ni nada parecido. Él hace trabajos de parto y chequeo del aparato reproductor femenino.
-Yo... -Ji Yong estaba inentando asimilar todo lo que ahora sabía, pero le resultaba muy difícil. -¿Seung Hyun...?