POV BANG
La alarma había sonado a las 6:00am y en realidad no había mucho problema con esa hora, por alguna extraña razón no pude conciliar el sueño. Me levante y me dirigí al baño en este se encontraba un espejo muy grande me observe y dos segundos después sonreí, volver a ser el Bang aburrido luego de este baño me resultaba un poco gracioso, me duche y Salí para vestirme con unos pantalones holgados de color café con tirantas hasta los hombros, una camisa a cuadros, mis gafas de los años 50 y mi pelo llevado hacia atrás con mucho gel, ese era el otro yo.
Baje de mi cuarto, mire la hora 6:30am tome un zumo de naranja, mi maleta saliendo de mi casa, me fui hasta la parada de buses, después de un tiempo ya me encontraba en frente del colegio. Ya no era incomodo las miradas que me daban al entrar se podría decir que me había acostumbrado, cabe decir que las miradas no eran buenas, y los susurros tampoco. Saque un papel en el que decía la hora y donde me tocaba clase hoy, salón 2-B 7:00 a 9:00, como comenzabamos las clases, solo dabamos dos horas.
Cuando entre todo el mundo se quedó callado mirándome raro, pero era de esperarse no todos los días se veía a un profesor de los 50 en tu salón.
-Buenos días alumnos mi nombre es Bang yong-guk y soy su nuevo profesor de química y física- Todos me respondieron excepto uno, lo mira fijamente era hermoso, piel blanca, ojos negros profundos, su cabello se observaba tan sedoso, y su cuerpo… Dios para ser un niño era perfecto. Decidí avergonzarlo un poco, en realidad quería escuchar su voz.
-¿Señor?...-Dije esperando que saliera de su trance, todos voltearon a verlo. ¿En qué estaría pensando?
-Choi… Choi jun hong- dijo apenado, no podía ser más adorable, bueno eso lo iba aprobar.
-Sé que mi clase le incomoda señorito Choi pero haga el intento de no irse al cielo- dije muy serio, ¿cómo reaccionara?
-Emm… yo… mmm- dijo, sí, sí que podía ser más adorable, como sería tenerlo abajo mío, retorciéndose, gimiendo y... NO ¡no debo pensar en eso es mi alumno!
La vergüenza es peor que el hambre señorito Choi, siéntese y por favor ponga atención- dije para comenzar mi clase, sabía que Choi no estaba en este mundo, pero ya le había causado una pena antes no seré tan malo para volver hacer lo mismo, además no debería poner en ridículo a alguien así de hermoso. La clase se acabó y por lo que veo el sigue en ese largo trance, tengo una idea.
-Todavía no se ira Jun hong- dije sintiendo la mirada directa en mi desde hacía ya mucho ¿Qué era lo que quería ver?
-S.i.…si ya me iba- dijo levantándose rápidamente, cuando llego a la puerta, me decidí.
-señorito Choi- dije alzando la mirada conectando nuestros ojos.
-¿Si?- Dijo nervioso ¿yo causo eso en él? No deja de sacar preguntas a la ligera.
-Cuídese- Dije y le “sonreír” quería verle sonrojarse, y lo conseguí. Él se fue y yo sonreí, mi vida sí que sería interesante con Choi aquí. Además por lo que he escuchado es de esos chicos un poco rebeldes, que va a fiestas y a bares. ¿Conocerá el bar “desenfreno”? y una sonrisa maliciosa salió de mis labios. Choi jun hong serás mío.