Kim Junmyeon luce como un modelo de esos que anuncian pasta dentífrica. Sus dientes blancos y brillantes se muestran perfectamente apilados con una sonrisa que se dirige hacia Jongin.
Chanyeol lo arrastró al acabar sus clases a este restaurante japones y le presentó a su compañero de trabajo.
-¿Qué me recomiendas para comer, Kai?- La voz es suave y acompaña perfectamente a su sonrisa.
-Kim Jongin.- Le corrige.
-¿Prefieres que te llame así?- Pregunta cortésmente.
Jongin asiente e intenta sonreirle de vuelta. Pero su sonrisa se queda en nada comparada a la del mayor.
Chanyeol por otro lado mira a Jongin de reojo y no sabe si sentirse nervioso o aliviado. El mismo le propuso esa comida a Junmyeon, aunque no a ese restaurante, eso fue idea del otro. Fue como un intento de huida.
Después del desafortunado encuentro con Sehun, Chanyeol se sintió tan avergonzado que eso de “tenemos que hablar” quedó en segundo plano. Lo último que quería el alto ahora era enfrentar a Jongin. Se estaba comportando como un idiota, lo sabía, ¿pero que otra cosa iba a hacer?
Junmyeon llena los silencios con preguntas a Jongin y se muestra ajeno a las miradas que cruzan ambos a escondidas.
-¿Y qué tal con este?- El dedo apunta a Chanyeol y en su cabeza empiezan a sonar alarmas.
Jongin le dedica la primera mirada directa y el alto se siente desnudo de nuevo ante sus ojos. La sensación es desagradable porque Junmyeon sigue presente y esperando por una respuesta, y aunque sabe que el chico no va a dejarlo mal, él si que es consciente de la realidad.
-Muy bien.- Contesta finalmente.
-Sabía que Chanyeol era el mejor para esto.- Aquel halago le sienta como una patada pero una sonrisa falsa se dibuja en su cara.- Se nota que habéis encajado bien.
Ahora es cuando el alto mira a Jongin y se pierde en sus labios apretados apunto de decir algo.
-Chanyeol es lo único que tengo ahora.
Y este se tiene que agarrar para no caer de la silla. Aquello es toda una declaración que deja a Chanyeol con la boca seca, los ojos demasiado abiertos, su corazón latiendo rápido le tapona los oídos y apenas escucha o siente cuando su compañero le palmea la espalda y lo vuelve a halagar.
-Ahora también me tienes a mi.- Le dice Junmyeon con la sonrisa de un padre.
Jongin asiente agradecido y siente como el cuerpo de Chanyeol está inmóvil enfrente suya. No tenía planeado decir eso, para ser sincero, pero le salió y ahora estaba asustado por la pasividad de su mayor. ¿Le habría sentado mal?
La conversación se ve interrumpida por el sonido de un móvil y Junmyeon se excusa diciendo que es su mujer. Se levanta y los deja solos y en silencio.
Chanyeol ve como el chico agacha la cabeza y se encoge sobre su asiento y sabe que tiene que decir algo. Disculparse es lo que lleva haciendo casi toda la semana y permanecer callado solo le va a traer más problemas con Jongin, y él no quiere más problemas con Jongin, él quiere verlo feliz.
Por eso sin saber bien que decir se gira y ve a su compañero en la puerta del local, teléfono en mano, lo suficientemente distraído como para levantarse de su sitio e inclinarse sobre la mesa. Con sus manos atrae la cara de Jongin y sin darle tiempo a nada lo besa. Es un simple roce, un choque de labios que se corta rápido por la sorpresa del chico y la presencia del otro policía.
-Perdóname.- Repite Chanyeol.- Dile a Sehun que lo siento, me comporté como un idiota.
Jongin está en shock. Su lengua se pasea por sus labios y comprueba que el cosquilleo es real y que Chanyeol lo ha besado. Y entonces asiente.
-Yo debí de haberte avisado.- Dice bajito porque está avergonzado.
Cuando Junmyeon vuelve a la mesa el ambiente ha cambiado totalmente y Chanyeol tiene dibujada en la cara una sonrisa idiota o brillante, como quieras verlo. Y claro que se percata de eso.
-Seunhee te da recuerdos y os invita a los dos a casa.
El otro policía le habla a Jongin sobre su mujer, una chica joven y extrovertida y Chanyeol está de acuerdo en ir a conocerla.
La comida se sirve rápido, comen con una charla amena con el alto riendo y haciendo chistes sobre su compañero y Jongin se da cuenda de que ama la sonrisa de Chanyeol, su forma, su sonido y lo que le hace sentir. También se da cuenta de que esa sonrisa no tiene nada que ver con la perfecta de Junmyeon.
***
La mañana de Chanyeol da un giro cuando Jongin se monta en el coche. El “buenos días” de siempre va acompañado de un beso.
El chico se le acerca en un impulso y cuando se quiere dar cuenta siente el aliento caliente sobre si. El alto le corresponde como puede y aunque ese beso ha sido corto se siente como si le acabaran de robar algo de dentro.
Jongin desvía la mirada cuando se separa, garraspea y espera a que Chanyeol diga algo.
-Bu- Buenos días.
El trayecto se pasa en silencio y cuando Jongin está apunto de salir del coche, Chanyeol lo detiene, lo agarra del brazo y lo acerca a su boca. Entonces se besan, como aquel domingo en el apartamento del chico. Se besan despacio, con lengua y deseosos de más. Cuando se separan suspiran y Chanyeol quiere bloquear la puerta y llevarse a Jongin lejos, pero no puede.
-Ten un buen día.- Pronuncia con una sonrisa forzada.
Jongin se vuelve a acercar y lo besa, y cuando se separa se siente mejor. Ahora la sonrisa pinta ambas caras y una sensación de remolino en el estómago se hace presente.
-Ten un buen día tu también.- Le dice Chanyeol.
Cuando la estilizada figura de Jongin entra en el edificio Chanyeol suspira y se dirige a su trabajo con la sonrisa estúpida posada en su cara todavía.
Le permite a Junmyeon reírse de él y es que está como en una nube. La orden de hoy se basa en ordenar papeles con antecedentes de personas que son números y eso no le quita el buen humor. Ni la voz de Baekhyun diciendo que le cortará su parte más noble si hoy no se pasa por su casa, nada consigue borrarle la sonrisa de la cara.
La hora de recoger a Jongin llega y el saludo se vuelve a repetir. Jongin monta en el coche y espera a que Chanyeol arranque para acercarse al mayor y rozar sus labios con los suyos. La comida pasa como si de dos enamorados se tratara, pero eso solo es la percepción de Jongin que mira a los ojos directamente del alto.
La despedida es más de lo mismo. Jongin quiere decirle que suba, pero no lo hace y espera a que esta vez sea Chanyeol el que se le acerque. Y no tiene que esperar mucho. Chanyeol casi se tira encima de él y lo besa, atrapa su labio inferior, lo muerde y Jongin suspira, y casi está apunto de pedirle a su mayor que suba, pero Chanyeol corta el beso y se despide.
-Mañana nos vemos.- Dice con la sonrisa brillante.
Jongin solo puede asentir y se queda por primera vez viendo como el coche del mayor se aleja.
Una vez en la puerta de su amigo y con unas cervezas en la mano, Chanyeol escucha como Baekhyun le cambia los planes. Quiere salir y emborracharse, pero afuera.
-Debes de sacarme más, ya casi huelo a humedad.- Le reprocha el bajito.
-¿Eres mi mascota ahora?- Y ríe.
Baekhyun se acaba de dar cuenta de la sonrisa de bobo que trae el otro.
-¿Has follado?
La sorpresa hace que sus ojos se abran y duelan y Baekhyun rompe en una carcajada. Y es que Chanyeol teme más que nada en el mundo que alguien se entere de lo que pasó con Jongin. Ahora su sonrisa se acaba de esfumar.
-Es broma idiota.- Dice Baekhyun empujándolo y haciéndole caminar hasta su destino.
La primera botella de soju se acaba en un abrir y cerrar de ojos y Baekhyun ya está hipando. Sus mofletes rojos y sus ojos más pequeños de lo normal le dan a Chanyeol la idea de que su amigo de verdad necesitaba esto.
-¿Ha pasado algo?- Pregunta retirándole la botella.
Baekhyun se toma su tiempo para contestar y cuando está apunto de hacerlo su boca se arruga como si estuviera apunto de llorar.
-Yifan me ha dicho que me quiere.- La voz le tiembla cuando dice la última palabra.
Y Chanyeol se aguanta la risa porque ve a su amigo mal, pero eso es lo último que se esperaba.
-¿Por qué ha tenido que decir eso?- Le pregunta Baekhyun directamente como si su amigo tuviera la respuesta.- ¿Por qué no dejo su polla en mi culo y se calló la boca?
El alto frunce el ceño con la imagen que su amigo le acaba de describir.
-¿No es eso lo que querías?- Pregunta.
Desde que la relación o lo que sea que tuviera Baekhyun con ese tio empezara, este solo se quejó de lo descuidado que era el tal Yifan. “Yifan no me llama, no me regala nada, no me habla.”
Chanyeol ni si quiera conocía al tipo y ya le caía mal por como su amigo lo describía. Una persona fría, calculadora y descuidada con su pareja.
-¡No!- Exclama mientras coge la botella de nuevo.- No así. En realidad, ¡no!
-¿Qué?
-Que no quería que me dijera eso.- Dice al fin.- Me había acomodado... Yo, ya me había acostumbrado a que él fuera así. Y además tu y yo...
“Tu y yo...”
-¿Qué?- Vuelve a repetir Chanyeol con una ceja alzada.
Baekhyun se muerde el labio y desvía la mirada de su amigo.
-Nada.- Dice este.- Es solo eso Yeol, él no siente eso por mi. ¿Por qué me lo dice? ¿Para crearme ilusiones?
-¿Quién dice que no lo siente? No todo el mundo expresa sus sentimientos de la misma forma Baek.
El alto se calla cuando ve los ojos aguados de su amigo. Baekhyun es una persona sensible a pesar de que se oculta a través de sus continuas bromas.
-Tranquilo, tu solo tienes que decirle lo que sientes tu.
-Yo no siento nada, Chanyeol.- Le contesta rápidamente.- No por él.
Este sonríe y estira el brazo sobre la mesa para alcanzar el vaso de su amigo, le sirve y se lo ofrece.
-Se sincero contigo mismo y con Yifan.- Le recomienda y es irónico porque Chanyeol nunca podría hacer eso.
-Que fácil suena eso.- Dice el bajito después de beber de un trago el vaso de soju.
Al final Chanyeol no sabe que más decirle y pide otra botella. Cuando se quiere dar cuenta su amigo está sobre la mesa durmiendo y sabe que le toca llevarlo a casa. Cuando llega lo acuesta en su cama, no es la primera vez que tiene que traer a Baekhyun a casa por su baja tolerancia al alcohol.
Está apunto de separarse cuando el brazo delgado de su amigo lo agarra y le impide alejarse.
-No te vayas.- Susurra en su oído.
Chanyeol suspira y mira la hora, es tarde y dormir en casa de su amigo no estaba en sus planes, pero lo hace por él. Se tumba a su lado y sin ni siquiera darle tiempo, Baekhyun ya está enredado en su cuerpo. El aliento embriagador por el alcohol cae en la boca del alto y este se aleja un poco, pero su amigo no le deja y con un quejido lo acerca a él aun mas.
No hay que ser muy listo para darse cuenta de que Baekhyun quiere besarle. Sus bocas chocan y Chanyeol se vuelve a alejar. Jongin es lo primero que se le viene a la mente.
-Chanyeol.- Gime su amigo bajito.
-No puedo.- Dice el alto negándose a la petición silenciosa.
Lo único que consigue con eso es que su amigo empiece a sollozar y esconda su cara tras sus manos. Y es que es la primera vez que Chanyeol le niega un beso a Baekhyun. Tan pronto como ve el cuerpo de su amigo hacerse pequeño se arrepiente y con su mano acaricia su cabello.
-No te pongas así, Baek, por favor.- Le susurra ahora él.
Este aparta las manos de su cara y le muestra al alto las lágrimas gruesas que recorren sus mejillas. Y siente algo extraño. Jongin sigue ahí, dentro suya, la imagen del joven sonriendole, cuando se acerca a él y lo besa y cuando se queda parado mirando como se aleja. Pero ahora tiene a su amigo en sus brazos destrozado por algo que ni si quiera entiende. Y solo le está pidiendo un beso.
Por eso sin pensarlo mucho más atrae la cara empapada de Baekhyun y atrapa sus labios con sabor salado. Es un beso dulce que lo único que quiere es tranquilizarlo pero el bajo lo pega a su cuerpo y abre la boca dejando que su lengua se pasee por los labios gruesos de Chanyeol.
Está apunto de detenerlo, pero se dice que es cuestión de tiempo que Baekhyun caiga rendido por el alcohol y se duerma. En realidad está totalmente equivocado. El bajo arrastra su mano hasta el pantalón de Chanyeol y lo desabrocha con gran maestría.
-Espera Baek.- Dice como puede con la boca ocupada.
Este se hace el sordo e ignora el intento por detenerle de su amigo. Ahora además de su mano arrastra todo su cuerpo y cuando el alto se quiere dar cuenta tiene la cabeza de Baekhyun en su sexo semidormido.
-Oye, Baek, Baek, esp.- Balbucea cuando la lengua ya se ha puesto en contacto con su piel suave.- Espera, Baek. Mierda.
Baekhyun ríe cuando oye maldecir a su amigo y abre la boca para meterse por completo todo el sexo de Chanyeol.
Como puede Chanyeol piensa en detenerlo, pero no quiere tener que pasar toda la noche despierto consolando a su amigo. Por eso le deja hacer. Y aunque está mal, cierra los ojos y disfruta de la cavidad húmeda que lo tiene atrapado ahora mismo. Sus manos se deslizan hasta la cabeza de Baekhyun y lo guía en un ritmo constante.
Sin poder evitarlo los gemidos se empiezan a escapar y se entremezclan con los propios de Baekhyun que se masturba a la vez que devora la excitación de Chanyeol.
-Baek, Baek, ya voy a.- Su propósito era avisarle pero este aumenta el ritmo y cuando Chanyeol ya no puede más se corre en su boca.
La lengua de Baekhyun recoge las gotas que se han escapado de sus labios y las saborea, y no sabe si está intentando seducirle otra vez o que, pero Chanyeol lo toma por los hombros y lo besa. Y realmente eso era lo que estaba esperando Baekhyun. Un simple beso de Chanyeol.
***
-¿A quién le escribes?- Le pregunta Sehun mirando por sobre su hombro.
Jongin aparta el móvil disimuladamente y cierra la conversación de Chanyeol.
-A mi tío.- Responde con normalidad fingida.
Sehun aprieta sus labios y niega con la cabeza.
-No se que le pasa a tu tío conmigo.- Confiesa.- Entiendo que se preocupe por ti, pero.
-No se lo tomes a mal.- Lo corta el moreno.- Él solo se preocupa por mi, sabe que paso mucho tiempo solo y no se fía de la mayoría de la gente.
Las palabras que acaba de decir son una suposición, una excusa barata para el comportamiento tan raro de Chanyeol y es que ni Jongin mismo entiende que es lo que le ocurre al alto con Sehun.
-Por cierto, me dijo que te pidiera perdón de su parte.
-Dile que se meta sus perdones por el culo.- Contesta siendo demasiado brusco.- Bueno, por ahí no, seguro que él es más de dar.
El rubio rompe a carcajadas por algo que solo parece entender él y Jongin traga evitando la mirada de su amigo.
-Es broma, no te enfades.- Le dice sonriendo.
Jongin niega y cuando ve a Sehun distraído de nuevo con su móvil vuelve a abrir la conversación con Chanyeol.
“Hola, ¿qué tal?”
Le escribe sin dudar.
-Se me olvidaba.- Dice Sehun girando su cuerpo hasta el de su amigo.- Vi a tu tío cuando volvía, iba con un chico, ¿es su novio verdad?
Jongin abre la boca y la vuelve a cerrar y lleva una mano hasta su estómago, aquello se siente como una patada justo ahí.
-¿Su novio?- Pregunta con el ceño fruncido.
-Si, bueno, era un chico bajito, y lo llevaba casi en brazos.- Le explica.
Baekhyun.
Jongin sabe perfectamente que ese chico del que habla Sehun es Baekhyun. Mira la pantalla de su móvil y ve que Chanyeol acaba de leer su mensaje, pero aun así no contesta.
-¿No sabías que tenia novio?- Rompe el silencio Sehun.
El moreno niega y dibuja una sonrisa falsa en la cara.
-Él puede hacer lo que quiera.- Su tono es despreocupado y la sonrisa aun no se ha ido.
Sehun no es tonto y se da cuenta de que algo acaba de pasar, y es que su amigo a veces es como un libro abierto. Por eso decide cambiar de tema.
La hora de irse llega y cuando Jongin se vuelve a encontrar solo en el departamento echa un vistazo a la conversación con Chanyeol. No hay nada nuevo, no hay contestación del mayor y eso lo deja destrozado.
Tiene la incertidumbre, y sabe que no puede ir a reprocharle nada a Chanyeol, pero tiene que hacerlo. Con un último apretón en su estómago se dispone a escribir:
“¿Es cierto que estas con Baekhyun?”