Sasuke versión
Escuche la alarma por segunda vez y decidí ignorarla, por segunda vez.
No había podido dormir durante toda la noche, la razón estaba: confundido.
Cada vez que cerraba mis ojos recordaba el momento en el que él y yo nos besamos. Es claro que no había sido la primera vez que nos besábamos, las veces anteriores fueron accidentes; pero había algo que diferenciaba está de todas las anteriores.
Me levante de mi cama y fui directo al lavabo del baño a mojarme la cara, estaba cansado y necesitaba que algo me despertara. Moje mi rostro y me vi en el espejo, al verme no pude evitar recordar cada detalle de aquella noche…y me maldije por eso.
Él y yo siempre estábamos juntos, tanto en la escuela como fuera de ella. Se podría decir que era mi único amigo, así que era normal que las personas nos vieran juntos.
Ayer recibí una llamada de mi hermano, al parecer él se dignaba por fin a volver; menuda estupidez. Habían pasado cinco años desde que él se fue al extranjero dejándome con mis padres, en pocas palabras dejándome completamente solo. Mis padres siempre estaban ocupados, mi padre con la empresa y mi madre siempre acompañándolo. Sabía que no debía quejarme de mi situación, ya que al menos los tengo y Naruto era el que se encargaba de hacérmelo saber. Los padres de Naruto habían muerto apenas había cumplido los seis años, así que él había quedado al cuidado de su abuelo pervertido y de su tío el cual nunca se encontraba en las tardes y cada vez que yo me quejaba de que mis padres no estaban, el semblante de Naruto cambiaba, lo que hacía retractarme de mis palabras.
Cuando termine de hablar con mi hermano estaba demasiado molesto. Durante esos cinco años no había recibido ninguna maldita llamada de él. Y ahora como si nada, él llama solo para avisar que en dos días llegara a Japón, ni siquiera pregunto cómo están sus padres o su hermano, menudo idiota.
Después de la molesta llamada que recibí, decidí salir con Naruto al bar de siempre. Nos sentamos en la mesa del fondo para evitar a las personas que estaban en la barra. Todas eran mujeres y por lo regular cuando estaban borrachas eran más insoportables que nunca. Naruto empezó a hablar como siempre de todo lo que le había ocurrido, gracias a eso me pude olvidar de la llamada de Itachi. Nos quedamos callados por un instante, cuando el idiota movió su mano haciendo que la mano de él y la mía rosaran. Me sorprendí cuando el agarro mi mano, mire nuestras manos y al momento de levantar observe el perfil de mi amigo, el voltio y nos miramos. Naruto se empezó acercar a mí, quería apartarlo pero mi cuerpo no me respondía y sin darme cuenta yo también termine por acercarme a él, y nos besamos.
Mi amigo estaba demasiado ebrio, así que después del beso decidí que lo mejor era salir de ahí. Ayude a que él se parara y nos encaminamos a la salida. Nuestras casas no estaban demasiado lejos así que pensé que la mejor idea era caminar hasta ellas para que a mi amigo se le pasara los efectos del alcohol. Me lleve a Naruto ayudándolo a caminar avanzamos poco ya que me detuve al verlo tan mal. No era la primera vez que Naruto se ponía ebrio así que sabía qué hacer en situaciones como esas.
Me detuve en un callejón que para mí gusto era desagradable, mi amigo como si nada se recargo en una de las paredes esperando a que se le pasara el mareo. Después de unos minutos me percate de que él idiota se había quedado dormido y me enoje, ya que no podía creer que él se quedara dormido en una situación como esa y lo peor: en un lugar como ese.
Decidí despertarlo de la peor manera posible en ese instante, que era empujando por un lado para que perdiera el equilibrio, al ver que el golpe no dio resultado que esperaba opte por agarrarlo por los hombros y moverlo bruscamente. Al momento en que hice eso mi amigo asustado se despertó, nuestras miradas encontraron por segunda vez en el día.
Y fue ahí cuando me empecé a percatar de que esta vez el que se acercó primero no fue él sino yo. Aún sigo sin comprender por qué hice lo que hice.
Me acerque lentamente a él, era como si de alguna manera algo me atrajera. Otro beso.
Al momento en el que nos besábamos pude sentir como aumentaba la intensidad, le mordí su labio y empezamos a jugar con nuestras lenguas. Cuando terminamos el beso, los dos nos quedamos sin aliento, era increíble que el beso más largo que había tenido con alguien sea con este idiota.…….
Recibí un mensaje, lo que hizo que saliera de mis pensamientos. Por un instante desee que fuera de Naruto pero para mi sorpresa era Sakura.
Menuda molestia, pensé, no es que la odiara pero ella era alguien irrelevante en mi vida. Ignore el mensaje y salí de casa dirigiéndome a la escuela.
Trate de no recordar nada en el camino, pues era molesto.
Al llegar al salón de clases me di cuenta de que el idiota aun no llegaba, por lo regular él llegaba temprano y no gracias a él sino a su tío. Una parte de mí se sentía preocupado, por otra parte estaba mi orgullo, el cual decía que lo ignorara.