-Qué tontería.- me dije a mi mismo. Volví a poner la invitación en el sobre y la arroje al casillero, mire mi teléfono para ver la hora; 7:20, tenía que apresurarme solo me quedaban quince minutos de tolerancia. Camine rápido por todo el pasillo hasta llegar a las escaleras, subí al primer piso y mi salón quedaba justo a la vuelta. Me asome por la ventana, el maestro pasaba lista; aún no llega a mi apellido lo que quiere decir que todavía no pierdo la asistencia, to que la puerta para llamar su atención, el maestro volteo a la ventana, sacudió la cabeza y me hizo un gesto con la mano para que pasara. Entre y fui directo a mi asiento mientras el maestro me sermoneaba sobre mi retraso.
-intente más temprano, Evans.-dijo con aliento reprobatorio.
-lo intentare.-volvió a sacudir su cabeza y siguió pasando lista. Yo acomode mis cosas a lado de mi asiento, como siempre. Me tome un momento para respirar, no fue mi culpa llegar tarde, anoche: mamá y papá me dieron permiso de quedarme solo este viernes mientras ellos iban a la boda de la tía Luz: no sin antes darme un montón de instrucciones:
1) No debo desordenar la casa y si lo hago tengo que recoger los desastres que haga.
2) Me dejaran algo de dinero para comprar comida pero no debo gastarlo en comida chatarra.
3) No dejar entrar a nadie desconocido.
4) Recoger el correo aunque no “espiarlo”
Y la última y más importante para ellos.
5) NADA DE FIESTAS EN CASA.
Ese es el mayor miedo de los padres, dejar solos a sus hijos y que ellos hagan una fiesta que se salga de control ellos terminen pagando el daño de sus hijos, a veces literal u otras veces metafóricamente. Aclarando de antemano: No estoy enojado, molesta que ellos no confíen más en mí, se tomaron UN MES para decidir si está bien dejarme solo y ni aun así están seguros de que no hare algún destrozo. O tal vez… solo soy negativo, es la primera vez que me dejan solo por mucho tiempo y posiblemente están asustados de que algo me pase.
-¿la recibiste?-susurro Jason para no llamar la atención del maestro.
-¿recibir qué?-en voz baja.
-¡dah! La invitación para la fiesta del jueves en la noche.
-sí, la recibí, igual que los últimos dos años.-sin aire de emoción.
-algo me dijeron sobre aquello. Dicen que es una fiesta que organizan los alumnos de un grado diferente, una vez al año en una cabaña, algo así.
-no la organizan los alumnos, eso es solo un rumor. Nadie sabe quién la organiza, solo se sabe que es en un lugar diferente cada año y que se invita a todos los alumnos de la escuela sin excepción. Casi toda la escuela va y dicen que son increíbles. Ya sabes: buena música, baile, bebidas alcohólicas, el tipo de cosas que se supone le gustan a los adolescentes.
-eso suena bien, ¿y vas a ir?
-por supuesto que no.- Jason se me quedo viendo con sorpresa. La respuesta que él esperaba era positiva, hora de explicar mis motivos.- No iré a una fiesta con un montón de gente que no me agrada, que a lo único que ira es a emborracharse y a tener sexo.
-¡Jason y Alexis!- demonios, cuando el maestro te llama por tu primer no nombre significa que estás en problemas.-Si tienen algo que compartir con la clase entonces pasen al frente y díganlo.
-n-no señor, no hay nada que comentar.-respondí avergonzado.
-¿y tú, Jason?
-t-tampoco tengo nada que decir.-puedo escuchar las pequeñas risas burlonas a nuestro alrededor.
-entonces guarden silencio y presten atención a la clase.-regreso al pizarrón.
-Está conversación aún no termina.-me dijo Jason. Que testarudo, ahora no se rendirá hasta que yo acceda a ir con él.
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No me equivoque. En la hora de receso:
-por favor
-no
-por favor
-no
-por favor
-¡que no, por un demonio!-siento que estoy peleando con un niño ¡y lo peor es que respondo!-¿no entiendes? Ya te dije mis razones y sigues insistiendo. ¡No iré a esa estúpida fiesta y punto!
-no seas aburrido.
-mira: aunque todas las razones que te he dado no fueran suficientemente validas.-y desde mi punto de vista, lo son.- mis papás se irán ese día a una boda algo lejos y no regresaran hasta el sábado.
-¿y…?
-agh, y: si no van a estar ¿quién cuidara la casa?
-Alexis.-puso sus manos en mis hombros y me miro a los ojos de una manera seria e incómoda.- tenemos quince años; haremos un examen para entrar a otro nivel en mes y medio, las probabilidades de quedarnos son muy pocas.- ¿eso que tiene que ver con lo que estamos hablando?- lo que digo es: que quiero tener una buena noche olvidándome de ese asunto y de los problemas de mi casa y cuando lo haga me gustaría que mi mejor amigo este ahí conmigo.-maldición, ahora no me puedo zafar de esto, a menos que…
-me encantaría hacerte ese favor, pero ya te dije: mis padres se van-
-¡esa no es una excusa! Si tus padres se van es mejor, así no hay nadie que te presione para llegar temprano a casa y la noche será más divertida.-lo más irónico es que como el viernes se suspenden las clases está bien si llego al amanecer o más tarde.-Sé que la mayoría de la gente en la escuela no es de tu agrado; así que puedes ver está fiesta como la forma de celebrar que no los volverás a ver.
-no estoy seguro.-sinceridad.
-¡ash! ¿y ahora porque?-quito sus manos de mí con frustración, ahora el que acaba con la paciencia del otro soy yo.
-tengo un mal presentimiento, ¿no te parece sospechoso? Que alguien haga una fiesta… y que invite a todos sin falta, es obvio que esta persona quiere algo.-Jason se pasa la mano por la cara, creo que empieza a desesperarse.
-Se honesto ¿sabes de alguien que haya desaparecido en estas fiestas?
-mm… pues no.
-¿alguien fue extorsionado para hacer algo que no quería?
-que yo sepa no.
-¿alguien termino muerto en esas fiestas?
-creo que… no.
-¿entonces? No hay razón para decir que no, la dirección de la fiesta está por el vecindario, así que puedes estar tranquilo e irte cuando lo desees.
-bueno… lo voy a pensar, te lo diré el jueves cuando lleguemos a la escuela.
-está bien.
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Cumplí mi promesa, lo pensé y lo pensé durante tres días: Jason tenía buenos puntos, no había razón por la que sentirme ten inseguro, he decidido ir a esa fiesta, ya se lo dije. Obviamente ni se lo comenté a mis padres, no lo aprobarían.
Regreso a casa, papá y mamá se fueron hace horas, la fiesta es hasta la noche.
¿Esto está bien? Siento que algo va a pasar, algo me lo dice. Posiblemente solo sean los Doritos con salsa que comí en el descanso. Ahora, ¿Qué clase de ropa se usa en una fiesta? Normalmente me daría igual, de hecho, me da igual, llevare la primera ropa que me encuentre, no es como si mamá fuera a regañarme porque mis zapatos y mi pantalón no van (como siempre lo hace).
Bien, aún falta una hora para que Jason venga a recogerme, voy a revisar unas cosas en la computadora y después me arreglo. Pero cuando fui al lugar donde tengo la Pc vi que había unos pantalones de mezclilla entubados junto con una camisa roja a cuadros de manga tres curtos, nuevos. Mamá debió comprarlos el día que se fue a comprarse su vestido para la boda, ella sabe que a mí no me gustan este tipo de pantalones, mis piernas son algo… se parecen a las de una chica, no son tan musculosas o tan huesudas como normalmente las tienen los hombres, mamá siempre me dice que parecen de modelo por ser largas y no gordas, por eso quiere que use este tipo de cosas. Mm… lme probare está ropa, si no me gusta me la quitare y se acabó.
20 minutos después:
Sinceramente creo que la ropa me va un algo bien, pero aún no estoy seguro si debo usar estas prendas.
Tocaron la puerta, voy a ver quién es.
Jason, nos quedamos viendo un rato, más específico: yo me quedo algo sorprendido porque él debía venir por mí en cuarenta minutos más, él se queda viendo mi vestimenta.
-¿qué, me manche de algo o…?
-o, no, no, para nada, solo que… te ves bien.
-¿eso es sarcasmo?-lo dejo pasar y cuando se sienta en el sofá cierro la puerta y me siento a su lado.
-no, es que me acostumbre a verte siempre con ropa menos llamativa y… que no combinaba. Nunca creí verte tan bien vestido.
-porque para mí es más importante estar cómodo, ¿Qué no debías estar aquí en un rato más? En eso quedamos.-enciendo la televisión.
-lo fiesta es en un rato más, yo estoy aquí para estar menos rato con mi familia.
-si sigues con esa costumbre tengo el presentimiento de que te volverás el tipo de adulto que busca cualquier excusa para no estar en casa con su esposa e hijos.-le dije en broma.
-sí, cuando menos te lo esperes me la pasare en tu casa para que veamos una película mientras mis hijos se estén graduando.-me sigue la broma.-ah y por cierto ¿Qué tal mi atuendo?-me le quede observando unos minutos; traía una camisa abotonada en color verde olivo que hacía lucir su buen físico y unos jeans negros que acentuaba su cintura.
-no tengo muy buen sentido de la moda pero sere sincero: te vez menos gordo.-él se empieza a reír y luego dice:
-¡te matare!-y me arroja un cojín a su lado.
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(N/A: a partir de aquí hare algo similar a la última parte de “Ciudades de papel” ósea que el reto del cap será narrado en horas.)
HORA 1
Llegamos a la dirección de la fiesta muy tarde, como a las 10:00 pm la fiesta empezó hace una hora pero Jason quería terminar de ver la película. Como sea, es en un hotel lujoso, ya saben, donde algunas compañías hacen sus reuniones anuales o algo así. Solo que; 1) no somos una compañía y 2) en vez de trabajadores somos un montón de adolescentes que probablemente harán grandes destrozos que al anfitrión le saldrán muy caros, cosa que al parecer no le importa ya que sigue haciendo estas fiestas.
Adonde sea que veo solo hay estudiantes y uno que otro chaperon, logro distinguir a Cristal besuqueándose con alguien de segundo, o alto, el tipo se propazo, Cristal le dio una bofetada y se marchó con sus amigas. No sé por qué se molesta cuando ella misma se dio la fama de “fácil”.
Cerca de la barra de bebidas veo a Derek con su grupo de amigos, rodeados de mujeres que andan de ofrecidas con él y otros, ellos se dejan.
Yo tenía razón, estas fiestas son solo para ligar y emborracharse.
-¿quieres algo de beber?-me dice Jason, grita un poco ya que la música está muy alta.
-si claro, estaré en esa mesa.
Una mesa en un rincón apartado de todos, después de todo no puedo cambiar, soy el chico antisocial, esto es así. La gente se empieza a reunir para bailar en la pista, algunos con pareja y otros solos. Por supuesto que no se bailar, jamás lo he intentado ya que si lo hago muy mal eso hubiera clasificado como una persona vergonzosa y hubiera “llamado la atención”, hace mucho que llamó la atención aunque no por eso voy a dejarme avergonzar.
-aquí tienes.-Jason puso enfrente de mi un enorme vaso con un liquido amarillo, lo probe, el sabor era asquerosamente amargo, lo peor que probe en mi vida.- ¿Qué es esto?-dijo entre tosidos.
-cerveza.-él le da un sorbo a la suya como si nada.
-¿enserio Jason? Yo no bebo, a lo mucho tomo sidra en navidad.
-bueno pues siempre hay una primera vez para todo.-otro sorbo.-yo tampoco soy mucho de tomarla pero vamos, es tú primera fiesta tienes derecho a disfrutarla y alocarte.-tercer sorbo. Lo pensé cinco minutos di un suspiro y le di un segundo sorbo a mi vaso, vaya, es cierto lo que dicen, el segundo no sabe tan mal.-excelente.-choca su vaso contra el mío.
Tal vez una no me haga nada.
HORA 2
¡ES LA MEOR NOCHE DE MI VIDA! Llevo cuatro cervezas y estoy excelente, fui a la pista de baile junto con ese sujeto… ¿Cómo se llama? ¿Janson? ¿Jaiden? Bueno ese, ahora lo perdi de vista pero volverá luego. Sin querer choque mi espalda contra alguien.
-o disculpa ¡ey! ¡Eres tú!
-jaja así es, creo que soy yo.
-¿oye por que no bailas un poco más?-dijo colgándome de sus hombros.
-ok, solo si tú eres mi pareja.
-eres un tipo muy tramposo pero creo que eso me gusta un poco así que bueno.
HORA 3
Me canse de bailar y fue con este sujeto a sentarme, se mueve bien.
-jaja, nunca creí verte así. Tan… descontrolado.-que bonita sonrisa tiene.
-hoy me siento diferente, como… si pudiera hacer cualquier cosa y sentirme feliz.-le hago una señal al camarero para que me trajera otra margarita.
-eso es bueno, siempre te ves algo triste.
-no estoy triste, solo soy algo tendiente a depresión.-que rapidos ya la trajeron.
-ya veo.
-mjf.-le doy un sorbo y luego la dejo en la mesa.- sabes lamento haber sido tan cruel contigo la otra vez pero no podía hacer nada.
-no te preocupes, eso fue hace mucho ya ni lo recordaba.
-ok, ¡oh, mira! ¡Haya están jugando virpong! ¡Hay que ir!
HORA 4
-¡Sor el rey del virpong!
-bien hecho su majestad.-me dice.
-y desde ahora tú eres mi caballero.
-sería un honor.-se inclina en señal de respeto aunque estoy muy ebrio sé que es de broma.
-entonces te nombro.-empecé a caminar hacia él pero me tropecé. Él alcanzó a sujetarme de la cadera antes de que tocara el suelo, debo apartarme de su lado pero el cuerpo no responde, nos quedamos viendo un rato, que hermosos ojos tiene, no me controlo, él se acerca a mí, yo cierro los ojos.
Y me besa.
El beso se empieza a alargar, es el primer beso de mi vida, y más que nada está lleno de autosatisfacción, la verdad no encuentro otra razón por la que sigo haciendo esto. Despues de un rato nos separamos, me quede viendo un poco más sus ojos, y sus labios y su nariz, Hasta que sus labios se abrieron para decir:
-Ven conmigo
Me llevó de la mano hasta una habitación. Enorme. Es la palabra perfecta para este lugar, enorme. La cama es muy grande, tiene unas hermosas colchas rojas adornadas con toques dorados. Él empieza a abrazarme por detrás y a besarme el cuello. No soy idiota, se perfectamente lo que va a pasar aquí, pero lo deseo tanto que no lo evitare.
Empezó a desabotonarme la camisa, cuando termino yo le quite la suya. Vi su torso, bien marcado. Nos volvimos besar caminamos hasta que llegamos a la cama, me desabroche el pantalón rápidamente hasta que termino en otro lado de la enorme habitación. Por último él me arrebato la ropa interior, lo único que me quedaba.
Comenzo a acariciarme por todos lados, luego a besarme los botones, no fue ni succionarlos ni morderlos, los beso. Incluso en estos momentos sigo sin entender porque la gente me trata como si fuera algo frágil. Sentía sus ladios desde mi cuello hasta el ombligo, yo intentaba devolverle estó, no pude hacer mucho, solo lograba ver su cuello.
El tipo estaba erecto, y todavía así no se desesperó por hacérmelo rápido, vi cuando se puso el plástico, al menos tengo la seguridad de que no me enfermare está noche. En vez de hacerlo por detrás quize que me lo hiciera por… esa avertura ya que por ahí no necesito lubricarme, esa habilidad me la brindo la maldita madre naturaleza, pero si me estimulo, sentí su dedo dentro de mi, luego el segundo, hizo movimientos de tijera para entrar más fácil pues el tipo no lo tiene nada pequeña o tan siquiera mediana, me dio pánico al principio, no pensé que eso entrara por ahí.
Sentí como la punta entraba, el resto del camino fue más doloroso aunque no tanto como creí, cuando entro toda ambos empezamos a movernos simultáneamente para tener más contacto, definitivamente es la mejor noche de mi vida. Y a la mitad del camino se detuvo.
-¿q-que sucede?-dije con cierto agotamiento en mi voz.
-n-no es nada.- y siguió con lo suyo.
Lo único que alcanzaban a escuchar mis oídos eran mis propios gemidos y al otro llamándome por mi nombre, ya no aguante más y por lo visto el tampoco y coincidentemente nos corrimos al mismo tiempo, no vi cuando salió de mí solo lo sentí. Y al final escuche como el me susurraba “te amo” pero no le respondí, aunque no hubiera caído dormido tampoco le respondería, yo no siento nada, eso no fue más que un simple momento de autosatisfacción, un momento de placer.
“pero como dicen por ahí: por un momento de placer hechas tu vida perder”