¿Saben que es estúpido? Que llevo casi tres meses en esta casota y apenas me entere de que tenía alberca. Fue por accidente que lo descubrí: ayer estaba aburrido y me puse a explorar, entonces llegué a una puerta (la cual probablemente me mostraron el día que llegue pero no lo recuerdo por qué no puse mucha atención que digamos), la abrí y había unas escaleras que al bajarlas llevaban a esta bonita piscina de forma rectangular, techada, con calefacción automática y con unas bonitas sillas de playa. Un poco más a la derecha hay una especie de "cocina", no sé cómo se llama aunque hay un pequeño refrigerador con bebidas, comida y, lo que más me importa hielo.
Esta "pica" (creo que así es cómo me dijo Dereck que se llamaba), ya duró mucho, no es cómo si no tuviera otros antojos (me encantan las alitas con salsa cajun), sin embargo el hielo sigue estando en el primer lugar.
Ahora estoy sentado en la orilla; con un short de pesca, una playera blanca y con mis piernas pataleando en el agua. Hoy ya estuve nadando un rato, no seré nadador profesional, menos con este bebe dentro, solo nado para pasar el rato. Nado con ropa porque de esta forma es más cómodo, mi mamá siempre me decía que la ropa no es para nadar, nunca le hice mucho caso en cuanto a eso.
-hola Evans.- dice Dereck llegando conmigo y poniéndose en cuclillas para hablar.
-hola, ¿cómo sabías que estaba aquí? -inconscientemente me frote en el vientre, ese gesto se ha vuelto muy frecuente, y dejó de importarme hace tiempo.
-Lucy me dijo que llevas aquí toda la mañana.- se sienta para estar más cómodo.- veo que te entretienes mucho en este lugar.
-es genial, aunque sigue siendo algo difícil entretenerme.
-oh, entonces... ¿quieres salir mañana?
-¿de verdad? ¿Y tú trabajo?
-puedo faltar, les diré que es una "situación familiar". - sonreí.
-que malote.- bromé y el soltó una veloz carcajada.
-no tienes idea de cuánto.- sonríe.- ¿y a donde quisieras ir?
-mmn... la última vez decidí yo, ahora te toca a ti.- se rasca la mejilla, donde se ve que su barba está volviendo a crecer, ¿que se sentirá tener barba? Asumo que incomodo pues, tienes que afeitarte todas las mañanas, y no hay que hablar de las irritaciones. Oh alto, Dereck va hablar.
-pensé que podríamos ir al centro comercial y ver-
Antes de poder terminar la oración mi celular, desde la mesa, comenzó a vibrar y a reproducir el tono de llamada que le asigné a Jason. Mi intención era ignorarlo para escuchar lo que Dereck me estaba diciendo, sin embargo él me dejo contestar. Con un poco de dificultad me paré y fui a la silla de playa donde deje mi cel.
-¿hola?
-¡ayuda! -dijo de inmediato.
-¿qué pasó? -dije un poco alarmado por la forma en que contestó.
-¿podrías... venir mañana y pasar un rato con mi hermano? -ladeé un poco la cabeza.
-¿me pides que sea niñera?
-este... sí, creo que es la mejor manera de llamarlo.
-no lo creo, Jason, ya estaba haciendo planes con-
-¡ándale no seas malo! Si te lo estoy pidiendo es porque es REALMENTE NECESARIO.- dijo haciendo énfasis.- mis papás van a salir en la noche, y yo debo ir a una estúpida obra para la clase de filosofía.- ¡rayos, no quiero fallarle a Jason! ¡Pero tampoco quiero quedarle mal a Dereck!
-mira, voy a hablarlo con Dereck y te aviso en un momento ¿va?
-bien.
Entonces colgué el teléfono y me puse a hablar de eso con Dereck, quien (si se ve que no le agradó del todo la idea) aceptó.
Después de eso decidí nadar un poco más, esta vez Dereck también entró a nadar. Solo que; "mi nadar" no es nada comparado a "su nadar". Yo apenas y salgo de la parte donde me puedo sentar bajo el agua, mientras Dereck va por la decima vuelta de un extremo a otro, puedo ver su fuerte espalda fuera del agua, y de vez en cuando su cara, no trae goggles así que le deben arder los ojos por el cloro de la alberca. Después de la decimo-quinta vuelta se detiene y se va a la parte alta parte alta conmigo.
-¿por qué nadas con ropa?
-nunca me he sentido cómodo con trajes de baño.
-pero la camisa se te va a transparentar.- me avisó (?)
-no importa.
De la nada Dereck se metió bajo el agua, creí que bucearía hasta que vi cómo su figura se acercaba a mí.
-¡woh!
Debajo del agua, sentí dos manos al rededor de mi panza y una pequeña presión en mi ombligo. Después al dueño de esas manos salió a flote en lo que yo puse mi mano arriba de mi panza.
-creo que te tomaste muy enserio lo de "no me tienes que pedir permiso".- se echa el cabello para atrás y se quita la mayor cantidad de agua que puede de la cara.
-perdona, es que... era algo que quería hacer desde hace un tiempo.
-¿por qué no lo pediste antes?
-tenía miedo de que te enfadaras y me prohibieras tocarte o... tocarlo, mejor dicho.- hundí mi cabeza hasta debajo de mis ojos por la vergüenza, creo que si me porté muy altanero al principio cómo para que él tuviera ese miedo. Siento que me falta el aire así que regreso toda mi cabeza a la superficie.
-Dereck, yo... no quiero ser la clase de adolescente en estado que dice "me jodiste la vida maldito, así que yo arruinare la tuya para vengarme", quiero intentar que nos llevemos bien el tiempo que estemos juntos.- aunque sean solo estos cuatro meses restantes. Solo que eso no lo sabe él.
-gracias.
-no hay de qué.
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Llegué a casa de Jason a las siete de la tarde, sus padres estaban muy ansiosos por irse, creo que iban a ver algo de unos pagos o algo así, él se fue con ellos en el auto porque lo iban a dejar en el teatro.
Entonces me quede con "el mocoso insoportable", así es cómo le decía Jason las pocas veces que hablaba de su familia. Su nombre es Carlos, se parece a su hermano, solo que con el cabello más claro, corto y rizado, y los rasgos de Jason son más finos. Su mamá me dijo que tiene prohibido ver la tele, y que si podía ayudarlo a hacer la tarea (eso lo dijo viendo a Carlos un poco molesta). Llevamos cómo veinte minutos y ya casi terminamos, Jason dice que Carlos tiene la "maldad" de portarse cómo un angelito con gente nueva y portarse cómo realmente es: un niño frustrante, impaciente y berrinchudo. Aunque es muy listo, lo único que se le complica un poco son las restas de llevar, de ahí en fuera todo es fácil.
Veo su mochila donde hay un folder forrado con un papel de piratas.
-¿qué es eso? -dije en lo que lo tomaba y lo abría.
-son mis hojas de evaluación diaria.
En la hoja hay una tabla, en la primera fila vertical están los días de la semana de lunes a viernes, y en la primera horizontal están las siguientes materias en este orden:
- matemáticas
- español
- formación cívica
-Artes
- educación física
- inglés
- conducta.
Puedo ver que no le va muy bien en la cuestión de conducta, su calificación en esa área no pasa del siete. Fijé la vista en la evaluación de hoy y entendí porque solo había tarea de matemáticas y porque su mamá lo castigó sin ver televisión; hoy sacó cinco en matemáticas y en conducta.
-Carlos, puedo ver que eres muy listo ¿entonces porque estas calificaciones? -dije en un tono suave y él bajó un poco su cabecita y no me contestó.- anda, dime.
-la escuela es muy aburrida, no me gusta estar sentado en esas bancas, así que me pongo de pie para jugar y la miss me regaña.- lo dice de un modo tranquilo aunque enojado.
-tú puedes ser mejor que esto.- es la primera vez que cuido a un niño, no sé qué hacer entonces le revuelvo los cabellos esperando que el contacto no sea del todo raro. Algo me dice que no lo fue, ya que rió.- ¿tienes hambre? Porque yo sí, y mucha.- me paro y voy a la cocina, Sara, la mamá de Jason, dijo que podía tomar lo que quisiera, veo que en el refri hay cómo unas tortillas de harina con especias, luego veo la salsa de tomate y el queso y se me ocurre una idea.
-¿quieres ayudarme a cocinar? -Carlos se pone muy emocionado y asiente.
Enciendo la estufa y en un sartén pongo la tortilla, esta será la base. Después le pongo un poco de salsa y la esparzo por toda el área de la tortilla. Luego hice lo mismo con el queso.
-¿Carlos, ya tienes listo el jamón? -lo atrape justo cuando se metía un trozo chico a la boca. Le pedí que hiciera trocitos, los cuales puse al final de todo. La puse en un plato y la dejé enfriar.
-¡es pizza! -dijo muy asombrado y con una gran sonrisa en su rostro.
-creo que ya se enfrió.- digo pasándole un cuarto en un platito.- ¿quieres cátsup?
-aja.- le pasé un sobrecito de un frasco que tenían en la alacena, de seguro los van juntando conforme van comprando comida rápida.
-¡eres genial, Ale! -dice dándole una mordida a su rebanada.
-bueno pues muchas gracias.
-¿no tienes calor? No te has quitado ese enorme suéter desde que llegaste.
Lo traje para disimular, no sé cómo un niño tomaría esto, ¿qué tal si se asusta? (Además no se qué pensarían sus padres).
-n-no, estoy bien.- entonces Carlos agarró unas servilletas y se limpió sus dedos y su boca (sin embargo aun tiene un poco en la punta de la nariz). Se baja de la silla y se dirige a mí.- ¿o-oye que estas-?
Carlos bajó el cierre de mi súper chamarra y la abrió un poco. Me puse muy nervioso, entonces a él se le iluminaron sus ojitos y sonrió más.
-¡tendrás un bebe! -no lo preguntó, lo afirmó, y muy emocionado. Yo me sorprendí por lo rápido que llegó al intuir que este vientre era por un bebe y no por comida.- Wow, eres el primer doncel que conozco.- ¿?
-¿doncel? -dije confundido.
-la Miss dice que así se les está llamando ahora, en mi opinión suena más bonito.- bueno, eso es cierto.- ¡oh! ¿Es un niño o una niña? -el no aparta la vista de ahí, incluso se arrodilló para estar más cómodo.
-a-aun no lo sé, me lo dirán la próxima cita, es en dos semanas.- sigo nervioso, necesito relajarme, ya se enteró y no puedo hacer nada para que se le olvide.
-¿crees que pueda jugar con él o ella? -tomé aire y me calme un poco.
-seguro, pero antes debe nacer y luego crecer un poco.
-¡qué bueno! Aquí nunca nadie juega conmigo.- su mirada se puso más triste aunque sin apartarla del mismo lugar.- mami y papi se enojan mucho conmigo, aunque luego se disculpan por gritarme y me dicen que me quieten, mas siempre están muy cansados para jugar.
-¿y qué hay de tu hermano? -justo al decir eso se aferra a mí, más especifico a mi panza y pega su frente en donde esta mi ombligo.
-Jason siempre llega muy tarde a la casa, además él es grosero y nunca me ha dicho que me quiere, y tampoco juega conmigo. Dice que soy fastidioso.
Simplemente no podía creerlo. Jason, mi amigo Jason, que siempre se portaba amable con todos y que adora la naturaleza... ¿era malo con su hermano de siete años? Si bien todos somos uno en casa y otros afuera, jamás pensé que ese significado estuviera tan apegado a algunas personas. Vale, de Dereck puedo imaginarlo todavía ¿pero de mi mejor amigo?
-Ale... -dijo suavemente Carlos sacándome de las nubes.
-dime.- dije acariciando su cabello.
-¿quieres a tu bebe? -si hubiera estado tomando algún liquido cuando me hizo esa pregunta, lo más probable es que me estaría ahogando ahora mismo. ¿Cómo puedo explicarle mis sentimientos a un niño sin que se ponga triste?
-bueno... -agarré a Carlos de los brazos y lo senté en mis piernas.- ¿Cuántos años tiene tu mami, Carlos?
-mm...- empezó a hacer memoria.- cuarenta y tres.
-bueno, ella te tuvo cuando ya era grande.- el estaba poniendo total atención, podría decir que más que cuando hacíamos la tarea.- bueno, yo tengo la edad de Jason ¿crees que estoy listo para tener un bebe? -dije de manera suave.
-nm... no.
-exactamente, así que a mí me cuesta mucho trabajo poder quererlo cómo tu mamá a ti.
-Aaaah...- dijo asintiendo despacio, creo que logré que lo entendiera.
Puede que Carlos si se porta cómo un ángel por lo que dice Jason, pero de todas maneras fue lindo tener a alguien que no me dijera "ese bebe no tiene la culpa" o "tienes que quererlo". Fue bueno encontrar a alguien que no me dijera lo que debo o no debo sentir y hacer. Aunque sea un niño de siete años.
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Jugué videojuegos con Carlos un rato, su mamá no dijo nada sobre eso, le encanta Plantas vs Zombis, lo note desde que vi su mochila y playera. Luego de eso se quedó dormido en su cama. Ya que él estaba descansando prendí el televisor.
Tal vez por simple curiosidad, volví a ver su hoja de evaluación. Abajo de esa tabla había una parte que decía "NOTAS" se guida de dos puntos y cinco líneas horizontales para escribir. Y decían: "hoy Carlos le pego a un compañero y estuvo corriendo en el recreo", "no terminó el trabajo y estuvo interrumpiendo clase". Ninguna nota era buena.
-pobre Carlos, no debe ser fácil para él.- dije al aire.- ¿qué es esto?
Miré la parte superior y vi que decía.
Escuela Primaria "Jorge Matías" de tiempo completo.
Grupo: 2·B
Alumno(a): Carlos Emilio Parra.
¿Parra? ¿No se supone que debe ser Masner? Creo que después le preguntaré a Jason.
Entonces escucho el timbre y cuando abro los padres de Jason, y Jason, están ahí. Y... se me olvidó ponerme la chamarra.
-oh... volvieron antes.- digo mientras la sangre empieza a subir a mi rostro.
-si... este... teníamos miedo dejarte mucho tiempo con Carlos.- ¿miedo? -Jason nos dijo que tú estas... bueno.- señaló mi panza con su mano. No me enojé ni nada, de hecho agradecí que Jason se preocupara por mi y este pequeñito.
- no hay de qué preocuparse, está dormido.- ellos se miraron extrañados y luego volvieron la vista a mí.
-¿quién está dormido? -preguntó Jason. Bueno, ahora soy yo el extrañado.
-pues... Carlos ¿quién más?- Sara se tapó la boca con su mano izquierda, Jason abre sus ojos de la impresión y su papá igual.
-¡¿cómo lo hiciste?!
-no fue muy difícil, él solo dijo "estoy cansado" y lo llevé a su cama.- le expliqué a mi amigo.
-vaya, nunca quiere dormirse temprano.- dice Susan mientras busca algo en su bolsa, saca su cartera un billete de cincuenta y otros de doscientos, y me lo ofrece.
-oh, no gracias, déjelo así-
-no, sé que mi hijo puede ser muy desesperante, y… tú lo necesitas.- ¿?
-eh… mamá.- dijo Jason.
Creo que Jason no dio detalles de todo lo que me esta sucediendo, lo que es bueno. Aunque ahora esto se puso incomodo. Le dije a Sara que no era necesario el dinero y que me divertí cuidando a Carlos. Note que si es un niño muy energético, pero muy ocurrente y amistoso. Creo que aunque es muy difícil sus papás hacen lo posible por ayudarlo, por más difícil que se les haga.
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Al día siguiente me quede en la casa, no tuve muchas ganas de nadar. Dereck no solo trabaja medio día hoy así que ya no debe tardar en llegar. El señor Aldrich fue a una convención de empresarios por un par de días, y Lucy se tomó el día libre, creo que salió en una cita o algo así, varias veces la escucho hablar por teléfono con quien sabe quien, me alegro por ella, se lo merece. En cuanto a Nat; tiene un examen de química el lunes y dice que no tendrá contacto con la humanidad hasta que haya estudiado lo suficiente como para sacar mínimo un noventa y tres.
Oh, creo que Dereck regresó. Cierro la puerta de mi cuarto y bajo las escaleras para verlo en la sala de estar. Despues de saludarlo y preguntarle cómo le fue en el trabajo, en parte por curiosidad ya que aquí no hay nada interesante y en parte por cortesía. Él en cambio me pregunta que como he estado yo y como ha estado el bebe, yo respondo que bien. Luego recuerdo que ayer me surgió una duda, ¿Quién mejor que “el súper-genio” para responderla? Lo acompaño hasta la cocina en busca de un vaso de agua, en lo que el se lo sirve yo preguntó.
-¿Dereck, que es Doncel?- el le da un trago al agua y después de pasarla responde.
-Creo que es la nueva forma de llamarle a las personas como tú, aunque no es de forma burlesca.- da otro sorvo.
-oh, ¿y qué quiere decir?
-el significado literal sería: joven en pleno desarrollo.- eso me confundió un poco, aunque creo que de algún modo tiene sentido.- aunque creo que se refiere más al segundo término: Doncel es la denominación de un oficio de corte de la monarquía castellana bajomedieval.
-Dereck, entiendo tu inteligencia y así, pero no comprando.
-Cierto. En pocas palabras se refiere al masculino de las doncellas de los cuentos clásicos, es algo así como una ironía.- Eso me queda más claro.- en mi opinión suena mejor que Virmu o Femino.
-en eso no te puedo contradecir.- También me dio sed, y yo igual me sirvo agua.- oye, ya no me dijiste a donde querías ir, ayer no se pudo pero podemos mañana, no tienes trabajo.
-me gusta, quería decirte que si vamos al centro comercial. Técnicamente no sería una cita porque… quiero que vayamos a comprar cosas para la habitación del bebe.- me impresiono, no es como que esperara una cita, incluso admiro ese sentido de responsabilidad que está teniendo, pero al mismo tiempo siento que aun teme que yo me enoje.
-por supuesto, solo tengo una condición.- el me deja seguir hablando.- no quiero cosas amarillas.
-¿Por qué? –dice algo curioso.
-motivos personales, detesto ese color.- podría dar una larga explicación sobre eso, pero por una vez prefiero aurrarmela.
-Está bien, si quieres mejor iremos comprando lo más básico: pañales, ropa, quizá juguetes.- simplemente asentí.
No sé por qué, pero ya van dos veces que discutimos este tema y mi celular empieza a sonar, con el número de Jason, Dereck no dice absolutamente nada, quizá por dentro quiera estrangular a mi amigo. Contesto rápido con un “¿Qué sucede? Y lo que oigo a continuación me impacta.
-Ale…me voy de mi casa.