I Love You To Death
By Jenny Ya.
000---> PRÓLOGO
<<Te Amo.>> Dijeron al mismo tiempo.
Por una fracción de segundos un gran destello iluminó el cielo nocturno. El vehículo que había girado ciento ochenta grados, estalló, una enorme bola de fuego devoró todo lo que encontró a su paso.
Cuando los anonados espectadores comprendieron lo que había ocurrido, gritaron y salieron despavoridos como una estampida de gacelas aterradas. No obstante, con semejante estruendo y las llamaradas altas, policía, bomberos y cuerpos médicos llegaron al lugar, advertidos por vecinos alarmados.
.
.
.
.
.
A la mañana siguiente, el diario local exhibía en su primera plana una detallada crónica del amargo suceso. Dos imágenes captaban la atención de propios y extraños de esa ciudad. La primera imagen lucía de manera escalofriante lo que quedaba de un calcinado vehículo marca BMW, el fuego había terminado por consumirlo todo reduciendo al deportivo en chatarra quemada, y a su lado, se apreciaba la foto de un atractivo chico de escasos 18 años. Había sido el presidente estudiantil de su instituto, el hijo mayor y único varón de la acomodada familia Lee.
La nota mencionaba la participación del joven en las carreras ilegales, algunos de los menores infractores que fueron detenidos durante la huida señalaron que al momento del trágico accidente el infortunado chico se encontraba en estado de ebriedad.
Un anuncio sobre los funerales del joven heredero abarcó media página, mucha gente asistió al funeral, la mayoría por morbo mientras que unos pocos, con honesto pesar.
Para la comunidad, era el escándalo del año al quedar descubierto, que el niño perfecto de los Lee frecuentara tales lugares de ese tipo y consumía bebidas prohibidas.
Para la estación de policías y bomberos, era una estadística más de los decesos provocados por el alcohol mezclado con la alta velocidad de las mortales carreras ilegales.
Para la prestigiosa familia Lee, era la gran pérdida del hijo prodigio, el profundo duelo por el niño consentido con un futuro prometedor que se vio tajado de manera brutal.
El día anterior, había asistido a clases cotidianamente. Bromeó con sus amigos, hizo rabiar a su hermana menor. Saludó a su madre y conversó con su padre. Estuvo con sus amigos jugando y bebiendo en ese lugar de mala muerte. Era difícil aceptar que a la mañana siguiente, los diarios reportaran su trágica muerte. Dolía aceptar que el joven imprudente ya no estaba más. Un hijo, un hermano, un primo, un amigo…
.
.
.
.
.
.
Para el propio chico que ya no podría defenderse de acusaciones o malas interpretaciones, era el fin de una insoportable tortura. El reencuentro con la persona que más estuvo extrañando. Su alma no había podido soportar una larga espera, su corazón había muerto desde hacia tiempo, lo que quedaba de él solo eran escombros.
Nadie sospechaba que había sido un plan fríamente calculado que tuvo infructuosos detalles anteriormente, hasta esa noche en que perdió el control del auto y volcó aparatosamente. Aunque el resultado fuese producto de una casualidad, aportó mucho en su plan suicida, bebía sin control para cometer las estupideces que acelerarían su funeral.
Fue egoísta, fue arrogante, fue idiota. Pero también fue algo que no se sabía; un chico locamente enamorado de una persona completamente diferente a él en la mayoría de los aspectos.
Un suicida que murió por la persona que amaba en vida pero que ésta partió antes, dejándolo en un mundo del que ya no quería formar parte sin su presencia.
.
.
.
CONTINUARÁ.