Capítulo 2
La entrega
Hipo estaba exhausto nuevamente, afortunadamente le dieron el día de descanso de mañana por su excelente trabajo y que su jefe vio sus terribles ojeras, sólo deseaba llegar a su casa, comer, bañarse y dormir, al llegar a ésta, escuchó una risa femenina proveniente de arriba, subió y vio la puerta del cuarto de Jack abierta, nuevamente se enojó y se sintió triste, pero no quería interrumpir, así que los dejó solos; entró a la ducha para sentir las gotas chocar con su piel y cabello mientras el cerraba los ojos, le dolía bastante saber que Jack era un mujeriego. Al salir de la ducha y vestirse con algo más cómodo, unos shorts y una camiseta color verde fue a la cocina para prepararse simplemente un sándwich de atún y poder dormir después; empezó a leer un libro mientras su gato lo acompañaba. En eso escuchó un fuerte portazo que lo aterró, la chica de cabello negro bajó molesta.
–¡No puedo creer que creyeras que yo era de esas facilitas! –gritó enfadada, observó a Hipo anonadado y se sonrojó–. Disculpe.
Salió de la casa, Jack bajó de prisa.
–¡Te invité a la casa para eso, era más que obvio! –exclamó.
–Ya se fue, ya no te escuchará –mencionó su amigo mientras cerraba su libro para levantarse de su asiento.
–¿La viste y no la detuviste?, ¿por qué? –preguntó el oji azul molesto.
–Porque no es algo que me importe –dijo Hipo con tristeza.
–Nuevamente se me escapa la oportunidad de poder hacerlo –se desesperó.
–Lástima, a veces hay suerte y otras no, me voy a dormir –dijo Hipo pasando al lado de Jack para subir las escaleras.
Jack lo observó y vio la piel de su amigo, sus piernas bien trabajadas, delgadas pero se veían fuertes y sus brazos igual, su imaginación comenzó a divagar.
Hipo llegó a su alcoba y empezó a mover las cobijas de su cama para meterse en ella y poder apagar la luz.
La luz nuevamente fue encendida, Hipo observó en la entrada a su amigo que sólo observaba.
–¿Qué ocurre? –le preguntó.
Jack se acercó y le quitó de encima las cobijas para dejarlo descobijado cosa que asustó a su amigo, se colocó encima de él al estilo cuatro patas y le sonrió de forma pícara.
–¿Qué rayos te sucede? –preguntó el oji verde asustado y muy sonrojado puesto que Jack le había besado los labios, jamás se imaginó que algún día su amigo lo besaría.
–No pienso quedarme con las ganas –fue lo único que dijo para así después volver a besar a Hipo, quien se preocupó por aquellas palabras aún más.
–Jack, basta, por favor, déjame en paz –se quejó el chico intentando quitarse de encima a su amigo pero era inevitable, Jack se quitó su pantalón y camiseta para estar sólo en bóxer cosa que sonrojó más a Hipo, jamás se imaginó poder verlo así.
–Sé que también quieres –dijo con lujuria y le quitó su short.
–¡No!, por favor no –Hipo empezó a soltar lágrimas por la tristeza sabiendo que él sólo iba a ser un juguete porque no pudo acostarse con la chica cosa que hizo sentir pésimo a Jack.
–Por favor Hipo, no me digas que no, quiero hacerlo, por favor –Jack se lamentó en el hombro izquierdo de su amigo.
Hipo se sorprendió por aquella actitud, jamás se imaginó que Jack rogaría por aquello, sí que realmente quería tener relaciones esa noche, Hipo lo pensó y su corazón fue débil, pensó que probablemente nunca podría tener otra oportunidad para algo así, acarició el cabello de Jack para que su amigo lo viera.
–Está bien –dijo en un susurró cosa que alegró al peli blanco quien volvió a besarlo y su beso fue recibido.
Jack sintió aquel beso como lo más hermoso en su vida, había besado a varias personas pero ese beso fue muy significativo, metió su lengua a la boca de su amigo para hacerlo más profundo, se separaron por unos instantes y observó al oji verde completamente sonrojado y sonriente, le quitó su camiseta y su ropa interior restante para verlo como Dios lo trajo al mundo y quedar maravillado por lo hermoso que era, después se quitó su única prenda que tenía para que ambos estuvieran desnudos y así poder hacer lo que tanto deseaba. Empezó con delicadez para no dañar a su amigo ya que sabía que él aún no había tenido relaciones con anterioridad provocando que Jack fuera el primero. Hipo por su parte deseaba que eso llegara a más pero muy en el fondo sabía que sólo era un pasatiempo de Jack.