Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Extraño por LocatisLunaticaLupin

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola, aqui estoy de nuevo con un capitulo mas de esta loca historia.

Aclaracion rapida, nuestro chicos van a una escuela donde al dia toman 7 clases de 50 minutos cada una con un receso de 10 minutos entre clase y clase, excepto el cuarto receso que dura media hora.

Cesar se recargo en la pared del salón estirando su cuerpo después de casi una hora de estar encorvado para terminar su lamina de dibujo, admiro su trabajo satisfecho, solo era un cubo pero ese cubo le había costado toda la clase, se relajó un poco y miro su reloj, en tan solo tres horas seria libre de aquel reclusorio y saborearía el fin de semana. Observo el intento de su pequeña amiga frente a él, estaba tomando las escuadras incorrectamente, otra vez, se inclinó un poco hacia Dalis para ayudarla.

- Las escuadras no se toman así –le susurro

- Pff, entonces ¿Cómo?

El moreno se tomó su banco y se sentó al lado de su amiga para compartir su mesa de dibujo, tomo las reglas y le enseño la forma correcta de tomarlas

-          Ahora tu – le paso las reglas y la pequeña las acomodo como las tenía su amigo hace unos segundos – Desliza la de arriba hasta que coincidan con las marcas y luego dibuja la línea – siguió dándole indicaciones hasta que la campana sonó y la profesora se acercó a revisar los trabajos

-          Cesar, si no dejas de ayudarla jamás aprenderá – el chico volteo a ver a su profesora molesto, era una mujer que no pasaría los treinta, su grácil cuerpo oculto bajo unos pantalones flojos y una blusa bordada un poco amplia sumado a su cabello suelto enmarañado le daba un aspecto hippie – si dejaras de preocuparte tanto por ella tal vez tu trabajo quedaría mejor – garabateo un pequeño ocho en una esquina de la lámina del muchacho y después un cinco en el de la chica – esfuércense más – y sin más regreso a el escritorio a tomar sus cosas y se marcho

-          ¡Pero que perra¡ - gruño Dalis – pero si tu lamina esta perfecta, solo lo hizo por joder

Cesar solo bufo molesto y regreso a su lugar para guardar su lamina, llevaba tres clases con esa mujer y ya la odiaba, siempre le encontraba un pero a sus trabajos a pesar de que lo hacía perfecto, tal vez no sería el mejor en la clase pero mientras se tratara de dibujo sabía que superaba a cualquiera. Saco de su mochila un molde con su almuerzo, Dalis hizo lo mismo y salieron al patio para encontrarse con su amiga castaña quien ya los esperaba sentada en una banca frente a su salón.

-          Hola – les sonrío Luna mientras se recorría en la banca para darles espacio a sus amigos – ¿qué tal las clases?

-          Horribles – escupió Cesar mientras comenzaba a comer su ensalada – esa estúpida vieja me volvió a poner un ocho en mi lamina

-          Pero, ¿por qué? – Luna miro a su amigo preocupada – compartí dos años de dibujo contigo, eres increíble

-          Lo sé – las palabras de Cesar hicieron que Luna sonriera por la poca modestia de su amigo – si sigue así mi calificación se verá muy afectada

Comieron en silencio unos minutos hasta que Dalis le pidió a Luna que la acompañara a comprar, dejando al moreno solo en la banca. Aburrido miro alrededor y se encontró con el chico de ojos avellana que lo había visto extraño el lunes, desde aquel día no se lo había topado y de haberlo hecho no se dio cuenta, en ese momento sus miradas se cruzaron, el moreno lo miro desafiante al notar que lo miraba fijamente,  el momento se comenzó a hacer más incómodo  estaba a punto de decirle algo cuando sintió que alguien lo abrazaba con excesiva fuerza del cuello.

-          Ya volvimos, osito de peluche – la voz de su Luna sonaba a sus espaldas – ¿qué tanto veías?

-          Mira discretamente hacia el salón de computo, el chico que está en la puerta me estaba mirando

-          ¿No es el mismo tipo del lunes? – pregunto Dalis

-          Si – el moreno miro de nuevo y vio que ahora hablaba con un chico que se sentó a su lado – me da mala espina

-          Yo creo que exageras – Luna había soltado de su abrazo a su amigo y se sentó a su lado mientras lo miraba incrédula – tal vez estaba viendo un punto fijo en esta dirección, no necesariamente a ti

-          Luna el lunes me miro casi todo el trayecto del metro, luego me siguió muy de cerca hasta que Dalis se dio cuenta y le grito, después se me quedo viendo de nuevo mientras iba al salón y hoy se me queda viendo fijamente, yo no creo estar exagerando

-          Amigo, no estás tan bueno como para que hasta los hombres baben por ti

Cesar miro molesto a su amiga pero decidió dejar el tema así, simplemente tratar de hacerla cambiar de opinión iba a ser una tarea titánica, hablaron un poco más de cosas triviales hasta que el timbre sonó anuncio el final del receso.

-          Los veo en el descanso de diez minutos – grito Luna mientras corría a su salón - ¿ya saben  dónde vamos a ir?

-          Si – le respondió Dalis – iremos a la cineteca

La castaña alzo su pulgar en forma de aprobación y se perdió en el mar de alumnos para ingresar a su salón. Cesar le pidió a Dalis que se adelantara para poder lavar sus manos antes de entrar a su segunda hora de dibujo, temiendo que si dejaba alguna mancha en su lámina la profesora le calificara con un cinco, al llegar a los baños lavo sus manos rápidamente y al alzar la mirada vio por el espejo un par de ojos avellana que lo miraban desde dentro de un cubículo, nervioso se secó las manos y salió corriendo de ahí, no se consideraba un cobarde pero era demasiado inquietante las miradas de aquel sujeto, sentía que lo miraba con una máquina de rayos x. Entro al salón justo detrás de la maestra, Dalis noto que algo raro le pasaba a su amigo y lo interrogo con la mirada a lo que respondiendo con un gesto con la mano que le contaría después.  

La clase se le hacía eterna al joven moreno, trato de despejar su mente mientras trazaba suavemente unas líneas para dibujar una pirámide de base rectangular, logro terminar justo cuando suena el timbre indicando el fin de la clase, la profesora nuevamente garabateo un ocho en la lámina del adolecente, apenas salió la docente del salón Dalis comenzó a interrogar a su amigo.

-          ¿Qué paso?

-          Me siguió al baño

-          ¡¿Enserio?!

-          Si – Cesar tembló ligeramente al recordar – creo que es una clase de psicópata

-          ¿Quién? – la voz de Luna sobresalto a Cesar – ¿qué te pasa?

-          El psicópata de hace rato me siguió al baño – le explico

-          Ya te dije, son imaginaciones tuyas – le dijo exasperada la castaña

-          ¡Pero me siguió! – el moreno casi grita, se sentía nervioso y un poco ofendido de que su amiga no le creyera – ¿Qué gano inventando eso?

La chica medito unos minutos antes de responder, ciertamente su amigo jamás jugaría con algo así pero no creía que aquel sujeto tan tímido fuera un psicópata acosador.

-          Nada, no ganas nada – contesto resignada – tal vez le gustas y …

-          ¡Ni lo menciones! – a Cesar casi le da un infarto cuando su amiga hizo ese comentario

-          Vamos, no es tan malo, solo déjalo ser seguramente se olvidara de ti en unos días – le sonrió lo mejor que pudo – venga Cesar no pongas esa cara, te digo que exageras – le pellizco las mejillas como si fuera un niño pequeño – sonríe

-           Lo dices muy fácil, a ti no te persigue un loco

La chica iba a replicar pero en ese momento sonó el timbre y solo alcanzo a despedirse rápidamente de sus amigos para salir corriendo a su siguiente clase.

Las siguientes dos horas pasaron rápidamente, al sonar por última vez el timbre los jóvenes salieron rápidamente para encontrarse con Luna. La encontraron hablando animadamente con una chica morena, de cabello negro, un poco más bajita que Dalis, cuando llegaron Luna la despedía y le agradecía algo.

-          ¿Quién era ella? – pregunto Dalis

-          Se llama Karen, va en el mismo salón que el aparente acosador de Cesa, no interrumpas y escucha – Luna miro directamente a Cesar quien estaba a punto de interrumpirla – investigue un poco a aquel chico para demostrarte que solo son imaginaciones tuyas, pero solo sé que se llama José, aparentemente es un poco reservado, es nuevo en la escuela, llego aquí para recursar el segundo año de prepa y… algunas chicas creen que batea para los dos lados – agrego lo último un poco más bajo.

-          ¿Ahora si me crees? – la chica le negó con la cabeza lo que provoco que el muchacho bufara – en todo caso, ¿Cómo conseguiste toda esa información?  

-          Esto… el receso anterior me dedique a localizar el salón de aquel chico, después busque a alguien con quien pudiera entablar una conversación sin verme sospechosa. Encontré a Karen, tiene una mochila de un anime que me encanta así solo espere a que saliera y yo bien casual le pregunte donde compro su mochila, para mi buena suerte iba saliendo José así que me mostré interesada en él y comencé a preguntar. Y ahora tengo un fantástico plan para demostrarte que estas paranoico y así continuemos felices con nuestras vidas

-          ¿Y cómo pretendes hacer eso? – después de escuchar atenta, Dalis decidió intervenir - ¿tu idea no es llegar y preguntárselo directamente, verdad?

-          Noooo… esa idea la descarte después de comentarlo con Ana – Luna rio nerviosamente ante las miradas de sus amigos – fingiré que soy la novia de Cesar, la lógica indica que si le gustas lo demostrara aunque sea por un instante y cuando veas que no le importa en lo más mínimo estarás tranquilo y toda esta loca historia acabara – sonrió satisfecha, como si le acabara de revelar la fórmula secreta para curar el cáncer

-          ¿Y que pasara si te equivocas? – Dalis miro a su amiga quien medito la respuesta un rato

-          Pues… ya se me ocurrirá algo, pero ya pensaremos en eso después, voy a irme a cambiar para ya irnos, ¿vienes Dalis?

-          Si – la rubia tomo su mochila y las dos caminaron al baño de chicas

Cesar decidió cambiarse también así que entro al baño de hombres y se metió al primer cubículo que estaba disponible, se quitó la camisa del colegio y saco de su mochila una playera azul que sustituyo a la prenda anterior. Terminando salió del cubículo y recargado en la pared estaba aquel extraño, José, evitando cruzar miradas Cesar se retiró del baño y con alivio vio que sus amigas ya lo esperaban.

-          Mi vida, tardaste mucho – Luna corrió a abrazar a su amigo mientras le hablaba melosamente - ¿listo para irnos?

-          Pero que cursis – dijo Dalis mientras se acercaba

El cerebro de Cesar no procesaba la información recibida, después noto una mirada clavada en sus espaldas y lo comprendió, se soltó suavemente del abrazo de la chica y le tomo de la mano, mientras le sonreía

-          Perdón amor, vámonos – dieron media vuelta para ir a la salida y de paso comprobar la teoría de Luna, lo que vieron los dejo helados.

José los miraba furioso, le dio una mirada un poco amenazante a Luna para después caminar rápidamente a la entrada y desaparecer. La castaña trago con dificultad y miro asustada a su amigo.

-          Cesar, si las miradas mataran… creo que estarían en este momento preparando mi funeral -  rio nerviosamente para sacar un poco del estrés – creo que no exagerabas

-          ¿Al fin lo reconoces?

-          Si, ese tipo en verdad está loco

Notas finales:

Espero que les gustara. Santino y Ale espero que les gustara XD, yo se que si. Muchas gracias a emanuel por su comentario, eres un amor.

En fin, espero que comenten acepto de todo desde un Hola hasta un jitomate podrido.

Un abrazo


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).