En este punto de mi vida, he pasado por muchas cosas por ser débil… tengo que ser valiente y demostrar mis sentimientos, pero todo a su debido momento.
− Y bien, ¿qué dicen?...
Todos quedamos en silencio, no esperábamos esa declaración de amor por parte de la tortuga. Ryeowook estaba temblando, con las mejillas color carmesí… Algo así no se escucha todos los días. Volteé a ver a los chicos para saber cuál era su reacción ante esto, sin embargo todos estaban boquiabiertos. Como líder, supuse que debía hablar primero.
− Bueno – Suspiré hondo. – Creo que por mí está bien. La verdad, chicos… tal vez era consciente de ello algunas veces, cuando los veía. No los juzgo por su preferencia sexual, pues eso es muy de ustedes. Lo único que les ruego que hagan es que lo mantengan para ustedes cuando estén en público, o al menos disimular, pues a ellas les encanta el “YeWook”… Así que, cuando estén en el departamento, controlen sus hormonas, ¿sí? – Todos voltearon a verme cuando mencioné lo anterior, estaban sorprendidos por mi madurez con el caso, o por haber aceptado una relación homosexual en el grupo. Sin embargo, hice caso omiso y proseguí. – Además, chicos, no quiero que por decir que no, ustedes vayan a actuar de manera negativa y de repente hacer algo que perjudique al grupo.
− Gracias, hyung. – Dijo un Yesung completamente feliz. – Con que tú lo aceptes estoy bien. Pero, los demás… me gustaría que digan lo que piensan…
El ambiente se volvió tenso, hasta que, luego de unos segundos casi eternos, KangIn habló… − Pues, también lo acepto, Yeye… − dijo, no lo puedo creer, ¡es tan lindo! Heechul le siguió – A mí me da igual, no hay problema… Ya lo sabía. – Dijo con una sonrisa malévola. Así sucedió con casi todos los miembros, excepto uno… − Pues, a mí no me parece… creo que es asqueroso… no puedo juzgarlos y no queda más que aceptarlo por mayoría… pero no me siento cómodo. Lo siento Yesung. – Dijo un serio Eunhyuk para irse directo a la van negra en la que veníamos. “Oh, no…”. Miré hacia la nueva pareja para ver su reacción, la cual no era buena… Yesung tensaba su mandíbula, mientras que el más pequeño tenía sus ojos muy abiertos y lágrimas amenazaban con salir de ellos…
− No le presten atención. Solo está estresado y triste porque te vas. – Dijo Donghae completamente serio…tanto que daba miedo.
− Sí, de seguro es eso, además, Eunhyuk es un amargado, estos días no ha estado muy feliz, siendo francos. – Mencionó la Chula, moviendo sus manos como toda una diva, intentando calmar el ambiente.
− No se preocupen. Todo está bien. Cuidaremos de Wook, ¿ok? – Dije intentando tranquilizar a Yesung, quien estaba furioso.
Llegó la hora de partir para él, fue otro momento difícil, la verdad. En aquel lugar, nos despedimos uno a uno de él, haciendo al final nuestro “Uri neun Super Juni oeo”. Lágrimas recorrían nuestros rostros en el momento que vimos la despedida del “YeWook”. Increíblemente, Wookie estaba ahora fuerte, sonriendo. Al final le dio un tierno beso en los labios. Luego, el más bajo regresó con nosotros, así que nos dirigimos a la van, donde se encontraba un Eunhyuk realmente enojado, cosa no muy usual en él.
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Unas semanas después, todos estábamos completamente enfocados en el lanzamiento de Mamacita, pues quedaban unos pocos meses. Entre mis citas con el doctor, habíamos visto una leve mejoría, al menos. De todas formas, no quería comentarlo con los chicos. Y como adicional, estaba el cumpleaños de Hyuk. No podía simplemente arruinarlo. Solo me quedé en silencio por otras semanas más, antes de comenzar el SS5 en Sudamérica. Luego de estos conciertos, un año después… sería el lanzamiento de Mamacita.
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Este es el último concierto, luego tendremos unas leves vacaciones y vendrá el comeback. Me he sentido mucho mejor luego de ir con el doctor, además, KangIn me hace sentir que todo está bien. Gracias a él, puedo estar tranquilo…
− Bueno, chicos! Este es nuestro último Super Show, por ahora… tenemos que darlo todo. Las ELF lo merecen… siempre nos han apoyado en todo, incluso las que no han podido asistir a uno de nuestros conciertos, o no nos han conocido en persona, yo sé que nos apoyan con todas sus fuerzas… Esto es por ellas. ¡Uri neun Super Juni-!
− ¡OEO!
Salimos al escenario y lo dimos todo. Al final, los banners dedicados a Yesung nos hicieron llorar a casi todos, pues algunos teníamos que ser fuertes…yo llevaba en mi espalda un peso muy grande, soy el líder… no puedo ser tan débil, pero mis chicas saben lo llorón que suelo ser cuando se trata de mis bebés… El simple hecho de no tener a uno de ellos cerca es la peor pesadilla… Sin embargo, me mantuve firme. Aunque en el backstage pasó todo lo contrario.
Al terminar el concierto, nos despedimos de las fans, hicimos una reverencia y salimos del escenario. Me dirigí a los camerinos y en la sala de descanso no pude más y comencé a sollozar… es muy duro ser el líder de un grupo con gran cantidad de miembros, ya que cuando uno se va, los demás bajan sus ánimos, y yo como líder debo hacer que suban… Cuando estaba en ese lugar, estaba solo, sin embargo, de repente apareció el mapache con un pañuelo en sus manos. Le agradecí y lo tomé para secar mis lágrimas. KangIn me abrazó por la espalda y comenzó a decirme “todo está bien, puedes llorar”, suavemente. Nunca antes alguien, aparte de Heechul, había hecho eso por mí. Lo abracé y le planté un beso casto en los labios, después de todo los chicos no estaban por ahí.
De repente, mi teléfono suena… es una llamada. Lo tomo en mis manos y miro el número del doctor. Rápidamente me levanto sin dejar a KangIn decir una sola palabra y me encerré en el baño.
− Sí, ¿dígame? Sí, habla Leeteuk… Bueno Park Jung Soo. ¿Qué sucede, doctor?
− Señor Park, le tengo buenas noticias y malas noticias.
− Bueno, puede hablar, lo escucho… Diga la que le parezca más relevante ahora.
− Ok, te daré la buena. La anemia está desapareciendo.
− Oh, eso es muy bueno… Entonces, ¿cuál es la mala?
− Bueno, señor Park Jung Soo… Al parecer su anemia es crónica.
− ¡¿Qué?! – Me regañé mentalmente por decir eso tan alto, al escuchar a un KangIn preocupado del otro lado de la puerta. Coloqué mi mano sobre el móvil para evitar que el doctor escuchara lo que iba a decir. – N-n..no es nada… tranquilo, amor. Estoy bien….− Cuando escuché que se calmó, volví a mi conversación con el médico.
− Ok, mira. La anemia puede ser pasajera o crónica. La tuya es ésta última, es decir, necesitas tratamiento. Estamos a tiempo, pues es leve, no severa. Además, si dejamos pasar por alto esto y te comienzan las hemorragias nasales o si por algún motivo te golpeas… puede tener consecuencias peores. – Sentí que un balde de agua helada caía sobre mí y de paso me golpeaba la cabeza con el mismo balde. −
− No…Debe estar equivocado. Déjese de bromas, por favor. Yo estoy bien, aceptaré el medicamento, pero solo para prevenir.
− Tiene que escucharme, no puede tomarlo tan a la ligera.
− Y no lo haré, pero me niego a creer lo último que mencionó. – Dicho esto, colgué la llamada. Estaba harto de las malas noticias. –
Al salir del baño, me encontré con la mirada de desapruebo de KangIn… Sabía que me pediría explicaciones, pero en estos momentos mi cerebro no quería procesar lo que me habían dicho… Se suponía que para el ComeBack estaría completamente bien, pero ya no es así… Queda poco tiempo y yo no necesito preocuparme por mí, sino por Super Junior.
Decidí evadir su mirada y dirigirme rápidamente con los chicos. KangIn apenas pudo gesticular, pues no le di tiempo de mencionar palabra alguna. Fui rápidamente con los chicos, que se encontraban alistándose para partir de nuevo a Corea, ya que estos conciertos eran en el extranjero.
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Después de un tiempo, nada inusual había pasado, Eunhyuk comenzó a aceptar la relación que tenían Yesung y Ryeowook. Sinceramente no tengo idea de por qué se comportó tan mal aquel día. Pero Heechul fue muy amable al ofrecerse para hablar con el mono, así que cuando estábamos en nuestro apartamento, decidió que era hora de enfrentarlo y preguntarle la razón por la cual había actuado de tan mala manera. Eunhyuk le explicó, sin embargo, Heenim no dio detalles sobre lo declarado por este.
En cuanto a mi salud, todo estaba en perfecto estado. ¿La razón?, bueno… Al parecer mi querido novio no quiso quedarse con las ganas de preguntarle a mi doctor sobre lo que estaba sucediendo conmigo y me hizo pagar una a una, las mentiras que le inventé para no decirle la verdad…
Flashback
− Teuk, ¿puedes prestarme tu móvil? Resulta que el mío se descargó cuando estaba revisando unos mails muy importantes.
− Claro, toma. Ya sabes la contraseña. – Parecía que de verdad su móvil se había quedado sin batería. Es mi novio, así que debo ayudarlo con lo que pueda. – Ah, pero por favor, vuelve a ingresar con mi cuenta, el manager está obsesionado con mandarme mails sobre cualquier cosa del grupo, en vez de decírmelo por llamada o mensajes, incluso en persona. Bueno, ya lo conoces.
− Sí, claro amor. Ya casi te lo devuelvo, es urgente. – Dijo esto para comenzar a utilizar mi teléfono. Es extraño que no lleve consigo el cargador de su celular, normalmente no sale sin él, como todos nosotros.
Pasados unos minutos, KangIn regresó con mi teléfono. Su mirada era algo ruda, normalmente su rostro parecía amargado, pero ahora estaba… enojado. En su mano mi aparato electrónico estaba siendo estrujado, a tal punto que creía que se podría romper en cualquier momento.
− Ca…cariño, ¿sucede algo? – Intenté no parecer muy nervioso, misión a la cual fallé. – Estás muy tenso… – Me miró con furia, para proceder a hablar, con un tono no muy dulce, sin embargo comprendí la razón por la cual vino con tal expresión.
− Park Jung Soo… ¿cómo es posible que nos ocultaras esto, eh? ¿No era verdad que ya te habías recuperado? No puedo creerlo… Me has decepcionado. Esto se lo diré a los chicos, no puedes seguir así… Te hará muy mal seguir practicando, estamos a unas semanas de hacer el Comeback, por el amor a todas las deidades, Jungsoo.
− Discúlpame, no quería preocupar a nadie. Por favor, no menciones esto, yo…
− Tú nada, ya hiciste suficiente. Si no te vas a preocupar por ti, yo sí lo haré, Teuk. Yo te amo, no es justo que me ocultes este tipo de cosas.
KangIn se marchó y fue a hablar, en contra de mi voluntad, con los chicos. Consecuencia de esto fue que me obligaban a tomar medicamentos y descansar casi en exceso, sin prácticas. Wookie y Hae se encargaban de mí, mientras que los demás hacían su trabajo, luego cambiaban de lugar con Sungmin y Shindong. Me sentía culpable, pero era algo que había dejado muy descuidado y estas eran las secuelas que dejó mi silencio.
Al inicio, KangIn casi ni me hablaba, se encontraba demasiado enfadado como para dejar pasar esta situación. Cuando todos estábamos cenando, en vez de sentarse a mi lado, lo hacía junto a Siwon o EunHyuk. Solamente algunas veces me dirigía la palabra, me sentía mal por esto… todo era mi culpa.
Luego de unas semanas por fin la anemia se había ido casi por completo, pero mi novio parecía no cambiar de actitud. Intenté hablar con él para aclarar las cosas, pues no era normal que actuara de esa manera, menos conmigo, que se supone que soy su novio… la persona que él más ama, ¿verdad?
Con los chicos en el apartamento era algo difícil hablar sobre nuestra relación, más no podía dejarlo así. Entonces se me ocurrió una gran idea… pero debía ser cuidadoso, o los chicos podrían darse cuenta y sería todo un caos.
Mientras todos iban a ensayar, pedí que hoy me cuidaran Heechul y KangIn… después de todo mi salud estaba perfecta, eran solamente unos días más. Todos accedieron, hasta KangIn, creo que sabía el por qué quería que estuviera conmigo… y Heechul, que es la única persona en el mundo que no me juzgaría, además de ser el único que sabe de mi relación con el mapache. Cuando todos se fueron, Heechul se dirigió a la cocina, dejándonos solos en la habitación.
− KangIn… tenemos que hablar… por favor. Supongo que sabes que no dije que los quería a ambos aquí porque simplemente me dio la gana, ¿cierto? – Solamente asintió, en completo silencio. – Mira, yo no sé cómo decirte esto, pero de verdad estoy muy dolido porque me ignoras… Nunca quise mentirte, pero me preocupaba tu reacción, y mira ahora… ya ni me hablas.
− Mira, Teuk… Te evadía porque estaba muy enojado… no quería gritarte más de lo que debía, no te lo mereces… Además, estoy algo cansado de estar ocultando esto a los chicos… Mira a Yesung, no tuvo miedo de la reacción de los chicos… y ellos no lo tomaron mal, hasta Hyuk lo comprendió bien… Quiero estar contigo, pero así no…
− ¿Estás diciendo que quieres que les diga la verdad a los chicos sobre nosotros?
− Básicamente, sí. Pero yo estaré junto a ti, ayudándote si sientes que no puedes más.
− Yo… - Vacilé un poco con mi respuesta, era algo demasiado repentino… pero era el momento indicado para hablar con la verdad… - Está bien, hagámoslo…
Fin del Flashback.
Ya había pasado un tiempo después de mi conversación con KangIn… cada vez que intentábamos hablar con los chicos ellos hacían algo para no escucharnos… o al menos así parecía.
Un mes antes de nuestro comeback, decidimos que no íbamos a esperar más. Llamé a los chicos al salón principal del apartamento. Todos comenzaron a llegar, mientras se sentaban en los sillones en “L”. KangIn y yo estábamos de pie, frente a todos. Un nudo se formó en la garganta, pero al saber que mi novio se encontraba ahí para apoyarme, decidí hablar cuando supe que todos ya estaban prestando atención…
− Ehh, chicos. Hola… – Me encontraba tan nervioso que comencé a tartamudear y decir cosas al azar. – Verán, los cité aquí porque tengo… digo tenemos algo importante que anunciar. Espero que todos me digan lo que piensan, pues es realmente importante para la salud del grupo. – Todos me miraban confundidos, sin embargo no protestaron y siguieron prestando atención.
− Lo que sucede, es que… – Comenzó a hablar KangIn detrás de mí. – Teuk y yo… – Tomó mi mano fuertemente, como señal para que yo prosiguiera. Tragué fuerte y me dispuse a hablar.
− Somos… pareja. Esperamos que comprendan esto, sin embargo… si no lo comparten están en todo su derecho de poner sus condiciones.
Esperé para que los chicos dijesen algo, pero nadie dijo nada. Todos parecían muy tranquilos, incluso el monito. Miré a Heechul algo confundido, pero este me respondió con una sonrisa y comenzó a caminar hacia nosotros…
− Bueno, hasta que al fin hablan. Bueno, eso es genial. Los felicito a los dos, por mí y todo el grupo, tienen la aprobación… como lo hicimos con el YeWook, ¿verdad que sí, pequeños? – Todos asintieron, con una amplia sonrisa…. Eso no me lo esperaba. – Ahora, vamos a sincerarnos… ¿ok? Ya el líder lo hizo, creo que como segundo hyung, debería comenzar… Siwon y yo estamos en una relación. Tenemos 5 años de estar juntos, como pareja. ¿Kyuhyun, quieres continuar?
− Claro, verás, Leeteuk-hyung… Sungmin y yo también estamos saliendo, aunque es más reciente, llevamos dos años.
− ¡¿Qué?! – Me sentí totalmente confundido…. ¿Todos aquí eran… igual que KangIn y yo? – Y no me digan, ahora me van a salir con que Shindong…
− ¡NO! Eso sí que no… – Alegó el mencionado. – Yo estoy con NaRi.
− Ah, eso está muy bien… Así que… me lo tenían bien oculto… Esto realmente es un alivio…
− Eso no es todo. Hay alguien que también quiere decir algo, ¿verdad HyukJae? – Heechul mencionó esto con una sonrisa, al ver al menor tensarse.
− Ehh… s-s-ssí. Sí. Bu…bueno, verán… Hae y yo estamos saliendo también… Tenemos… un mes.
Al escuchar todo esto, una felicidad indescriptible recorrió todo mi cuerpo. Decir la verdad me llevó a descubrir algo maravilloso, aunque extraño. No esperé que todos los chicos a excepción de Shindong estuviesen saliendo entre sí. Bueno, supongo que son cosas de la vida. Realmente estoy muy feliz, como muy pocas veces. Ahora, frente a los seres que más quiero, no tendré que ocultar el amor que siento por mi novio, KangIn.
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