Pero… creo que yo no puedo corresponder a tus sentimientos, perdón… – Dijo esto para retirarse a ‘nuestro’ dormitorio…
…Lo sabía, ya nada va a ser lo mismo…
Leeteuk’s POV
Sentía que me estaba muriendo en ese preciso instante. El momento por el cual tanto temí, sucedió y trajo consigo demasiado dolor. Me limité a quedarme en el sofá, el que KangIn me considerara solamente su amigo, y recibir un rechazo eran suficientes razones por las cuales quedarme en la habitación principal y no en el dormitorio compartiendo una cama con el hombre que más amo, mi mejor amigo.
Al día siguiente me desperté y tenía una manta encima, tapándome del frío que seguramente me estaba atacando la noche anterior. Miré a mi lado y me encontré con un pez dormilón abrazado a mí. Intenté zafarme de su agarre para ir a levantar a los demás miembros para dirigirnos a nuestro ensayo, ya que pronto tendríamos un comeback. Comencé con Eunhyuk, sin embargo este ya estaba en el baño, se oía la ducha Qué extraño, pensé… debo hablar con estos dos (Donghae y Eunkyuk) para saber lo que está sucediendo… Yesung y Ryeowook también estaban despiertos, sin embargo ellos se encontraban en la cocina.Fui a la tercera habitación, intenté despertar a Shindong, fue bastante sencillo. Luego me dirigí a la cama del maknae y nuestro conejo y los levanté con prisa ya que ambos se abrazaban muy amorosamente…
– Ustedes dos, despierten de una vez antes de que se me ocurra traer agua helada y la vacíe ‘accidentalmente’ sobre ustedes!– Les dije divertido al ver las caras de recién levantados que tenían. – Si las fans los vieran de esta forma ya no los amarían! – reí.
– Aish omma pato! No molestes, nuestras ELF nos aman así, sin bañar, feos y sin maquillaje… ellas son muy lindas, ¿verdad Kyu? – Dijo Sugmin, haciéndole un aegyo al maknae.
– Si, Minnie. ¡Yah! Teukkie-hyung, vete, ya estamos despiertos pero debes levantar a los otros.
– Tienes razón, me iré a levantar a los otros, espero que cuando estemos todos listos ustedes también, Ok?
– Está bien. – Respondieron los dos al unísono.
Ya cuando todo estaba en orden me dirigí a mi habitación, a despertar a Heechul y Siwon, y ver si este primero me ayudaba a despertar a KangIn, quien últimamente tenía el sueño pesado.
– Yah! Heechul, despierta!!! – Grité, golpeándolo con una almohada. – Es hora de despertar, diva!! – No me hacía caso y pues, lo único que logré fue que me devolviera los golpes, con sus puños y que se diera media vuelta, aferrándose a Siwon, quien se despertó con mis gritos.
– Yo te ayudo, hyung. – Me dijo. Siguiente a eso, se acercó a Heechul con mucha delicadeza. – Hey, Rella, despierta… No me obligues a usar otras armas para despertarte, ¿sí? – Luego de esto le posó una mano bajo su camisa de dormir, espera ¿QUÉ?... No, creo que vi mal, por otra parte logró que la diva de SuJu se despertara con buen humor…
– Chullie, necesito que me ayudes con KangIn, por favor. – Le dije con una mirada suplicante, no quería quedarme a solas con él de nuevo.
– Claro, espera. – Me dijo para ir a buscar algo en su closet. – Yah!, KangIn, tú, bueno para nada, despierta. – Comenzó a golpearlo con uno de los juguetes de Heebum, típico de él, siempre tan raro. – No me obligues a traer a Heebum o a Bugsy!
– Ya, ya… estoy despierto. – De repente KangIn se levanta para dejar de ser golpeado por Heechul. Aproveché el instante donde Yesung comenzó a llamarnos a todos a desayunar para salir de la habitación.
Ya en el comedor, estábamos desayunando para ir al ensayo. No obstante, no me sentía del todo bien ese día, pero decidí no decirle a los chicos, por lo menos por hoy. Además, era el mayor, ninguno se debería de encargar de mí, sino yo de ellos. Comí lo que pude y fui a preparar todo para irnos.
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En el salón de ensayos, todos estábamos aprendiendo la nueva coreografía de “Mamacita”, nuestro nuevo álbum. Yesung estaba con el asunto de su enlistamiento, por lo que no participaría de manera directa en este disco. Sin embargo, nos ayudó en la parte de audio.
Llevábamos algunas horas de ensayo, pero de repente no me sentí bien. Seguí con la coreografía para no alarmar a los chicos, sin embargo comencé a sentirme peor, producto de mi anemia. Tuve que detenerme y enfocar de nuevo mi vista, la cual estaba volviéndose un poco borrosa. Todos me miraron en espera de que dijese el por qué me había detenido, más no pude decir mucho, ya que mis piernas no aguantaron más mi peso, así que caí al suelo. Intenté incorporarme, sin embargo eso solo empeoraba mi estado. Sentí unas manos en mi cintura, luego pude ver que se trataba de KangIn.
– Teukkie, ¿Qué te pasó?, si te sentías mal debiste avisar antes. – Me dijo con un tono de regaño, y tenía razón, pero no quería pelear con esta persona, así que intenté incorporarme, sin éxito.
– ¿Qué haces?, no tienes la fuerza suficiente, espera un poco. – Mencionó Siwon, quien se encontraba a mi derecha.
– No, chicos, estoy bien, solo es debilidad. Lo juro. – Dije para aprovechar que mi visión se recuperó e intentar salir de ahí… Me levanté y salí del salón, pero antes me dirigí a Heechul. – Quiero que todos sigan ensayando, ninguno se preocupe, iré a tomar algo para recomponerme, ¡¿OK?! – Dije para irme de ese lugar.
No pasó mucho para llegar al baño del piso, en donde intenté recomponerme de nuevo, ya que otra vez mi vista se hacía borrosa. Tomé algo de agua y unas vitaminas que llevaba conmigo para no empeorar mi estado. Sin embargo, nada parecía volver a la normalidad, me asusté, así que salí en busca de ayuda de la primera persona que viera frente a mí. No sé, tal vez el karma me estaba jugando una mala pasada, pues la primera persona que vi al salir de aquel baño fue nada más y nada menos que KangIn. No me encontraba en condiciones de correr, así que me mantuve quieto, viendo cómo él tenía la preocupación marcada en su rostro…
– KangIn, ¿qué haces aquí? Te dije que se quedaran todos, sin excepción. – Dije regañándolo por no haber acatado mi orden anterior.
– Lo siento, estaba preocupado, te veías mal y estabas o más bien estás pálido. – Me dijo colocando una de sus manos en mi mejilla, con un suave tacto. Como si le importara…
– Ah, ya. Tranquilo, todo está bien, solo fue agotamiento, nada del otro mundo. – Le dije con una sonrisa ladina.
– Igual, no es algo con lo que puedas jugar de esa forma, debiste decir algo. No podría vivir si algo te llegara a suceder Teukkie. – Me dijo serio, No lo creo, primero me rechaza y luego viene a decir que se preocupa por mí…
– Estoy bien… – Le dije algo despreocupado… Quería irme de ahí de inmediato, algo andaba mal, lo presentía…
– No Leeteuk, no lo estás!! – Me dijo enojado. – Prácticamente te desmayaste ahí adentro, no es algo por lo cual no estar alarmados, eres nuestro líder, si te sucede algo todos vamos a estar ahí preocupados por ti, ¿Qué no lo entiendes? – Me sentenció con esa pregunta al final… Ahora sí me hizo enojar…
– Yah! Tú, mapache! No tienes por qué tratarme así, no eres nadie!... No puedes andar diciéndome lo que debo hacer, sino yo… – De pronto algo me hizo detenerme. Algo que hizo que mis pensamientos y mi mente se pusieran completamente en blanco. ‘De repente una pequeña luz de esperanza comienza a surgir’. KangIn tomó mi brazo y enmudeció mis palabras… posando sus suaves labios sobre los míos… ¿Él de verdad lo hizo? ¿KangIn me besó?…
Aunque, no lo comprendo… Se supone que él no me ama, pero ¿qué hace?... Seguro estás jugando conmigo… ¿no es así?... Él me lo dijo hace unas horas, en nuestro nuevo apartamento, me rechazó de la manera más cruel, y luego viene y hace toda una marea con mis sentimientos... Kim Young-woon ¿Qué quieres de mí?