Mask (Mascara)
By Angie
Capitulo Nº 10 – A -
El joven Kim fue completamente consciente de dos cosas, sin sentir la necesidad de abrir los ojos, por que de una extraña manera supo que no podría seguir durmiendo, lo segundo fue que no estaba solo en aquel lecho y para complicar el asunto se encontraba absolutamente inmovilizado.
-“Joder”- pensó frustrado el de pelo rubio - “¿Porque carajo estaba otra vez bajo el yugo de aquel hombre pulpo?” – se cuestionó aun con los ojos cerrados.
Si bien al hacer algo de esfuerzo, recordaba con un poco de más claridad, que luego de encontrar a ese idiota tuvo que disculparse varias veces, se habían subido al auto y escucho el motor arrancar, pero no quería hablarle a aquel estúpido hombre así que cerro los ojos y…
-“Demonios” - no había nada más en su cerebro; Eso quería decir que no se había dado cuenta, cuando se durmió y suponía que Zhang lo había traído a su habitación cuando llegaron al hotel.
-“Maldición que humillante” – refunfuñó para sí, el heredero, cuando una idea golpeo su cerebro – “seguro me paseo por todo el hall central como si fuera una princesa” – apretó la boca para no gruñir. Esa idea simplemente era horrible, sin pensar mucho en como enfrentaría al personal que lo había visto en aquella posición tan ridícula.
Junmyeon lucho contra su propios impulsó de imaginarse, a si mismo, en aquel lugar (ya saben el pecho de Zhang) apoyando su cabeza en su hombro y como se había sentido aquellos brazos protectores rodeando su cuerpo, simplemente el pensamiento era demasiado tentador y él sabía que no podía dejarse llevar por los encantos de aquel libertino.
Pero primero que todo necesitaba espacio, al menos el suficiente como para poder recuperar el control que por algún extraño motivo siempre perdía estando pegado a ese subyugante idiota. Con la decisión en mente abrió los ojos le tomó un poco de tiempo adaptarse a la penumbra, ladeo el rostro y allí estaba él. Suho no pudo evitarlo, se quedo observándolo porque no pudo escaparse de aquella necesidad que lo invadió. ¡Condenado hombre! debería de venir con un cartel de advertencia o algo así.
El corazón del rubio volvió a sentir aquel extraño cimbronazo, y se tentó demasiado con la idea de pegarse al dormido Zhang y comenzar a besarle la piel expuesta de su cuello y hombro. Fue allí donde detuvo sus pensamientos porque de algún modo dejarse llevar por aquel impulso visceral, que el mismo Suho sabía, era solo un alboroto de lujuria que no le llevaría a nada bueno.
¡Pero no! él no flaquearía… Él era Suho “EL SUPREMO”. Él era una persona que conseguía lo que quería como lo quería y cuando lo quería. No podía permitir que Zhang Yixing tomara cosas que él no podía o no quisiera darle. Respiro profundo, exhaló el aire con decisión y sujetó con la mano derecha el brazo que lo aprisionaba y con al mano izquierda la pierna tentáculo que lo sujetaba e hizo un solo movimiento rápido y preciso con el que consiguió liberarse del agarré.
Una vez liberado se salio de la cama matrimonial, asombrado escucho las claras quejas de el modelo, lo primero que se le ocurrió al bajito, fue remplazar su cuerpo con la almohada que había estado usando y vio como literalmente los brazos y piernas de Yixing comprimían a la pobre victima que ocupo su lugar. Junmyeon se estremeció al ver aquel acto, el hombre pulpo daba miedo.
Después de aquel episodio y luego de ver que Zhang entraba otra vez en un relajado sueño, Junmyeon observo a su alrededor, frunció el ceño al notar que no eran ni su cuarto ni el de Yixing. Se pregunto ¿donde demonios estaban? Camino con cuidado de no toparse con nada ni de hacer ruidos, cerro la puerta del cuarto y vio la gran sala que estaba preparada para una pareja, se sonrojo al notar todos aquellos detalles cursis. No quiso pensar que cosas había dicho Zhang para conseguir aquella habitación, por lo que leyó en uno de la carta junto al teléfono, ese era una posada que no estaba muy lejos del laberinto.
Lo único bueno de aquello era que no lo habían visto siendo cargado cual damisela por el Hall del hotel donde su madre había reservado para él. –“¡mierda!”- pensó de repente – No he llamado a mi madre – murmuró, mirando todo a su alrededor porque no tenía idea de dónde estaban sus cosas.
Encendió la luz y vio su mochila en uno de los lindos sillones de color crema, también estaba su cámara. Rebusco entonces, pero no encontró su celular y recordó que el siempre lo llevaba en su chaqueta, se pregunto entonces donde estaría. Refunfuñando ante la idea de que Zhang lo había desvestido, volvió a entrar a la habitación y la verdad no le importo el ruido que hacia ni el hecho que encendió la luz. Busco su chaqueta cuando la encontró reviso sus bolsillos, hayo el celular al revisarlo noto dos llamadas perdidas y varios mensajes. Una de las llamadas era de su madre y el otro de Kai.
Volvió a salir del cuarto apagando la luz aunque al parecer no le importaba un comino al mentado modelo, ya que seguía aplastando a la almohada sin inmutarse por la claridad. Suho observo la hora aunque pasaba la media noche él no creía que su madre estuviera durmiendo; conociéndola si no la llamaba seguramente mandaría a buscarlo si ya no lo había hecho seria un milagro, marco y espero no demasiado.
-Hijo me tenías preocupada – se quejo su madre desde el otro lado de la línea.
-Lo lamento madre – se disculpo sincero.
-¿Estas bien? Llame al hotel y me dijeron que no habías llegado – señalo la dama Minha y Junmyeon maldijo interiormente.
-Si madre estoy bien- dijo tranquilo – lo que sucedió es que me quede dormido y tuvimos que quedarnos en una posada cerca del laberinto desde donde te mande las fotos – le recordó.
-¡Ho! - exclamó ella.
-Estoy bien simplemente estábamos demasiados cansados para manejar y decidimos quedarnos en una posada cercana – mintió para no preocuparla.
-Entiendo… me quedo más tranquila al saber que estas bien- suspiro la señora Kim.
-Dime que no enviaste a nadie – inquirió Junmyeon.
-Casi lo hago pero Nani me dijo que te enfadarías – confeso – me sugirió que esperara por tu llamada.
-La señora Park me conoce muy bien – comento Suho más relajado.
-Y tú a mi también - remarcó la dama en un tono enfadado - no vuelvas a asustarme así – le pidió con un tono de niña caprichosa, el rubio sonrió porque podía ver, en su mente, a su madre usando ese truco que siempre usaba para conmoverlo.
-No fue mi intención hacerlo, solo me dormí mamá – le volvió a decir.
-No te enfades, tú sabes que eres importante para mí y no quiero que te pase nada – agrego ella en el mismo tono.
-Lo sé – el joven Kim exhaló un suspiro - por eso no me enfada llamarte, pero ya sabes que tengo veinte años, ese control que tienen sobre mí me hace sentir que soy un niño y se supone que no lo soy – se quejo sin poder evitarlo.
-Disculpa a tu madre por ser tan protectora…
-Esta bien mamá solo descansa no volveré a hacerlo – respondió como el buen hijo que era.
-Jongin llamo quejándose que no contestaste a sus llamadas eso me preocupo mas – dijo la señora haciendo que Junmyeon frunciera el ceño.
-Matare a ese primo mío – dijo sin más.
-No te impacientes con él – pidió ella.
-Esta bien mamá descansa – pidió intentando no parecer lo molesto que estaba - te llamo mañana – prometió.
-Que descanses hijo te quiero
-Yo también mamá - suspiro al cortar.
Pensó seriamente en matar a al idiota de Jongin de una forma muy dolorosa ¿Cómo se le ocurría llamar a su madre? ¿Qué carajo tenía en la cabeza ese tonto de Kai para hacer eso? Estaba seguro que le patearía el trasero apenas lo viera ¿Qué momento de estupidez domino su mente para preocupar de aquella forma a la dama Minha? Si, ya estaba decidido, ese muchachito sufriría era un hecho ¡¡¡Su primo era carne muerta!!!
Se llevo la mano al cuello, masajeado un poco sus tensos músculos, porque su tensión había crecido durante aquella llamada. Necesitaba relajarse lo más pronto posible y pensó que un baño caliente lo haría, tal vez así podría volver a dormirse, suponía que el sillón seria mejor opción que volver al lecho con el hombre pulpo.
Supuso que el baño estaría en la habitación principal, eso implicaba volver al cuarto dónde dormía Zhang, tal vez se despertara y eso sería un problema. Pero siendo sincero, con el humor que se cargaba no pensaba que fuera inconveniente un enfrentamiento en ese momento. Como estaba, quizás podría enfrentarse a Godzilla y ganaría, así que… ¿qué más daba? Con eso en mente se dispuso a marchar hacía la habitación.
Pero cuando se dirigía, con decisión, al cuarto vio una portezuela que antes no había llamado su atención, su curiosidad pudo más y abrió la puerta. Valla sorpresa que se llevo al ver aquel Jacuzzi hermosamente decorado, parecía invitarlo a sumergirse en él. No lo pensó mucho simplemente lo encendió cerro la puerta y fue a quitarse la ropa a uno de los lados mientras esperaba que se calentara el agua.
No espero mucho el agua estaba a una temperatura aceptable y se sumergió lentamente mientras encendra los chorros calientes que daban en su espalda relajando sus músculos, suspiró complacido, apoyó su cabeza en uno de los bordes y dejo que el agua hiciera su trabajo.
No supo exactamente cuanto tiempo paso, pero toda su relajación se fue al carajo cuando escucho que la puerta se abría y cerraba, Junmyeon no abrió los ojos porque sabía de quien se trataba ¿que otra persona podía ser tan atrevido como para entrar mientras el tomaba un baño?. A sus oídos llego una especie de murmullo en chino y después su nombre. ¡Ho Si Zhang estaba allí! ¿Qué mierda le importaba a él lo que ese tipo decía o hacía?
No sabía que tan buena idea era permanecer quieto en aquel sitio, pero luego una idea clara le vino a la cabeza. Él no tenía porque moverse de aquel lugar ya que él llego primero, y no permitiría que arruinara esto también. Además en aquel momento pensó, con calma aun sin mirar, ¿que más daba si el libertino estaba allí?
Ya que se recordó a si mismo que ambos eran hombres, esto sería algo parecido a cuando él y su primo ya había estado en baños públicos. Corría con cierto grado de familiaridad, no tenía sentido el escándalo ni el enfado, simplemente se levantaría se iría a dormir.
Justo en el momento en que abrió los ojos, con la intención de largarse de allí, volvió a cerrarlo por un estúpido reflejo, ya que el muy descarado de Zhang se estaba quitando la ropa. No es que el hubiera visto aquel majestuoso cuerpo; No él no lo hizo apropósito, tampoco vio aquella piel ni el resto de su tonificado cuerpo. No Suho no era un pervertido ¡No señor! Simplemente esperaría que el tipo se metiera al maldito Jacuzzi y se largaría de una vez.
-Junmyeon – lo oyó llamarlo.
-…- el rubio permaneció en su sitio ignorándolo.
-Junmyeon mírame – ordeno en un extraño tono caprichoso que ya había oído.
-“Habrase visto, maldito atrevido”- pensó Suho que decidió no tomarlo en cuenta apropósito.
-Hey… pequeño – llamo Zhang insistentemente esta vez acompañado por el toque de su dedo gordo del pie en su blanquecina pierna, haciendo que el otro diera un bote y encogida un poco las piernas - Anda no seas así mírame…- pidió Yixing, con otro toque a la pierna con su pie – vamos - lo tocaba con sus dedo gordo varias veces – respóndeme – suplico el mayor añadiendo otro toque un poco mas fuerte – mírame- pidió acercándose un poco más - Junmyeon, Junmyeon, oye, pequeño, lindo mírame, oye anda, se bueno, Junmyeon - repetía y repetía casi sin respirar siempre acompañado por un toquecito de su pie o mano ya que estaban más cerca. Observando como la venita palpitaba en la frente del rubiecito y realmente sentía que una necesidad de molestarlo mas. Zhang sabía que se estaba excediendo pero no podía evitarlo el quería que aquel chico le volviera ha hablar y se para eso tenía que molestarlo a muerte lo haría sin pensarlo, no por nada tenía esa reputación delante de Wolfy, así que sonrió de lado y volvió a la carga – ¿y no vas a mirarme? anda Junmyeon mírame ¿sí?… pequeño… chiquitín… pelusa… cosita…
-¡Basta! – explotó el más bajo - ¡Cierra esa maldita boca!- se escucho decir en un gruñido casi inhumano mientras que la mano cerrada en un puño golpeaba el agua haciendo que Yixing tragara un poco, de esta, por la sorpresa. Su estabilidad se perdió cuando el rubio se puso de pie sin darle importancia a su desnudez y comenzó a caminar para salirse fuera de la tina mientras decía - eres el ser más irritante que conocí en mi vida y puedes irte a la mierda si crees que podrás ganarme con esas cursilería y motes tan idiotas – escupió pero antes de que pudiera continuar dando un paso más, el heredero, sintió que su brazo era jalado. Aquel tirón consiguió hacerlo perder el equilibrio, como resultado termino pegando de lleno con su trasero en el fondo de la piscina haciendo que el agua lo cubriera casi por completo luego en una fracción de segundos sintió como unos tentáculos lo rodeaban aprisionándolo – ¡con un demonio Zhang Yixing suéltame!- ordenó intentando zafarse
- ¡te ordeno que me sueltes! - exigió
-No, hasta que me escuches – dijo un divertido Yixing.
-¿Por qué demonios lo haría? – escupió un enfadado Junmyeon.
-Sólo para complacerme – dijo de forma descarada.
-¿Y quien caracolitos te crees para que yo hagas eso? – magulló Suho, echando de toda su fuerza de voluntad para no voltearse y ahogar a ese maldito engreído.
-No lo se - Alzo los hombros con desenfado- tu acompañante de aventuras…- dijo tentativo
-Eso no me sirve – bufó - suéltame si no quieres que comience a gritar – advirtió seriamente.
-Si lo haces vendrán y verán donde y como estamos – le aclaro el pelinegro.
-No me interesa – dijo sincero.
-¿y si le dicen a los periodistas?- aventuro a decir el mayor.
-No me importa – respondió de forma directa el blondo.
-Eso lo dices ahora pero cuando te acosen los paparazzi y no puedas ni siquiera poner un pie fuera de tu casa ¿Qué harás? no es divertido – aseguro posando su mentón en el hombro del más bajo - anda Junmyeon déjame disculparme.
-Suéltame- repitió Kim.
-No – fue la respuesta del más alto, apretando el cuerpecito como si fuera un muñeco de felpa.
-¿Porque? – quiso saber el rubio.
-Te iras y no quiera – respondió sin tapujos Yixing, haciendo que Suho suspirara con resignación, el modelo sonrió por alguna razón supo que había ganado este round.
-Al menos deja que respire me estas asfixiando – remarcó un muy frustrado rubio.
-OH…- exclamó el pelinegro aflojando un poco el agarre pero no lo soltó del todo.
Suho tomó un poco de aire dejando que sus pulmones se expandieran, estaba muy cabreado y sabía que ese mal genio no era bueno, volvió a inhalar y exhalar buscando el control que había perdido. Pero… ¿como se puede encontrar control? Si luego de un momento de ira, pasas a darte cuentas que todo tu cuerpo esta rodeado por los brazos y las piernas de Zhang Yixing. Además su espalda estaba completamente pegada a su pecho y abdomen. No sólo eso, su latente y excitado miembro esta pegado a la base de tu espalda.
-“JODER, JODER, JODER”- chillo la mente del más bajo.
-Junmyeon….- escucho que lo llamaba ya más calmado justo sobre su oído derecho – ¿me perdonas? – dijo el pelinegro.
-¿Qué quieres que te perdone?- gruño el rubio intentando idear una forma de salir de allí ¡pero ya!
-No seas así pequeño – susurro apretujándolo un poco contra él – anda hablemos.
-Está bien – resoplo resignado - pero no aquí- señaló decidido.
-¿Porque?
-Casi me ahogas – acusó – y creo que al menos deberíamos tener ropa encima si queremos hablar – puntualizo mientras observaba las piernas del más alto que lo envolvían, haciendo un hermoso contraste con su pálida piel.
-A mi no me molesta estar así - rió entre dientes – ¿a ti si?- consulto besando el hombro del mas bajo – ¿te incomoda?
-¿quieres la verdad?- consulto el menor de forma tentativa.
-Por supuesto
-Eres demasiado atractivo como para pensar cosas coherentemente y no pienso decir nada más si no me dejas salir de aquí – sentencio.
-¡Ha! pero a mi me gusta estar así contigo – señalo Zhang de los más complacido con las palabras del mas bajito, todo su cuerpo se lleno de un hormigueo extrañamente placentero al enterarse que el pequeño no era inmune a sus encantos.
-Me di cuenta – remarcó con un bufido el menor - eres como un pulpo que no deja a su presa – remarco con enfado Suho.
-¿Pulpo?
-Si, acaso no lo has notado incluso cuando duermes me abrazas hasta asfixiarme – acuso Junmyeon.
Aquellas palabras golpearon mucho más de lo que el rubio suponía, es que eso de abrazar y acurrucarse por las noches no eran cosas que Zhang hacía con nadie.
Un suspiro lo volvió a la realidad, sus ojos detallaron el cuerpo que aun sostenía entre sus brazos. El corazón del pelinegro latió acelerado, aflojo el agarre y dejo que el más bajo se apartara, lo observo alejarse y salir de la bañera luego tomar una bata y sus cosas, Yixing necesitaba tiempo para calmarse y sacar de su sistema aquellos pensamientos y sensaciones que había generado aquella revelación.
-Ve te alcanzo en un momento – le dijo y para su sorpresa el rubiecito asintió y salio del la habitación.
En la mente del modelo se genero un remolino que ni el mismo podía dominar, por un segundo se dejo envolver por aquel miedo (Si miedo) que le provoco al idea de que su lado emocional aun estuviera vivo y oculto en su interior.
Porque el gran Zhang era extrovertido, divertido pero prefería desparramarse sólo en una gran cama, siempre solitario después de unas buenas horas de sexo (sin emociones o sentimientos de por medio). Los mimos y el estar pegado piel con piel por horas sintiendo el calor de la persona que lo acompañaba en el lecho eso era más de la esencia de Lay (porque él era romántico, sensible, bueno y muy cariñoso).
Pero Zhang Yixing no podía actuar así, imposible, porque eso quería decir que Lay aun vivía; Eso no adquiría un sentido verdadero, Lay estaba muerto, él lo enterró hace mucho tiempo. Y debía seguir allí, porque los sentimientos no podía volver a joder su vida, no eso no era cierto jamás dejaría que eso volviera a pasar.
Zhang Yixing no permitiría que eso sucediera, además todo aquello se removió sólo porque el chico rubio era demasiado lindo y le provocaba aquello, si era racional eso no tenía nada que ver con sentimientos ni con nada de esas cosas.
oxoxoxoxoxox
Junmyeon necesitaba poner espacio entre ellos dos así que simplemente se largo de allí para poder pensar en frió. ¡Carajo que difícil era eso! Era dificultoso pensar cuando todo en tu interior gritaba por una satisfacción; pero al final obedeció a su mente racional e hizo lo que ella le pedía que hiciese.
Y lo hizo, pero ¡joder!! Su cuerpo quería otra cosa, simplemente ambicionaba volver ahí y besar a Yixing hasta cansarse y hacer otras cosas demasiado atrevidas para seguir imaginándolas. Inhaló y exhaló un par de veces mientras caminaba descalzó por la sala de estar.
Un mensaje llego a su celular, era de Jongin. Como aun seguía algo fastidiado con él, simplemente tecleo una respuesta enfadada, envío un mensaje a su madre que apagaría el celular y lo prendería apenas se despertara. Apago el celular no estaba de humor para explicar lo que le estaba pasando a su protector primo.
Porque Kim Jongin era demasiado protector con él, así como Suho lo era con su pequeño primo si el momento lo requería. Y bueno eran los únicos Kim que quedaban así que ¿con quien más podía contar? Aquel pensamiento calmo un poco su estado de animo y se sentó en el sillón esperando que Yixing volviera a aparecer. No término de pensar aquello cuando lo vio cruzar la puerta vestido con una salida de baño igual a la él se pusiera.
El pelinegro no tomó asiento junto al menor, como era de suponerse, simplemente se fue al Frigo bar y extrajo unas botellitas de licor y las sirvió en un vaso. Suho levanto una ceja incrédulo preguntándose que demonios estaba pasando por la cabeza de aquel hombre en ese momento. Lo observó por un momento y las ideas que había estado reprimiendo en su cabeza se volvieron a instalar.
-“¿Por qué demonios se veía tan sexy bebiendo? ¿Lo hace apropósito? – las preguntas se generaron a medida que los segundos pasaban.
Junmyeon de repente sintió mucha sed, así que se puso de pie y fue por una lata de jugo, la abrió y bebió de allí sin servírselo en un vaso, cuando la termino la apretó y la tiro al recipiente verde donde iban las cosas para reciclar luego encaro al silencioso Zhang.
Ya era hora de aclarar todo aquello, si no obtenía una respuesta, simplemente esperaría a que amaneciera para pedir un taxi y volvería al hotel. Al llegar dormir algo y luego se largaría a su casa ya se había cansado de aquel hombre y su bipolaridad. ¿Porque que sentido tenía estar ahí deseando algo que al parecer no obtendría? Suho no era de darse por vencido pero tampoco pensaba rogarle nada a nadie.
Yixing simplemente tomó su trago ignorando a cualquier ser a su alrededor, cuando Junmyeon se acerco y se puso en su campo visual, el hombre mayor se aparto como si el más bajo tuviera una enfermedad contagiosa. Suho estaba sumamente cansado, bajo mucho estrés por varios motivos y frustración de varias formas. Por consiguiente y viendo que el mentado modelo no hablaría decidió tomar el toro por las astas y hablo primero.
-Bien terminemos con este estúpido silencio de una vez – dijo Suho pero no tuvo ninguna respuesta.
Si había algo que al joven Kim detestaba era rogar por atención. No estaba en él suplicar por algo que a sus ojos no valía la pena, el silencio de Zhang dejaba entre ver dos cosas, o bien se había cansado de jugar con él (según Suho esto era lo más probable) O solo lo hacía por hacerse el interesante (cosa que si era así, fastidiaría aun más al mas bajo) El silencio se extendió por más tiempo del que Junmyeon pudiera soportar así que apretó los puños y hablo.
– Ya que no se que demonios te llevo a convertirte en un idiota y no piensas hablar al respecto he decidido que me iré a penas amanezca, dormiré en el sillón tienes toda la cama para ti – espetó Kim arto del silencio incomodo que se había formado entre los dos, fue hasta la habitación tomo una almohada y un cobertor y fue directo al sillón donde los arrojo para luego ir directamente hasta el interruptor y apagarlo sin impórtale que Zhang estuviera ahí todavía.
-“imbécil, idiota, crédulo” - se decía a si mismo, Suho, por creer que podría pasar algo bonito entre ellos dos –“deja de pensar como una jodida colegiala”- se regaño mientras se cubría hasta la cabeza – “¡joder!”- exclamó cuando sus ojos ardían –“ni se te ocurra”- se ordeno, e inhalo y exhalo para calmarse.
Zhang observó al bulto en el sillón, se maldijo por hacer que aquel chico se sintiera mal. Pero ¿que más podía hacer? Mantener el control de su vida era esencial él no podía ni pretendía caer nuevamente. Simplemente no quería volver a sentir nada especial por nadie. Si lo hacía ¿que sucedería con el Gran Zhang Yixing?
Era increíble que una persona tuviera ese efecto en él, creyó que no le volvería a pasar. En todos esos años, dónde se hizo mas duro y se prometió a si mismo no volver a dejarse llevar los sentimientos, nunca encontró nadie que lograra derribar sus barreras de protección y simplemente no quería, no podía volver a caer en eso nuevamente.
-“Cobarde”- se grito una voz en el interior de su cabeza, como acto reflejo apretó el vaso vacío que sostenía, el insulto se repetía cual eco en una montaña. Realmente no le gustaba la idea de catalogarse a si mismo de aquel modo despreciable.
Pues no Zhang Yixing no era temeroso niño, el se juro a si mismo no volver a caer por nada ni por nadie. Se prometió que jamás volvería a someter a su corazón aquellas sensaciones y lo cumpliría.
Y si él tenía tan claro aquel objetivo ¿cual era el problema?
Luego de meditarlo seriamente se dijo que no habría ninguno mientras él supiera que podía manejar la situación sin involucrarse demasiado. ¿Y si su objetivo era tan bueno como para arriesgarse pues que le impedía avanzar?
Se sirvió la última botellita de coñac que había sacado del Frigo bar y la bebió por completo y de un solo trago. Él estaba dispuesto a manejar aquella situación y los sentimientos que se generaran.
-“¡Sí, él podría manejar aquello que le provocaba estar con Kim Junmyeon!”- Se dijo a si mismo – “Sea lo que sea lo que eso conllevara, él podría manejarlo”- se animo.
Soltó el vaso y se encamino hacia el bulto estático en el sillón, se dio cuenta que el rubiecito no estaba dormido porque apenas se sentó el otro encogió un poco las piernas, sonriendo de lado empezó a hablar - Oye Junmyeon – comenzó a decir, porque al menos debía dar una buena explicación para poder disculparse como era debido y luego vería que cosa se le ocurría para que lo perdonaran y tal vez solo talvez, conseguir un par de noches en compañía de aquel apetecible cuerpecito – Escucha pequeño – volvió a hablar mientras pensaba que demonios diría para que fuera efectivo hasta que llego a él la respuesta – Sé que realmente no me he portado bien contigo – escucho un murmullo bajo la manta, quiso reír pero no lo hizo continuo siguió con su monologo.
-Atiéndeme Junmyeon te voy a explicar un par de cosas que debes tener encuesta sobre mí - comenzó a decir con calma - yo soy una persona especial y no es por mi fama ni nada de eso, que tu ya conocer eso de mí- aclaro - de lo que hablo es que soy un despistado de primera - aseguro sin más, porque pensó que la verdad era su mejor opción que tenía en ese momento – si no me crees pregúntale a Wolfy, ella sabe que suelo perderme en mi propia casa de hecho es una de sus bromas mas comunes burlarse de ese defecto – afirmo, y escucho lo mas parecido a una risa ahogada que lo alentó a continuar.
–Entonces… supón que mis habilidades de orientación no son buenas en espacios reducidos así que imagina lo que paso en aquel laberinto – resopló porque no le gustaba admitir sus falencias – Bueno yo me perdí allí, por eso decidí esperar a que tú me encontraras - se rasco la nuca frustrado porque a pesar de lo que decía no veía ningún movimiento del chico del sillón, aun así proseguir - Pero debo agregar algo de lo que tampoco estoy orgulloso – suspiro un poco.
-yo no tengo muy buenos despertares- declaró - Aunque creo que ya debes saber eso - chasqueo la lengua por lo que ahora debía decir pero se dijo que si ya había llegado hasta ahí debía terminarlo respiró profundo y continuo – realmente lo siento Junmyeon, yo no quería asustarte, ni tratarte mal, simplemente estaba demasiado dormido para distinguir algo, se que no es escusa pero de verdad no quise tratarte así. Tampoco quería que te pusieras triste y no trates de negarlo; sé que así te sentiste cuando no conteste a tus preguntas – silencio y sin respuesta alguna.
Zhang observó un poco al cuerpo frente a él y sonriendo de lado llevo sus manos hacía los costados del bulto frente suyo y de repente se le había ocurrido una idea que tal vez funcionara aunque tal vez fuera arriesgado – “quien no arriesga no gana” – se dijo a si mismo.
Espero un poco a ver si obtenía alguna respuesta pero no, el chico era terco y con mucho carácter, y eso lo incentivaba a provocarlo de mil formas para ver sus reacciones. – “Ho! Esto se pondrá bueno” – afirmó en su mente mientras reía mentalmente ya mas decidido.
–Presta atención Junmyeon si no me hablas te castigare – advirtió y vio el cuerpo tensarse bajo el edredón – Anda pequeño háblame – ronroneo cerca de la mata de cabello rubio que se comenzó a asomar – Junmyeon debes ser un chico bueno y contestarme – dijo mientras observaba el lugar exacto por donde metería las manos y atraparía a su presa – la ultima oportunidad para que hables antes de recibir tu castigo - advirtió mordiéndose el labio ante la idea de ejecutar su travesura.
Escucho una maldición ahogada y no espero mas simplemente sumergió sus manos en entre la manta buscado las costillas de aquel cuerpo y comenzó su ataque de cosquillas, un chillido de sorpresa lo hizo reír – te lo advertí – gruño divertido cuando el cuerpo comenzó a retorcerse seguido de una carcajada apenas contenida.
-¡Basta Zhang! – exigió el pobre Suho desde debajo de la manta intentando liberarse pero el muy maldito lo tenía atrapado entre su cuerpo y el sillón atacándolo de una manera insospechada él no toleraba que le hicieran cosquillas de ningún tipo – ¡DEJAME MALDITA SEA! – exigió agitado.
-No… - fue al respuesta mientras detenía por un momento su ataque – hablemos.
-Eso ya lo intente y no funciono – escupió desde su posición.
-Vamos pequeño - animo Zhang quitándole la manta del enrojecido rostro - Se bueno y perdóname.
-¡Eres un maldito aléjate y déjame en paz! – pidió desesperado porque el mayor tenía sus manos sobre sus brazos inmovilizándolo, además de cierto peso que sentía sobre la parte superior de su cuerpo.
-Claro que no…- dijo Yixing sin inmutarse por las patadas que el otro daba – si lo hago te iras – señalo – ¿como fue lo que dijiste? - pensó un momento – ¡Ho si!- exclamó al recordar - me dijiste que soy demasiado atractivo como para pensar cosas coherentemente.
-Si lo dije pero que tiene que ver – gruño el rubio enfadado por no poder darle un puñetazo que borre esa sonrisita tan sexy que tenía dibujada en el rostro.
-Tiene que ver y mucho solo quédate quieto y escucha – pidió
-…- Junmyeon frunció el ceño y obedeció, no es que tuviera muchas opciones para elegir sabía que el mayor tenía el control por el momento, además necesitaba saber que demonios pasaba por aquella cabeza. A ver si así tal vez podía llegar a entenderlo un poco de una buena vez.
-Bien…- empezó a decir acomodándose un poco para darle algo de espacio al mas bajo pero aun así no lo soltó – Si no me perdonas no podré darte tu premio – comento e ignoro la cara de pocos amigos que el rubiecito le daba – Ya sabes que si no me hablas no podrás decirme que hacer o que no – se alzo de hombros – además que no tendrás ningún beneficio seria aburrido estar allí alado tuyo sin hacer nada. ¿No lo crees? ¿Es aburrido verdad?
-¿De que estas hablando? – cuestiono un muy confundido Suho.
-De la apuesta del laberinto – recordó – tu dijiste que si yo te encontraba tu harías lo que yo quisiera ¿recuerdas? – la boquita del menor se formo una “O” muy bonita que Zhang no pudo ignorar se quedo callado mirándolo.
-No te estoy entendiendo ¿que tiene que ver todo eso con estar enfadado contigo?
- Pues si no hablas no me podrás ordenar que haga lo que tu quieras – dijo muy quitado de la pena, se acerco un poco más al rostro del menor, este intento apartarse pero lo único que consiguió es ladear el rostro y dejar parte de su blanquecina piel expuesta – Mi querido Junmyeon – suspiro sobre aquella clavícula y comenzó acender rozando aquella zona con su aliento - si no me perdonas no podré ser tu… - se detuvo y lo susurro sobre su oído , para luego retirarse por completo.
Zhang se quedo sentado en el borde del sillón, toda su piel quemaba y contuvo su respiración al ver al mas bajo sentarse y observarlo, sabía que su palabras surtieron efecto en el mas joven, no las había dicho en vano, sus hermosos ojos lo observaron con tanta intensidad, sus pálidas mejillas ahora ardían con un sonrojo intenso, su cabello siempre pulcramente peinado, estaba revuelto. Su bata estaba abierta mostrando más de lo que él mismo podía soportar, quería tocarlo pero se aguantó, aun no era el momento.
-“Shit!” – Pensó Yixing más que excitado -“Si el me ignora no sé que haré esto que yo mismo genere” – pensó vagamente mientras lo veía acercarse un poco.
-¿Estas hablando en serio Zhang? – Se animo a preguntar – porque si no es así…
-Ya lo dije Junmyeon – interrumpió el pelinegro – mi ofrecimiento es muy serio esta en ti si aceptas o no – confirmo el mayor.
-Pero… ¿por qué harías eso?
-Me gustas y se que te gusto – soltó sin mas tomando la pálida mano del más bajo – ¿Porque no? – dijo con simpleza.
-Yo… ¿te gusto? – consulto entrelazando sus dedos con los de Yixing.
-Vamos Junmyeon esa es una pregunta demasiado capciosa – susurro mientras llevaba la pequeña mano hacia su ya muy llamativo problema - realmente estaré en problemas si decides no aceptar…
Junmyeon retiro la mano de aquella intima parte, intentar pensar simplemente era en vano, él lo sabía. No pudo seguir reprimiendo lo que quería hacer desde hacía ya bastantes semanas atrás. Llevo ambas manos hacía cada mejilla de ese endiabladamente sexy hombre y lo beso con toda esa ansiedad que había estado reprimiendo.
Zhang ahogo un jadeo entre aquellos labios que lo atacaban sin piedad simplemente rodeo el delgado cuerpo con sus brazos y los pego más a él, respondiendo a la intima caricia con la misma intensidad.
El beso se rompió cuando la necesidad de respirar fue imperativa. Se observaron el uno al otro, ambos estaban agitados, Zhang fue el primero en hablar.
-¿Eso es un sí?… - lo abrazo y oculto su cara en el blanco cuello
- ¿aceptas que sea tu esclavo sexual?
-Cállate y vamos a ver que tan bueno eres en seguir ordenes – gruño Junmyeon apartándose y poniéndose de pie.
-¡Huy… que mandón! – rió entre dientes el pelinegro.
-A la habitación ahora – espeto Suho.
-¿Quieres que te cargue como una princesa? Ya sabes como recién casado y eso… – Bromeo el pelinegro – mejor no – se corrigió luego de ver la cara del rubio mientras comenzaba a correr al cuarto.
-¡¡¡Espera y veras Yixing!!! Pagaras por haber siquiera pensado eso- ladro Junmyeon yendo tras él.
-¡¡¡Cuento con eso!!! – fue la respuesta seguida de una carcajada.
La puerta se cerro de golpe, Yixing sabía que tal vez había despertado a un Monstruo pero que va… él era el gran Zhang podía con todo…
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