Se encontraba con el ceño fruncido, ese pequeño gesto llamó la atención de varios, especialmente de los chicos del club de básquetbol, era muy extraño que Izuki estuviese enojado, por eso mismo no sabían cómo actuar, decidieron que fuese Teppei quien hablara, en el peor de los casos, solo se molestaría con él. Sí, lo estaban utilizando como conejillo de indias, él lo notó, pero no se negó.
-Izuki ¿Cómo estás?- preguntó el pívot de Seirin sentándose al lado del pelinegro.
Izuki suavizo su gesto y volvió a su actitud de siempre al escuchar a su amigo.
-Bien ¿y tú? ¿Ya lograste acostumbrarte nuevamente a Japón?
-Claro, fue pan comido, aunque me gustaba estar en Norte américa, es un bello país aunque la gente es más liberal.
-Gente liberal, supongo que es general
-Izuki, sueles hacer juegos de palabras malos, pero ese fue fatal
-¿Debí haber dicho nacional?
-Habitual, también era una opción
Al final el par de amigos se quedaron charlando de cuál era la palabra indicada para hacer rimar con liberal, no llegaron a ningún consenso pero encontraron varias palabras que podían ser útiles, Kiyoshi se fue del lugar cuando llamaron a su celular. A los minutos (y luego de haber contestado) volvió con los demás con los demás chicos del equipo.
-¿y bien?- preguntó Koganei bastante interesado en saber qué había sucedido con Shun
-¿Y bien qué?- respondió Teppei sin si quiera pensarlo.
-¿Sabes qué le sucedió a Izuki?- colaboró Hyuuga, preocupado por su amigo.
-Eh... Jejeje, no me creerán si se los digo
-¡¿Qué cosa?!-preguntaron todos al unísono
-Pues... Se me olvidó preguntar. Bien, creo que me voy.
Hyuuga golpeó al castaño, Riko lo detuvo, Koganei y Kagami le reclamaron a Kiyoshi por no lograr el objetivo y el resto del equipo suspiraba por la escena.
-¿Por qué están haciendo tanto alboroto?- cuestionó Shun apareciendo en escena.
-Izuki-senpai, la verdad queríamos saber porque parecía molesto, ha estado con el ceño fruncido todo el día.
Todos lanzaron una exclamación al escuchar lo directo que era Kuroko, aunque Izuki solo sonrió ligeramente y no le dio importancia.
-No tengo problemas en explicar de qué se trata, todo es culpa del idiota de Himuro.
Como reacción natural todos voltearon a ver a Kagami quien negaba con la cabeza.
-No me miren a mí, no sé qué habrá pasado entre mi hermano e Izuki, pero puedo asegurar que no tenía ni idea de que hubiesen discutido.
-Lo siento Kagami-kun, pero como son hermanos supusimos que quizá te había contado algo.-se disculpó Riko en nombre de todos.
-La verdad, no peleamos, ni siquiera discutimos, yo solamente me enfadé por un comentario, pero no es nada serio, de seguro que Himuro ni si quiera se dio cuenta.
-¿Quieres qué te ayudemos en algo?
-¿Ah? Para nada, mejor volvamos a clases.
Todos obedecieron a Izuki aunque la curiosidad seguía presente ¿Qué era lo que había sucedido?
Himuro e Izuki eran novios, se volvieron pareja un día en que Tatsuya había decidido ir a ver a Taiga, el trigueño no se encontraba en el gimnasio en el momento en que su hermano llegó, estaba tomando clases de recuperación tras haber suspendido un examen. Izuki se sentó a su lado mientras esperaba, hablaron durante horas y cuando Kagami llegó ambos sintieron que había matado la atmósfera. Himuro comenzó a charlar con su hermano, y justo antes de irse decidió que quería seguir hablando con Shun. Aún recordaba la frase que Tatsuya le había dicho "Izuki, sé que esto es extraño, pero la vida es extraña, Akita queda a miles de kilómetros de Tokio, probablemente apenas nos veamos, existe la posibilidad que te aburras de mi después de un día, o yo de ti, aunque lo dudo, el punto es ¿Quieres ser mi novio?"
Izuki enarcó una ceja y Kagami estuvo a punto de perder su quijada. Todos en el gimnasio voltearon a ver la peculiar escena y Shun contestó "sí, vale la pena intentarlo". Así fue como nació su relación, nadie puede saber si inició solo como un experimentó de Tatsuya o realmente quedó encantado con él luego de hablarle durante un largo rato, pero podemos decir que resultó con un amor honesto de ya siete meses de relación.
Entonces retomemos la pregunta ¿Qué había sucedido con Izuki? ¿Por qué estaba molesto con Himuro? Pues tendremos que retomar otro flashback.
Izuki había estado todo el fin de semana en casa de su novio, logró que sus padres lo autorizaran a estar dos días fuera diciendo que iría a estudiar, claramente se puede suponer que lo que menos hizo fue estudiar, a menos que gemir bajo el cuerpo de Tatsuya fuese tomado como estudio, en ese caso podemos decir: ¡Izuki estudió muy arduamente! En lo que estábamos, luego de hacer el amor quien sabe por cuanta vez, Himuro preguntó "¿Shun eres homosexual?" la pregunta se le hizo sumamente estúpida y pensó que debía dejar de hacer chistes malos frente a él, al parecer era contagioso, se sintió obligado a responder al ver que no le quitaba los ojos de encima, "no Himuro, soy heteroflexible" respondió a modo de broma, Tatsuya sonrió malicioso, y a su vez dijo "demasiado flexible la verdad, tanto que podemos ensayar cualquier posición del Kama Sutra", ambos rieron e Izuki le dio un ligero golpe en el hombro a su pareja, "ok, asumo que fue una pregunta idiota, pero la verdad yo soy bisexual, tenía curiosidad en saber cuál era la orientación sexual de mi pareja" "entonces te sirve todo lo que se mueve" bromeo el miembro de Seirin. Himuro negó con una sonrisa, y sin intención de molestar contesto "no, no, esos son los pansexuales, a ellos le vienen todo, hombres, mujeres, transexuales, travestis, no es que tenga un problema con los últimos dos, solo que es raro ¿no crees? Por algún motivo me produce rechazo"
La conversación había terminado en eso, para Himuro no había sido tema, pero Izuki realmente se había molestado, no es que fuese un defensor de las minorías sexuales, pero tenía un familiar que se había cambiado de sexo quirúrgicamente, por lo tanto se sentía mal con que su novio no los aceptara, pero no podía hacer nada para hacerlo cambiar de opinión ¿o sí?
... ... ... ...
¡Maldición! ¡Tenía una idea! Era una buena idea, pero era realmente estúpida y alocada, bueno, mucha de las cosas que hacía con Tatsuya era estúpidas y alocadas, así que ¿cuál era la diferencia? Bien, estaba decidido, solo esperaba que su valentía no se esfumara.
O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O
Días después, una tarde de viernes cuando Himuro volvía de clases encontró a una chica frente a su puerta, el solo veía su espalda, un cabello negro, largo hasta la cintura, también podía apreciar que llevaba mini falda y medias hasta las rodillas. Suspiró con algo de resignación, tenía muy bellas piernas, bastante apetecible pero era una persona fiel y solo tenía verdadero interés en Izuki. Aunque claro eso no quitaba el que se calentara con otras personas, fiel y enamorado, pero no ciego señores.
-Señorita ¿Busca algo? - cuestionó el azabache, pero casi le dio un ataque al ver el rostro de la chica.
-A mi novio- dijo jugando con la punta de sus cabellos.
-¡¿Shun?!-Exclamó Tatsuya de forma tan "suave" que se escuchó en al menos otros dos pisos del edificio.
-Baja la voz, mira que vine de Tokio vestido así para darte una sorpresa.
Himuro miró al techo, respiró hondo, se cuestionó la salud mental de su pareja y terminó por volver a mirar las piernas de su novio, es que ¡maldición! esas piernas eran tan perfectas. Se fijó en el resto del atuendo, aparte de tener medias y mini falda, tenía una blusa holgada, zapatos de tacón, en sus labios se notaba el uso de un labial rosa y sus pestañas estaban encrespadas. Sí, definitivamente su pareja se veía muy bien con ese atuendo.
Abrió la puerta de su casa y lo primero que hizo fue sentarse en un sillón, lo que más le sorprendió fue que su novio también se sentó, pero no exactamente a su lado, si no frente a él, o de forma más específica, sobre él.
-Himuro, hoy tuve un día muy aburrido, bueno toda la semana lo fue, basta con decir que lo más interesante que tuve fue una conversación con Kiyoshi, el corazón de hierro preparó su propio entierro, ¡imagina que sale con Hanamiya, el que le rompió su rodilla! Vaya, sale un chiste cruel con las rimas de su nombre de forma bastante natural, casi ideal.
El escolta de Yosen no estaba escuchando en absoluto los malos chistes de su novio, aunque eso no quiere decir que no le prestara atención a él, de hecho solo podía pensar en él y en el "pequeño detalle" de que estaba sentado sobre sus piernas moviendo sutilmente su pelvis con cara palabra que decía, haciendo rozar su miembro con el de él reiteradamente.
Tatsuya paseo su mano por los blancos muslos de su novio, pero se sorprendió como este se alejó de él y lo miraba desconcertado.
-¿Pero qué te sucede? Creí que no te gustaban estas cosas.
-¿Qué cosas?- cuestionó sin entender en lo absoluto ¿acaso no lo había provocado para tener sexo?
-Tu dijiste que no te gustaban los chicos vestidos de mujer y no te preocupes lo entiendo, no te obligaré a tocarme, sé que hoy probablemente te produzco asco.
-Oye no digas eso.
-No te molestes en disculparte, lo entiendo... sabiendo ¿sintiendo? ¿Creciendo? ¿Abriendo?
Shun siguió pensando palabras en voz alta mientras que se sentaba en el suelo con las piernas abiertas, el dueño de casa estuvo a punto de atragantarse al ver que llevaba bragas femeninas, se fijaba en cada acción del otro, como mordía su dedo índice con aparente inocencia y el evidente hecho de que se negaba a cerrar las piernas. Definitivamente lo estaba incitando. Siguió observando las acciones de Izuki, se había aburrido de buscar rimas consonantes de la palabra "entiendo" y se había dirigido al congelador, sacó una caja de leche, se sirvió en una vaso y comenzó a beber, todo bien excepto cuando parte de la leche en lugar de caer en su boca caía bajo esta y recorría desde su mentón hasta su cuello. Definitivamente lo estaba seduciendo.
Himuro golpeó con fuerza la mesa de centro, llamó la atención de su novio quien a pesar que se había sorprendido solo lo miró interrogante.
-Izuki Shun, cuando empezamos a salir dije que nunca te obligaría a hacer algo que no quisieras, que te respetaría y bla bla bla, realmente no quiero romper esa promesa pero ¿No es un poco injusto que vengas a mi casa con esa ropa, me provoques y luego me rechaces? Así que dime, ¿qué quieres que haga para tener sexo?
En este punto debemos entender lo desesperado que esta Himuro para llegar al punto de suplicar por sexo, pero, hay que comprender ¡Está soportando una erección prácticamente desde que Izuki entró a su departamento! Y basta con decir que él no es de la gente que puede soportar pacientemente con su miembro erecto. El integrante de Seirin sonrió triunfante, se sentó en un sofá, cruzó lenta y seductoramente ese par de gloriosas piernas (y en el proceso se pudo ver, nuevamente, las bragas femeninas), Himuro miraba embobado cada uno de sus movimientos y se sintió en el cielo cuando el otro azabache mordió sus labios y alzo las cejas, ese era un gesto típico de su novio con el que trataba de decir "adelante ¿qué rayos estás esperando?"
Fue cosa de segundos para que Himuro fuese al ataque, de hecho Izuki ni si quiera pudo notar cuando pasó de estar sentado a recostado con su novio sobre él devorándolo a besos mientras acariciaba incesantemente sus muslos, se dejó hacer mientras, al mismo tiempo, desnudaba a Tatsuya, debía asumirlo, él también estaba bastante caliente. Se desprendió de la peluca, ya no la necesitaba, es más, ahora era solo un estorbo, se sorprendió de ver que su pareja estuviese desabotonando la blusa con su boca, por algún motivo más allá de su comprensión le gustaba esa acción. Himuro se detuvo de golpe, quería largarse a reír, y es que simplemente no podía ignorar que su novio había sido tan profesional que incluso había decidido usar brasier.
-¿Es una broma?
Izuki negó conteniendo la risa, luego llevó sus manos a la espalda para desabrocharlo pero Himuro lo detuvo.
-Consérvalo, me gusta la idea de que lo uses mientras hacemos el amor.
Izuki le restó importancia y siguieron en lo suyo, era natural para ellos improvisar a la hora de tener sexo, hasta la cosa más ridícula resultaba excitante. Para su asombro Himuro tampoco le quitó la falda ni las medias, estaba perplejo, al parecer su plan había funcionado mucho mejor de lo que se había propuesto.
No hubo tiempo para juegos eróticos, a ambos les urgía tener sexo. Ahora. En pocos minutos la ropa de Tatsuya estaba en el suelo junto a la blusa, peluca y bragas de su pareja. Himuro abrió las piernas de su pareja sin preguntar, esto no ofendió al otro, por el contrario le gustaba que tuviesen una intimidad tan grande como para que se sintiera con esas libertades. Lanzó un grito cuando fue embestido mientras trataba de afirmarse algún lado del sillón; Himuro salió de su cuerpo solo para volver a entrar, repitió las acción una y otra, y otra, y otra e incontables veces, mientras lo hacía gruñía, y arremetía con más fuerza. Cuando ellos tenían sexo no había delicadeza, el más alto se dejaba llevar por sus instintos además no había mejor y más adictiva recompensa que los gritos del otro, a Izuki le gustaba el sexo duro, después su cuerpo lo resentía, pero en el momento lo disfrutaba de tal manera que no le importaba las consecuencias que podría tener.
Así estaban, entre gritos, gruñidos y sudor, en una especie de competencia de quien resistía más tiempo en correrse, lo más emocionante de la competencia es que ninguno quitaba su vista del otro, nunca. A Himuro le gustaba ver las distintas expresiones que podía tener su novio al entregarse por completo, a Shun por su parte le gustaba ver a Himuro perder su cara inexpresiva y como en esos momentos solo se fijaba en él.
Siguió embistiendo el cuerpo de su novio cuando ambos llegaron a la eyaculación, Izuki lanzó largos jadeos mientras veía la falda llena de semen, era un asco. Himuro acarició su rostro y se besaron profundamente. Se quedaron recostados ahí, en una posición incómoda y en el reducido espacio que ofrecía el sillón (hay que decirlo, para tener sexo todo es válido, para descansar son algo exigentes), después de algunos minutos, cuando el integrante de Seirin recuperó el aliento comenzó a hablar.
-Y bien Himuro ¿cambiaste tu opinión sobre los travestis? no iba a cambiarme de sexo solo para darte una lección sobre transexuales.
-¿Todo eso fue porque dije aquello? Wow, eres bastante radical Shun.
-¿Y... te molesta o detesta la propuesta?
-No, para nada limonada. Dime ¿Si critico a las conejas de playboy también harás algo así? porque créeme, las comienzo a insultar ahora mismo.
-Eres un enfermo pervertido.
-No fui yo el que llegó travestido a la casa de su novio e hizo un show con la leche.
-De acuerdo, fue algo extraño, pero debía hacerlo, siempre había querido.
-Pfff, definitivamente la mejor idea que he tenido en mi vida fue salir contigo, eres increíble.
-Imposible y apetecible.
Ambos se rieron y pensaron que ambos tenían serios problemas mentales, pero eran bastantes compatibles, quizás el encanto en su relación estaba en eso en la espontaneidad y locura de ambos. Pero hubo algo que dio vueltas por la cabeza de Himuro ¿Acaso ahora era pansexual? ¿o quizás era Shunsexual? Suspiró ¿realmente importaba? No, no afectaba en nada.
O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O
Cuando despertaron a la mañana siguiente Izuki tuvo un sueño bastante extraño que debió compartir con su pareja.
-Soñé que éramos parte de una serie, éramos personajes secundarios y apenas si nos hablábamos pero lo más extraño es que fuera de la serie había un grupo de personas que nos emparejaban, aun cuando nuestros diálogos se podían contar con los dedos de una mano.
-Vaya Shun ese sueño es bastante raro, por decir lo menos.
-Lo sé, y lo más extraño es que escribían historias de nosotros, y en la mayoría de ellas estaba embarazado ¿puedes creerlo?
-No te preocupes, no existen personas tan raras.
Luego de eso siguieron durmiendo.