Egoísmo
cap 19 tercera parte
Como si la naturaleza supiera lo que avecinaba cubría el cielo de nubes grises. Y bajo su manto se contemplaba a los humanos corriendo en busca de un refugio… Una tormenta estaba cerca.
Sasuke, Frimost, Iker, Dante, Naruto, kankuro y garra. Eran los únicos que parecían tranquilos caminando bajo el cielo gris que dejaba escapar uno que otro estruendoso relámpago. Todos en diferente lugares de la ciudad, tan lejos y a la vez tan cerca uno del otro.
Frimost dejaba a Iker en un basurero, en el más lejano que encontró, comprendió que por ser un bebe nadie lo lastimaría, que su imagen infantil lo resguardaría.
“aun si te encuentran ese hombre no te matara” sentencio, pues los sangre sucia pese a no ser los favoritos eran aceptados.
La bebe solo cerro los ojos, comprendía la situación… sus instintos se aconsejaban dormir y guardar todas las energías hasta ser rescatada por algún adulto.
Por su parte Garra era lentamente empapado por la lluvia, pero esto no le importaba, había captado el olor de Frimost, estaba cerca de acabar con ese error. Y no solo con ese, sino que también sentía la esencia de ambos donceles. Todo estaba saliendo a pedir de boca. Ese día acabaría con todos los errores cometidos por el consejo.
Elevo la mano arriba y sobre esta se formaron diversas bolas de arena que comenzaban a recorrer la ciudad en todas sus direcciones. Kanguro miraba expectante a su hermano menor, ese Sangre sucia que fue obligado a cuidar.
De hecho fue una día muy similar a este cuando vio que Hinda su terrorífico hermano mayor, ese que les hacia la vida de cuadritos, pues solo él y nadie más que él tenía derecho de estar con su madre enfrentaba a su padre en un duelo a muerte.
Sasori como la mayoría de los donceles, fue entrenado para ser sumiso, un ser tan patético que carecía de voluntad, sin deseos… un ser muerto en vida. Llamado por muchos sangre puras como el doncel “perfecto”. Así que el día del enfrentamiento Sasori cual muñeco de porcelana simplemente permanecía sentado en una esquina junto con Kanguro y Temari. En espera del resultado final.
Kankuro observo ninguna expresión en el rostro de su madre cuando Hinda decapito a su padre. A ese hombre que jamás mostro ni un solo gesto de cariño por Sasori, a ese hombre que quizás termino matando el alma de su madre, pues a ser sinceros su madre podía pasar por uno de sus hermanos… ¿a qué edad fue entregado a su padre?. Le dio miedo hacer cálculos… 10… 12… Trago saliva y volvió a ver a su hermano gritando frenéticamente su victoria. Sasori solo se limitó a acariciar la cabellera dorada de Temari que aun temblaba.
Esa misma noche tanto kanguro como Temari fueron botados de la casa principal. Todos sus privilegios como sangre pura les fueron arrebatados. En fin la vida no les fue fácil. Años después Kanguro supo de la muerte de su hermana y fue llamado a la casa central. Con temor se encamino en esta. Con miedo observo como las grandes puertas eran abiertas y dentro Una mujer de cabellera café y ojos verdes le esperaba con un niño en brazos.
-y… ¿mi madre?- Interrogo Kankuro esperanzado de ver a ese ser que le dio la vida
-Murió- fueron la palabras de esa mujer, que quedó sorprendida al ver la indiferencia que mostraba kankuro.
-¿y Hinda?- volvió a preguntar
-Murió- Kankuro no supo que más preguntar, acaso existía otro sangre pura tan poderoso como su hermano.
La mujer pareció comprender sus dudas, así que simplemente repuso
-Este niño es tu nuevo hermano, es hijo de Hinda con Sasori… una sangre sucia.
Esas palabras bastaron para explicar lo que paso… supuso que era lógico: quien a hierro mata a hierro muere. Pero tan pequeño… tan mortal.
Kankuro lamento el regresar, pues se le fue impuesta la educación de Garra. Una educación que se basaba en obedecer o morir. Valla que le fue difícil sobrevivir a Garra en sus entrenamientos, pero a ser sincero era mejor que Hinda, pues ante los ojos de Garra kankuro solo era otra pieza de ajedrez y no un enemigo amoroso.
Una vez en el silencio de la noche, cuando garra contemplaba las estrellas pareciendo tener sentimientos. Kankuro se arriesgó a preguntar
-Mama murió protegiéndote de Hinda cierto?
Garra giro para verle y serio repuso
-yo lo mate porque era un estorbo… un ser que no tiene voluntad, ni deseos de vivir merece la muerte.
-y Hinda no te detuvo?
-Hinda?-Pregunto Garra para volver a ver las estrellas- ese hombre que trato de matarme en el vientre de Sasori… lo mate. Apenas Salí del vientre de Sasori.
Kankuro quedo callado. Lo que oía lo dejaba pasmado.
Pero lo acepto al ver cada pelea que garra sostenía con los que se le revelaban, nadie sobrevivía a sus ataques de arena. Simplemente una masacre.
…
Kankuro sintió pena por el hombre que se hallaba frente suyo. Era el doncel de nombre Sasuke Uchiha. Sería el primero en morir.
-Garra- susurro reconociéndolo por el sello que tenía en su frente. Aunque no era difícil no reconocerlo. Aquellas ojeras, aquel cabello rojo y el tatuaje… ese era garra de arena.
-El error de Orochimaru- le dijo sin mostrarle mucho interés. Solo elevo una mano al aire y detrás de él se formó una garra de arena que se dirigió a Sasuke para intentar atraparlo y aplastarlo.
Sasuke apeas logro esquivar el ataque. Y tratar de hacer algún sello, pero a diferencia de Naruto y Dante, Garra no le dejaba tiempo para realizar invocación alguna, siquiera para hablar, una y otra vez aparecía una y otra garra tratando de capturarle. Mientras Garra seguía parado en el mismo lugar tratando de ubicar a Frimost.
…
Kakashi podía oír a Iruka despidiéndose, podía oírlo pero no tenía fuerzas para moverse. Por qué las cosas siempre acababan mal. Solo fue un error ya hora… jamás debió tocar a su madre, de no existir Iker ahora los dos podrían planificar un plan de fuga, en vez de conspirar el uno contra el otro.
-Nooo- rogo a duras penas, pero esas palabras no salieron de sus boca solo de sus pensamientos.
…
Iruka no tardo en ver las bolas de arena que recorrían las calles. Estas que no eran otra cosa que ojos de arena que buscaban a sus objetivos. Uno de esos ojos al verlo se detuvo y comenzó a cambiar de forma. En una garra de cinco dedos con uñas filudas.
-no huiré- repuso Iruka y al garra de arena se convirtió en una mariposa guiándole a lugar donde lo esperaban.
…
-Sasuke- gritaba Dante corriendo tras el rastro de su madre. Pero antes de poder llegar a Sasuke dos ojos de arena se interpusieron en su camino, pero solo uno se quedó y el otro siguió su camino en busca de otro estorbo llamado Naruto.
Naruto que no estaba lejos de Dante paro su recorrido al ver el segundo ojos impidiéndole el paso.
-La basura debe ser limpiada- dijo Dante y Naruto sonrió divertido
-Solo cuida de no lastimarte niño
-Lo mismo digo vejete
…
Frimost miro al cielo descubierto a ese ojo de arena. Suspiro… era hora de la verdad. Quien era más fuerte: el que era la nueva especie o el Sangre sucia
Sin hacerse esperar corrió a gran velocidad y de un solo salto atravesó ese ojo de arena que se convertía en garras.
- Ahora es mi turno de ser el cazador- repuso caminando en busca de Garra.
…
Por su parte Sasuke aun esquivaba los ataques de Garra, pero comenzaba a cansarse.
-Debo, debo… - decía sin poder completar la frase.
De la nada Garra aparecía de tras de Sasuke listo para clavarle una espada de arena en el pecho, cuando de la nada sintió el látigo del viento cortando la espada. Tanto Garra como Sasuke giraron y descubrieron a Frimost.
Los ojos de Sasuke miraron a su hijo totalmente cambiado. Ahora con esa apariencia de veinte años, con esos ojos de serpiente. Debía ser sincero, estaba asombrado de que su hijo lo salvara y más de su transformación, pero no era hora de sorprenderse. Rápidamente comenzó su conjuro de parálisis. Pero cuando iba a concluirlo, Frimost aparecía al lado suyo y negaba con la cabeza. Sasuke le miro dudoso
-No le ganaras… es demasiado fuerte
-no te metas en mi camino- fue la respuesta de Frimost- es mi comida- Sasuke de mala gana retrocedió. Claro dejaría que su hijo luchara pues no era rival para Frimost ni garra, pero apenas viera el momento sellaría a Garra. No dejaría que ese hombre asesinara a su hijo.
…
Cada batalla se ponía ardiente. Naruto jamás creyó que se le complicaría tanto acabar con un ojo de arena que cambiaba de forma continuamente, Dante tiempo, quizás ambos no eran tan fuertes como se creían y eso no les gustaba para anda.
…
Iruka escuchaba los estruendos cerca de su posición, supuso que estaba cerca de Garra, mientras en el departamento Un Kakashi a duras penas se levantaba del suelo y tambaleándose trataba de ir en busca de Iruka.
…
Las cosas no se veían bien. Frimost perdía la batalla, Naruto y Dante también la tenía complicada. Sasuke aunque trataba de realizar sus invocaciones estas parecían no tener efecto en Garra. Iruka era el testigo que acababan de llegar sorprendiéndose de lo visto.
Acaso Garra pese a estar ganado no la estaba pasando bien. Frimost estaba poniéndolo en aprietos, sin mencionar que Dante y Naruto también lo estaban debilitando, era cuestión de tiempo antes de que perdiera su poder. Estaba llegando al límite.
Una sonrisa maquiavélica se formó en los labios de Iruka: claro… hagámoslo.
Rápidamente se acercó a Sasuke y le apoyo en la creación del sello.
Kanguro como espectador miraba asombrado la batalla, por una parte estaba asombrado del poder de su hermano, por otra del poder de ese tal Frimost, pues siendo un niño ya había adquirido tanto poder, pero no era suficiente, sin embargo si ese Frimost se comía a garra… sería un problema. Una verdadera amenaza.
Rasco su cabeza. Si bien deseaba ver a su hermano muerto, pero debía ser franco… era el único que mantenía las cosas en orden entre los sangre pura y sus variaciones. Era el único que o se dejaba llevar por emociones y buscaba el prosperar de la especie.
-AAAARG- renegó para luego liberar su verdadera forma. Debía detener a esos donceles rebeldes.
De la nada aparecía una bestia tipo tortuga. Era la forma de kanguro. Ayudaría a Garra. Pero apenas iba a tacar a los donceles se congelo ante la mirada furiosa de Garra que le dedicaba un – no interfieras asesino.
Enfadado hundió la cabeza en sus hombros
-Como quieras- repuso y volvió a sentarse en el suelo agitando una banderia- Vamos, vamos.. tu puedes- susurraba de mala gana.
Garra miro de mala gana ese comportamiento de Kankuro. Quisiera o no debía admitirlo, era su hermano después de todo. Si, su hermano.
Recordó como aquella mujer rio aliviada de verse libre de cuidarle. De hecho se marchó para nunc amas regresar.
Desde que nació, siempre fue lo mismo: intentos de asesinarlo, lucha del más fuerte. Miradas de odio supuso que kanguro no sería diferente. La única diferencia era su parentesco sanguíneo y esa fatídica noche
Recostado en su cama, sintió como una presencia se asomaba con intenciones nada sanas. Allí identifico uno de sus ojos de arena observo a Kanguro asomarse a su habitación con una catana maldita. No le extraño que su hermano intentara matarle. Por ser su hermano decidió hacerse el dormido, permitirle herirle antes de que su ojo lo asesinara con sus garras destructoras. Pero cuando canguro estuvo a punto de clavarle la catana se detuvo, para luego suspirar pesadamente y dar media vuelta. Y soltar en un susurro la palabra fenómeno.
Desde entonces nunca más vio diferencia alguna en Kankuro con el resto, pero supo que aunque su hermano deseara verle muerto no tenía las agallas para matarlo. Sin duda su carácter era muy parecido al de su madre.
Giro a ver a Frimost que no dejaba de atacar a su burbuja escudo. Supuso que debería abandonar su forma humana para poner fin a esta locura de una maldita vez.
Tanto los ojos de arena que impedían el paso a Dante y Naruto desaparecían. Y estos comenzaba a correr algo malo estaba punto de pasar
-Iruka-llamo Sasuke e Iruka asintió. Era hora de realizar una invocación de máximo nivel. Esta vez llevarían a esa sangre sucia al infierno.
Un par de rayos cayeron cerca del lugar, y la lluvia se intensifico.
Frimost recibió el golpe de ese demonio de arena de una cola en pleno rostro y fue plantado en el suelo por la fuerza del impacto. Naruto y Dante miraron como el dolor de cabeza de ambos era derrotado como si de un amosca se tratase.
Se miraron mutuamente. Ahora si estaban en problemas, pues aunque les doliera admitir Frimost era el único que si le hacía frente a Garra, ellos apenas si le causaban cosquillas.
¿Y ahora qué? Se dijeron mentalmente mirándose a los ojos
Naruto giro a ver a Sasuke. Tomarlo y salir huyendo era una idea tentadora, Naruto comprendía que ni adquiriendo su forma zorruna sería rival para Garra. Dante pensó casi lo mismo, más al ver a Sasuke una nueva esperanza se formó. El conjuro que hacían ambos donceles comenzaba a formar sobre el suelo y unas marca se formaban, las puertas del infierno estaban a punto de abrirse.
Ambos rubios asintieron, el plan no era derrotar a Garra solo distraerlo hasta que el conjuro concluyera. Kankuro asintió con la cabeza comprendiendo el juego de los oponentes de su hermano. Al fin el sangre sucia más poderoso de la historia seria sellado.
Lentamente se paró y camino en medio de la lluvia y los escombros que caían como gotas de agua por la feroz batalla. Lentamente camino en dirección de los donceles.
“Si voy a ver su fin lo hare en primera fila” dijo elevando las manso dando a entender que no haría nada a los donceles. Y todos decidieron ignorarle.
-Kankuro…- oyó la voz de Temari en su cabeza- Kanguro…- su risa- ¿crees en el amor?
Negó con la cabeza. Era muy pequeño para creer en esas cosas, se suponía que debía amar a su madre, pero jamás pudo siquiera tocarlo, o estar cerca, apenas si pudo verle la cara. Dudo que alguna vez alguno de los dos hubiera conocido el vínculo que afamaba a los sangre puras. Dudo que alguna vez hubiera conocido el amor.
-Kankuro- Nuevamente la voz de Temari- he conocido el amor… - fueron las últimas palabras que escucho por teléfono y después supo que su hermana fue asesinada y arrojada cual basura. ¿Eso era el amor? Se cuestionó. Ser tratado como basura y botado cuando menos te lo esperabas, ser una simple herramienta. Sus ojos contemplaron como las puertas del infierno se abrían. Miro como las cadenas salían del suelo y cogían a su hermano que pese a su fuera y su lucha era arrastrado al fondo.
Se preguntó quién caería primero en el abismo, si su hermano o los dos donceles pues lentamente ellos también se hundían en las puertas del infierno.
Naruto y Dante seguían atacando para acelerar el ingreso de garra al infierno.
Kankuro giro la cabeza y vio a un hombre de cabellera blanca
-Kakashi- repuso Kankuro reconociéndole. Iruka giro a ver a su hijo acercándose a duras penas, y luego busco con la mirada a Frimost. Que comenzaba a levantarse del suelo y buscaba Kankuro para devorarlo, mas al ver a Kakashi comenzaba acorrer
-Idiota Vete de aquí!-grito Iruka desestabilizando el conjuro, pues ahora solo Sasuke lo mantenía.
Sus manos se clavaron sobre el suelo tratando de salir del círculo de las puertas del infierno para ir a por Kakashi. No perdería a ninguno de sus hijos. No lo haría. Sasuke miro perplejo a Iruka, pero supuso que no tenía más opción, más que mantener el sello solo. Aunque esto significara la muerta.
Iruka corría desenfrenadamente en dirección de Kakashi. Mientras este con la vista borrosa podía verle y le dedico una sonrisa. Ya estaba cerca, cerca de Iruka, el doncel de la voz molesta…
Por su parte Frimost que era más rápido que Iruka
-así que eso es el vínculo- dijo Kankuro parándose para luego desaparecer.
Fueron segundos los que le tomo a Kankuro ponerse en medio de Frimost y Kakashi, segundos para empujar al peli blanco y recibir el ataque de Frimost, ante un Iruka asombrado, un garra que al notarlo dejo de prestar a tención a su batalla con Dante y Naruto para abandonar su forma demoniaca y tratar de llegar a donde se encontraba kanguro pues Frimost comenzaba a devorar toda su energía.
“Así que esto es dar al vida por alguien… ¿esto es el vínculo?” fueron sus últimos pensamientos antes de cerrar los ojos y caer al suelo convertido un cadáver.
Garra que intento legar a salvarle detuvo su camino para quedarse estático en medio de todos. Un aura oscura comenzaba a recorrer cada metro cuadrado del lugar. Dante, Naruto, Kakashi, Iruka y el mismo Frimost le miro aterrados. Hasta el momento solo pelearon con la bestia que cumplía su obligación ya hora parecía que le habían tocado la llaga.
-¡Retrocedan!-Grito Naruto. Mientras Dante corría a por Iruka para llevarlo con Sasuke. Este no podría mantener mas el sello solo ellos no podrían contra Garra
Frimost que al inicio se sintió sorprendido ahora solo se sentía intrigado. Así que ese era el verdadero poder de ese sangre sucia. Se preguntó que tanto seria su poder si lo devoraba.
Relamió sus labios con su lengua. Aquel sangre pura pese a no aparentarlo era fuerte. Al fin se sentía completo, opero deseaba más poder.
Garra ya no necesito su forma demoniaca, con un solo movimiento aparecía frente a Frimost y sus ojos encolerizados lo miraron fijamente antes de darle un puñetazo tan fuerte que todo el lugar sintió el impacto de su fuerza, como si de una honda de energía se tratase. Puñetazo que hundía toda la cara de Frimost.
Las cadenas se elevaron al cielo y cual serpientes comenzaron a dispararse en todas las dirección buscando a todos los demonios que tenían a su alcance. Dante y Naruto rápidamente se alejaron del lugar, no tenía planeado ir al infierno, Naruto rápidamente cogió a Kakashi y lo llevo lo más lejos que pudo. Mientas Garra y Frimost pese a la ser capturados por las cadenas aún seguían inmersos en su pelea. Uno cegado por el odio y deseos de venganza, y el otro cegado por la ambición y el éxtasis de poderío absoluto.
Lentamente las cadenas los arrastraban al infierno, lentamente Sasuke también se hundía E Iruka acudía a su lado para tratar de ayudarlo sin mucho éxito
-Sasuke detente- grito Iruka- no lo lograras- volvió a decir, más Sasuke ya no lo escuchaba, de hecho su cuerpo lentamente parecía translucido, el hechizo estaba acabando con él, consumiéndolo.
-¡Sasuke!-Grito Iruka y Naruto y Dante esquivando las cadenas corrieron a liberarle del circulo de invocación.
-solo un poco más, solo debo direccionar las cadenas contra Garra, solo un poco más, solo un poco más para que Frimost está a salvo- repetía Sasuke una y otra vez en su cabeza. Si oír a nadie… desconectándose de la realidad.
Frimost que le dio una patada a Garra para empujarlo a las puertas del infierno miro con detenimiento a su madre. Estaba muriendo. Miro a Dante y Naruto. Y recordó a Kankuro…
-todos son unos idiotas- susurro para contemplar a garra. Incluso ese sangre sucia resulto tener sentimientos. Todos menos él. Él no se sentía culpable, el aprovechaba todos los recursos a su disposición, así debía ser. Debía sobrevivir era la nueva especie. Volvió a patear a Garra y caso lo metió por completo en las puertas del infierno.
Deseaba derrotarlo, pero supuso que era muy riesgoso. Sin contemplación alguna y adquiriendo su forma demoniaca que era nada más y nada menos que la de un ave de fuego termino por atacar a Garra hundiéndolo en las puertas del infierno. Para luego también entrar a estas pero no para entrar en el infierno sino para sacar de ese enredo a Sasuke.
Todos miraron perplejos la acción de Frimost. El cual de mal gana les miro y volvió a su forma humana
-solo garantizo al supervivencia de mi especie. Repuso dando media vuelta para largarse de ese lugar. Había alcanzado la madures, ya no necesitaba de un escudo, era libre para hacer lo que se le viniera en gana.
-¿Eso es bueno?- se preguntó Dante sin saber si sentir felicidad o preocupación.
-supongo- Dijo Naruto rascándose la cabeza- Tenemos a tu madre… conformémonos con eso- animo.
Continuara.