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Oferta de trabajo por SC2672

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Notas del capitulo:

Bueno aquí está el capitulo 4 Thank U for leer y demás, y por los reviews espero tener la continuación muy pronto, ya ando trabajando en ella pero probablemente me tarde un poco en subirla, me alegró mucho de que muchas personas me estén diciendo que les gusta lo que hice con este fic y espero que les siga gustado y sigan leyendo hasta el final. Si tengo tiempo haré un nuevo proyecto en lo que hago este, para no hacerlas esperar.

Aún no podía recordar si había estado aquí antes, se sentía bastante familiar y por más que lo intentara no recordaba haberme subido antes.

Después de unos minutos llegamos a mi casa, la vez pasada había querido presentarle a mis hermanos pero se habían ido ya a trabajar, está ves estoy seguro de que estarán ahí,

Ace no suele dormirse hasta que yo llego.

-hemos llegado, Mugiwara-ya-

-gracias por traerme, ¿quieres pasar? Estoy seguro de que a mis hermanos les agradarás.-

-no es necesario, yo habrá oportunidad en alguna otra ocasión-

-eso fue lo que me dijiste la vez pasada-

-------------------LAW------------------

Es cierto cuando lo traje a su casa la primera vez le había dicho que la próxima vez podría conocer a sus hermanos. Me miraba con un rostro bastante lindo sería difícil rechazar su propuesta después de ver la mirada en esos hermosos y penetrantes ojos negros.

-sólo será un momento, ¿está bien?-

-geniaaaal!!-

Bajamos del auto, y subimos las escaleras, hasta llegar al segundo piso. Era un pasillo largó que recorría de izquierda a derecha. Me tomó de la mano y me guio hasta donde estaba la puerta de su apartamento. Tomó sus llaves del bolsillo y abrió la puerta.

-Luffy, ya te habías tardado ¿en dónde te habías metido?-

-¡¡Ace !!-

Corrió a abrazar a su hermano quien al parecer aún no se percataba de mi presencia. ¿Así que esto es a lo que llaman complejo de hermano?

-¿dónde está Sabo?-

-salió a comprar comida, dijo que probablemente tendrías hambre después de llegar a casa-

-aaah ya veo, entonces espero que llegue muy pronto-

-tú sólo sabes pensar en comida-

-shishishishi, Ace quiero que conozcas a Torao-

-aaah es el amigo con quien te quedaste la otra... ¡¿TRAFALGAR LAW?!

-un gusto-

-Luffy ¿¡no es él tu jefe o algo por el estilo?!-

-lo es shishishi pero es una muy buena persona me ha ayudado mucho-

-ahh de ser el caso, gracias por cuidar de mi torpe hermanito-

Hizo una reverencia y con su mano bajo la cabeza de Mugiwara-ya para que la hiciera también, era bastante cómico verlos a ambos. Pero como había dicho antes, sólo sería un momento, así que ya era hora de irme.

-es tarde, tendré que irme ya, fue un gusto Ace-ya. Otro día conoceré a tu otro hermano, Mugiwara-ya-

Revolví sus cabellos y me despedí de él. Salí del apartamento y baje hasta llegar al auto. Antes de poder subirme escuche su vos que me llamaba.

-nos vemos mañana en el trabajo-

Simplemente sonreí, recordé que podría pasar por él de ahora en adelante pues íbamos al mismo lugar y así sería más entretenido el recorrido, se lo diría mañana puesto que aún no tenía su número, es muy necesario que un jefe tenga modo de contactar a sus empleados.

-no llegues tarde-

Subí al auto y lo encendí para poder ir a casa, no quedaba muy lejos de ahí, pero de alguna manera el trayecto se me hizo bastante largó está ves, ¿quizá porque ya me había acostumbrado a cierto alguien que hablaba todo el camino?

Llegue a casa después de unos 10 minutos. Tome las llaves y abrí la puerta, nuevamente estaba ahí, pero por primera vez note que el tamaño de la casa era grande, y de que había muchas habitaciones. ¿Qué sería esta sensación? ¿Por qué no lo había notado antes?...

Me había metido a bañar hace unos minutos, y salí para poder ir a dormir, las sábanas y almohadas tenían su aroma, se había quedado impregnado en ellas. Era tranquilizador, tanto que me quede dormido de manera rápida, usualmente antes de dormir pienso en las cosas que tengo que hacer el día siguiente, pero está vez, simplemente fui cautivado a dormir pensando solamente en que el día de mañana lo volvería a ver...

------------------------------------------

Abrí los ojos, me encontraba en mi oficina, aún que no recuerdo haberme despertado y tampoco recuerdo el hecho de cambiarme o haber manejado para llegar aquí.

-¿en qué momento llegue aquí?-

Mire a mis alrededores, todo parecía completamente normal, todo como lo había dejado el día anterior.

Me dirigí a mi escritorio y revise cualquier cosa que estuviera fuera de lugar; no vi nada malo así que simplemente me senté y abrí la computadora para revisar algunos pendientes y estadísticas de la compañía. Sentí que habían pasado cerca de 30 minutos y yo seguía en lo mío, cuando noté que una puerta en mi oficina se abría y de ella salía aquel chiquillo que estaba trabajando para mí.

-Mugiwara-ya ¿cuándo llegaste?-

-eeh ¿de que estas hablando? Torao llevo aquí el mismo tiempo que tu-

Es extraño en ningún momento noté su presencia, a decir verdad yo recordaba haber estado en la oficina sólo, y recuerdo haber revisado también su lugar de trabajo antes de ponerme a hacer mis cosas.

-perdona no lo note, estoy algo distraído el día de hoy-

-hmmm Toroa ¿dormiste tarde? Quizá tengas hambre, mis hermanos dices que cuando tienes hambre es mejor comer, porque si no, no tendrás fuerzas para el día.-

Parecía normal, era él, tenía esa misma sonrisa y también esa mirada inocente que tanto me gustaba. Revolví sus cabellos y le dije que podríamos ir a comer a penas tuviéramos listo los asuntos faltantes. Me sonrió y me dijo que estaba bien.

-si hay algo que necesites, dime lo-

Simplemente asentí, y con eso ambos retomamos lo que estábamos haciendo. Me senté en mi escritorio y abrí la carpeta de mis documentos, la cual extrañamente parecía más larga e interminable de lo usual. El trabajo en la computadora era pesado, pero si me aburría más tarde podría dejarlo para ir a comer después.

Sentí que ya habían pasado 2 horas lo llamé para ver si ahora quería ir a comer, quizá no sería mala idea dejar estos asuntos para después de la comida.

-Oiee Mugiwara-ya ven aquí-

-¿me llamaste Torao?-

-ya he avanzado mucho con lo que debía hacer, vallamos a comer antes de que termine la hora de la comida en cafetería-

Asistió y comenzó a acercarse a mí, aún estaba sentado en la silla de mi escritorio, y cuando estuvo frente a mí, apoyó sus rodillas en la silla y comenzó a inclinar su rostro a mí, ¿era lo que pensaba que estaba haciendo?

Sentí como sus labios rozaron con los míos y los aprisionaba en un tímido pero cautivador beso, ¿será que se acordó de nuestro pequeño secreto?

Esta era la orden que yo había dado por que hacerme del rogar, correspondí de una manera más intensa aprisionándolo lo más cerca de mí, haciendo el contacto entre nuestro cuerpo más apremiante, aquellas sensaciones que tanto me gustaban comenzaban a regresas haciendo que mi adicción por ese chiquillo simplemente creciera más y más. Deshice el contacto para ordenarle algo, si ya tenían su boca la iba a poseer por completo.

-saca la lengua Mugiwara-ya-

Hizo caso inmediato y me permitió jugar con ella mientras la mantenía fuer a de su boca, lamiéndola y viendo las reacciones que tenía en mi chiquillo, deje de jugar e introduje mi lengua en su boca, era algo nuevo, nunca lo habíamos intentado antes, y esto se haría parte de mi adicción

-hmmm... Aaah... Tora..o..-

Gemía dentro de mi boca llenándola con su dulce voz; sus manos por otro lado no se quedaban quietas. De estar aferradas a mí, comenzaron a moverse y una de ellas la enredo en mis cabellos, posando la otra en mi rostro. Jadeaba y gemía cada vez más fuerte, no me extrañaría que alguien escuchara y se preguntará que es lo que estaba pasando.

-haaa... Torao...-

Deshizo el contacto y me miro a los ojos, su rostro sonrojado y la mezcla de nuestra saliva en su boca, no era más que provocador. Resistirse a los

Encantos de este chiquillo sería una de las cosas más difíciles que he hecho.

Aún me miraba y jadeaba, exhalando exhausto el poco aire que lograba acumular.

-Toroa... Hagamos lo...-

Eso había sido una sorpresa para mí, no esperaba aquellas palabras, aún que a decir verdad eran satisfactorias.

Se inclinó nuevamente y volvimos a besarnos. Aún que haya sido algo repentino algo dentro de mí ser, me impedía resistirme a aquellas palabras. Sentía como mi cuerpo reaccionaba ante el contacto de las yemas de sus dedos, el sonido su dulce vos gimiendo y su cautivadora mirada mantenía contacto con la mía.

Deshice el contacto que él mismo había comenzado y baje, desde su mandíbula hasta su cuello y comenzó a hacer pequeñas marcas que serían muy notorias a la vista.

-Tu camisa me estorba; Mugiwara-ya-

-si te estorba me la quitare, ya te dije que quiero hacerlo contigo-

Ladeo su mirada, y lo dijo de alguna manera avergonzado pero sin que lo pareciera del todo.

Comenzó a desabotonar la camisa, de manera algo torpe, sus manos temblaban y aún que su mirada estaba directamente en los botones de esta, parecía encontrarse nervioso, y mi paciencia no era algo eterno.

-deja me hacerlo por ti-

-pero...-

-a veces debes dejar que tu jefe te enseñe como hacer las cosas, si no ¿cómo vas a aprender para la próxima vez?-

Simplemente me dejo continuar, y desabrochar los botones dejando al descubierto su bien marcado pecho, ese que ya conocía y que había sido tocado por alguien más antes que yo.

-Torao...-

-dime-

-...tócame...-

Simplemente sonreí, no estaba nada mal, era todo lo que quería, desde el inicio todo había salido como lo había deseado. 

-Torao... Hazlo...-

-estás algo impaciente ¿por qué es eso?-

- la otra noche me tocaron, aquí...-

Señalo su pecho y su boca indicando lo que había pasado haciéndome recordad y traer esas memorias a mi mente.

-es asqueroso, Toroa, me siento sucio, sólo quiero que Toroa me toque...-

-Mugiwara-ya-

Sus palabras me gustaban, aquella dulce melodía que me pedía que hiciera con él a mi placer, era simplemente algo que había estado deseando desde el día en el que lo vi.

Volvió a acercarse y parecía decir unas palabras, que no logre escuchar, sólo vi cómo se movían sus labios...

-¿qué has dicho?-

-**biiip biiip biiip biiip biiip biiip** -

Desperté de golpe en mi habitación, el despertador llevaba cerca de 5 minutos sonando y hasta ese momento lo había escuchado.

-¿un sueño?-

Había sido sólo un sueño, pero aun así, lo había sentido tan real. Quizá fue mi imaginación que su puso a volar esta noche, jugando con mis pensamientos combinando lo con el aroma de la habitación que dejo y mis recuerdos acerca de lo que pasó la noche anterior.

Mire el reloj, ya era algo tarde y está probablemente sería la primera vez que llegaría tarde a la oficina.

Tome un baño y me vestí rápidamente, no quería que me tocara la hora de tráfico por las mañanas. Baje las enormes escaleras y abrí la puerta para salir a donde se encontraba mi auto. Subí en él y deje mi maletín en el asiento de atrás, salí de mi casa algo apresurado eran las 7:05 usualmente a estas horas estoy llegando a mi oficina.

El tráfico ya había comenzado a invadir las calles y era difícil avanzar rápido. Recordé que había un atajo que no estaba tan concurrido y decidí irme por ahí sólo por esta vez, sería bueno ver que tal están las cosas por ese lado.

Logre entrar por el atajo no quedaba muy lejos de donde estaba y efectivamente había menos carros pero aun así no faltaba aquel que detenía a todos los demás.

No estaba prestando mucha atención a mis alrededores, sólo quería llegar de una buena vez al trabajo, mis subordinados estarían esperando sus órdenes para el día de hoy y yo aquí esperando.

Mire por la ventana unos instantes y me sí cuenta de que había una silueta bastante familiar caminando por la banqueta.

Ese era mi chiquillo que tanto adoraba y me gustaba. Quizá el hecho de haberme atrasado no fuera tan malo después de todo, si podía llevarme una recompensa como está.

-Mugiw...-

Lo llamé pero antes de que pudiera escucharme, una mano lo tomo del hombro y la otra tapo sí visión. Llevándolo a una de los callejones de esa misma cuadra. Tenía que hacer algo, ese maldito pelirrojo quería volver a tocar lo que es mío y no tenía intenciones de dejarle ir así de sencillo.

------------------LUFFY-----------------

Iba caminando, había salido tarde de casa porque me quede dormido, había olvidado el hecho de que ya tenía un trabajo, y Ace me regaño por eso. Sabo simplemente se río, los dos son imposibles.

No podía recordad la hora que Torao me había dicho que debía llegar, y como no era tan tarde no tenía mucha prisa.

Iba por el mismo camino de siempre y de pronto sentí como unas manos me jalaban, una de ellas del hombro y otra tapo mis ojos, no podía ver nada, y era difícil respirar con una mano tan grande sobre mi cara.

-Oiee Mugiwara, que coincidencia que te encuentre caminando por aquí, porque no vienes conmigo así será mil veces más divertido-

-¡KID!-

Como no reconocer esa voz, era esa persona a quien pensé que le había entregado todo pero al final simplemente me uso después de enterarse de quien era...

-¡¡suelta me!! ¡Tengo que llegar a un lugar!-

-¿por qué la prisa Mugiwara? No debe ser importante, aparte creo que podemos llegar tarde este día, vamos a divertirnos ¿quieres?-

Me soltó y apenas lo hizo apreté mi puño y golpee su cara. El impacto fue grande pero logró esquivar parte de este para volver a aprisionar me de las manos con una de las suyas y llevar la otra a mi cuello

-¿será por las malas entonces? Mira que portarte así, creo que es un buen día para hacerte aprender cómo tratar a tus mayores-

-¡¡no quiero ir a ningún lado contigo!!-

-oooh pero lo harás-

Quito  su mano de mi cuello y la metió a el bolsillo de su pantalón, de donde algo similar a una jeringa.

-no te muevas o esto te podría enserio doler, no quieres eso ¿verdad?-

-aaah!!-

Sentí como la aguja entraba por mi piel, comencé a sentirme extraño, como la sangre me hervía y me sentía algo mareado, ya no estaba reaccionando bien. Me costaba trabajo respirar y sentía más calor de lo usual.

-¿Qué mierda me diste?-

-¿no te  gusta? Es para que seas más dócil a la hora de jugar. Esto es solo un pequeño soporte para que sea más entretenido para ambos, vas a ver que lo vas a disfrutar mucho. Te lo puedo asegurar.-

Apenas y podía escuchar la voz de ese maldito, mis ojos comenzaban a cerrarse y sentía que ya no estaba pensando las cosas, no podía sentir nada de lo que estaba pasando, pero si mal no recuerdo, esto también paso las ves que… Torao me ayudo a salir de esta….

-------------------LAW------------------

Baje del auto, y apenas llegue al lugar en donde estaban, era de nuevo ese infeliz. Tenía planeado que en cuanto saliera sabía que probablemente mi ser reaccionaria y le haría pagar, hasta que no sintiera ni su propia alma.

Salió con mi chiquillo en brazos, tenía el rostro sonrojado y respiraba con dificultado (es como aquella vez), era peligroso que hubiera una pelea a estas horas de la mañana, mejor decidí escuchar por esta ves a mi cerebro y seguirlo a ver a donde lo planeaba llevar, sería más fácil ir y hacer las cosas a mi manera.

Se subió a un auto de color rojo y lo subió al auto, pude ver que mientras lo estaba metiendo a la parte de atrás, Mugiwara-ya le susurro algo al oído y este simplemente sonrió maliciosamente, para después robarle un beso.

Sentía la sangre a hervir como nunca, aquellos preciados momentos guardados en mi interior en donde él y yo compartimos besos similares a ese. No estaba seguro si quería continuar con lo que estaba a punto de hacer sentía enojo, pero también sentía dolor y tristeza. No es normal en mí experimentar muchas emociones al mismo tiempo.

Entre el callejón de donde los había visto salir, no sabía qué hacer ni cómo reaccionar, pero mis dudas pronto fueron aclaradas por un objeto que había sido tirado al suelo.  Recogí el objeto y me di cuenta de que era un jeringa, pero esta era una diferente a las de uso médico, era más pequeña y en su interior aún quedaban restos de lo que es líquido afrodisiaco, ya había estudiado sus propiedades anteriormente y sabía cómo funcionaba y como era cuando estaba en su forma líquida. No había duda eso que había visto fue un simple engaño; él no estaba de acuerdo con lo que había pasado, había sido drogado por ese maldito.

Salí del callejón y me di cuenta de que aún no era tarde. El auto en donde lo llevaban estaba delante de 3 autos delante del mío. Subí con prisa de nuevo al auto y lo encendí para seguirlo, si esto era en contra de su voluntad no iba a dejar, que nada malo le pasara.

En el camino llame a Sachi y Penguin, me preguntaron por qué aun no llegaba y les conté lo que estaba pasando les dije que dieran instrucciones y que vinieran de inmediato. Si había alguien en quien podía confiar era en ellos dos y sabía que ambos podrían ser de gran ayuda.

-¡VAMOS PARA AYA ENSEGUIDA, JEFE!-

Contestaron al mismo tiempo y con eso finalizo la conversación, ya me encontrarían usando el GPS, por ahora tenía que concentrarme en no perder el auto en donde llevaban a mi subordinado. Los seguí de cerca, habían pasado por mucha partes hasta que llegaron a un edificio que parecía abandonado, de alguna manera me pareció familiar, sentía que lo había visto antes, (“¿Barocke Work’s?”). Vi como el auto rojo entraba al estacionamiento. No pensaba entrar también porque sería demasiado sospechoso, y aparte que el lugar se veía completamente solo.

Me estacione cerca del edificio y entre por el estacionamiento, había visto que lo llevaban todavía en brazos, el chico pelirrojo no estaba solo, con él había visto a un chico de cabellos rubios y largos que cubrían su rostro, también un chico de lentes que usaba frenillos y su ropa era similar a la de un músico, tenía brazos largos y llevaba de peinado una cola en trenza. También había visto a un hombre quizá un poco mayor, de cabellos rubios largos que vestía de traje blanco y sus cejas eran largas y casi parecían ¿tatuadas?

-rápido killer baja a Mugiwara, todavía tenemos un rato en lo que se pasa el efecto de la droga, después de eso se lo podemos dar a el ex-shichibukai.-

-si tanto quieres que las cosas se hagan bien hazlo tú mismo-

-cállate Hawkins, si algo malo sucede todo será culpa de ustedes dos, les dije que aumentaran la dosis del afrodisiaco, pero según Apoo sería peligroso. ¡Me importa una mierda lo que le pase a ese mocoso!, aunque no pienso perderme semejante oportunidad de jugar un rato con su cuerpo, antes nunca pudimos hacerlo era demasiado aburrido, pero ahora si le enseñara quien quiere que-

Pude escuchar lo que tenían planeado hacer, y eso era algo que no iba a permitir, recibí el mensaje de Penguin de que estaban llegando y que no tardarían menos de 5 minutos hasta entonces tenía que impedir que le hicieran algo.

-waaachaa ¿a qué hora dijo que llegaría este ex-shichibukai?-

-dijo que llegaría en una hora. Ahora ustedes 3 dejen de pelear, ni si quiera en esto se pueden poner de acuerdo y tu Kid si tanto quieres hacer lo con el chico puedes, si mal no recuerdo hay un cuarto escondido detrás de donde están los elevadores.-

-se supone que no deberá oponer resistencia-

De estarlo cargando el tipo con cabellos largos hasta tapar el rostro ahora lo cargaba el pelirrojo, dejo el lugar en donde estaban y se dirigió a los elevadores para adentrarse en el pequeño cuarto que le habían indicado.

-no molesten, terminare con esto pronto. Killer no dejes que nadie entre-

Este era el mejor momento, cada uno se había separado del otro y eso haría más fácil para mi deshacerme de ellos.

-señor hemos llegado-

-¿Cómo esta Mugiwara-san?- 

Penguin y Sachi habían llegado, y en el mejor de los momentos. Les explique lo que había y estaba pasando. También les dije que para poder entrar a donde lo tenían, había que deshacernos de los 3 tipos restantes que se había separado, y tenía que ser rápido, pero antes de  poder hacer algo de lo que teníamos planeado sonó el teléfono del tipo con los cabellos largos hasta  tapar el rostro.

-¿Quién habla?-

-ahhh, ¡no puede ser creímos que lo habíamos arreglado!-

-si señor vamos para allá, ¿dos de nosotros será suficiente?-

-estaremos ahí en 10 minutos, no estamos muy lejos-

Colgó el teléfono y se dirigió al otro  hombre de cabello rubio largo y lacio. Ambos subieron de nuevo al auto rojo y le dijeron al otro que cuidara el lugar en lo que ambos regresaba.

-Oiee Apoo, quédate a cuidar aquí, y si llega el jefe dile a Kid que deje sus asuntos personales para otro día.-

 

Diciendo esto se marcharon. Esto hacia 10 veces más fácil las cosas para mí, pero teníamos que trabajar rápido y en silencio si no quería alarmar al tipo con apariencia a un instrumento musical.

Sachi y Penguin fueron por el otro lado. La idea era que le cubrieran los ojos y detuvieran su circulación, los 3 tenemos experiencia médica, estudiamos un poco cuando éramos más jóvenes y sabíamos que para que alguien se desmayara había que cortar la circulación de un brazo, así quedaría inmóvil e inocente por las siguientes 2 horas.

Ambos hicieron un excelente trabajo, me sentí feliz de tenerlos ahí, habría sido difícil hacerlo solo.

El tipo cayó al suelo inconsciente, Sachi y Penguien se encargaron de vendar sus ojos con un pedazo de tela, ya que la luz podría molestarle más tarde al despertar, y aun que no fuera alguien de mi agrado, ellos insistieron.

Ya que eso estaba solucionado, corrí hacia donde se encontraba el cuarto en donde lo habían metido y junto con el pelirrojo era una horrible amenaza el estar juntos ahí, más aun con los efectos del afrodisiaco en su cuerpo, (que no sea muy tarde) sabía que si algo malo le sucedía nunca me lo podría perdonar (por favor que aun este bien) mi mente me o repetía una y otra vez y lo único por lo que pedía era ese bastardo no le hubiera hecho nada más.

Abrí la puerta de golpe, y lo que vi hacia que mi corazón se acelerara de manera desbocada, sotnia dolor dentro de mi ser, pero al mismo tiempo…. Estaba feliz de que aún no fuera tarde.

Ahí estaba en frente de mí, dos personas muy distintas, una de ellas era la persona a quien más odiaba por lo que estaba intentando hacer y la otra era la persona de quien me había enamorado. Ya le había quitado la mayoría de la ropa, pero este seguía bajo los efectos de la droga.

-¡¿Pero qué mierda?! Se supone que nadie sabía lo que estaba pasando donde están esos 3 inútiles-

-¿Qué es lo que crees que estás haciendo?

-¿no estás viendo?....- lo tomo de las caderas y lo acerco más a él. Si lo que quería era provocarme a incitarme a matarlo lo estaba haciendo muy bien.

-voy  a tener sexo con este mocoso, así quizá entienda que las cosas siempre son a mi manera-

Se acercaba a él pero antes de que pudiera hacer algo lo tome del brazo, lo jale lejos de él, dio contra la pared y me interpuse entre ambas personas.

-no hay forma de que te deje hacerle daño, ya te lo he dicho antes,  él…  es mí preciada pareja-

Notas finales:

Bueno pueees este fue el capítulo 4 (Aurora si estás leyendo esto “no me arrepiento de nada”) espero poder tener la continuación lo más rápido posible. Muchas gracias a todas por leer, y `por sus reviews. Como ando en exámenes tengo muy poco tiempo para continuar así que tendrán que esperar a que termine para tener el capítulo 5 listo como quiera espero poder empezar con un nuevo proyecto para que no haya tanta espera J

Se me cuidaaaan un choooro hij@s


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