Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¿En dónde has estado, amor? (+18) por KimmyRoseTaeminnie

[Reviews - 35]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

“Los amigos del duque y el joven Minho regresan al castillo después de un tiempo de aventura, sabiendo que su tiempo de jugar termino. ¿Qué podrá pasar ahora en el castillo? ¿Rose logro su cometido?” 


 


 


 


Que tal ? diganme que piensan de este cap? 


Abrazos <3

CAPITULO 8

VOLVER

“Los amigos del duque y el joven Minho regresan al castillo después de un tiempo de aventura, sabiendo que su tiempo de jugar termino. ¿Qué podrá pasar ahora en el castillo? ¿Rose logro su cometido?”

Paris

-          Pero Key amor mío… ¡no te enojes! – suena un portazo- ¡Key! Okay está bien, aquí te dejo tu desayuno, no deberías enojarte así…

Jonghyun se tira a su cama a suspirar, cada día que esta con Key es una bendición pero su temperamento es peor que el de  una mujer. Key es muy consentido, o así lo volvió Jonghyun: De tal manera que todo lo que le pida, este lo hace. 

Por otro lado Key disfruta de su atención pero le saca lo borde. Se encierra en el baño tras el portazo anterior, se sume en la tina y al acostarse hecha su cabeza para atrás. Enfrascado en sus pensamientos retrata cada momento especial con él, sus historias fuera de contexto, sus ocurrencias, chistes de mal gusto, sus atenciones hacia él y por supuesto el sexo. Esto último tal vez era algo que el resaltaba mucho de Jonghyun, nadie lo había complacido de la manera que él lo hacía, era único. Le había propuesto cosas nuevas y a pesar de su altura sabia como defenderse ante él.

Con una actitud noble, Jonghyun se levanta de la cama y camina hacia la puerta del cuarto de baño dispuesto a ser escuchado. En lo poco que llevaban juntos había aprendido mucho de lo que era capaz de hacer cuando se está enamorado. Tanto que le recalcaba a Minho por ser tan enamoradizo y sensible que al fin de cuentas había caído el en lo mismo.

-          Key…- golpea en la puerta y posa su frente en la misma- Creo que te lo he dicho muchas veces… o no estoy seguro se te lo he dicho de esta manera. Te amo, fue amor a primera vista, a primera impresión. Cada momento que he vivido contigo ha sido especial y te juro que no soy de los que dicen lo que sienten… te miro y no me lo creo. Me haces vibrar… me haces sentir vivo… no sé por qué pero siento que debo decírtelo. Si quieres hablar… estaré esperándote abajo con los chicos. Te quiero… y mucho.

El silencio inunda la habitación tras esa confesión, Jonghyun se dispone a vestirse y marcharse. Algo ligero para ir a comer y luego emprender camino hacia Chambord.  De repente Key abre la puerta, sus ojos están llenos de lágrimas, su desnudes expuesta con apenas una toalla tapando su cintura. Jonghyun quien estaba de espaldas siente como le abraza, siente la humedad de sus lágrimas en su camisa de lino… siente sus sollozos.  Este se gira para encontrarse con la expresión más tierna que en su vida haya visto: Los ojos acaramelados de Key estaban desbordando lágrimas cristalinas, su nariz estaba roja de tanto llorar, su expresión era como la de un gatito consentido. 

No pasaron tres segundos para reaccionar ante ello, coge su cara con la delicadeza con la que siempre lo había tratado y lo mira a los ojos, con el pulgar le limpia las lágrimas mientras le besa. El beso estuvo cargado del sentimiento más puro, más celestial.

-          Key, no llores… por favor. ¿sabes? Haz nacido para brillar. Y no quiero que ese brillo se opaque con nada en este universo.

-          Pero Jonghyun… no vuelvas a hablar como si fuese una despedida… por favor…

-          Esa no fue mi intención amor… en ningún momento.-  el chico siente como algo en su interior se desgarrara, solo pensar en separase… era enfermizo.

-          Así sonaste… ¡perdóname! – Key empieza a llorar de nuevo llenando de lágrimas el hombro  de Jonghyun.

-          ¿Perdonarte? Porque dices eso… si antes debo agradecerte por todo esto…

-          Por ser tan malo contigo… es que… es que… te amo… y no te quiero perder…

-          ¿Me amas?

-          Mucho enano… mucho…

Eran solo besos y abrazos, la emoción del momento y aquellas confesiones de amor eterno habían encendido el  libido en sus interiores. Cada tacto del uno al otro, cada susurro de amor habría de ponerle más sentimiento al instante.  Jonghyun sabia como desenvolverse en el cuerpo de Key, él era bajito pero no le impedía manejar el cuerpo de su alto amante para complacerlo y hacerle sentir de la mejor manera.  Se dejaron llevar e hicieron el amor hasta la hora de almuerzo.

 

Al mismo momento en otra habitación de la posada estaban Onew y Donghae desnudos jugando ajedrez. Ambos, muy conocedores, sabios y organizados se proponían otra clase de cosas. Sabían que había un vínculo especial entre ellos dos demostrándoselo con poesías escritas a mano, composiciones musicales, halagos y mucho sexo desenfrenado.  En ese momento sabían que tenían que bajar a desayunar pero habían iniciado una partida de ajedrez apostando algo interesante: se dejaría de activo a quien ganara en la próxima sesión sexual. Donghae siempre había sido el activo en sus momentos más eróticos por ende Onew quería tener la oportunidad de demostrarle de lo que era capaz.

-          Si me como otro caballo tuyo… te quitas el camisón Onew.

-          Sigue soñando. 

-          ¿Te da miedo?

-          ¿Hay alguna razón? Eres tú el que siempre se debilita al verme desnudo.

-          Buen punto, debo estar en mis cabales para ganarte y no dejarte que me des por detrás.

-          Por dios. ¿Por qué eres tan basto al hablar? Pero pensándolo bien lo hare sin que me lo pidas. – Onew se deshace de su camisón quedando totalmente desnudo.

-          ¡E-estas completamente desnudo!

-          Sigamos jugando…

-          A la mierda el juego…

 

Donghae se lanza sobre Onew cubriendo su desnudez con su cuerpo, empezando a devorarlo a besos, mordiscos y uno que otro chupón. Los gemidos de ambos eran guturales, muy masculinos. Cualquier persona promedio los ha de pasar por dos heterosexuales muy  apuestos que atraen a cualquier mujer y la tienen a sus pies si desean. Pero en la intimidad de sus cuartos son dos hombres que se entregan uno al otro con pasión desmedida y masoquismo ardiente.

A la hora del almuerzo se encuentran ambas parejas en el comedor de la posada. Ya habiendo comido emprenden su viaje al castillo de Chambord despidiéndose con nostalgia de Paris y sus muchos recuerdos y aventuras desmedidas.

 

Unas horas antes en el Castillo de Chambord

 

-          Minho… ¿Qué haces allí parado? Ven… duerme un poco más.

-          Buen día mon petit. Solo veía como llovía… el día está gris.

-          Igual  que tu mirada. ¿Qué sucede?

-          Nada en especial… solo no pude dormir bien.

-          Por eso mismo. Ven y acuéstate.

-          Como ordene señor duque.

 

Minho camina con desdén hacia la cama, tenía la sensación de que algo iría mal o simplemente algo pasaría. La luz azulada que lo despertó en la madrugada no habría de poner así. Se tira de espaldas para mirar perdidamente al techo. Taemin no dice nada, solo mira sabiendo que algo le preocupa. Llevan juntos por casi un mes y en todo este tiempo no lo había visto de ese temple.

De un momento a otro el joven moreno cierra los ojos y se queda dormido. Taemin decide no molestarle así que con cuidado baja de la cama y va al cuarto de baño para arreglarse y darle despedida a Rose quien aviso la noche anterior que se iría. De alguna u otra manera esto le alegraba.

Ya listo y arreglado el joven duque abriga a su amado y cierra sus cortinas para dejarlo dormir más. Emprende camino hacia el ala del castillo donde Rose residía, quería pedirle que no volviera pero no sabía cómo decirle algo así sin que sonara grosero.

Antes de salir del cuarto le escribe una nota a Minho:

“Mon Minho,

Cada día que paso contigo es una bendición. Eres mi estrella de la suerte, no sabrías cuan agradecido estoy contigo por cada momento. Nunca creí conocer la gloria hasta que vi tus ojos. Te amo~

Pdt. Te estaré esperando para el almuerzo.”

Al salir del cuarto cierra con premura la puerta e inicia su camino hacia donde residía Rose. En una esquina, oculta por una  gran cortina estaba Rose, con un jarrón en la mano. Ve salir a Taemin y al observar que se alejaba se dispone a entrar al cuarto. Abre la puerta con sigilo, ve la habitación a oscuras, pero se veía claramente la cama y sobre ella el cuerpo dormido de Minho. Se acerca a la cama y pone el jarrón al lado de la misma, luego duda y lo pone sobre la orilla del nochero que había al lado del lecho del duque y su amante, con la firme convicción de que sería torpe y lo haría caer.

Esa misma mañana Kai se levanta en busca de su morena, pero solo dejo su aroma en sus sabanas, y el rastro de su virginidad. Un sentimiento de gloria machista y de tristeza le inundo el cuerpo. ¿Por qué se había ido? Podrían haber despertado juntos. Así que se paró rápido de la cama, se puso lo primero que encontró y salió en busca de la chica, por lo menos para verla y saludarla. Kai y Chanyeol se encontraron con la noticia de que las tres mujeres habían salido esa madrugada del castillo o eso les había informado el guardia nocturno de la entrada. Lo único que las mujeres dejaron fue una carta de agradecimiento  para el joven Duque.

-          Joven Taemin buenos días.

-          Kai buenos días… ¿por qué veo que ni te has duchado?

-          No es escusa lo sé, pero vengo a entregarle una nota que dejaron las mujeres gitanas. Al parecer se fueron del castillo esta madrugada.

-          ¿Cómo es eso? Quería tratar con la señora un poco más… - dice desilusionado Taemin.

-          Ven amigo, tenemos que hablar.

-          ¿Qué pasa Kai?

-          Vamos a tu estudio duque, tengo que hablarte y que me leas esa nota o si no perderé la cabeza. Me siento ansioso.

-          Bien vamos.

Al llegar al estudio del duque, Kai se sienta apresurado de la forma más informal, una forma que Taemin en su tiempo de amigos jamás había visto.

-          Viejo que pasa, me preocupas.

-          Taemin… amigo, hoy me levante más ansioso que nunca, tengo la sensación de que hice algo que no debía.

-          ¿y qué es eso que no debiste hacer?

-          Acostarme con Evangeline y despojarla de su virginidad.

-          ¡Qué hiciste que!- grita Taemin.

-          Lo que escuchas… solo apareció en mi cama tarde en la noche… desnuda… me deje llevar… fue grandioso pero al mismo tiempo sentí que era prohibido… lo que me encendió mas.

-          Porque demonios estaría ella a esas horas desnuda en tu cuarto.

-          No lo sé.  Solo pasó. Y era virgen. Esa gitana es hermosa.

-          ¿a qué se debe tu ansiedad entonces? ¿no conseguiste lo que querías? – dice enojado Taemin.

-          Taemin… creo que es el hecho de que no sé. Solo me siento mal y aunque fue fenomenal… de cierto modo me arrepiento. Fue como si se hubiera llevado algo de mí…

-          Sé que eres muy perceptivo. Pero, ya cálmate. La verdad no entiendo.

-          Si, debo relajarme. Lee la nota por favor.

-          Está bien… pero cálmate amigo. Aquí va.

 

“Querido Duque

De antemano pido disculpas por irnos de esa manera tan cruel y grosera. Mis hijas y yo no podemos estar en un lugar más de un día, puede decir que suena a una excusa pero es la maldición de las gitanas. Duque, estaré visitándolo más adelante porque tengo que volver a hablar con usted. De nuevo gracias por todo.

Familia Flamcourt”

-          ¿Solo eso dice?

-          Solo eso.

-          ¿La maldición de las gitanas? ¿No poder quedarse en un sitio?

-          Solo sé que siempre haces lo mismo. Yo quería tratar con la señora un poco más, tal vez fue por esto. Se daría cuenta…

 

 

A las dos de la tarde llega un carruaje el castillo, eran los lacayos de Taemin junto a los amigos de Minho.  Todo el personal del castillo incluido el duque sale a la plaza a recibirlos. Tanto alboroto despiertan al moreno tras su descanso. Se estira en la cama y ve que esta solo pero acompañado de una pequeña nota. Con la luz que entraba del espacio de la cortina a regañadientes la lee y sonríe como un bobo enamorado.

En la plaza estaban todos abrazándose con todos, los lacayos van en busca de su amo y lo abrazan como si hubieran pasado años, se alegran de verse y empiezan su relajo habitual. El castillo estaba completo.

-          Señor duque-dice Donghae-  perdone que lo interrumpa, pero ¿por casualidad sabe dónde está Minho?

-          ¿Minho? Él se fue a su búsqueda desde que salieron del castillo a su aventura. – el duque miente y toda la servidumbre lo miran divertido.

-          No puede ser… - la cara de jonghyun se transforma en un momento.

-          Mira su cara duque no hagas esto- dice burlonamente Kai

-          Jajajajajajajajajaja – se carcajea el duque – Mon Minho paso mala noche y siguió durmiendo de largo, no quise molestarlo. Además no sabíamos que nos darían esta repentina sorpresa.

-          Que malo duque…

-          ¿Cómo osas duque a preocupar a mi enano?- hace pucheros Key- No duque, no está bien.

-          No me quiero imaginar que tanto paso en ese viaje para que a él, que al principio querías matarlo, lo defiendas tanto.

-          Ni te imaginas.- dice Onew.

-          Bien vamos, vamos. Reunámonos y festejemos. Yo me encargo de despertar a Minho.

 

Cuando todo el personal entra al castillo, Taemin empieza a correr hacia su habitación para levantar a su amado durmiente. Se tropieza varias veces pero la emoción no lo deja ni correr bien, tenía que avisarle que sus amigos estaban de vuelta y podrían encontrarse de nuevo.

Minho aún estaba en la cama haciendo pereza, tenía curiosidad de saber porque era tanto alboroto, tal vez un miembro de la nobleza o un anuncio.  Miraba al techo y veía las pinturas en el techo, todo tan hermoso. Se encontró que había empezado a sentir nostalgia, de un momento a otro empezó a imaginarse a sus fans aclamándolo en los conciertos, se imaginó tocando su guitarra eléctrica, se imaginó a su madre.

Sus ensoñaciones fueron interrumpidas por el golpe de la puerta contra la pared, del susto quedo sentado pero relajo su cuerpo al ver que era Taemin quien al entrar había iluminado la habitación. Minho sintió alegría al verlo y para ir a su encuentro empieza a bajarse por el lado donde Rose había dejado el jarrón. El moreno no lo había visto, así que al apoyarse sobre el nochero hizo caer el jarrón.

La habitación del joven duque se empieza a llenar de una luz azulada que emanaba del jarrón recién roto. Minho  lo sintió en su pecho, aquella sensación de vacío lo apoderaba intentaba moverse pero lo único que pudo hacer fue mirar hacia donde estaba Taemin y apretar en su mano la nota que le había escrito su amor. Por otro lado Taemin asombrado por la extraña luz da un paso atrás entre cerrando sus ojos avellanados, empieza a gritar su nombre.

-          ¡Minho! ¡Minho!

Minho le ve entre las luces parpadeantes, inmóvil solo lo mira y de sus ojos empiezan a brotar lágrimas. Sabía que su hora había llegado. En los mismos instantes estaban Jonghyun y Donghae inmóviles. Tal escena le había causado pánico a los espectadores y a sus amantes. Sus cuerpos estaban traslucidos y Key al tratar de tocarlo, lo había traspasado. Key empieza a gritar como loco tratando de encontrar una salida a su dolor, sus presentimientos eran ciertos algo andaba mal desde el inicio de aquel maligno día que lo separaría de su amor. Le había costado amar de verdad toda su vida y algo se lo quería arrebatar. En últimas, pasados los segundos cae de rodillas ante él, quien solo lo podría mirar, y de sus ojos se desbordan las lágrimas más dolorosas que ambos hayan llorado.

Todos estaban en shock, pero el joven Onew no se podía mover, no sabía que pasaba ante sus ojos, todo era tan extraño e irreal que pensó en pellizcarse para despertar de esta pesadilla. Camino lentamente, pasos que parecían levitaciones, miro a Key y sintió punzadas de dolor inexplicable en el pecho, todo estaba pasando tan rápido que no podía ver todo con claridad. Sus piernas temblaron y miro a Donghae quien desaparecía poco a poco, fue a tocar su cara y este y Jonghyun desaparecieron. Onew se desmayó.

Minho intentaba gritar que lo amaba pero le era imposible, sentía algo en el centro de su cuerpo que lo halaba. La luz empezaba a desaparecer poco a poco junto al cuerpo casi desnudo del moreno alto, al ver esto Taemin se sorprende, trata de actuar rápidamente corriendo a su encuentro estirando el brazo… al llegar, él había desaparecido.

 

La luz incomodaba sus ojos, sentía frio y oía pequeños susurros a lo lejos. Minho abre sus ojos y la luz blanca irrita su vista.  Trata de acomodarse al entorno y ve lo que serían unos paramédicos. El ruido de la ambulancia empezaba a retumbar en sus oídos, poco a poco iba recobrando el conocimiento. ‘¿Qué demonios estaba pasando? ‘pensó.   Su conocimiento iba volviendo poco a poco para que segundos después se diera cuenta que tenía un respirador artificial en su cara y muchas cobijas en su cuerpo.

-          Señor… ¿usted es Choi Minho? ¿joven? ¿Tiene algún número donde comunicarnos con su familia?

-          ¿Dónde estoy? – dice el alto recobrando su conocimiento.

-          Joven está usted en una ambulancia. Vamos de camino a Hôpital Saint-Jacques. Tiene usted una hipotermia muy avanzada necesitamos tratarle urgente.

Su cuerpo estaba débil, su fortaleza se extinguía y no podía quedarse consiente por más de que quisiera. Taemin llenaba sus pensamientos haciéndole sentir un tibio calor hogareño, un sentimiento de seguridad que poco a poco se alejaba.

-          ¡Abríguenlo más! ¡Sus signos vitales están bajando! ¡Ajusta el suero! ¡hay que hacer algo mientras llegamos al hospital!

-          Jefe no me explico que hacían estos hombres a estas horas de la mañana fuera del castillo de Chambord.  Están muy graves, anoche llovió mucho a pesar de que es primavera.

-          No sabemos nada, solo que son ídolos reconocidos. Solo ellos saben, por ahora hay que llegar.

-          Él está más grave que los otros dos. El solo estaba en ropa interior y tenía esta nota en la mano.

-          ¡guarda eso y deja de hablar! Si no llegamos pronto este hombre va a morir.

Epilogo del capítulo

 “Te esperaré toda la vida aunque tardes un tiempo, mundo, un deseo y dos besos. Porque siento que he nacido para amarte, creo poder realizarlo. Creo estar preparado para tanta espera y tanto amor. Porque quien no espera no ama, nunca amó. 
Aunque se me vaya la vida antes que llegues, aunque se me vaya todo y me quede un último suspiro, una última luz, aquí te espero yo: con mi espera, mi esperanza y mi amor, Mi amor… Mon Minho”

Taemin cae en bruces confundido, su corazón late cada vez más lento y se siente desfallecer, diciendo estas palabras cae desmayado por la coalición de su alma. Ahora está el dolor donde hace momentos sentía euforia.

 

 

Notas finales:

Que sintieron con este capitulo? que esperan para el proximo !!!

;-, confiezo que escribiendo , llore. xD

las quiero. 

no me maten :v 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).