Era un nuevo día, se sentía la frescura de la mañana y con los rayos de sol traspasando las ventanas de los cuartos, en uno de ellos se encontraba un tierno doncel embarazado dormido.
-Mmmm – el pequeño estaba despertando
Toc Toc Toc
-mmm… ¿Quién es? – preguntaba adormilado el castaño.
-Soy mamá, ¿puedo pasar?
-Haiiii
La mujer entro a la habitación y noto que su hijo seguía en la cama adormilado.
-Ya debes despertarte, son las 8 de la mañana y tienes clases a las 10 – dijo la señora.
-No tengo ánimos de ir, tengo mucha pereza – refuto el menor
-Normalmente ya te hubiera regañado por decir esas cosas pero se que tus pequeños te quitan muchas energías, así que está bien te puedes quedarte aquí en casa, solo, no tendrás con quien hablar o salir – decía la madre con una sonrisa en su boca al ver que su hijo estaba dando vueltas en la cama.
-Pensándolo mejor, si iré a la universidad – el doncel salto de su cama y se fue a bañar.
-Jajajajaaj que bella forma de hacer que nuestro hijo perezoso vaya a estudiar – decía el padre que pasaba por el cuarto y oyó a su esposa.
-Lo sé jajaaja – dijo risueña la mujer - Andy querido te esperamos abajo para desayunar – grito al lado de la puerta.
-Está bien, bajo en 15 minutos – respondió el menor.
+++++++++++++++++++ 30 minutos después ++++++++++++++++++++++
-Mocoso ¿Por qué tardas tanto? – Entro Makoto al cuarto con venas marcadas en su frente - ¿Qué pasa? – pregunto al ver a su hermanito haciendo un puchero.
-No******************* – dijo rápido el menor y apenas audible.
-¿Qué dijiste? – Makoto no logro escucharlo
-No******************** – volvió a decir el menor
-Habla alto que no te entiendo – dijo el mayor frustrado
-No me cierran los pantalones ¿eres estúpido o qué? - grito el menor con la cara roja del enojo pero después se pudo azul – waaaaaaaaa lo siento hermano, perdóname no quise decir eso – sus ojos se pusieron aguados.
-Pffff JAJAJAJAJAAJ - se rio el mayor por lo escuchado – no te preocupes por eso JAJAJAJAJAJAJ.
-NO TE RIAS – grito el menor
-JAJAJA lo siento JAJAJA pero es que no lo soporto JAJAJAA- siguió riéndose como desquiciado.- AUCHHHH OYEEEEE
-Te dije que no te rieras – le dijo el menor con la cara roja de enojo.
Damas y Caballeros, el doncel le había tiro a su hermano un libro, para ser más específica una enciclopedia…
-Moooo no tenías por qué tirarme ese tremendo libro – dijo Makoto pero – JAJAJA AY POR DIOS – el mayor corrió hacia su hermanito y lo abrazo – te ves tan lindo.
-No me digas lindo, yo no soy lindo – dijo el menor con un puchero más notable, con la cara roja pero de vergüenza y lágrimas en los ojos.
-Si lo eres y más por la cara que me estas poniendo – dijo feliz el mayor por ser el privilegiado de ver esas caras tan adorables – espera un momento – dijo y salió de cuarto.
Andy vio con duda al mayor cuando por haber salido del cuarto pero después se oyó una estampida de pasos yendo en dirección al cuarto del menor.
PLAM sonó la puerta de la habitación al ser abierta de forma abrupta.
-¿Es cierto que ya no te está quedando la ropa? – preguntaron en unísono los intrusos; el padre, la madre, las gemelas y David. Makoto estaba detrás de ellos con una sonrisa burlona.
-B…bu…buaaaaaa siiiii ya no me cierran los pantalones buaaaaaaa – decía el menor llorando a mares.
-Kyaaaaaaa hay que ir de compras – decían las tres mujeres
-Creo que si, ya que no te quedan los de tus hermanos – dijo el padre - y tampoco vestido – dijo rápidamente al ver que a las tres mujeres se le iluminaba la cara y después suspiraban con desdén por la negación de este.
-Está bien, cero vestidos pero si tendrás que ir con nosotras de compras – decía Mitsuki
-Sob…está bien… - respondió el menor.
-Creo que al final, no vas a ir a la universidad ajajaja – decía feliz la madre
El pequeño asintió con la cabeza.
-Puedes ir pero no te enloquezcas como ellas – ahora fue el medico el que intervino, todos lo vieron raro, este se dio cuenta – le puede hacer malo y más porque los primeros meses son los más importantes – decía con sabiduría y subía sus anteojos.
-No te preocupes nosotras cuidaremos de el – manifestó Mitsuki
-Por el momento ponte alguna prenda de tus hermanos con elástico, así te quedan un poco mientras vamos al centro comercial – dijo la madre
-Entonces, ven conmigo, los míos son más pequeños que los de David – hablo Makoto y se llevó consigo al menor – ten esto y te esperamos abajo – vio que su hermanito asintió y salió de su habitación con rumbo hacia la sala en donde se encontraban los demás.
+++++++++++++++++ 5 minutos más tarde ++++++++++++++++++++++
-M… me quedan u...un poco flojos – decía el menor entrando a la sala
-ADORABLE ¿Dónde CARAJOS HAY UNA CAMARA CUANDO SE NECESITA? – era pensamiento de todos al ver al doncel con un buso de algodón que se notaba que le quedaban grandes, una polera floja color celeste pero aun así se notaba una pequeña pancita y sobre todo porque sus mejillas estaban sonrojadas
-NOS VAN A ROBAR AL ANGELITO – las tres mujeres.
-GRRRRRR MAS LE VALE A CUALQUIERA NO ACERCARSE A ANDY SI NO QUIEREN VER EL INFIERNO - los tres hombres.
-¿Pasa algo? – pregunto el menor al ver que nadie hablaba.
-No es nada – decían los 6 al unísono.
-Bueno es hora de ir ¡¡¡¡de compras!!!! – dijeron las gemelas
-Nos vamos ya querido, los vemos más tarde, cuídense - decía la madre de forma rápida yendo hacia el auto y jalando al menor.
-HAAAAAAAAA, MUJERES – suspiraron los tres hombres olvidados.
+++++++++++++ En el centro comercial +++++++++++++++++++
-Vamos a Mit Mat Mamá – decía Natsuki
-Nooo, mejor a Vertbaudet, tiene más clase – hablo Mitsuki
-Que tal La Redoute – ahora era la madre
-Neeee quiero ir a esa – dijo el menor sonrojado y apuntando hacia una de las tiendas.
-Shop Mami – dijeron las tres mujeres – kawaiiii, Andy es una dulzura completa.
La tienda era hermosa, tenía de todo; para mama, para el bebé, ya sea ropita, cuidados para el niño o niña, juguetes y muchas cosas más. La tienda estaba decorada con globos de distintas formas, el ambiente era muy agradable.
Los cuatro entraron a la tienda quedaron maravillados, se fueron al departamento de ropa para donceles, le probaron de todo al pequeño, las gemelas se atrevieran hasta de medirle un vestido y lo que se ganaron fue un golpe en la cabeza dado por el menor, al final compraron cinco mudadas para el pequeño.
-Por el momento con esa ropa estarás bien – hablo la madre
-Hai – respondió feliz el pequeño – si quieren comprarse algo vayan.
Las mujeres lo vieron con duda.
-Sé que lo quieren hacer, las vi viendo hacia otras tiendas, no hay problema vayan y disfruten – dijo con una sonrisa el menor- yo me sentare en las mesas mientras ustedes van a comprar – las mujeres asintieron y le dieron un abrazo.
Andy se fue a unas bancas que estaban cerca de él, mientras las mujeres se iban, no dejaba de sonreír ya que desde esa posición podía ver a sus hermanas en una tienda poniéndola patas arriba.
-JAJAJAJAAJ – el menor estaba feliz.
-Hola precioso – le hablo una voz detrás de él.
El menor dio un brinco, dio la vuelta y ahí estaba... la persona que más odiaba en este mundo.
-C…Connor