La cena transcurrió tranquila mientras los adultos platicaban alegremente y los niños se dedicaban a comer fervientemente. Tony comía desesperado como si no hubiera un mañana, aun si atreverse a mirar a Steve, éste por su parte reía internamente al ver el acto desesperado de su compañero. Tony estaba tan ensimismado con la comida que no se percató que se había manchado la parte superior de sus labios creándole un gracioso bigote de salsa.
Steve que no perdía detalle de las acciones del más pequeño, no dudo mucho y llamó la atención del más bajo dándole un leve codazo. Anthony le miro con sus grandes ojos chocolate un poco molesto y avergonzado, fue entonces que el niño de ojos azules le señaló sus labios pero Tony solo enarcó una ceja como diciendo..Y a este tipo qué le pasa. Al ver que su gesto no era comprendido por el pequeño Stark, Steve decidió tomar una servilleta y sujetó el mentón de Tony firmemente, pasando de forma delicada y cuidadosa la servilleta sobre los labios manchados del menor. Anthony estaba que se moría de la vergüenza por las acciones de ese niño rubio…es que en serio era como un príncipe el..uhm como era que decía su padre cuando algún negocio fallaba. Ah sí “jodido”, ¡Jodido mini príncipe salido de cuentos de hadas Steve!
El más pequeño le miró con desdén ni bien el niño terminó de limpiarlo.
-No tenías que hacerlo…niño Barbie –dijo lo primero que se le vino a la cabeza Anthony-
-Pero parecía que te ibas a quedar con los labios manchados enano-enfatizó en la última palabra Steve-
-¡A quién le dices enano ojos saltones! –repuso con su mejor sonrisa marca Stark-
-Pues a ti…Todos en este comedor somos más altos que tú GENIO
Bueno, ya estuvo él era Anthony Edward Stark heredero de industrias Stark, quien se creía que era esa Barbie salida de cuentos de hadas. El más pequeño no lo pensó dos veces cuando procedió a tirarle una patata al niño rubio que le miró estupefacto.
Ahh…no ese pequeñajo mimado lo estaba retando….Recuerda los modales Steve, recuerda los-
Sus pensamientos fueron interrumpidos al ver la sonrisa socarrona en la cara del niño. Al demonio los modales, de inmediato Steve le tiró salsa en la cara a Tony, el más pequeño se enfureció y aún con su pequeña estatura se lanzó contra el niño Barbie. Empezaron una pelea en la que Tony restregaba lo que encontrara a su paso en la cara de Steve mientras que éste pataleaba y buscaba quitarse de encima a esa pequeña bestia.
Sus padres que charlaban muy contentos de inmediato fueron a separarlos, María buscaba sacar de encima a su bebé y Elianne jaloneaba a Steve. Los dos hombres sólo se golpearon a frente, en definitiva las mujeres no tenían el don para eso, sus sospechas se confirmaron cuando María se puso histérica y le gritó a Elianne
-Ese monstruo de ojos azules está lastimando a mi bebé – decía ella buscando apartar a Tony-
-¿Estás loca? Es tu pequeña bestia que está lastimando a mi Stevie
Bueno es suficiente, pensaron ambos jefes de familia. En un acto de presencia un tanto tétrico los dos apartaron a sus respectivas esposas y cuando estas iban a reclamar los dos hombres les echaron una mirada de “Si abres la boca, tú también serás castigada y a ti no te tendré compasión”. Ambas mujeres comprendieron y se quedaron en silencio.
-Anthony-dijo con voz casi de ultratumba Howard-
-Steve-procedió de igual forma Ivan-
Los dos niños dejaron de pelearse y de inmediato se pusieron de pie pero ni bien se vieron a los ojos ya iban a empezar el segundo round cuando escucharon:
-Cancelado el viaje en que me acompañarías a visitar los hoteles
-Tú también te quedas sin el viaje y las clases privadas de dibujo
-¿PERO QUÉ? ¡NO PUEDES HACERME ESTO PAPÁ!
-Pero nada Anthony Stark
Los dos niños solo atinaron a mirarse furiosos claramente se veía en los ojos de Tony que le gritaba mentalmente a Steve ”Gracias princesa rubia ahora por tu culpa me quedo sin viajar y conocer más de mi futura herencia” y Steve “Genial monstruito y yo que quería viajar para tener nuevos diseños y para colmo me quitarán las clases de dibujo”
-Aunque….Podríamos cambiar de opinión si ambos se disculpan – dijo Ivan con una sonrisa un poco maliciosa que se combinó con la de Stark-
-Pero papá, él empezó –dijo Steve-
-No inventes, fuiste tú –lo señaló Tony-
-No importa quien empezó, se disculpan ahora mismo o no hay viaje ni nada. – dijeron ambos padres cruzando los brazos-
Ambos niños se alejaron un poco más del grupo de padres para discutir lo de la disculpa.
-Yo no pienso hacerlo –empezó el pequeño Tony-
-Pues yo menos… pero mis clases de dibujo y el viaje –susurraba Steve-
-Si queremos viajar y tú tus clases de dibujo pues hay que hacerlo –dijo Tony decidido-
-No lo sé, ojitos preciosos. Eres lindo y todo pero tú empezaste esto. Creo que eres tú el que me debe una disculpa –dijo con su mejor sonrisa Steve al ver como el otro niño se sonrojaba nuevamente-
-Tú me dijiste enano..ojos saltones – le sacó la lengua-
-Bien…entonces debemos decirlo ambos
-Estamos esperando que se disculpen..Uy y el tiempo se pasa muy rápido creo que no habrá viaje ni nada…-decían Ivan y Howard-
-Bien….lo haremos –dijo avergonzado Anthony-
-Discúlpame –dijeron los dos niños mientras estrechaban las manos-
Los adultos quedaron satisfechos con la disculpa de los niños pero les advirtieron que si había una sola pelea más, todos se quedaban sin viaje eso iba también para María y Elianne. Al final la servidumbre se dispuso a limpiar el desastre mientras que los adultos se fueron al living a conversar, en el camino iban las dos esposas disculpándose por su conducta infantil;dejaron a los niños ir al jardín para que interactuaran pero solo eso..no que se mataran a los golpes
Anthony de inmediato se sentó en el pasto fino que adornaba su jardín mientras observaba la fuente de agua y las flores hermosas que su madre cuidaba tanto. A su lado se puso Steve admirando también la belleza de las flores. Se rascó un poco la cabeza porque quería disculparse en serio con el morenito pero no hallaba cómo.
-Son hermosas ¿no?-dijo con una sonrisa Tony-
Steve sintió como su corazón quería salir de su pecho al ver esa sonrisa pura y muy tierna.
-No…-dijo casi hipnotizado por la hermosura de ese niño- Tú eres hermoso –afirmó mientras giraba el rostro de Tony para que lo mirase-
-¿Qué?-musitó el pequeño mientras sentía su cara arder por el comentario de Steve-
-Eres hermoso Anthony Stark, creo…creo que me gustas. Tus ojos preciosos, tu cabello tan suave –dijo acariciando el cabello del niño- Tu nariz graciosa y….
-¿Y…?-dijo Tony acercándose más a Steve y sus hipnotizadores ojos azules-
-Y…esto…-tocó los labios de Tony, los acaricio suavemente- Tus labios tan bonitos, tan…
-¿Tan? –decía casi desesperado el pequeño…-
-sonrojado y con el corazón latiendo a mil- Tan…apetecibles, quiero…quiero pro-probarlos Anthony Edward Stark. ¿Puedo?
- Hazlo…-dijo Tony ya muy cerca de los labios de Rogers- Te doy mi permiso…-cerró los ojos tal y como había visto en esas películas de amor que su madre adoraba mirar-
-Con gusto…-musitó Steve para romper la distancia y al fin poder tocar esos pequeños labios-
-¡STEVE! Cariño….ven con mami y papi. Ya nos vamos a casa….¡Steeviee!
Sólo eso bastó para que ambos niños se separaran bruscamente, los dos sumamente sonrojados y Steve casi queriendo morir porque su madre había interrumpido y no pudo probar los carnosos labios de Stark.
-Debes irte…-dijo Tony avergonzado- Ven…te llevaré –dicho eso se paró y se disponía a caminar hasta el living cuando Steve lo detuvo-
-Lo siento..Ya habrá oportunidad –le acarició el rostro al más pequeño y rápidamente le dio un beso en la mejilla- Por ahora...estaremos bien con esto –abrazó al niño y lo apretó contra su cuerpo mientras susurraba esas palabras y Tony solo se limitó a asentir-
Ambos caminaron tomados de las manos hasta el living donde sus padres les esperaban.
-Cariño porqué tardaron tanto….-dijo María-
-Es que estábamos charlando mamá, estábamos muy entretenidos en la charla –dijo Tony mientras sonreía-
Toda la familia Stark escoltó a los Rogers hasta la salida y tocó la parte de las despedidas donde los adultos de nuevo se perdían entre ellos. Steve y Tony se miraban intensamente, al final Elianne tuvo que decirle a Steve que se despidiera de Tony.
El niño de ojos azules de inmediato tomó la manito del pequeño Stark y le dio un beso tierno.
-Un gusto conocerte Anthony…Espero vernos pronto –dijo con su sonrisa perfecta-
Tony estaba embelesado y perdido por la sonrisa de ese niño…De inmediato también puso su mejor sonrisa.
-Yo también me alegro de conocerte Steve. Hasta pronto…
Sus padres quedaron satisfechos con la reconciliación de sus hijos pero no sabían que la relación de ambos estaba yendo más allá que una simple amistad. Los Stark vieron como los Rogers se iban.
Steve iba sentado en la parte trasera del auto y no sacaba de su mente los labios de Tony…
“Anthony Stark, me gustas”, pensó antes de caer dormido