No sabía porque, pero exactamente no entendía como en toda la existencia humana, debía de fijarme en aquella persona. Esa persona que es imposible hasta para las chicas más hermosas y astutas de todo el campus de la Universidad de Seoul.
Mi problema, bueno…Tiene nombre y apellido y aunque no comprendía como había sucedido. Había caído en sus redes, pero no de una forma dramática, porque literalmente, luego de tanto tiempo, tanto de estar ahí y verlo caer y nuevamente levantarse. Era yo el que necesitaba de su ayuda en estos momentos.
Ese chico que con solo una sonrisa torcida te hace pensar tantas cosas, hace que en tu vientre se desate una pelea de mariposas, un nudo en tu garganta y que tu cuerpo tiemble, sin siquiera tocarte. Su piel morena y ojos negros, cabello castaño. Sí, me supongo ya saben de quien hablo.
- Hey SeHun- me hablo con una sonrisa.- ¿Te sientes bien?
Aquella pregunta me tomo por sorpresa, sacándome de mis pensamientos y viendo a mi amigo mirándome preocupado.
- Estoy bien…- conteste algo ido- Es solo que no he dormido bien.
JongIn pareció creerlo, no volvió a preguntarme algo. A su lado, estaba mi mayor problema, bueno. En términos de atracción, ahí estaba KyungSoo, el eterno amor platónico de JongIn. Era así, pues, cuando el moreno se le confeso. KyungSoo le dijo que no era su tipo, que no insistiera en ello.
- ¿Hunnie?- esa voz me hizo alzar la vista y ver a LuHan, mordí mi labio suavemente. Mi novio.- ¿Estas bien?
Suspire, no quería que lo notara. Sonreí para tranquilizarle.
- Claro bebe, no es nada- le comente con una delicada sonrisa.
Tao se colocó de pie, mirándome de manera molesta. Me levante para ir con él. Bese los labios de mi novio para irme junto a él. A medida que nos alejábamos del salón de Física, me miro a los ojos, sabía que vendría.
- Debes dejar esto hasta aquí, Hunnie…- me susurro con dulzura- Terminaras haciéndote daño.
- ¿De qué hablas?- me hice el desentendido.
- Venga, no soy un imbécil…- me comento con una sonrisa.- No te involucres con él, sabes cómo terminara todo, tu mejor que nadie lo sabe.
- Lo sé, ¿Vale?- suspiro- Sé que estoy malditamente jodido por haberme fijado en un PlayBoy como JongIn.- bufe- Pero no sé cómo paso, no lo sé…
Pase mis manos por mi rostro con notoria frustración, molestia e irritación. Tao suspiro y paso su mano por mi espalda.
- Sé que esto te está comiendo por dentro, más cuando tienes novio hace tres años, y que JongIn sea tu mejor amigo desde toda la vida.
- Está comiéndome amigo…- susurro- No sé cómo hacerlo para sacarlo de mi mente.
- Esta noche iremos de fiesta, es viernes y se les hace una fiesta a los de primer año- comento con una sonrisa- Habrá alcohol, drogas, sexo y demás.- me guiño- Ya sabes a que me refiero.
Una sonrisa se formó en mi rostro.
- Estas tentando a tu menor, Hyung- le susurre divertido.- Pasa por mí, estaré listo.
Y sin más, Tao se alejó. Volví a mi recamara, que adivinen con quien la comparto. Exacto. Ahí estaba, mirando una fotografía del modelo de su clase. Suspiraba y bufaba, me deje caer en la cama. Mirando como sus carnosos labios eran rozados con la goma del lápiz grafito.
- SeHunnie…- me llamo, me alarme.- ¿Puedes ser mi modelo?- me sonroje suavemente.
- ¿Yo?- estaba nervioso- Pero, tienes al modelo en la fotografía.- comente.
- Lo sé, pero este no me gusta.- susurro mirando la foto con molestia.- Mira…- se acercó a la cama y con su dedo me mostro su rostro, era bastante apuesto- Sus expresiones con demasiado forzadas, una sonrisa cálida es lo que necesito.
- ¿Esperas que yo, el chico que menos sonríe en toda la Universidad, te sonría?- hable con sarcasmo.
- Esto va a mi calificación final- presiono- Venga, sé que si puedes- hizo un mohín- Siempre se las haces a LuHan, ¿Cuál es la diferencia?
- LuHan es mi novio, JongIn.- suspire- Es normal le sonría si él es mi todo.- pude ver como su mandíbula se tensó.- Pídele a KyungSoo que lo haga, seguro sus labios quedarían mejor.
- ¿Qué tiene que ver el aquí?- me miro alzando una ceja- Además, no lo haría. Sabes muy bien que no le agrado.
- Aun así te gusta- ataque, molesto- No comprendo que le ves, es tan…- me miro atento- Común.
- Bueno, joven “diferente”, es simple- me miro a los ojos- No comprendo cómo terminamos hablando de esto pero da igual- se encogió de hombros.- Soo no es tan común como dices- eso dolió- Sé que no te agrada y no comprendo porque razón.- mordió su labio inferior- Pero a mí el me encanta, desde que iniciamos la secundaria.
Aquello había dolido más de lo que había esperado. Tome aire para apartar mi vista de sus ojos. Sentía que me quemaba, su mirada era tan profunda. Sonreí de medio lado, casi burlándome.
- Escúchate- le reclame molesto- Este no es el JongIn que yo conozco- le ataque molesto, me miro sorprendido- Eres un tonto, sabes que el jamás te querrá, no de la forma que tú quieres.
- ¿Tu si?- me ataco mirándome molesto, terreno peligroso.- No comprendo porque rayos te enojas tanto cuando lo nombro- bufo mordiendo su labio y colocándose de pie- Yo te apoye cuando querías iniciar una relación con LuHan.- se paseó por el cuarto como un león enjaulado- No te entiendo, si hablo de Soo, te enojas.- mordió su labio- Si hablo de alguna chica, te enojas, ¿De quién demonios quieres que hable?
Iba a terminar explotando. Estaba más que seguro de eso.
- Esto no tiene ni pies ni cabeza…- susurre mirando el piso, incapaz de verlo- Dejemos esto así.
- SeHun…- suspiro molesto- No quiero, debes decirme que te molesta.- puso sus manos en mis hombros, haciéndome verlo, me quemaba- Por favor…odio que peleemos.
Quiero me veas a mi…Lo mire para morder mi labio. Mi cuerpo temblaba, y mi corazón amenazaba con salirse de mi pecho. Esto era tan malditamente complicado.
- Quiero cambiar de cuarto…- susurre, sus ojos se abrieron sorprendido- No puedo seguir así, JongIn…- mordí mi labio.- ¿Cómo no te das cuenta?
- No…- susurro.
- Quiero que te alejes de KyungSoo porque, amigo mío- palmeo sus hombros, con los ojos cristalinos- No soporto saber que el siempre será el primero…- mordí mi labio- Porque me gustas, maldita sea.
Entonces espere con los ojos cerrados que me gritara o se alejara de mi pero no, lo que conseguí fue algo que en mi vida habría imaginado que realmente se cumpliría. JongIn, coloco sus manos en mis mejillas y me atrajo a él, besándome lento, pausado, profundo.
Mi cuerpo estaba quieto, mis mejillas sonrojadas y mis ojos abiertos. Esto debía de ser un sueño, pero juro que si alguien me llegaba a despertar iba a terminar sacándole los ojos. A los segundos reaccione y pase mis manos tímidamente por su cuello, atrayéndolo a mí, besándolo con más profundidad, como sabía que le gustaba.
Me acerco a su cuerpo, dejando que ni un espacio de aire se desplazara entre nuestros cuerpos, estaba confundido. No podía…lo aleje, a regañadientes. Tenía novio, lo amaba, me encantaba. Oh Demonios…no puedo.
- No…- mordí mi labio- No soy una más de tus putas, amigo…- me levante para tomar mi móvil.- No me trates como eso…- me aleje de ahí, saliendo.
Sabía que JongIn solo lo había hecho por ser un buen amigo, por demostrarme que el jamás cambiaria. Pero, para mi aquel beso había significado demasiado. Aun cuando mi novio me amaba, yo le engañaba. No podía ser.