Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

2Min: "Don't you Forget?" por ZaffireHeart

[Reviews - 99]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

OH POR DEEEEEOOOOS!!!!! MIL MILLONES DE DISCULPAS!!!!! >-< casi 2 meses ausentes! Lo siento, lo siento mucho en verdad, creí que este día nunca llegaría pero finalmente pude remontar y he vuelto para terminar esta historia! Que al final tendrá 30 capítulos O-O, así que tendremos una semana intensa, pues como dije en mi página, toda esta semana estaré actualizando este fic día a día, así que espero y puedan perdonarme >-<

#2MinHardCoreWeek XD :P LET'S GO!

Capítulo 25: “Las promesas que hago… las cumplo”


Parte 2


~POV TaeMin~


Ese día desperté realmente motivado, quería hacer algo más por mi bien y el de él. Miré a mi costado, y allí estaba él, dormido con una leve sonrisa, haciéndome sonreír a mí también de inmediato. Me levanté de la cama con algo de pereza, pero lo hice, fui a tomar un baño tomando prestada una toalla y el shampoo. Sonreí una vez más. <<“El shampoo de MinHo”>>, pensé ridículamente mientras también sonreía como estúpido, pues ese día, me encontraba realmente bien conmigo mismo, volver a tener a ese hombre a mi lado y ahora de una forma mucho más íntima me encantaba. MinHo finalmente era mío.


Una vez salí de la ducha, me coloqué mi uniforme y habiendo preparado un desayuno no tan elaborado, lo llevé a la habitación y le dejé una nota. <“Perdóname mi vida, tengo cosas que debo hacer y debo hacerlas solo, por eso no te esperé ni desperté, espero me entiendas, nos vemos a la salida”> Besé su frente y partí rumbo al colegio.


Una vez llegué allí fui directo al gimnasio, no sé por qué pensé que estaría allí tan temprano, pero grande fue mi sorpresa cuando vi el gimnasio ya abierto y oí unos chirridos. Por lo que ingresé sin pensarlo, y grande fue mi sorpresa cuando vi que se trataba de quien yo estaba buscando. Suspiré una vez más, llenándome de valor y tragándome el coraje que me provocaba con tan sólo verlo y me quedé observándolo en silencio.


Él notó mi presencia, luego de unos cuantos segundos y se detuvo dejando de jugar consigo mismo. Pues sólo él y ahora yo nos encontrábamos allí.


-¿Entrenando?-


-¿Qué haces aquí?-


Respondió él de mala manera al yo haber dicho la primera palabra de una manera realmente seria e insensible.


-Vengo a hablar contigo.-


-¿Más? Creí que ya lo habíamos aclarado, tú no eres-


-Gracias.-


Él me miró asombrado al haber sido interrumpido con aquella palabra.


-¿Qué?-


-Gracias… por abrirme los ojos.-


Él se notaba aún más confundido que antes, por lo que se dirigió a la banca, cogió la toalla y comenzó a limpiarse la transpiración en lo que depositaba el balón nuevamente dentro de su contenedor.


-No estoy entendiendo nada, ¿Estás borracho, drogado o es una clase de broma o apuesta que hiciste con tus amiguitos?-


-No, en verdad te estoy agradeciendo. Gracias por todo lo que hiciste ChangMin, por lo que me dijiste, me abriste los ojos y me hiciste más fuerte.-


-¿¡Disculpa!?- Habló aún más estupefacto que antes mientras se tiraba agua en la cara y luego bebía una buena medida. -¿Estás agradeciéndome por decirte la verdad, y arruinarte prácticamente tu orgullo y todo lo que te concierne?-


-De alguna manera.- Dije ahora acercándome unos cuantos pasos más hacia él, quien aún estupefacto retrocedió un paso por inercia, y de cierta manera disfrutaba verlo así, después de todo, no era tan “imperturbable” como parecía. -Es verdad que cuando me dijiste todo aquello te odie profundamente, pero no por la forma en que me lo dijiste, sino porque patéticamente eran ciertas, y viví en carne propia aquello que dicen acerca de que “La verdad duele”, pero aun así, gracias a eso, me di cuenta de lo ingenuo e inmaduro que había sido todos estos años. Me destruiste por completo, sí, debo admitirlo, pero pude reconstruirme mucho más fuerte.  Así que finalmente me quitaste la venda de los ojos, y me permitiste descubrir a un nuevo yo. Ese nuevo yo que logró que le dieran otra oportunidad a MinHo.- ChangMin abrió sus ojos a más no poder al parecer más que sorprendido y continué con mis “ataques”; -Sí, así como lo oyes, logré remendar mi error, y MinHo junto con JongHyun viajarán al extranjero.- ChangMin cayó sentado de golpe mirando al vacío.


-Ni-ni siquiera yo logré hacer cambiar de opinión al entrenador, aun cuando rogué de las mil maneras apenas me enteré de lo que le habías hecho hacer a MinHo. ¿Po-porqué tú sí?-


-No lo sé, pero me guste o no admitirlo, es gracias a ti que lo logré, como te dije, tú me despertaste, por eso…- Me quité mi bolso lo dejé caer al suelo el cual hizo estruendo ganándome la mirada aún confundida de ChangMin y me incliné casi 90° frente a él. –Muchas gracias por todo ChangMin ssi. Sin usted no lo hubiese podido lograr.- Terminé de decir, y esperé por una respuesta pero nada de ellos sucedió, por lo que segundos interminables después volví a erguirme, él me estaba mirando realmente impactado.


Se puso de pie y no me quedó más remedio que inclinar mi cabeza hacia atrás, debido a que me sacaba unos cuantos centímetros más, casi 10 lo cual era demasiada diferencia a mi parecer.


-MinHo ¿ya lo sabe?- Cuestionó repentinamente mirándome a los ojos. Por lo que sin mucho que decir asentí, él suspiró y cerró sus ojos, y acarició el puente de su nariz, para luego volver a mirarme a los ojos. –No puedo creer que después de todas aquellas atrocidades que te dije, estés aquí agradeciéndome en vez de golpeándome hasta dejarme sin conocimiento.-


-Quizás, “el viejo TaeMin” lo hubiese hecho, pero no en el que me he convertido ahora. En el que usted me ha convertido, así que me disculpo por todos mis errores anteriores y le agradezco por lo que me dijo.-


-Por tu temperamento imagino que ¿has vuelto con MinHo, cierto?-


-Nunca rompimos ChangMin ssi, simplemente nos distanciamos un poco, pero ahora me he redimido ante él gracias al empujón que usted me dio.-


-Diablos, ¿Perdí, cierto?-


Yo le miré ahora algo confundido, por lo que él sonrió ahora de lado al parecer burlándose de sí mismo y colocó una mano en mi hombro, provocando que le mirara aún más fijamente a los ojos.


-Supongo que la respuesta es sí, al parecer te subestimé demasiado. ¿Y sabes? La disculpa te hace valiente, el perdón te hace fuerte, el agradecer te hace humilde y el amor… te hace feliz, y tú eres todo ello ahora, así que al parecer; si estás a su altura. Siempre lo estuviste ahora que lo pienso. No desistas nunca de tus sueños, eres perseverante y eso te llevará alto. La perseverancia te ha hecho ganar… un admirador.-


Finalizó sonriendo de lado, aquellas palabras me dejaron mudo, pero realmente él tenía razón y me llegaron, por lo que ahora, finalmente había conseguido lo que deseaba, “limar todas las asperezas” con este ser humano, pues después de todo, ya sea para bien o para mal, MinHo está “sano y salvo” mentalmente gracias a él. Le debo mucho.


-Gracias, esas palabras son realmente halagadoras. Ahora si me disculpa, es hora de retirarme, tengo otras cosas que hacer y entrar a clases. Discúlpeme y por favor no haga sufrir a MinHo más de lo que ya ha sufrido. Con permiso.-


Me despedí de él e inclinándome un poco me despedí de él, a lo que él simplemente asintió y desvió su mirada. Yo continué mi camino, pero antes de salir por completo del gimnasio sentí una última mirada, tuve el impulso de girarme y cuestionar si se le ofrecía algo, pero ahora debía de seguir con KiBum, él… él realmente también debe de estar sufriendo por mi culpa e inmadurez.


<><><><><><><><><><><><><><><> 


~ 3 años después~


Terminé la coreografía, finalmente me había salido completa, y varios pares de aplausos no se hicieron esperar. Abrí mis ojos, vaya, al parecer entré en una especie de trance y comencé a recordar aquello, ¿por qué? No lo pregunten, simplemente se me vino a la cabeza. Mi respiración estaba más que agitada y alterada, mis prendas todas totalmente sudadas, y mis cabellos ahora negro azabache, se pegaban a mi frente, sonreí complacido, sin poder evitarlo, finalmente me había salido, después de casi 1 mes, me había aprendido la coreografía y me había salido perfectamente, sin error alguno. Pues no era que la coreografía fuese extremadamente difícil, pero tenía muchos movimientos de pies y pues se me enredaban, ya que la canción era muy movida, había salido hace poco, era de una “Boy band” debutante, llamada SHINee, y la canción se llamaba “A.MI.GO”.


Alguien se acercó a mí y me colocó una mano en el hombro, palmeándome con orgullo, a lo que me giré y mi sonrisa fue más que amplia cuando vi de quien se trataba. De HyukJae, pues él también había entrado a estudiar en esta misma Universidad; “Hanlim Multi Art School”, ambos habíamos al parecer decidido seguir nuestros sueños.


Él iba un año más avanzado que yo, por eso siempre teníamos invitados de años superiores a nuestro “salón de baile” para que nos enseñasen y ellos a su vez comenzaran a “pulir” sus habilidades de enseñanza, pues ninguno allí sabíamos si íbamos a terminar como profesor de danzas, o quizás si tuviésemos aún más suerte, como bailarín de apoyo de alguna estrella.


-Lo has hecho de maravilla, finalmente lo has logrado, felicidades, tus movimientos han mejorado muchísimo, chico.-


HyukJae me sonrió y yo asentí realmente agradecido con sus palabras. Los aplausos se hicieron oír una vez más, y les agradecí a todos allí con una leve reverencia.


-Puedes disfrutar plenamente tú fin de semana ahora, eso ha sido todo por hoy al parecer.-


Dijo divertido y algo orgulloso, para luego de otorgarme otra sonrisa mirar al profesor en busca de que confirmara finalmente aquellas palabras.


-Muy bien chicos, eso es todo por hoy, ya pueden irse y disfrutar, todos lo han hecho muy bien hoy.-


Habló finalmente el profesor, aplaudiendo para llamar la atención a lo que todos le agradecimos sus esfuerzos, y nos dirigimos a los vestidores. Yo la verdad es que no quería hacerlo, pero no por “sucio” por así decirlo, sino porque habíamos quedados con KiBum en encontrarnos dentro de un rato, y yo quería ducharme realmente tranquilo en mi casa, pero si me iba para allí ahora, cuando llegase el sudor ya se habría secado y corría peligro de enfermarme, y pues no quería estarlo. El invierno nuevamente se estaba acercando, la Navidad también y la verdad que no me agradaba la idea de pasar esta época en cama.


Por lo que de cierta manera renegando de mí mismo, me dirigí a las duchas y me bañé lo más rápido posible. HyukJae también tomó una ducha y una vez que nos encontramos nuevamente vestidos con nuestras prendas limpias, le pedí que me acompañara de camino a casa.


Él asintió y nos fuimos juntos. KiBum estaba estudiando para ser diseñador de moda, pues recuerdo que en segundo año de preparatoria, al no estar JongHyun para inspirarlo a ser mejor y así tener de qué hablar con JongHyun dejó el equipo de baloncesto y se concentró en la moda, su segunda pasión. Por lo que ahora él al igual que yo, se encontraba en su primer y último año de estudios. Ya que aquello no era una carrera muy larga.


-¿Cómo está él?-


Preguntó de la nada HyukJae, mientras íbamos camino a casa de KiBum, yo le miré algo confundido y él sonrió, por lo que aquella simple sonrisa me había dado la respuesta, sonreí también y colocando la mano dentro del bolsillo de mi camperón sujeté el móvil aún con sus dos colgantes intactos y sujeté con fuerza aquel aparatito que tantas veces me había salvado.


-¿MinHo?- Cuestioné de todas formas para asegurarme de que había entendido bien, él asintió ampliando aún más su sonrisa, a lo que yo me sonrojé al recordar aquel evento tan penoso que llevamos a cabo hace 1 semana. “Sexo telefónico”. –Bi-bien, él está realmente triunfando en Estados Unidos, incluso ya se le ha pegado algo del acento americano, ¿No lo has visto en el televisor el otro día? Él fue protagonista de un juego maravilloso.- Hablé sin poder evitar que mi voz y corazón se “inflaran” de orgullo al mencionar aquello.


-Pues es vergonzoso admitirlo, pero no, lo siento, no lo vi, pero al parecer le está yendo bien, eso es genial.-


-Sí, lo es… incluso me dijo que hay dos equipos importantes en América que se disputan por él.-


Bajé la mirada y sonreí, si eso pasaba, ¿podría volver a verlo, algún día? ¿O comenzaría a hacer su vida en Estados Unidos? Eso me preocupaba levemente, pero por otra parte, finalmente había aprendido a sentirme feliz por sus propios logros.


-Oh, ¿de verdad? Eso es genial, y a JongHyun ssi, ¿cómo le está yendo?-


-JongHyun ssi, está bien, pero está siendo prácticamente un esclavo de un equipo, ya que ha mejorado mucho, y finalmente aprendieron a usar su altura como ventaja y no defecto, y pues, han ganado muchísimos partidos, pero MinHo me ha dicho que él ya se quiere ir, quiere cambiar de aires y eso, pero el equipo no quiere.-


-Oh, vaya, pero ¿acaso no está en ese equipo por contrato, no puede irse tranquilo cuando el contrato expire?-


-Eso es lo que quiere hacer, y lo que está esperando pacientemente, pero el contrato no vence hasta dentro de 6 meses creo o algo así, tal vez no es mucho para nosotros, pero él quien quiere irse de allí, supongo que lo será.-


-Sí, estoy casi seguro de ello, de todas maneras me alegra que aunque no sea tan “grata” la situación de todas maneras le esté yendo de maravilla, ¿Qué dice KiBum ssi, acerca de esto?-


-Pues es medio contradictorio, porque él ama que su novio sea tan “valorado” en ese equipo, pero no lo ve bien al hecho de que no lo quieren dejar ir por voluntad propia. Se siente algo angustiado con respecto a ello, porque pues, él dice que JongHyun ssi, no está disfrutando como debería. Lo cual le hallo mucha razón, pero pues supongo que Estados Unidos es así.-


-Supongo también, nunca he estado allí, pero me gustaría viajar aunque sea una vez para conocer el lugar, aunque el idioma ha de ser difícil de aprender, me pregunto cómo lo habrán hecho ellos 3, ¿Por qué fueron 3? ¿No es así?-


-Sí, pero creo que SongKi les ha ayudado mucho, ya que cuando era pequeño vivió unos años en aquel lugar, según JunGyu, así que supongo que los conocimientos le han de haber quedado.-


-Ojalá, porque para nosotros es algo complicado aprender sus palabras, pues tienen sonidos que nosotros no tenemos y esas cosas.-


-Sí.-


Dije ahora sonriendo suavemente mirando al suelo y presionando mi móvil una vez más, le extrañaba tanto, quería sentir tanto sus brazos y su aroma en mí, que había veces que “me daban ataques”, lloraba, pataleaba, me deprimía y quería tenerlo a mi lado, pero TaeJun ahora con 15 años, (todo un hombrecito) me ayudaba a salir de mi depresión luego de unos cuantos días. En verdad que no sabría que hubiese hecho sin él.


-Lo extraño mucho, ¿sabes?-


Miré a HyukJae quien iba caminando a la par mía mirando hacia adelante, ahora levemente serio y cuando me oyó decir aquello me miró. –Lo imagino, no ha de ser para menos, pero la verdad es que no dejas de sorprenderme, jamás creí que te lo tomarías tan bien, durante estos 3 años has estado aguantando mucho, y has podido lidiar con ello mucho mejor de lo que pensé, me sorprendes, aunque tú nunca dejas de sorprenderme.- Yo simplemente sonreí levemente una vez más mientras miraba el suelo, sonrojándome levemente ante el cumplido de HyukJae hyung y asentí.


-No ha sido fácil para nada, por más que parezca así, TaeJun, mi hermanito, en verdad que me salvado incontables veces. Aunque ahora ya lo sienta un poco más natural, jamás dejaré de extrañarlo, él está guapísimo, no te imaginas, se me ha caído la saliva cuando lo vi en aquel juego.-


-Jaja, Tae, tú nunca cambias, eso es genial, y si, ya lo creo, el deporte hace magia a veces, pero tú tampoco te quedas atrás, tu cuerpo se ha transformado también y te ves mucho más sexy y estilizado, cuando te vea se va a caer de espaldas, pensando que se sacó la lotería contigo.-


-¡Yah~ hyung!-


Comenté altamente sonrojado, mientras le pegaba suavemente y él sólo sonreía ampliamente divertido, sabiendo a la perfección a lo que hacía referencia, pero a pesar de que me sonrojé, en el fondo estaba sonriendo y feliz de que me diera más seguridad en mí mismo.


-Cambiando de tema.- Carraspeé mi garganta. –KiBum me ha citado en su casa porque tiene algo muy importante que decirme, y pues yo la verdad tengo algo de miedo, pues él es tan impredecible como su cabello que cambia de color cada vez que lo veo. ¿Tú tienes alguna idea de algo?- Cuestioné sabiendo que aquella pregunta era estúpida, pues quien era más cercano que nada a KiBum era yo.


-Hmm, pues la verdad que no sé qué podría ser, tal vez quiera darte una buena noticia, no tiene porqué ser malo, hay que tener fe en que será algo bueno.-


-Pues sí, creo que tienes razón y ha sido estúpido preguntar… ¿Cómo está DongHae ssi?-


Cuestioné una vez más, de la nada, cambiando de tema tan repentinamente, a lo que me gané nuevamente una mirada de él pero ahora con una amplia sonrisa.


-Bien, mejor que nunca, aún sigue enseñando en nuestro ex –instituto como profesor de baile, pero ahora aparte de eso está estudiando arduamente gastronomía, pues descubrió que quiere ser chef y tener su propio pequeño restaurante, lo cual yo veo más que maravilloso, además…- Él hizo una pausa, y sonrió más para sí mismo que para mí, en lo que se sonrojaba levemente, a lo que yo realmente me sorprendí, pero no dije nada, simplemente esperé a que él me terminara de contar. –Además, no está 100% confirmado, pero… estamos hablando para… adoptar un niño.- Cuando oí aquella noticia, me detuve de repente, estaba realmente impactado con esa noticia.


-Wow… ¿de verdad?- HyukJae simplemente asintió nuevamente con esa sonrisa tímida en su rostro. –Pues la verdad me tomas por sorpresa, sé que no soy nadie para decirte que hacer, pero… ¿no crees que eres demasiado joven aún para ser “padre?”. Digo, apenas tienes 20 años-


-21, los cumplí hace unos cuantos meses ¿lo recuerdas?, y sí, sé que probablemente soy muy joven, pero de cierta manera, junto a DongHae ssi, siento que estoy listo para ser padre, además, él ya tiene 29 años, y quiere poder cumplir su sueño de formar una familia, y pues bueno… como le amo tanto, quiero cumplírselo. Sé que no será fácil, pero confío en que nos acostumbremos y aprendamos como cualquier pareja de padres primerizos “heterosexuales”.-


-Vaya~ es un bonito gesto de tu parte hyung, pero aún no te imagino como padre.-


Sonreí ahora divertido a lo que él me imitó.


-Lo sé, yo tampoco, y para serte sincero tengo un poco de miedo y estoy algo nervioso, pero como te he dicho, aún no nos hemos puesto de acuerdo al 100%, ya que un niño es una responsabilidad muy alta.-


-Sí, y vaya que lo es. De todas maneras sea cual sea la decisión que tomen, me pondré feliz por ustedes, ya que han llegado a un punto en su relación bastante alto para ya considerar agregar a un niño o niña a sus vidas. Además, ¿Te imaginas? ¡Yo seré su tío consentidor!-


Hablé ahora un poco más animado y casi riendo, mientras colocaba una mano en su hombro y le sonreía ampliamente, él me miró a los ojos y sonriendo también de la misma manera asintió.


-Sí, gracias, lo sé, y aún no puedo creerlo, pero todo es gracias a ti, ¿pues ya te lo había contado, no? Ese día que dejaste tu tan preciado “sólo” para irte con MinHo, no importándote nada, me hiciste armar de valor, para yo también considerar tomar el toro por las astas y decirle finalmente mis sentimientos, los cuales increíblemente fueron correspondidos, aún pienso en ello y sigo sin entender que es lo que vio en mí para aceptarme a su lado, siendo que podría tener a cualquier hombre a sus pies.-


-Vio lo que realmente eras hyung, y en verdad me alegro de que todo haya resultado favorable para ustedes.-


-Sí, pero aun así, sigo sin poder creerlo, pero estoy por supuesto jodidamente feliz. Bien creo que aquí nos separamos, hemos llegado.-


Habló ya deteniéndose en la puerta de KiBum, yo sonreí y asentí.


-Sí, gracias hyung por acompañarme, realmente esta charla me ha ayudado mucho y la disfruté también, deberíamos de juntarnos más seguido.-


-No hay de qué. Cuando quieras pequeño.- Respondió con esa gran sonrisa en él, y despeinó un poco mis cabellos ahora negros. –Ese color y corte te quedan muy bien. Nos vemos. Te cuidas, y más te vale que te quedes a dormir aquí, no quiero que te suceda nada.- Me advirtió a lo último a lo que asentí determinadamente y pues sonreí una vez más por aquel cumplido acerca de mí cabello. Luego de aquello, él correspondió ante mi reverencia y se retiró, no sin antes revolverme el cabello una última vez.


Una vez que finalmente desapareció de mi vista, borré mi sonrisa paulatinamente me concentré y me puse serio, pues la verdad es que eso tan importante que me tenía que decir me tenía realmente mal y nervioso. Así que suspiré, me concentré y toque timbre, luego de unos cuantos segundos, él me atendió, también tenía un cabello negro azabache, pero con mechones ahora rojos o mejor dicho bordó.


Me sonrió al verme y sin decir nada, se hizo a un lado y me dejó pasar. Yo asentí y acepté su invitación susurrando el permiso para pasar.


-No quiero vueltas hyung, quiero que me digas que es lo que tanto tienes que decirme que es de suma importancia.-


Él sonrió de lado, colocó una taza de té en frente de mí, la cual al parecer ya había preparado con anticipación y le agradecí, para que luego pudiera sentarse él y sonreír una vez más. Se movió un poco y de su bolsillo trasero sacó un papel, yo lo miré extrañado y él asintió y me lo acercó.


-De esto quería hablarte, no sé cómo lo irás a tomar… velo por ti mismo.-


Yo aún más confundido que antes, aparté la taza de té, luego de tomar un sorbo y cogí el papel, el cual estaba levemente doblado, cuando lo miré y lo leí mejor, sentí como un balde de agua fría me caía encima, de la impresión y sorpresa que eso me provocó. Era un boleto de avión, rumbo a los Estados Unidos, el cual salía el siguiente Lunes, a las 15.00 hs.


-¿T-te vas?-


Dije casi sin poder hablar, él sólo asintió con una enorme sonrisa, pero yo estaba prácticamente pálido.


-Sí, iré a verlo, ya no lo soporto más, he estado durante muchos años sin él, y la tentación ha estado rondando alrededor de mí desde que se fue, necesito verlo, para reavivar todo ese amor que siento por él y recordar porqué le amo tanto, y decidí serle tan fiel. No ha sido fácil, pero hasta el momento, lo he logrado, pero ahora mis defensas ya están casi deshechas, a-ayer casi ha-hago una locura. Por lo que decidí hoy en la mañana ir directo al aeropuerto y sacar un pasaje.-


Yo abrí mis ojos a más no poder, al oír esa simple frase <<“Ayer casi hago una locura”>> y tragué saliva involuntariamente, pues sabía a la perfección a lo que hacía referencia con ello, y pues su rostro realmente aterrado y apenado al mismo tiempo me lo confirmaba.


-Po-por favor, di-dime que no lo hicieron…-


-N-no, ¡por-por supuesto que no! Pe-pero yo había ido a beber con unos amigos, y-y pues ca-casi me be-beso con uno de ellos, y-y aún no sé có-cómo es que reaccioné a tiempo, que me alejé de él como si quemase.-


-¡Oh Dios mío KiBum!-


-¡Sí! ¡Lo sé, si llegaba a hacerlo, ni siquiera yo sería capaz de perdonármelo! ¡Pe-pero no sucedió nada! ¡Lo juro! ¡No pasó nada! Por eso es que hoy fu-fui en busca de este boleto, golpeándome a mí mismo, por no haberlo hecho antes…-


Asentí ahora un poco más calmado, ante su explicación, pero de todas maneras el corazón acelerado no se detenía.


-Ya veo, quizás no lo hiciste antes porque ¿no tenías el dinero?-


-Puede ser, en parte, y en parte porque tenía miedo de ir, y aún lo tengo, pero si no lo veo, hablo con él, escucho su voz y siento sus brazos o su sonrisa, no seré capaz de mantenerme mucho tiempo más, “en celibato” por así decirlo.-


Yo me sonrojé completamente hasta las orejas al oír aquellas últimas palabras, porque pues, las comprendía a la perfección, y pues yo estaba pasando por una situación similar, aunque me cueste y me apene admitirlo. 3 años es mucho tiempo créanme, pero si pude vivir 15 sin “conocer el placer”, puedo vivir otros años más, aunque cueste más.


-Pero de todas formas eso no es todo, te cité aquí también, pues para saber, si, si quieres acompañarme.-


Me miró curioso y expectante, yo abrí mis ojos una vez más, y el té que estaba consumiendo casi lo escupo todo, por lo que me atoré y comencé a toser, mientras el intentaba calmarme haciéndome masajes en la espalda.


Aparte de que casi muero ahogado por el té, también sentí otro balde de agua fría caer sobre mí. En verdad que me tomó como sorpresa. ¿¡Yo, acompañarlo!? ¿¡Ver a MinHo devuelta!? ¿¡Después de tanto tiempo!? ¿¡Abrazarlo!? ¡Por supuesto que eso es lo que quería!


Pero… si me iba, y lo veía, después ya no querría dejarlo nunca más, y el corazón se me destrozaría una vez más… Me sentía entre la espada y la pared. ¿Qué pensaría MinHo si se entera que KiBum me propuso ir a verlo y yo rechacé la oportunidad? ¿Qué pensará, si acepto y le caigo de sorpresa, pero luego me voy? De ambas maneras le haría daño, ¿no es así?


Bajé mi mirada, y limpié finalmente mis labios con la servilleta, KiBum tomó mi mentón suavemente y lo elevó, mirándome preocupado.


-¿Qué sucede? ¿No quieres ir a verlo también?-


Yo desvié mi mirada con los ojos ahora algo cristalinos. Pero él me hizo mirarlo una vez más.


-Sí, por supuesto que quiero ir a verlo, abrazarlo y besarlo, pero… aparte de que no tengo el dinero suficiente, a diferencia de ti, yo estoy seguro que después que lo vea ya no podré dejar su lado otra vez, y él aún no ha terminado su periodo en América. Además, tengo que seguir estudiando, aunque no sea la gran cosa, quiero convertirme realmente en alguien, para ser digno de él cuando vuelva. Quiero ir, por supuesto, pero… no puedo, no podría dejarlo otra vez, como ya dije, pre-prefiero seguir esperándolo el tiempo necesario para así saber que cuando él regrese, lo hará para quedarse para siempre… es difícil, tal vez no lo comprendas, porque piensas totalmente opuesto a mí. Pe-pero a pesar de que realmente me muero por tenerlo a mi lado, rechazaré tu oferta, lo siento, si ves a MinHo, dile que lo siento muchísimo, pero que lo amo tanto que no podría dejarlo más, sí lo viera ahora.-


Tragué saliva, pues el nudo que tenía en la garganta dolía horriblemente, sin contar que mis lágrimas ya silenciosas, recorrían mi rostro.


-Hey~ cariño, tranquilo~, el dinero no es problema, yo te lo pago, pues te estoy invitando pero si no quieres, no te voy a juzgar por tu decisión, yo sólo preguntaba, nada más, ¿Por quién me tomas? ¿Somos mejores amigos, no es así?- Yo simplemente asentí e intenté secar mis lágrimas mientras que él todavía me sostenía del rostro. –No te voy a negar que pensé que dirías sí, sin siquiera pensarlo, pero respeto tu decisión, y creo comprenderla, sé que quizás también me suceda a mí, pero realmente necesito “re nutrirme” una vez más de mi “Puppy”. Las cartas, los mensajes, las llamadas telefónicas, ya no me son suficientes… Está bien, no te juzgaré por tu decisión, ya no llores, ¿sí?-


Asentí una vez más en silencio y sonreí levemente como un niño pequeño, él sonrió también y terminando de limpiar mis lágrimas, besó mi frente y me abrazó.


-Todo estará bien, ya han pasado 3 años, y ya falta menos, independientemente del tiempo en que ellos decidan volver, ya falta menos.-


-Sí, lo sé, ha sido realmente difícil soportarlo, pero aquí estamos, sobreviviendo, y lidiando con el asunto. Todo gracias a ti, a JunGyu, TaeJun y a HyukJae.-


Él simplemente me sonrió una vez más, asintiendo y aceptando mis palabras, para luego acariciar mis cabellos azabaches. Yo cerré mis ojos, y me dejé embeber, por la maravillosa sensación que me causaban sus manos en mi cabeza.


-¿Así que te estarás yendo este Lunes?-


Cuestioné con una sonrisa leve, para cambiar el ambiente un poco, separándome de su pecho y abriendo mis ojos para mirarlo, él sonrió también una vez más y asintió, mientras me dejaba ir y se bebía su té.


-Sí, así es. Estoy realmente ansioso y nervioso, pero bueno, no había para antes, además, el Lunes es perfecto porque me da tiempo para aprontar mis cosas, y buscar a alguien para que cuide de Bonnie, mi gata.-


Yo sonreí y cuando mencionó el nombre de su gata, ella apareció de la nada, ronroneándome mientras se restregaba en mi pecho sutilmente, yo sonreí ampliamente y la acaricié con dulzura.


-¿Creo que ya escogió a su cuidador, no crees?-


Él me miró entre curioso y sorprendido y me contestó.


-¿Qui-quieres cuidarla? ¿No te importa?-


-¿Por qué habría de importarme, es un bellísimo mamífero felino y pues me cae muy bien, ¿además, que mejor manera de demostrarle mi agrado que cuidándolo? –


Su sonrisa más amplia no podía ser y dejando su taza ya prácticamente vacía de té, asintió y habló.


-Pues para serte sincero, no habría nadie tan confiable como tú para que cuide a mi pequeña niña. No quería presionarte, pero la verdad es que yo también me sentiría mucho más tranquilo si la dejo en tus manos, sabes que Bonnie, es como mi pequeña niña y la amo con la vida, esos ojos verdes me conquistan.-


La gata como si supiera que se estaba hablando de ella, ronroneó y maulló mientras se restregaba ahora en KiBum, y él la sujetaba y la abrazaba mientras la besó.


-Sí, te entiendo a la perfección, así que no tienes de qué preocuparte, la dejas en buenas manos.-


Sonreí una vez más, y pues continuamos, hablando ahora sí, de cosas tribales, y cuando quisimos acordar, la hora se había ido como arena entre los dedos y pues ya estaba KiBum aprontando el sofá para que pudiera dormir, me ofreció dormir en su cama con él, pero me negué, no porque me diera vergüenza o algo, sino simplemente para respetar su espacio.


Así que al haberme quedado allí, cumpliría con mi palabra de no andar solo de noche, que le había hecho a un HyukJae últimamente muy sobreprotector, pero esa faceta en él me hacía feliz, y no me hacía sentir tan solo y lejos de MinHo. Si bien MinHo era irremplazable, HyukJae al parecer había decidido tomar su lugar pero respetando mi espacio y la distancia, por lo que en verdad le agradecía mucho.


Bonnie, la gata “Ruso Azul” de Key, vino a hacerme compañía y mientras me ronroneaba me hizo dormir de una manera un poco más relajada.


~ Lunes – 14.45 – En el aeropuerto~


Allí estábamos todos, JunGyu, HyukJae y yo, acompañando a KiBum quien estaba más nervioso que novia en día de su boda, pues no era para menos, era un viaje bastante largo, o más bien, excesivamente largo, pues 16 horas no era poco, pero aun así como estaba nervioso, también lo estaba de ansioso.


Quería ver a su “cachorro” cuanto antes, pues aquel fin de semana había sido una tortura y un maremágnum de emociones y es allí donde recordó aquella inestabilidad emocional que sufrió su “Puppy” en aquel entonces, lo cual a pesar de decir lo contrario, realmente no lo había entendido del todo, pero ahora, luego de tres años, finalmente lo comprendía, por estarlo viviendo en carne propia.


No era fácil irte a otro país prácticamente solo, a un lugar al cual no tenías ni siquiera de idea cómo manejarte. Pero si bien aquello era terrible, KiBum se sentía un poco seguro en ese aspecto, sabía Inglés y pues había vivido allí de muy pequeño, pero tampoco es que había tenido su infancia completa allí, por lo que sólo recordaba muy poco y de seguro el lugar ahora estuviese sumamente cambiado, pero aun así, sentía un poco de ilusión de volver a ver aquel lugar en el que nació…


Sus papeles estaban en orden, pues ya había comenzado a hacer los trámites con previsión, sabiendo que en cualquier momento le daría aquel “ataque de locura” que le dio la semana pasada.


<< “Atención por favor, pasajeros del vuelo 502 de las 15.00 hs, con destino a Nueva York, por favor dirigirse a la plataforma 7, de forma civilizada y ordenada. Desde ya muchas gracias”>>


KiBum nos miró y suspiró.


-¿Es tu vuelo, cierto?-


Él simplemente asintió y todos allí sonreímos y nos comenzamos a acercar para despedirnos uno por uno.


-Cuídate mucho, ¿sí? Y por favor si vez a MinHo salúdalo de mi parte y explícale el porqué de mi ausencia allí en esos momentos, espero que pueda comprender.-


-Sí, cariño descuida, y si no lo hace, lo haré comprender a la fuerza, créeme. Cuídate mucho tú también y cuida de Bonnie, te estaré eternamente agradecido. Toma aquí tienes la copia de la llave de casa.-


Me dijo mientras me abrazaba efusivamente y evitaba liberar lágrimas, para luego separarse lentamente y entregarme la llave, a la cual vi asombrado, pero sonreí luego de unos segundos, para tomarla y asentir.


-Sí, descuida, estará en buenas manos, puedes ir tranquilo. Te extrañaremos.-


-Yo también bebé, pero son sólo unos días o una semana como mucho, sabes que no puedo descuidar tanto mis estudios, aunque si bien no sean tan exigentes tal vez como los tuyos, también hay que otorgarles mucha dedicación.-


-Sí, lo entiendo, y no te preocupes, asegúrate de disfrutar al máximo aquella visita. Nos mantendremos en contacto.-


Asintió y finalmente nos separamos, luego de un último abrazo, a lo que luego se acercó JunGyu y supongo que también le dijo medianamente lo mismo, por lo que KiBum volvió a asentir una vez más y lo abrazó también. Para luego separarse una vez más.


KiBum cruzó mirada con HyukJae, y este simplemente sonrió levemente, descruzó sus brazos y se acercó a él. Un leve intercambio de palabras, que hizo sorprender a KiBum lo cual me hizo sentir curiosidad, pero pues no podía acercarme y continuar escuchando. KiBum asintió con más determinación que antes e hizo una leve reverencia en saludo al mayor.


14:55, y KiBum luego de otorgarnos una última mirada, y reverencia, se dirigió a las compuertas que lo llevarían de regreso con “su felicidad”. Tal y como aquella vez, me quedé allí hasta que el avión despegó, intentando también retener mis lágrimas al traerme recuerdos demasiados nostálgicos.


Pues desde ese día en que MinHo se fue, jamás volví a pisar un aeropuerto hasta el día de hoy. Pero a diferencia de aquella vez, yo hoy estaba un poco más tranquilo, era más maduro y tenía el apoyo de HyukJae ahora, que se había transformado en una especie de hermano mayor sobreprotector paulatinamente, y como ya dije, aquello no me molestaba para nada, es más, me agradaba.


Una vez el avión finalmente desapareció de mi vista, sentí una mano en mi hombro y pues sonreí al notar que era HyukJae y JunGyu detrás de él sonriéndome con dulzura.


-No te preocupes, todo saldrá bien y ya pronto ellos volverán. Ahora será mejor que vayamos a tomar un helado, ¿quieres?-


-¿Con este frío?-


Dije sonriendo agradecido de que quisiera hacerme olvidar.


-No hay nada mejor como beber helado en otoño/invierno, créeme.-


Habló JunGyu como nunca, con una amplia sonrisa, ambos le miramos con una sonrisa y algo de sorpresa y pues HyukJae noté que le miró de una manera diferente, como si le estuviese agradeciendo por algo, pero no sé por qué, sólo sé que JunGyu hizo una pequeña reverencia también devolviéndole ese “invisible” gracias y se adelantó a nosotros.


-Conozco un lugar muy lindo, dónde hacen unos helados artesanales deliciosos, solíamos ir allí muchas veces con SongKi.-


Habló como si “él” estuviese allí, sin una pisca de nostalgia, solo simple alegría, lo cual era realmente de admirar, pues mientras Key y yo nos la pasábamos llorando, él siempre se mostraba sereno y agradable, como si pareciera que la partida de SongKi, no le afectara tanto. Lo cual realmente a ambos nos tenía curiosos, pues no sabíamos si era porque realmente no lo amaba tanto como pensábamos, o era una persona sumamente madura y fuerte a pesar de que su cascarón parezca delicado y quebrantable en cualquier momento.


-De acuerdo, confío en tu criterio, sino de lo contrario, te obligaré a que nos hagas un pastel de manzanas.-


-De acuerdo, ya verán que no se arrepentirán, además, es bastante económico para la buena calidad y sabor que esos helados poseen.-


Habló primero HyukJae en tono amenazador pero en broma y JunGyu contestó de esa manera tan dulce y amable de siempre, aunque de todas maneras, creo que era la primera vez que le escuchaba hablar tanto, sin trabarse o sonrojarse. Era raro, pero pues, ya no éramos los niños de 16 y 17 años, pero de todas formas, aún seguía sorprendiéndome de tener como amigos a ellos 2, pues jamás lo imaginé.


-De acuerdo, dejen de pelear, y vayamos allí, a esa heladería que tanto te gusta JunGyu, tu guíanos, te seguimos.-


Hablé de manera amable y sonriendo por mis propios pensamientos y él asintiendo, lideró el paso por primera vez, mientras que atrás íbamos HyukJae y yo, hablando de cosas triviales en las que JunGyu participaba de vez en cuando.


Y en eso que íbamos llegando, siento sonar mi celular, por lo que lo saqué de mi bolsillo, vi el fondo de pantalla el cual consistía en aquella foto que MinHo me obligó a sacar aquella vez. Su mirada provocadora a la cámara y sus labios en mi cuello, mientras que yo tenía debo admitirlo un rostro avergonzado pero gozante. Sonreí ampliamente al recordar aquel momento, y pues una pequeña lágrima se me escapó cuando veo en la pantalla que tenía un mensaje del mencionado.


<<“Te extraño mucho bebé, no veo las horas de poder volver a verte de nuevo. Te amo. ¿Cómo la estás llevando?”>>


Aquel mensaje me hizo sentir culpable, pues teniendo la posibilidad de haber ido a visitarlo y apaciguar un poco su dolor, rechacé la oferta, pero, pero era por el bien de ambos, ¿cierto? vernos ahora, sería hacernos daño mutuamente, reavivar las heridas que en mi aún están cicatrizando, y no estoy dispuesto a dejarlo ir nuevamente, y si lo hago, no será de otra manera que no sea conmigo a su lado.


<<“Yo también te extraño y amo mucho vida mía, y tampoco veo las horas de verte nuevamente, pero recuerda que es por tu bien, así que aquí te estaré esperando para recibirte en mis brazos. No ha sido fácil, lo sabes, pero aún sigo de pie por ti.”>>


Suspiré algo preocupado, pues ahora me preocupaba la reacción que tendrá cuando vea allí a KiBum y no a mí. Pero espero y pudiera comprenderlo, ya que si realmente sigue siendo quien era cuando se fue, confío en que lo hará.


<< “Por eso me encantas tanto, a pesar de que el viento sople fuerte, tú nunca te quiebras y sigues luchando contra la ventisca, te amo bebé. Me tengo que ir, pero sin dudas más tarde llamaré.”>>


<< “Claro, cuando quieras amor, y suerte, cuídate mucho, te amo”>>


Finalicé el mensaje con una leve sonrisita, pero aun así con algo de culpa.


-¡YAH TAEMIN! ¿Vas a ordenar o te vas a quedar allí mirando a tu móvil?-


Cuestionó HyukJae, mientras la chica que estaba atendiendo la heladería, me miraba con aquellos ojos que yo solía mirar a MinHo. Brillo de adoración y miedo, nervios en sus ojos acompañaba a sus mejillas coloradas. Me sentía extraño, porque pues obviamente yo no sentía nada por ella, pero podía sentir o identificar sus sentimientos mediante su mirada, cosa que creo es imposible, pero esa sensación es la que me transmitía, aun así me acerque unos cuantos pasos más hacia el mostrador y ella tragó saliva, ¿en verdad tan nerviosa la ponía? Traté de comportarme con naturalidad, pero me era imposible, me sentía incómodo, como si me estuviese atravesando con la mirada.


-Helado de fresa con banana por favor.-


Pedí tratando de comportarme lo más normal y amable posible. Ella asintió y se apresuró a buscar los sabores, mientras que hacía movimientos torpes, tanto JunGyu como HyukJae me miraron extrañados, a lo que yo simplemente fruncí mis hombros en gesto de tampoco saber que sucedía.


Luego de unos cuantos segundos que parecieron eternos tanto para mí como para la niña, me entregó mi helado, y le entregué el dinero asintiendo y agradeciendo por el servicio, yéndome de inmediato a sentarme en alguna mesa lejos del mostrador. Segundos después llegaron ambos chicos y se sentaron a mi lado, también con una expresión de confusión en sus rostros.


-¿Qué ha sido todo eso? ¿La vieron? Ella hasta comenzó a sudar cuando vio a TaeMin.-


Fue el primero en comentar HyukJae, a lo que yo simplemente ignoré sus palabras y continuaba comiendo mi helado.


-No es para menos hyung, TaeMin es una persona muy guapa, además su cabello negro hace contraste con su piel blanca, haciéndolo ver aún un poco más etéreo.-


Habló con su típico tono cálido y amable JunGyu. Yo elevé mi mirada al oírlo decir aquello último.


-Aish, sólo estás exagerando, tú también tienes lo tuyo, y aun así ella no perdió la cabeza.-


JunGyu simplemente sonrió sin decir nada, no sé si porque aquello último le había dolido levemente o simplemente le pareció divertido.


-Quizás no soy de su tipo. Lo cual me parece bien, ya que debido a que ella tampoco lo es, no podría corresponderle.-


Contraatacó aún tan amable y dulce como siempre a lo que HyukJae rio suavemente ante aquel comentario, yo simplemente hice una pequeña mueca de sonrisa y continué mirando mi helado y comiéndolo.


-Hey~, te ves algo decaído desde que dejamos el aeropuerto, ¿ya lo extrañas?-


Yo levanté la mirada una vez más, al oír ahora la voz seria pero aterciopelada y preocupada de HyukJae y volví a hacer una pequeña mueca de sonrisa, mientras miraba a ambos y le contestaba.


-Pues sí, en parte, pero no es eso exactamente lo que me tiene así, es sólo que justo después de salir del aeropuerto me llegó un mensaje de MinHo diciéndome que me extrañaba, y pues me comenzó a invadir la culpa, pues, tuve la oportunidad de acortar nuestra distancia, y aun así la rechacé. No sé si hice bien o mal, y no sé si él lo tomará a bien o mal. Tengo miedo que se enoje, se ofenda y me deje o algo por el estilo.-


La dulzura en la mirada de JunGyu cambió por una de total empatía y preocupación. Mientras que la HyukJae se veía ahora confusa y pensativa, nadie dijo nada por unos segundos por lo que me vi obligado a seguir hablando para no caer en el silencio incómodo.


-Le dije a KiBum que cuando lo viera le explicara mis motivos, pero aun así, nadie me asegura que él se quedará de brazos cruzados y no hará nada, dejándolo pasar.-


-Y aquí vamos devuelta.-


Sonrió de lado Hyuk lo cual me llamó la atención, pues no entendí su comentario, pero aun así, me sentí un poco mal. Pues de seguro ya le tendría cansado con tantos problemas.


-Lo siento, no quise aburrirte ni arruinar tu helado con mis problemas.-


Hyuk se puso serio.


-Hey, no, no. No lo mal intérpretes, para eso estoy, para eso vivo, para escucharte, aconsejarte y contenerte en lo que pueda, siento si mi comentario te hizo sentir de esa manera, es sólo que me trajo recuerdos de cuando íbamos a la preparatoria, ¿lo recuerdas? ¿Cuándo se habían peleado por primera vez por culpa de ese tal ChangMin y dudabas de ti y su amor?- Yo simplemente asentí algo avergonzado al ver de reojo a JunGyu quien estaba escuchando atento, enterándose de cosas que tal vez no sabía, pues en ese entonces, aún no éramos amigos. –Pues bueno, entonces supongo que recuerdas, qué al final ¿sólo fueron figuraciones tuyas? Ya que él nunca te dejó de amar, ni dejará de hacerlo.- Volví a asentir mientras comía otro bocado de mi helado ya levemente derretido. –Bueno, pues yo creo que esta vez resultará de la misma manera. MinHo ya no es el “adolescente” que era, ahora tiene 22 y creo que aquel país lo habrá hecho cambiar un poco y madurar aún más de lo que ya era, por eso creo que él lo comprenderá, y que hubiera hecho lo mismo en tu lugar.-


-Puede ser hyung, pero aun así, no estoy tan seguro, conociéndolo, estoy seguro que él hubiese ido de todas maneras a “visitarme”, pues él me dijo que se sacrificaría todas las veces que sea necesario para verme feliz, y sin dudarlo. Si la situación fuese a la inversa, él se hubiera subido a un avión mucho antes, por eso a veces me siento muy infantil y egoísta con respecto a él.-


-Bueno, bien, supongamos que tienes razón, ¿Entenderte, no se toma también como un sacrificio de su parte?- Lo miré realmente extrañado y sorprendido tanto que JunGyu me acompañó en el sentimiento. –Sí él de verdad está dispuesto a sacrificarse por ti un sinfín de veces, entenderá que verlo en estos momentos te hará daño, por lo que yo creo que si comprenderá. Así que por favor ya no te preocupes, no pienses en ello, y será mejor que comamos nuestros helados de una buena vez porque se están derritiendo, y la verdad es que están deliciosos como para desperdiciarlos, buena elección JunGyu.-


Sonrió, cambiando de tema radicalmente, a lo que también sonreí, y aún me continuaba preguntando <<“¿Desde cuando eres tan indispensable y sobreprotector conmigo?”>>


-Sí, gracias, en verdad ha sido un buen consejo. JunGyu, vendremos por aquí más seguido.-


Él sonrió encantado y asintió, para luego, comenzar a hablar de cosas triviales una vez más, luego de ellos, cuando salimos me dirigí a la casa de KiBum, pues, él me había dejado una copia de las llaves de su casa, y pues, por esa semana estaría viviendo allí, en el lugar de Key, para hacerle compañía a Bonnie, pues de lo contrario se sentiría muy sola, mi familia ya estaba avisada por lo que le dije a TaeJun que podía ir a visitarme cuando quisiera, él encantado aceptó y me prometió venir un día de estos. HyukJae me acompañó hasta la casa y luego de que me vio entrar seguro, sano y salvo, se retiró hacia su propia casa la cual ya estaba compartiendo con DongHae, si, la verdad algo veloz a mi parecer, pero si ellos se amaban de tal manera, no tenía nada de malo. Ambos ya eran adultos responsables.


Así que ya dentro de la casa de KiBum, comencé a acomodar un poco las cosas, mientras le daba de comer a Bonnie, pues me sentía extraño y como un invasor, en propiedad ajena, pero creo era lo mejor para Bonnie.


<><><><><><><><><><><><><><><> 


~ 1 Semana después~


La verdad, es que el tiempo pasó rapidísimo, incluso ya había comenzado a tomarle el gustito a eso de “vivir solo”, pues la verdad no era tan malo, y sin querer, comencé a pensar, que también querría iniciar mi vida, de nuevo, junto a MinHo y por qué no, TaeJun también. Pues esa era la idea desde un principio, ahora que lo recuerdo, pero no me había puesto a pensar en ello, hasta que me encontré, aquí, “testeando” la vida de “independiente”.


Ahora más que nunca, tenía ganas de conseguir, un trabajo como la gente, en el que el sueldo fuera medianamente estable, y pudiera permitirnos, vivir una vida, “estándar” dentro de esta sociedad. Ahora más que nunca, quería terminar mis estudios y sentar cabeza, y estabilizar mi vida junto a MinHo. Y sí, sé que tal vez pensarán que soy demasiado joven para pensar en ello, teniendo 19/20 años, pero aun así quería hacerlo. Comprendiendo ahora  finalmente a HyukJae con respecto a su decisión de adoptar a un niño.


El timbre sonó, Bonnie, quien estaba en mi regazo, maulló y saltó de allí para ir hacia la puerta, por lo que sonreí y a la vez me puse nervioso, pues sabía quién era y aquella duda “Existencial” me asaltó una vez más, ¿Qué habrá dicho MinHo?


Me dirigí a la puerta, la abrí y allí estaba, sí, definitivamente, Key había vuelto.

Notas finales:

¡OMG! ¡Ya han pasado 3 años! ¡Pero aún ni MinHo ni Jong dan señales de estar por volver nuevamente a Corea! /)O0O(


Pero en fin, antes que nada, me recontra re mil disculpo (otra vez) por no haber subido capitulo hace dos meses más o menos, es que realmente, por una cosa u otra no he podido escribir, si bien escribía aunque sea 3 palabras para avanzar algo, no era suficiente, pero bueno, aquí el capítulo 25, que al final salieron 30 xD les juro que no estba en mí, controlar los capítulos, estaba fuera de mi control, en serio, jajaj, pero finalmente le pude dar un final agradable, creo xD


Por cierto, sé que faltan muchas cosas por resolver, por eso, decidí hacer ya que me lo han pedido, la historia de “JunGyu y SongKi” en una especie de oneshot/Extra en este mismo fic, como así también quizás, decida hacer otro con el viaje de Key, pero bueno como es más 2Min que nada este fic, aún no lo sé, pero bueno, en fin, la verdad es que no tengo mucho que decir. (Al final sí, hice 3 Extras, el fic en sí termina en el capítulo 27)


Simplemente me quiero disculpar en verdad con ustedes, por fallarles u.u, por eso es que no me gusta empezar a publicar una historia aún sin terminar, pues no quiero hacerlos esperar, pero la verdad es que tampoco me imaginé llegar hasta este punto xD, así que bueno. Por el momento me despido. Pido disculpas por las faltas de ortografía si las hay, y pues aprovecho también para agradecerles a esas personitas que siempre comentan n.n, las aprecio mucho en verdad, y a esas que también leen desde las sombras n.n. Saludos :3 n.n


Aquí les dejo mi página de Facebook, para avisarles por cualquier problema que surja en medio de algún fic o algo por el estilo, como las que me siguen habrán podido notar, ya que avisé, sobre mi falta de tiempo para terminar este capítulo. Pero bueno, como sea, mejor me dejo de tanto palabrerío y les dejo mi Página: “♥ ZaffireHeart ♥”.


PD: Aquí les dejo una imagen de la gatita de KiBum por si quieren xD “Bonnie


PD2: Nos vemos mañana en el siguiente capítulo ^u^//


Bye bye~ ^u^//


ZaffireHeart 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).