POV Lay.
-¿Cómo convenciste a mi padre? ¿Cómo es la casa en la que viviremos? ¿Tiene jardín? ¿Cómo es la cocina? ¿La presión del agua es correcta? ¿Tiene muchas ventanas? ¿Suho me estas escuchando?
-Te escucho cariño-La verdad es que no pude dormir nada ayer así que me puse a empacar. Cuando llego Suho yo iba recién terminando de empacar, he tomado unas cuantas tazas de café y vaya que el sabor no me agrada mucho.-Me parece que no has dormido nada, hubieras esperado a que yo llegara para ayudarte con tus cosas. Esta es nuestra casa-Suho apaga el auto y yo giro rápidamente mi cabeza.
-¡Me encanta!-La casa es hermosa por fuera y espero que lo sea aún más por dentro. Me arrojo a los brazos de Suho para poder besarlo. No sé cómo es que hemos terminado viviendo juntos pero me encanta.
-Vamos a desempacar-Acaricia mi cabello por cortos segundos. Nos bajamos a sacar del auto mis cajas y maletas. Al entrar doy saltos de la emoción, todo está amueblado y listo para ser usado. Vamos a una habitación enorme, con grandes ventanas y una enorme cama.-Mi ropa ya está guardada. Colguemos tu ropa y busquemos donde poner tus demás cosas-La sonrisa de Suho siempre es linda y dulce, es algo que me hace sentirme más enamorado de él.
Es una suerte que no sea un maniaco de la ropa como Baek o Xiumin, termino de acomodar mi último pantalón. Acerco otra caja y la abro, saco todo los libros dentro de ella y le pido a Suho que los acomode mientras yo abro otra caja.
-¿El ultimo unicornio? ¿Esto es en serio, lay? Y no es un libro, son dos con el mismo título.
-Son autores diferentes y las historias son diferentes también. Deberías leer uno de ellos, son muy entretenidos Suho.-Escucho a Suho reír. ¿Qué hay de malo con los unicornios? Son criaturas bellas con hermosos sentimientos y a mí me encantan ¿Suena a un locura? Pues no importa porque yo pienso así.-Ahora solo falta esto-Dejo sobre la cama muchos peluches de unicornio y los demás los dejo sobre la cómoda o sobre el sofá de la habitación.
-Los unicornios se han apoderado por completo de nuestra habitación-Suho me abraza y susurra en mi oído.-Vamos a almorzar, no hemos comido nada.
-Cocinare algo para los dos-Su calor me hace flotar.
-Cocinemos juntos-Doy un pequeño salto y me enrosco a su cintura para besarlo.
Baja las escaleras cargándome, yo dejo mi cabeza descansar en su hombro mientras acaricio su cabello. Delicadamente, muy delicadamente tomando en cuenta que sigo siendo un hombre Suho me deja sobre la encimera. Lo veo sacar carne, arroz, vegetales y todo lo necesario para cocinar. Mientras uno corta y otro lava terminamos de cocinar rápido, servimos juntos. Nuestra primer comida juntos sabe muy bien, todo es más especial porque estamos en un lugar que ahora es nuestro espacio, un lugar donde podremos hacer lo que queramos.
-Casi lo olvido-Suho recoge los platos en los que comimos-Compre un pastel-Se lleva los platos y luego regresa con un pequeño pastel justo para nosotros dos, lo deja sobre la mesa y vuelve a sentarse frente a mí-Celebremos que ahora vivimos juntos.
Después de apagar las velas juntos tomo con mi dedo un poco del pastel y lo pruebo-Sabe bien. Ahhh-Le doy con mi dedo a Suho y él lo lame todo.
No puedo evitarlo e inicio una guerra de turrón con Suho, no paro de reír, nuestros rostros están blancos, la mesa es un desastre pero me siento muy feliz.
-Ya usamos la cocina y el comedor, es hora de usar el baño y después la cama. Mañana podemos limpiar esto-Suho me carga sobre su hombro mientras yo sigo riendo como loco, Este hombre me fascina.
POV Tao.
Me levanto de mi cama lo más despacio que puedo, no quiero despertar a Kris. Entro a mi baño, me cepillo mis dientes y al terminar busco mis pastillas, estoy seguro de haberlas dejado en este estante pero no están, busco por todo el baño y nada. Estoy tan concentrado pensando en donde estarán mis pastillas que no siento los brazos que me rodean dese atrás hasta que escucho su voz.
-¿Qué buscas?-Incluso por las mañanas la voz de Kris es sexy.
-Mis pastillas…. ¿Dónde pueden estar?
-No necesitar tomarlas ahorita, regresemos a la cama.
-Claro que necesito tomarlas ahora mismo. Bueno tendré que tomar una de las nuevas-Me suelto del agarre de Kris y voy a la mesita junto a mi cama. Saco la pastilla y me la tomo, asunto resuelto pero aun así debo de buscar más tarde las otras pastillas.-¿Tienes hambre? Iré a hacer el desayuno.
Desde que supe los verdaderos sentimientos de Kris él no se aleja de mi ni un minuto, es normal que durmamos juntos y hagamos muchas cosas juntos, me gusta pero en este momento en el que estoy cocinando es incómodo tener a alguien abrazándome desde atrás, aparte que es peligroso.
-Saben….podrían ser normales y tener distancia entre ustedes-Sehun habla mientras junto a lulu se sientan en el sofá a ver algo en la t.v
-Podríamos, pero no queremos-Kris se apresura a contestar, siento su sonrisa en mi cuello, su respiración y yo sonrió, sonrió tal cual idiota enamorado. Es la verdad, estoy enamorado de Kris y si puedo estar a su lado por siempre seré el hombre más feliz, más feliz que cuando compro Gucci.
POV Xiumin.
Desde que puedo recordarlo, los sábados por la mañana son iguales. Despierto y sin bañarme bajo vestido en pijama a la sala donde encuentro a mi padre jugando video juegos y a mi omma cocinando un delicioso desayuno, usualmente mi padre me obliga a jugar con él y se ríe mucho en mi cara cuando pierdo. Los video juegos no son lo mío así que me alegra saber que este sábado quien está sufriendo la risa malvada de mi padre sea Jongdae y no yo.
-Te levantaste antes-Le digo a Jongdae, camino hasta la cocina para comer un poco de la fruta que seguramente ya corto mi omma.
-No fue así, tío Kyu fue a despertarme porque quería jugar-Jongdae no voltea a verme, appa tampoco.
-Vamos a desayunar. Ponle pausa a eso Kyuhyun.
-Espera sungmin, ahorita no podemos.
-¡Como que no! ¡Pausa, ahora!-Siempre me causa gracia la forma en la que omma quita de la consola a mi padre.
-Sungmin…. Estamos en medio de una pelea.
-1…2…3… hasta cinco voy a contar-Me comienzo a reír al ver cómo le pone pausa al juego, Jongdae también se ríe de una forma más discreta.
Tengo unos padres especiales, lo sé. Después del divertido desayuno, Jongdae y yo nos bañamos y cambiamos, separados claro. Hace uno minutos Jongdae de la nada me dijo ¨Empaca para un viaje de 5 días¨ mi respuesta fue ¨¿AH?¨ después de eso él se fue a su casa a traer su equipaje. Ahora estoy subiendo a su auto mientras él muy amablemente sube nuestras maletas, no sé dónde vamos ni cuál es el motivo para tener un viaje repentino.
-¿Por qué estamos en el aeropuerto? ¿Dónde vamos Jongdae?-Nos bajamos del auto y mis preguntas no obtienen respuestas hasta estoy en el avión y el capitán anuncia que iniciara el viaje a ¡Guangzhou!-¡CHINA! ¿Jongdae, vamos a China?
-Sí, vamos a China en este momento. Me siento muy feliz de que podamos viajar los dos solos.
Después de sonrojarme, no sirven el almuerzo. Ir de viaje junto a Jongdae es algo que nunca habíamos hecho. Este viaje es la oportunidad perfecta para poder pasar tiempo de calidad juntos y sin nadie a nuestro alrededor. Las cuatro horas de vuelo pasan corriendo al haber estado hablando todo el tiempo con mi especial y divertido novio.
-Ahora ¿Hacia dónde vamos?-Tomo mis maletas.
-Ahora buscaremos una de esas tiendas que venden souvenirs. Tenemos dos hora y un poco más antes de tomar nuestro próximo vuelo.-¡COMO!
-¿Otro vuelo? ¿Dónde diablos vamos Jongdae?
-Es una sorpresa ¿Sabes?-Se inclina a besarme rápidamente-Oh, es una tienda.-Jongdae me toma de la mano y entramos a la dichosa tienda.
Mi novio parece que no se ha dado cuenta que nosotros vivimos mucho tiempo en China por lo que uno de estos souvenirs no es algo extraño, pero está bien, atesorare todo lo que sea que compremos. Ahora sí que no sé qué planea Jongdae, hemos abordado el avión y el capitán ya hablo sobre cuál es nuestro destino.
-¡Wuhan! ¿Por qué estamos viajando dentro de China?
-Lo sabrás pronto Min-Jongdae sonríe al punto en que sus ojitos brillan de la emoción. Decido dar por muerta mi curiosidad, solo iré a donde mi novio me lleve sin preguntar mucho.
El vuelo de Guangzhou a Wuhan es rápido, así que aquí estamos una vez más tomando nuestras maletas.
-Busquemos algo para beber mientras tanto.-Ya no me extraña
-¿Mientras tanto? ¿Otro vuelo?
-Sí, otro vuelo-Me despeina el cabello.
Después de nuestra corta espera estamos una vez más acomodándonos en nuestros asientos. Me pregunto cuál destino es el que dirá el capitán esta vez, mi respuesta llega pronto y no sé qué pensar ¿Ese es nuestro destino final?
-Este es el último vuelo min, ese es nuestro destino-Jongdae sonríe divertido al ver mi rostro de asombro.-¡Sorpresa!-Me abraza y yo me aferro a su espalda lo más que puedo.
-¡Roma! ¡Me ha encantado tu sorpresa!-Conozco muchos lugares pero no Roma, estoy más que emocionado.
El vuelo es largo y de un momento a otro ambos nos vamos durmiendo, cuando despierte quiero estar en Roma.
-Xiumin….Minnie…-Abro lentamente mis ojos. Dormí muy cómodamente.-Es hora de bajar.
-¿Llegamos?-Las personas comienzan a levantarse de sus asientos-¡Llegamos! Apresúrate Jongdae. ¿Qué hora es?-Pregunto mientras miro por la ventana del taxi, se ve demasiado oscuro.
-Es la una de la madrugada acá.-Jongdae caricia mi cabello la mayor parte del camino.
Al llegar al hotel nos llevaron a nuestra habitación. La habitación tiene una sala de estar y todo está decorado el tonos beiges y celestes claros, me gusta y me siento muy cómodo. El viaje fue largo pero ya no tengo sueño así que acostados sobre la cama y abrazados hablamos por unas horas con jongdae sobre cualquier tema que se nos venga a la cabeza. Estos momentos en los que estamos en paz, hablando tranquilamente son los que más me gustan.
-Sé que no tienes sueño pero deberíamos dormir un poco para poder disfrutar de la tarde.-Jongdae me presiona más a su pecho, puedo escuchar el palpitar de su corazón, puedo oler su aroma. Escucho como comienza a tararear una melodía lenta y dulce que rápidamente invade mis sentidos, canta una que otra frase y mis ojos poco a poco se van cerrando, escuchar a Jongdae es una experiencia increíble y casi mágica.
El ruido de alguien tocando la puerta me despierta, a mi lado no está Jongdae. Camino perezosamente hasta abrir la puerta en donde me encuentro con muchas personas.
-Soy el gerente del hotel-Se presenta en un impecable italiano que por suerte puedo entender perfectamente.-Es hora que desayune y luego lo ayudemos a estar listo para su boda.
En cuestión de segundos tengo a muchas personas dentro de la habitación, alguien sirve el desayuno, alguien coloca maquillaje en el tocado, veo a otras personas sacando muchos trajes blancos. ¿Boda? ¿Cuál boda? ¿Dónde diablos esta Jongdae? Corro a tomar mi teléfono y le marco.
-Buenos días-Escucho su alegre voz.
-¿Cuál boda?
-Nuestra boda.
-En que momento me lo propusiste-Ahora dejo salir una leve risa. Jongdae es una persona única.
-¡Es cierto! ¿Quieres casarte conmigo?-Estaba muy asombrado de nuestro viaje a Roma pero esto es la cereza del pastel.
-Nos vemos cuando esté listo-Dejo un beso al aire que mi novio escucha, termino la llamada y de muy buen humor me voy a sentar para comer mi desayuno. No sé cómo trabaja la cabeza de Jongdae pero tal parece que hoy es nuestra boda, no sé cómo lo tomaran sus padres o mis padres, no sé dónde vamos a vivir cuando regresemos a corea, solo sé que nos casaremos y seremos muy felices.