Mistake
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"Comienza de nuevo" esas palabras que le repetían día a día sus amigos no le podrían sonar más lejanas, algunas veces era tentado a llevarlas a cabo, pero a quien quería engañar ¿no podía? Podía, el hecho es que no quería, no estaba dispuesto y aunque sabía que era un imbécil por aguantarlo, el miedo a la soledad o el miedo a encontrarse a alguien peor lo aterraban.
Tal vez sonase como un cobarde, por no enfrentar las cosas de frente como la mayoría de los hombres lo hacían pero MinHyuk no es como la mayoría.
Al ser hijo único de una familia "acomodada" y acomodada quiere decir que su casa tenía más habitaciones que un jodido hotel MinHyuk creció rodeado de sirvientes que hacían todo por él y esto que debió ser bueno, termino siendo el peor de los errores de sus padres, el varón en crecimiento se convirtió en un ser completamente dependiente, inútil, infantil y en algunos casos molesto, al menos era la opinión de su padre.
Por otro lado a la amorosa señora Lee le gustaba pensar en su hijo como un soñador, amable y un tanto despistado pero no le quedaba duda que cuando fuera todo un hombre sería diferente.
Cuando ingreso a la universidad las cosas empeoraron su afán por complacer a las personas por ser aceptado dio paso a que abusaran de su estatus económico, y Minhyuk y su estúpido miedo a que lo dejaran solo cumplía los caprichos de sus autonombrados amigos. Afortunadamente podía decir que tenía un amigo verdadero, aquel que creciera junto a él.
Woo Ji Ho, el hijo de una de sus nanas, compañero de aventuras y travesuras, el cual pese a ser menor que MinHyuk siempre terminaba defendiéndolo de los compañeros odiosos que veían al mayor como un blanco fácil. Afortunadamente los patrones al ver la estrecha relación que mantenían los infantes habían enviado a JiHo a las mejores escuelas al igual que su hijo. Gracias a su mejor amigo podía sobre llevar toda esa mierda llamada universidad.
Una de esas tardes tan típicas de estudios JiHo había llevado consigo a una sonriente chico, el cual capto la atención del apacible MinHyuk.
-Kim Yu Kwon- hizo una pequeña reverencia mientras sus mejillas se tornaban de un color rosáceo.
La dulce voz inundo todos los sentidos de MinHyuk y supo que desde entonces nada sería igual, y tenía razón ¿magia? ¿flechazo? Aún no está catalogado.
Rápidamente se volvieron cercanos y unos meses después de la transferencia del muchacho a la universidad MinHyuk le propuso comenzar una relación más allá de una simple amistad. Cuando la razón de sus suspiros acepto se sintió el hombre más feliz en toda la facultad.
Las citas en lugares caros y los regalos ostentosos que al principio ponían incomodo a Yu Kwon ya eran cosa regular en la relación, y es que MinHyuk quería solo lo mejor para su novio si de él dependiera el chico no trabajaría doble turno limpiando mesas en ese restaurant hasta altas horas de la noche, pero rechazada un millón de veces su propuesta de pagar la mitad de la colegiatura que no cubría la beca, no le quedaba de otra que darle cualquier cosa que pudiera imaginar.
Huérfano desde pequeño Yu Kwon se había visto obligado a vivir en hogares de acogida y en cuanto consiguió la mayoría de edad trabajo y estudio para poder salir adelante, era todo un hombre independiente en contraste con MinHyuk que no podía hacer nada sin alguien guiando su camino.
Tristemente MinHyuk regreso su mente al presente, era suficiente de recuerdos, aquellos días felices no volverían. Anudo su corbata frente al espejo viendo su reflejo, la imagen que le regresaba aquel era todo menos de felicidad como se suponía debía ser aquel día "el más feliz de su vida" una lagrima rodo de su ojo derecho e inmediatamente fue interceptada por su mano izquierda, demonios él no era una jodida chica, pero había soñado algo muy diferente para el día de su boda. Solía imaginarse a el parado junto al altar impaciente esperando a que Yu Kwon caminara hacia el mirándose a los ojos todo el tiempo y que el resto de las personas desaparecieran a su alrededor, solo ellos dos en una entrega de amor. Pero en cambio ¿que tenía? estaba a punto de casarse con un hombre que nunca conoció.
MinHyuk camino el extenso pasillo hasta llegar al altar donde esperaría al que se convertiría en su esposo, el lugar estaba lleno de familiares y conocidos, su vista se situó en el único lugar vacío, ese que le correspondería a su mejor amigo, un dolor punzante se instaló en su pecho ¿que error había cometido? ¿de verdad merecía aquello? Siguió el recorrido de su mirada hasta la última fila de asientos donde los hermanos Park aquellos que en poco tiempo se convirtieran en confidentes de su tragedia le veían con lastima. Kyung y Chanyeol decían que aún estaba a tiempo, entonces ¿por qué no salía corriendo del lugar? Era un cobarde.
Nuevamente se sumergió en sus pensamientos, los recuerdos se reprodujeron como una película barata de la que él era el principal espectador y dolían y quemaban como el infierno.
Varios enfrentamientos con sus padres había tomado que aceptaran a Yu Kwon como su futuro esposo ¿de donde había sacado la valentía? Sencillo, JiHo y YuKwon siempre guiándolo, aun así el señor Lee insistió en la firma de un contrato matrimonial para asegurar los intereses de su familia, a MinHyuk no le importaba en lo más mínimo con tal de casarse con el amor en su vida, pero Yu Kwon no tenía la misma opinión, no podía creer que sus futuros suegros lo tuvieran como un caza fortunas y fue ahí donde comenzaron los problemas.
Las peleas constantes por el desacuerdo con los padres de MinHyuk eran cada vez más fuertes y terminaban siempre con Yu Kwon desapareciendo por días, llamadas no respondidas, mensajes no contestados, excusado en su trabajo, aunque la universidad haya terminado hacía pocos meses la chica no podía abandonar de la noche a la mañana a su anciano empleador. Lo mejor de las peleas eran las reconciliaciones, una joya cara era puesta en las manos del chico cada que MinHyuk se arrepentía, por no poder ser lo suficientemente valiente para enfrentar a sus padres una vez más, para retirar el contrato.
Justo a una semana para la boda, después de estar buscando a Yu Kwon por dos días, MinHyuk decidió comprarle unas mancuernillas de diamantes para reconciliarse con él, lo busco en su departamento, lo espero por horas y nunca apareció, preocupado por la integridad física de su prometido hizo lo que jamás había hecho en 3 años de relación, decidió ir a su trabajo, grande fue su sorpresa cuando el anciano dueño relato que Yu Kwon solo trabajo un día con él. Confundido MinHyuk se dio a la tarea de seguir a Yu Kwon para saber la razón por la que su futuro esposo le había mentido, desde la comodidad de su auto vigilaba la entrada del edificio de departamentos, en algún momento en la madrugada Yu Kwon había llegado a su hogar, lo sabía por qué la luz de su habitación se mantenía con luz. Decidido a enfrentarlo para saber la verdad, bajó de su auto y atravesó el estacionamiento, se detuvo en seco cuando vio un auto conocido estacionado, su mente lo traicionaba, si eso era, aquella persona no podía estar ahí ¿cierto?
Lo mejor era esperar a la mañana siguiente, tras dar la media vuelta regreso a su auto y se dirigió a su hogar, casi no pudo dormir, su mente creando mil y un motivos por los que Yu Kwon había mentido. Después de varias horas MinHyuk por fin durmió, demasiado cansado de todos los hechos anteriores. Una llamada lo sacó de su tan reconfortarle sueño, sonrió inconscientemente al ver en la pantalla del aparato el nombre de su prometido.
- Amor, no podré verte hoy, el señor Jung me pidió ayuda, te amo- y tras decir esas cortas palabras corto la comunicación.
MinHyuk se apresuró a salir de su casa, con suerte todavía podría encontrar al chico en el departamento para hablar, manejo lo más rápido posible, giro para llegar al edificio de departamentos, vio al chico subirse a un taxi, decidió seguirlo. Sorpresa reflejaba en su rostro cuando el taxi donde viajaba Yu Kwon tomo rumbo al peor barrio de la ciudad, no entendía que era lo que su futuro esposo buscaba en aquel lugar.
El chico bajo del taxi bajo la atenta mirada de MinHyuk e ingreso a un local con luces de neón encendidas, su hasta ahora novio lo siguió de cerca sin que se diera cuenta, pero en un momento dado desapareció de su vista.
El sonido de la música inundaba todo el lugar, la iluminación del lugar daba mucho a que desear, el escenario estaba cubierto por varios tubos de metal distribuidos asimétricamente, las mesas frente al escenario estaban llenas de hombres de todas las edades, Minhyuk se quedó mudo, él aunque nunca hubiese estado en un lugar como aquel sabía lo que era, lo que aún no entendía es que hacia Yu Kwon ahí, su pregunta pronto fue respondida cuando una chico de voz ronca anuncio el próximo número, la estrella del lugar, “U-Kwon” el dios del lugar.
Un hombre con ropa demasiado provocativa subió al escenario, un antifaz cubriendo sus ojos y a pesar de la pésima iluminación MinHyuk logró reconocerlo.
-Veo que te gusta U-Kwon- hablo El chico que antes hubiese presentado al bailarín, tras él – es una lástima ahí viene su cliente favorito, no creo que pueda atenderte hoy- señalo hacia la entrada del local.
Su corazón comenzó a latir velozmente, estaba seguro que en cualquier momento se detendría. Justo en el umbral de la puerta, una figura conocida admiraba el baile sensual de su futuro esposo.
-JiHo- susurró tragándose las ganas de gritarle.
Era la primera vez que agradecía la pobre iluminación del lugar, JiHo pasó de largo sin ni siquiera mirarle, se dirigió al escenario donde el chico se quitaba la última prenda ante la mirada lujuriosa y los gritos lascivos de los espectadores. Ambos caminaron tomados de las manos escaleras arriba. MinHyuk los persiguió de cerca, sin dejar que aquel par se percatara de su presencia, cuando desaparecieron tras una puerta se tomó su tiempo para analizar su situación, su futuro esposo y su mejor amigo al que consideraba un hermano juntos en una habitación de un burdel de mala muerte, de verdad quería creer que todo aquello tenía una explicación lógica pero toda excusa tonta quedo opacada cuando decidió girar la perilla de la puerta e ingresar a la habitación en completo silencio.
JiHo y Yu Kwon completamente desnudos entregándose al engaño, MinHyuk juraría que pudo escuchar y sentir a su corazón partiéndose en millones de pedazos, su vista se nublo y unas nauseas terribles se establecieron en su estómago, cualquier hombre en su situación enfrentaría a aquel par de mentirosos, pero él no era un hombre, era solo un niño asustadizo y dependiente. En completo silencio como había entrado, salió corriendo del lugar y la “feliz pareja” no se percató de su presencia.
Fuera del lugar MinHyuk pudo respirar correctamente, ni siquiera era consiente en que momento dejo de respirar, el asfalto fue testigo de todo lo que había comido cuando devolvió el estómago, asqueado de lo que había visto.
-¿Estas bien?
El chico que minutos atrás se le acercara dentro del lugar, estaba parado a su costado, levanto una mano y limpio las lágrimas de MinHyuk, ¿en qué momento había comenzado a llorar? Kyung lo guio hasta una pequeña oficina y tras llamar a su hermano mayor Chanyeol, ambos escucharon todo lo que MinHyuk había pasado hasta ese momento. Los extraños rápidamente se ganaron su confianza, ¿Cómo es que podía confiar tan rápido en las personas? Tal vez ese era el error principal de MinHyuk pero no podía cambiar de la noche a la mañana.
-¡enfréntalos y termina con todo!- le repetía una y otra vez Kyung cada que lo visitaba.
El día de la boda por fin había llegado, MinHyuk estaba decidido a perdonar a Yu Kwon y JiHo si prometían el no volver a engañarlo, ingreso al lugar donde se suponía el novio debía arreglarse y nuevamente vio una escena que le revolvió el estómago. Yu Kwon con su traje de novio besando apasionadamente a JiHo seguramente si él no hubiese llegado, ese par terminarían por tener sexo en aquel lugar.
-¡MinHyuk!- grito Yu Kwon al percatarse del hombre en la puerta.
MinHyuk esperaba las miles de explicaciones y disculpas por parte de las personas que más quería, lo que no esperaba era la risa burlona de JiHo.
-¡Que lento eres! Tardaste tres años en descubrirnos
Todo aquello había sido obra de JiHo, planeado cuidadosamente para embaucarlo, Yu Kwon y él se habían conocido en una de sus tantas idas al lugar donde este bailaba, rápidamente se enredaron el uno con el otro, no se puede decir que era amor por que su relación se basaba únicamente en el sexo. Juntos le crearon una nueva vida a Yu Kwon y fue presentado ante MinHyuk como una víctima de la vida, su plan original era que ella se casara con MinHyuk y despojarlo de todo, pero el contrato que la obligaron a firmar cambiaba las cosas, pero con los regalos caros que su futuro esposo le hacía y los que seguramente le seguiría haciendo cuando se casaran podrían dividirse las ganancias y vivir una vida acomodada.
-¿Por qué? Más que un amigo te consideraba mi hermano.
JiHo volvió a reír, esta vez más fuerte que antes. Desde pequeño envidiaba a MinHyuk, mientras él y su madre tenían que trabajar para poder vivir, el niño tenía todo lo que deseaba con tan solo levantar un dedo, las cosas no mejoraron cuando los patrones decidieron enviarlo a las mismas escuelas que su hijo, al ser hijo de una sirvienta entre puros hijos de familias acomodadas JiHo era constantemente acosado por sus compañeros y mientras él siempre estaba para defender a MinHyuk nadie lo defendía, termino muchas veces llorando encerrado en los baños del colegio. Y así su resentimiento por MinHyuk fue creciendo día con día hasta que se convirtió en odio, cuando vio la oportunidad de tener todo lo que su supuesto mejor amigo tenía no lo dudo.
-Te conozco tan bien, que sé que saldrás de este lugar a llorar, pero igualmente estaras frente al altar esperando por Yu Kwon- JiHo se acercó a susurrarle al oído. -¡eres un maldito cobarde que no puede enfrentar a las personas solo!
Como JiHo había previsto salió corriendo de la habitación aguantando las ganas de llorar.
El sonido de la marcha nupcial regreso a MinHyuk al presente, aún seguía parado frente al altar ¿de verdad era un cobarde? Si lo era. Fijo sus ojos por última vez en Kyung y pudo ver la súplica en ellos ¿se casaría y arruinaría su vida para siempre? Las puertas del altar se abrieron y mostraron a un sonriente Yu Kwon guiado del brazo de JiHo. Y ahí supo que su peor error no es que fuera un cobarde, su peor error fue entregar su corazón a la persona equivocada.