En el mismo hospital, pero en el tercer piso del edificio…
En aquella habitación se veía a Nagato leyendo un libro mientras Minato se había quedado dormido en el sillón que estaba junto a el mientras le tomaba la mano, el pelirrojo aparto su vista de su lectura y sonrió al ver a su esposo.
-Minato... despierta amor, te vas a torcer. -Dijo Nagato al acariciarle la cabellera a un rubio que se iba despertando.
-(Bostezando)... Hola. -Dijo Minato sonriendo. -¿Cómo te sientes?
-Muy bien y Jiraiya san ¿Dónde está? -El pelirrojo le extraño no ver a su amigo.
-Fue con Kabuto a la cafetería. - Minato se levanta de la silla y va por un vaso de agua para su esposo.
- Mmmmm... - Nagato sonreía muy sospechoso.
-¿Por qué sonríes así?
-Pue de que al fin Jiraiya sea pareja de Kabuto, solo espero y lo haga feliz (recibiendo el vaso) gracias.
-Lo serán, bien ahorita vengo voy a alcanzarlos, ¿Quieres algo en especial para cenar?
-Algo fresco... una ensalada y a ti. - En ese momento Nagato tomo la mano de Minato y lo atrajo hacia el en un abraso.
-Na... Nagato nos van a ver. - El doncel se sonrojo al sentir como Nagato ponía una mano en su cintura y la otra la metía su mano dentro de su ropa y acariciaba su pecho.
-Y eso lo hace muy excitante. - En ese momento iba a besar a su doncel cuando de repente Kabuto abre la puerta junto a Jiraya. Al ver a la pareja en una posición algo "comprometedora", Kabuto se sonrojo y pidió disculpas y cierra la puerta.
En otro lugar del hospital.
Sasuke estaba al lado de un inconsciente rubio que dormía tranquilamente solo se podía escuchar el ruido de la máquina, solo de pensar en que casi pierde a sus dos seres querido lo volvían casi loco, pero él no merecía tener a Deidara a su lado le fallo, como pareja al igual que a Naruto a pesar de que empezaba a amarlo, pero no era el mismo amor que ahora siente por Deidara, más bien lo empezaba a querer como… un amigo, pero desde que vio a Naruto por primera vez algo muy dentro de él le decía que no dejara ir nunca más a ese rubio.
-Soy un estúpido. –Se dijo para así Sasuke.
En la sala de espera…
-Doctor como sigue Deidara. –En cuanto Naruto vio al doctor que revisaba a Deidara no dudo en preguntarle en el estado en que se encontraba su amigo.
-Por el momento está bien, tranquilo por cierto esta noche se quedara para tenerlo en observación y ver que no surja otro problema. - Dijo el doctor.
Tanto Naruto como Félix sintieron un poco de alivio, el rubio estaba fuera de peligro al igual que el chiquito que estaba en su vientre, pero se sentía culpable, en eso aparece Sasuke un poco ya más relajado y se sorprendió de ver a Naruto hay en la sala de espera… junto a Félix.
-¿Podría pasar a verlo? –Naru le pregunto al doctor.
-Por supuesto, pero antes tiene que salir su esposo. -Naruto se sorprendió y se alegró pero al mismo tiempo sintió miedo y un poco de celos y molestia, miedo a ver como reaccionaria Deidara, y los celos porque a pesar de la situación en la que esta sigue pensando en su teme.
Al ver que Sasuke se acercaba a donde estaba el, le dijo que Deidara se había despertado y que quería hablar con él, con paso veloz fue hacia la habitación de Deidara, al toca la puerta y escucha el "adelante" abrió la puerta y ve que Deidara no le quitaba la mirada de encima, cerró la puerta y fue acercándose poco a poco hasta estar frente a Deidara.
-¿Por qué Naruto? -Deidara le pregunto muy serio sin despegar su mirada de la de Naruto.
-Ni yo mismo lo sé, sé que te traicione a ti a mi mejor amigo... a mi hermano, perdón... -Naruto bajo la mirada pero es interrumpido.
-Eso de "amigo" o "hermano" lo dudo, pero Naruto si aún sientes algo defecto por mí, aunque sea lo más mínimo te pido que nunca vuelvas a acercarte a Sasuke, sabes muy bien que lo amo. -Deidara aun serio contenía un poco las lágrimas que empezaban a asomarse.
-... – Naruto no sabía que decir.
-Por favor Naru, no dejes a mi hijo sin su papa… por favor. –A Deidara se le salieron las lágrimas y con una mano se tapó el rostro.
-… -A Naruto le rompió el corazón ver en las condiciones en las que estaba su amigo, así que aunque le doliera y se le rompiera el corazón se apartaría de Sasuke. –Está bien, me alejare de ustedes. –Naruto se dio media vuelta y antes de cerrar la puerta escucho el “Gracias” de Deidara.
Naruto se había recargado en la puerta, pues no pudo aguantar que sus lágrimas salieran sin control, tanto así que poco a poco fue sentándose en el suelo y con sus rodillas se tapaba el rostro.
-¿Se encuentra usted bien? –Alguien se había puesto a la altura de Naru y le extendía un pañuelo.
-Si… lo siento, (toma el pañuelo) se lo devolveré. –Dijo Naruto apenado pues la persona lo había ayudado a ponerse de pie y le limpio sus lágrimas.
-Escucha, no sé lo que te allá pasado pero todo se arreglara, además me duele mucho ver a un hermoso doncel ver llorar, ven vamos a fuera para que te tranquilices.
-Pero yo…
-Anda… ¡Ah! Sé que tengo pinta de maldito, pero no lo soy, soy muy caballeroso con los donceles mi papi me enseñó a respetarlos. –Dijo el varón haciendo sonrojar a Naruto.
-¿Eh?... jajajaja –Naruto soltó una leve risa. –Está bien, pero será un rato.
Y así los dos se fueron en dirección contraria y platicando amenamente, pero no muy lejos de ahí tanto Sasuke y Félix se quedaron inmóviles en sonde estaban de pie (Félix a unos cuantos pasos de la puerta del cuarto de Deidara y Sasuke había girado justo cuando Naruto sonreía)
Sasuke por su parte se fue a la cafetería, pues al ver a Félix entrar al cuarto de Deidara le tranquilizo un poco pues, así el rubio no estaría solo, mientras Félix de muy mala manera abrió y azoto la puerta.
En la habitación de Deidara…
Cuando Félix cerro fuerte la puerta, Deidara se espantó y al ver de quien se trataba decidió ignorarlo.
-Ese estúpido ¿Quién se cree? –Dijo Félix al sentarse en un sillón que estaba en una esquina del cuarto.
-Si estoy bien gracias por preguntar. –Dijo Deidara al voltear su mirada al paisaje que daba su ventana.
-No estoy para tu sarcasmo, y dime ¿Qué paso con Naruto?
-Por el momento logre que se alejara de él, ya sabes unas cuantas lágrimas y el remordimiento vino. –Dijo Deidara al sacar de sus sabanas un frasquito de gotas.
-Perfecto uno menos. –Dijo Félix al sacar un cigarro de su chamarra.
-¿Por qué lo dices?
-Por nada (se acerca a Deidara y toca u vientre) ¿Cómo sigue nuestro hijo? –Iba a besar la frente del rubio pero fue rechazado.
-No es tuyo, es de Sasuke.
-Claro y yo nací ayer, porque te recuerdo que antes de que te fueras a E.U.A. te estabas comportando un poco raro y no me dejabas tocarte. –Félix había levantado la sabana y empezó a acariciarle la pierna a Deidara hasta llegar a su entrepierna.
-Sera porque eres muy brusco cuando tenemos sexo cariño. –Deidara beso a Félix.
Pero lo que ninguno sabia es que afuera de la habitación todo fue escuchado por Neji junto a Lee.
-Vez te lo dije, ellos están traicionando a Sasuke san y a Naru. –Dijo Lee molesto y a punto de entrar a la habitación.
-Tranquilo, por el momento no tenemos más pruebas, tenemos que ser muy cuidadosos de ahora en adelante si no… -Pero en ese mismo momento alguien toma el hombro del castaño.
-¿Qué hacen ustedes aquí? –Neji solo volteo sorprendido al ver a Itachi y por el susto Lee tropieza con la puerta abriéndola de golpe dejando ver como Félix besa a Deidara.
Estos dos al oír el golpe se separaron y pasar su sorpresa y más para el rubio fue ver a Itachi y a sus compañeros ahí en la puerta.
Afuera del hospital…
Naruto estaba en una de las mesas que estaba en un pequeño puesto frente al hospital, pues su acompañante fue por unas bebidas y bocadillos para poder hablar.
-(Suspiro) Es cierto no le marque a mi papa. –Naruto estuvo a punto de sacar su celular.
-Naruto… -Al oír su nombre levanto su rostro y le sorprendió ver a…