Katekyo Hitman Reborn
Capitulo 2
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‘‘Palabras y pensamientos’’
Y ahí estaba de nuevo ese estúpido silencio, pensaba el castaño. Después de la pequeña plática ninguno de los dos menciono algo para volver a entablar una conversación, a excepción que ahora Tsuna ¡se sentía como un animal de laboratorio siendo analizado de pies a cabeza!
El bastardo del Femilian ni se molestaba en despistarla, y el castaño evitaba con todo su ser no preguntar la razón, entonces ahora se encontraba tratando de ignorarlo y hacerse pendejo, esperando, no, más bien pidiéndole a todos los dioses y budas que el estúpido aparato sonara.
Pero la suerte no parecía estar de su lado.
--..Por lo tanto… ¿Eres un portador?...--
Esa oscura voz volvía a hablar, sacando al castaño de sus pensamientos abruptamente con un respingón que hizo sacar una pequeña risa al azabache.
Tsuna miro al humanoide al lado durante unos segundos antes de encogerse así mismo abrazando sus rodillas y dejando que su mirada se perdiera en el bello lago que momentos antes había salvado su vida.
--..No realmente…--Respondió una débil sonrisa para nada sincera--..Bueno, es algo a lo que me obligaron y me niego a formar parte…--Agrego nervioso pasando una mano por su cabello sin mirar ninguna vez al moreno.
Y no era del todo mentira, él si había sido obligado por su padre a ingresar en esa escuela desde el momento que se descubrió que tenía el don de ser el portador.
Desde el día que murió su madre, su vida cambio radicalmente de un giro de 360º, solo lo confirmaba cuando fue enviado a esa academia.
Era un ser débil con nada de talento, además del hecho que se negaba a realizar un pacto con los Femilian, no importa cuánto los profesores se esmeraron en hacerlo cambiarlo de opinión, jamás se dejo vencer con la esperanza de que si se negaba a hacerlo, su padre lo dejaría en paz y podría salir de esa escuela.
Tenía 17 años, sabía que era joven para vivir por cuenta propia, pero si eso evitaba seguir viendo a su padre, con gusto lo haría, pero como se había dicho era joven, y faltaban cuatro años para ser mayor de edad, evitando sus planes de romper todo contacto con su estúpida familia.
Su situación familiar no era la mejor como que digamos, resumiéndole en corto, su padre lo quería lo mas lejos de él, sus dos hermanos se alejaron dejándole atrás y a su suponer lo odian. Cuando pensaba en lo solo que estaba en ese mundo, un nudo en su garganta se formaba impidiéndole respirar correctamente, a veces se preguntaba ¿Por qué motivo había nacido, si de todos modos iba a estar destinado para caminar en solitario?. Al final de darle demasiadas vueltas había llegado a la conclusión de que, solo estaba y solo estaría para siempre.
Cruel realidad ¿Verdad?
El leve crujido de las hojas y el delicado viento que acariciaba sus cabellos, le hicieron regresar a la realidad, consciente que Reborn no le había quitado la mirada en ningún momento.
--..De todos modos Gracias…--Hablo por fin, pero al ver la mirada confusa de Reborn no pudo evitar soltar una leve sonrisa agregando--..Gracias a ti el Femilian que me perseguía se fue ¿No es cierto?...—Más que una pregunta era una afirmación.
--..Eres un humano raro…--Confeso sin quitar su mirada profunda, al final termino sentándose al lado del menor--..Digo, ¿No es contradictorio agradecer a alguien que podría matarte?...—Su voz había salido ronca y fuerte, ese hombre tenía una voz embriagante, que bien podía llevar a la locura a cualquiera.
Pero en realidad Reborn estaba un poco sorprendido que el humano se haya dado cuenta, y no es que realmente lo haya hecho para salvar al castaño, sino que jamás había visto a un humano escapar de los Femilian, al contrario hasta se ponían felices si eso significaba tener un nuevo contrato.
--.. Y que paso con el ‘‘Quien sabe….probablemente no vale la pena’’…--Pregunto divertido negando y haciendo reír nuevamente al hombre.
Reborn se preguntaba desde cuando no le habían sacado tantas sonrisas, pero no contesto y nuevamente observo al humano buscando algo que le dijera por que le llamaba tanto la atención o al menos lo hiciera diferente a los otros humanos. Pero no encontró nada, tan solo a un humano indefenso y débil, cuyas sonrisas eran sin ganas y sin ningún sentimiento que pudiera salir o trasmitir de su cuerpo.
--..Muéstrame tu brazo derecho…--Y sin dar una oportunidad de reaccionar al castaño, Reborn ya lo había jalado de su delgado brazo. Dejo sacar un grito ahogado ante la falta de delicadeza, pero sin embargo no se resistió, dejando al hombre oscuro comprobar lo que quería, a sabiendas de lo que era y quería ver. Normalmente cuando haces un pacto con un Femilian, un símbolo se formaba en el brazo derecho como un tatuaje, dependiendo del tipo de Femilian y la personalidad, preferencias e intereses del portador. Lo sabía porque había visto unos cuantos en sus compañeros, como flores, letras, símbolos, animales, objetos etc.
Reborn deslizo la manga mirando el delgado y pálido brazo libre de contratos u marcas, alzando una ceja de incredulidad sin proponérselo. Y al igual que en un portador, el Femilian también generalmente tiene un sello que da a conocer que tiene un pacto con el portador, y por consecuencia, que no estaba disponible.
--..Así que usted en verdad no tiene ningún contrato…--Exclamo mientras dejaba el brazo del menor--..No tiene alguna marca que indique lo contrario, y al mismo tiempo da a entender que no tiene con que protegerse. De verdad me sorprende que hayas sobrevivido tanto tiempo…--Admitió, aun que su seño no se haya aligerado. El moreno había notado que si subía un poco más las mangas, se podía ver piel mallugada y golpes recientes que parecían ser de una mano humana. ‘‘Parece que sufre de abuso’’…Pensó Reborn encogiéndose de hombros mentalmente, no es como si le sorprendiera, pero tampoco le importaba mucho para ir más profundo. Después de todo no es como si lo iba a volver a ver, lo mejor era cambiar el tema--..Si no mal recuerdo, una vez que el pacto se realiza aparece una marca en el portador al igual que en el Femilian, entonces estas se remueven a medida que realizan un nuevo pacto, ¿Me equivoco?...—Tsuna negó de acuerdo a lo que dijo el azabache.
--..Así es, un portador puede tener un número ilimitado de pactos, aun que yo lo máximo de Familiares que he visto en un portador son máximo 6, pero no creo que a los Femlian les agradara mucho…--
Reborn asintió de acuerdo, no le importaba seguir hablando con el débil humano--..Aun que la mayoría de los Femilian están bien un pacto, es por lo beneficios y raramente por amistad..—
--..¿Beneficios?...—No pudo evitar el castaño aleteando sus pestañas en confusión, que el sepa los Femilian no ganan un beneficio realmente, bueno eso es lo que entendía al ver como les maltrataban y explotaban--..¿Quieres decir que ambas partes pueden ganar igual?..—
--..Por supuesto…--Afirmo divertido, estirando sus piernas para ponerse en una posición mas cómoda, una vez mas cómodo se dedico a explicar--…Por ejemplo, si eres una persona que le encanta estar en las peleas, puedes realizar un pacto con un Femilian que al igual le gustan uniéndose para futuras batallas, también cuando se busca algo en común o simplemente cuando un femilian que no puede traspasar la barrera por sí solo, el pacto es una manera de hacerlo para conocer la otra dimensión…-Después se encogió de hombros--..Ese tipo de cosas..—
--..Bueno, si usted lo dice de ese modo, no suena tan mal…--Sonrió suavemente, pero luego frunció el seño--..Pero aun si, me niego a hacer uno…--Aclaro seriamente mientras se iba parando. Una vez parado se estiro aspirando hondamente el aire tan puro, a comparación de la tierra…Por última vez en ese día, se perdió en el cielo anaranjado de Arcadia, le encantaría vivir en ese lugar de hecho, el castaño negó sabiendo que era imposible, Tsuna giro un poco su cuerpo para mirar al Femilian, dejando salir probablemente para Reborn una de las sonrisas que no eran forzadas, aunque era suave y pequeña--..Es decir, yo realmente no quiero meterme en peleas sin sentido que puedan dañar a alguien…--Que por alguna razón, Tsuna sentía que en verdad tenía que decirlo al moreno.
Reborn no contesto a eso, pero se inclino hacia abajo ocultando sus ojos negando con la cabeza. Para el Castaño eso quedo confuso, sin embargo lo dejo pasar cuando el leve pitido del aparato que tenía en la bolsa del pantalón sonó. El azabache miro curioso al menor, el cual sacaba algo de su bolsillo deslizando la pantalla apago el pitido y por sus ojos un brillo de emoción creció, entonces entendió, que Tsuna tenía que regresar a su mundo.
--..Bien es hora de regresar…--Exclamo para a sí mismo el menor--..Fue un placer hablar contigo Reborn-san, y nuevamente gracias por salvarme…--Agradeció con una sonrisa, caminando de regreso--..Adios…--Pronuncio bajito cuando paso al lado del moreno. Poco después el castaño empezó a correr hacia el punto de encuentro de su grupo, perdiéndose en el infinito bosque a ojos del azabache.
En el camino Tsuna pensó que había sido agradable poder conocer al azabache, aun que probablemente jamás vuelva a ver a ese hombre en su vida. Después de todo era un simple e inútil humano, ante esa confesión sonrió tristemente mientras corría, pero no se quejaba, tal vez era lo mejor.
Reborn se había parado y quedado mirando al humano desaparecer con una mano en la fedora, mientras los últimos rayos del sol le alumbraban. Tenía la sensación que el castaño era una ave encerrada en una cruel jaula, bueno aun que él no podía decir mucho al respecto.
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Continuara♥