Marshall
Mierda,mierda,en unos minutos oscurecerá.Maldije internamente corroborando que todo este en su lugar.
Gumball sentado en la cama jugando con mi celular,la caja llena de cosas,la comida en la bolsa de papel y....¡El circulo! ¡Es lo mas importante de todo!
-¿Ahora qué tienes Marshall? -pregunto mi rosado amigo viendome seriamente.Me ponia nervioso el verlo así,con mi ropa puesta.Parecia una novia usando la ropa de su novio,mi ropa le quedaba notablemente grande,la camisa le quedaba muy extensa de mangas y también de largo ya que le llegaba a la mitad de los gluteos y los pantalones holgados que corrían peligro de quedar tendidos en el suelo.Agradezco a Glob que los boxers tienen un buen elastico.
-Na-nada -comencé a buscar la tiza y la sal dentro de mis cajones,encontré ambas y comencé a dibujar un circulo alrededor de la cama.Primero el de sal y luego el de tiza,mientras hacia cada uno sentía la mirada confundida y asombrada de Gumball.Me acerque a él y por acto reflejo retrocedio levemente.
-Tranquilo,no es ningun ritual raro o algo así.Es por proteccion.-le sonreí y vi por la ventana de mi cuarto,ya estaba oscureciendo.- Ve al baño ahora,luego no podras.-
comenté,luego deje de ver por la ventana y dirigí mi vista al rostro rosado de mi amigo.Las mejillas rosadas,creo un poco más de lo normal ¿tendrá calor?¿quizá fiebre? Por cualquier duda llevé mi mano hacia su frente para verificar.Lo cual empeoró el color de sus pomulos y así sentí un calor en su piel- ¿Te sientes bien? -pregunté con duda.
…l simplemente asintió,espero que así sea.Pero en cualquier caso,de todas formas tengo suficiente medicina como para curar cualquier mal.
Me levante de la cama y me dirigí al baño,me cambie de ropa para dormir comodamente.Una musculosa negra,boxers rayados rojos,short acuadrillé color verde oscuro y unos calcetines para que no se enfrien mis pies.
Al salir me encontre con Gumball sacandose los pantalones,frené en seco.
-¿Qué-qué ha-haces? -tartamudee nervioso
-Me preparo para dormir,tus pantalones me quedan muy grandes,de milagro tu ropa interior me ajusta la cintura.-sonrió nervioso y ruborizado.Me acerque a la ventana para seguir viendo por ella esperando el ocaso.En lo que yo observaba el paisaje,Gumball fue al baño y volvio,se sento en la cama y sentí que su mirada se posaba en mí- ¿Ya me diras que es lo que me ocultas? -volteé a verlo y respondí.
-Falta poco -sonreí- Avisame cuando estes hambriento,por ahora solo estaremos dentro del cirulo.-me cruze de piernas y lo observe por un momento.Estaba sentado de igual manera que yo pero de manera más cerrada,con sus brazos apoyados sobre sus rodillas mirando y jugando suavemente con sus dedos.Sus piernas rosadas,ligeras,finas,casi podría decir que no parecían de hombre pero no tanto como parecer de mujer.Su rostro se mostraba inexpresivo,extraño en él ya que la mayoría del tiempo se hallaba sonriente o simplemente serio,pero ahora no sé porque está así ¿Estara molesto porque no le digo la razón de todos estos preparativos?- ¿Sabes? -comencé a hablar y levanto la mirada esperando que siga hablando- Al ser el único heredero de Nocheosfera corro muchos riesgos,y más siendo un simple mortal que vive solo en medio del bosque.-solte una leve risa ante tal estupidez,ya que tranquilamente podría vivir con mi madre e ir a cualquier escuela de Nocheosfera pero preferí esta vida.- Ademas,muchos seres oscuros quieren verme muerto para tomar el trono -baje la vista un momento.
-¿Es por eso que haces todo esto? -pregunto girando un poco la cabeza.
Yo asentí y una curvee los labios inconcientemente- En general no es tan grave,vienen uno o dos fantasmas por noche,pero la mayoría son inofensivos.-suspire pesadamente,ya que en cualquier momento podrían comenzar a llegar las visitas no deseadas- pero en las noches de luna llena...llegan demonios y fantasmas potenciados en mayoría y fuerza.Si hubiese recordado que hoy era una de esas noches no te hubiese involucrado en esto.-agache la cabeza apenado.
-No te preocupes,todo saldra bien.-me sonrió confortantemente y se recosto en la cama.
-Así será.-sonreí.
Minutos pasaron en los que el silencio dominó completamente la situacion,pero aquel sonido inerte fue quebrantado por un clamor enorme de gritos que esos seres oscuros producian cada vez que se acercaban,oí el ruido de la puerta que se abría brutalmente y que los barullos se acercaban cada vez más,esperadamente las sombras nos rodearon y sonrieron maliciosamente al verme.
Oi un llanto,creo que no era un llanto era más como un quejido.Voltee a ver de donde provenía aquel sonido y me percate de que Gumball tenia la mirada perdida entre aquellos seres oscuros que no rodeaban.
¿Por qué se me olvida tan rápido que Gumball está conmigo? Ya que,cuando estoy con Barbie o Thomas eso no me sucede,quizá sea porque ellos no dejan de hablar ni por un segundo y Gumball sí.Sí eso será.
-Mnh,interesting replacement.-dijo uno de los demonios observando a mi rosado amigo mientras su sonrisa maligna no se borraba de su horrendo rostro.
-¿A-a que se refiere con re-reemplazo? -pronuncio con voz temblorosa. ¿Gumball sabe latín? Mierda,estos tarados me delataran completamente,creo que esta noche él aprenderá muchas cosas sobre mí.
Suspire pesadamente,será una larga historia la que tendré que contar.- Ven.-tome una de las sábanas y nos tape a ambos con ella,para que Gumball no preste tanta atencion a estos idiotas del infierno.
-Mar-Marshall ¿a qué se referían con "reemplazo"? -tembló mientras se acercaba a mí.
-Mnh.Dulcis,unum prandium delitiosius.-se oyo decir con el mismo tono de voz.
-¿¡Por qué hablan de eso,Marshall!? ¡Aseguraste que todo estaría bien! -se aferró de mi ropa y la sacudió levemente.
-Shh.Gumball,tranquilizate.-acune su rostro e hice que me viera a los ojos.Sus orbes rosado brillante mostraban de toda forma posible el miedo que él sentia en este momento,lo cual me hizo sentir culpable,inevitablemente culpable.…l no merece pasar por todo esto y mucho menos pasar por lo que luego pasará,no lo merece,Billie tampoco lo merecía.- Gumball...-susurre casi inaudible entre tanto barullo demoniaco- Te contaré una historia -suspire suavemente mientras enredaba mis brazos en él intentando tranquilizarlo aunque sea un poco.- Hace unos años,cuando mi hermano Lee roy murio y quedé como único heredero,estos idiotas comenzaron a atormentar mis noches...-hice una corta pausa para pensar mejor mis proximas palabras- Aparte de tener a mi hermano,yo tenía un amigo,mi mejor amigo -dije sin duda alguna,vi como Gumball sonrió levemente y continuo escuchando mi relato.- Se llamaba Billie,y si no fuera por él.Yo no estaría aqui contigo.-cerré mis puños con impotencia,realmente desearía que haya sido yo y no él.
-¿Qué le sucedio? -preguntó levantando su vista hacia mí.
Gumball
- He inter nos est -Oí decir a aquella voz que producía en mí algo más que un escalofrío de terror.
Al oir eso,mi amigo sacó la sabana que nos cubria y grito a los espectros.
-¡Ya basta! ¡Dejenlo en paz! -vi como su quijada se cerraba nerviosamente.
Inesperadamente,los demonios desaparecieron en el instante en el que mi amigo lo ordeno y el silencio fulmino el ambiente,una luz apareció en medio de la habitacion.Un chico de cabello café aparecio en su lugar,noté como a Marshall le comenzaban a brotar lagrimas al ver a aquel muchacho.
-¿Bi-Billie? -sonreía debilmente,lloraba a toda regla y avanzaba lentamene hacia donde se hallaba aque chico pálido que parecía de cristal.
-Sí,Marshall.-le sonrio el muchacho- veo que ya me has reemplazado.-su sonrisa se borro instantaneamente,y su mirada penetrante ahora se poso en mí.
-Yo-yo nunca te reemplazaría,no podría.-ahora mi amigo se hallaba al borde de la cama con la intencion de ponerse de pie.-Te quiero demasiado como para hacerlo.
-Si me quieres tanto,vén y abrazame.Como lo hacías cuando me asustaba por tus bromas ¿Puedes? -el chico pálido estaba fuera del circulo e insentivava a Marshall a que se acercase a él. ¿Será una trampa? Sin duda.
Pero Marshall no reparo en eso y se puso de pie dando cortos pasos hasta quedar casi al borde del circulo.
-¡Marshall! -grité al percatarme de que no se detendría si yo no lo frenaba.…l no hizo caso y estuvo a punto de salir del círculo que con tanto esmero me convencio indirectamente de no cruzar bajo ninguna circunstancia.- ¡Marshall! -grité nuevamente,pero él no me oia,me ignoraba y continuaba dando cortos y frenados pasos hacia el muchacho que lo esperaba con los brazos abiertos.
Ya cuando estuvo a punto de salir del circulo,por puro instinto me abalancé sobre él para evitar que saliera y cuando lo hice se negó diciendo que lo liberara ya que quería más que nada en el mundo poder abrazar por última vez a su amigo "Billie".
Se retorcia entre mis brazos los cuales al parecer tomaron una fuerza sobrenatural a lo habitual ya que unos segundos después Marshall no se calmaba por lo que atine a tomar algo de la caja;lo primero que mi mano encontro fue un bate de beisbol que había allí,ya que mi amigo no se calmaba y algo que no haría es golpearlo le lanzé el objeto al chico que se hallaba aún en medio de la habitacion viendonos seriamente.
El bate no lo golpeó y al parecer siquiera lo sintio,ya que practicamente lo traspaso.…l se desvanecio en la nada y mi amigo lloraba con más impetu e intentaba safarse de mi agarre con más desespero.
-¡No! -gritó al soltandose de mi agarre y quedando arrodillado sobre el suelo,pero aún dentro del circulo.- ¿Lo mataste? -volteo a verme con los ojos rojos casi identicos a los demonios de hace minutos,a diferencia de que los de Marshall aún caian lagrimas.
-N-no é-él no era más que un espectro,una tra-trampa de los demonios de recién.-intente explicarle,pero se acercaba a mí con unas notables ganas de asesinarme y yo retrocedí hasta encontrarme con el respaldo de la cama.
-¡Es mentira! -golpeo a los costados de mi cabeza y cerré los ojos un momento esperando el golpe,pero lo que sentí fue algo diferente- ¡Podríamos haber sido amigos! -Marshall tomaba mi camisa y la sacudía levemente mientras sollozaba sin parar- ¡Los tres podriamos haber hecho muchas cosas juntos! -ahora apoyaba su cabeza sobre mi pecho y con ese gesto intente consolarlo para que se tranquilizara y volviera en sí.- ¡Pero lo arruinaste! -comenzó a golpearme dandome uno o dos puñetazos en el estomago y torax.
-Ma-Marshall pa-para.-intentaba alejarlo pero él me golpeaba cada vez con más fuerza.
-Detente.-se oyo la voz de aquel muchacho de cabellos café,pero él no se hallaba en ningun lugar de la habitacion.- Si terminaras con él hazlo bien.-Marshall detuvo sus golpes y volteo a buscar algo dentro de la caja de carton.Estuve inmovil hasta que él dirigio su mirada hacia mí,una sonrisa enorme se dibujo en su rostro y cuando volvio tenía una daga en su mano y se me acercaba con ella.
-N-no Ma-Marshall,re-recuerda que so-soy tu-tu amigo.-balbucee nervioso,mientras buscaba algo con que protegerme.
-Tu...-se acerco a mí empuñando el arma blanca en su mano.- No eres nadie para mí.-se abalansó sobre mí e intento clavarme la daga en el pecho pero me removí en el momento que lo vi acercarse por lo que lo voltee y él quedo boca abajo,logre sacarle el arma y tirarla en algún lugar de la habitacion.
-Marshall,basta.-lo sostuve con ambas manos mientras él intentaba safarse nuevamente,esta vez lo logro y fui yo quien quedo abajo de él pero con la diferencia de que yo quedé boca arriba.- Suel-sueltame -alcancé a decir ya que me intentaba extrangular con sus manos.
-Calla,callate y terminare más rápido con esto.Y así podré volver con Billie,con mi amigo Billie.-lloraba con una sonrisa enfermiza en su rostro,pero con cada palabra dicha la fuerza de su agarre disminuia.Y yo podía recibir más oxigeno en mis pulmones.
-Yo-yo seré tu amigo Marshall,dijiste que lo sería.-tomé sus manos asegurandome de que no me atacará nuevamente.
-Yo no dije tal cosa.-apoyo su cabeza contra mi pecho y se quedó así un segundo.- yo no recuerdo nada así -levanto su vista hacia mí y fruncio el ceño.- no te conozco para nada.-sus ojos se volvieron nuevamente rojos y acercó sus manos hacia mi cuello con la intencion de continuar extrangulandome.
-Di-dijiste que nos conoceriamos mejor,y-y que seriamos amigos ¿re-recuerdas? -sonrei nerviosamente sosteniendo sus manos ya con dificultad.
- No he dicho nada como eso,y mucho menos te recuerdo.-mis manos temblaban ya sin fuerzas para continuar deteniendolo de su cometido.Fue entonces cuando una idea fugaz aparecio en mi mente.Un recuerdo que apuesto quedo en su memoria tanto como en la mía.Algo que no olvidaría ni aunque este bajo el aparente control de aquellos seres oscuros.
-Ma-Marshall.-susurre suavemente.- ¿no recuerdas esto? -su rostro se encontraba tan cerca del mío que no tuve que hacer demasido esfuerzo.Ahora el beso lo di conciente,conciente de que quizá y con suerte él saldria de su trance y volvería en sí.
Sus labios no eran suaves y mucho menos dulces,pero sí algo tibios.Nunca había besado a nadie pero para ser los primeros labios que tocaban los míos,no estaban mal.
Cuando dejé de sentir sus labios contra mí,abrí lentamente mis ojos,encontrandome con los mismos orbes azul marino de la última vez,su boca algo entreabierta del asombro y sus manos que se posaban rodeando mi cuello inofensivamente- perdoname .-fue lo primero que logró decir,escondio su rostro en mi hombro y sentí sus humedas lagrimas nuevamente.- perdí la cabeza y casi te pierdo a ti.-respiro un momento y continuo,ahora viendome al rostro- es que a veces ellos toman el control de mí y-y...no logro vencerlos.-bajó la vista y termino diciendo con desanimo- lo entiendo si no quieres volver a hablarme.-se recosto a un costado de mí y se tapó el rostro con la almohada.
Frunci el ceño ante lo último.Entiendo que el estar con él me puso en peligro,y apuesto que no será la última vez pero quiero ser su amigo y no lo dejare por algo así,es más,me esforzare para que estas situaciones no vuelvan a suceder.
-Marshall -lo llamé y él soltó un audible "¿mnhn?" - mírame -ordene y segundos después se quito la almohada del rostro.
-Al amanecer te llevaré a tu reino y estarás a salvo si no vuelves a juntarte conmigo ¿bien? -desvio la mirada,pero sus palabras no hicieron más que enfurecerme.
-¡No quiero volver a mi reino! ¡Y no dejare de estar contigo por algo así! -abrió sus ojos con asombro ante mis palabras y se sentó a mi altura para entender mejor lo que decía.
-¿Estas conciente de lo que dices? Pudiste haber muerto en mis manos hace tan solo momentos,pero aún así dices querer estar conmigo a pesar de ello ¿Acaso quieres morir,Gumball?
- ¡Prefiero morir a que seguir viviendo de la manera en la que he vivido!
-¿Qué? -retrocedio un momento asombrado ante lo dicho.
-¡¿Crees que es divertido vivir en un lugar enorme en donde no puedes hacer nada y que para colmo no puedes estar con nadie?! ¿¡Crees que no me duele saber que el único amigo verdadero que tengo y puder haber tenido me quiere lejos!? -me tape el rostro al percatarme de que habian comenzado a brotar lágrimas de mis ojos- ¡Pues no será así Marshall Lee! -tome valor y logré verlo nuevamente a los ojos- ¡Me quedare quieras o no,sin importarme lo demas! ¡¿Entiendes!? -por primera vez en mi vida había tomado toda la voluntad y rabia que estaba dentro de mí y dije todo lo que guardaba en mi mente.Pues ese había sido el trato,yo resguardaría algún secreto de Marshall y el guardaría algún secreto mío.
Marshall
La situacion se repite,es casi un dejabú lo que me sucede.Pero siento que con Gumball será diferente,que Gumball no terminara como Billie y me esforzaré por que no suceda así.
Lo único que se me ocurrio hacer en ese momento fue abrazarlo con todas mis fuerzas y susurrar un simple- gracias -apoye mi cabeza sobre su pecho y sentí sus manos que acariciaban mi cabello.
-Siempre estaré para ti,no lo olvides.-beso mi cabeza y continuo acaraciandola dulcemente.Estuvimos varios minutos así,me sentía bien en ese momento,fue casi eterno y casi perfecto,ya que la paz terminó en el momento en que los demonios aparecieron nuevamente.Los observe a todos y cada uno,soltando sus risas enfermantes y sus sonrisas cinicas.- Marshall -oí la voz de Gumball que me llamaba,levante la vista y tomó mi rostro- No les prestes atencion,si los ignoramos será mejor -me sonrio,lo aprete un poco mas entre mis brazos,lo vi toser y soltar una pequeña risa.
-Bien.-finalmente lo solté y me recoste bajo las sábanas.…l hizo lo mismo y nuestras miradas se encontraron bajo las mantas,él me sonrio dulcemente.
-Oye,Marshall.-se acerco a mí y dijo- tengo hambre -soltó una pequeña risa para romper la inquietud del momento.
Me contagió su pequeña risa y me saqué las sábanas de encima para buscar con la mirada donde se hallaba la bolsa de papel que dentro contenían las minipizzas.Pero lo único que me encontre fueron con los ojos celestes de mi viejo amigo.- Gu-Gumball -balbucee y lo busque freneticamente bajo las mantas.Sentí su tibio tacto contra mi mano y luego su suave voz que me calmaba nuevamente.
-Marshall,mírame.-voltee a verlo y continuo luego de suspirar pesadamente- él no es real,solo es un demonio disfrazado de el chico que alguna vez fue tu amigo ¿entiendes? -tomo mi rostro entre sus suaves manos y me vio directamente a los ojos,asentí ante sus palabras.Era doloroso verlo y saber que no era él,que no era Billie.
-Yo buscaré las minipizzas.-sonrió y beso suavemente mi frente.- Tú solo tranquilizate y vuelve a recostarte.-cuando él soltó mi mano me sentí vacio,sentí miedo de que al alejarme de él lo perdería,y aquella sensacion no se desvancecía.
-¿Estas bien? -escuche su voz preocupada por mi estado,estaba abrasado a una almohada llorando desconsolado pensando que a Gumball le pasaría algo.
-No te vayas,por favor.Que no te lleven,quedate conmigo.-era lo único que alcanzaba a decir,balbuceando todo lo que mi mente procesaba.
Gumball
Al volver,solo momentos habian pasado desde que busque las minipizzas y algunas cosas más.Pero me encontre con Marshall llorando desconsolado balbuceando que me quedara con él y que me llevarían.
- Tranquilo,tranquilo.Estoy aqui,mirame.-dije mientras dejaba las cosas que tomé a un costado intentando que él me viese a los ojos.Obviamente lo que sea que le haya sucedido a Marshall,fue algo que lo traumo de sobremanera.
-Gumball...-susurro mientras sonreía y sus brazos me rodeaban con la intencion de abrazarme nuevamente- no te vuelvas a ir,no te alejes de mí.-sus brazos me apretaban con mucha fuerza,su mirada quería encontrar la mía y cuando lo logró su sonrisa no volvió a desvanecerse y algunas lágrimas bajaban por sus mejillas.
-No lo haré,no lo haré.Ahora solo debes tranquilizarte ¿sí? -el asintió y me soltó.Voltee a tomar las cosas que deje atrás.Un palo de hockey que uní con cinta a un pedazo que arranqué de la caja para poder usarlo como mastil y unas linternas para iluminar bajo las sábanas.Y obviamente la bolsa que contenía la comida,también un pequeño reloj de bolsillo que marcaba las 11:30pm.Al ver todo lo traido me golpee mentalmente,había olvidado las bebidas.
-¡No! -me detuvo tomando mi mano.
-Marshall.-voltee a verlo ya algo hastiado- los dos iremos a buscar las bebidas ¿bien? -él asintio.
Marshall
Me sentía sumamente estúpido y avergonzado.
Creía que Gumball era el que estaría aterrado y nervioso por toda esta situacion,pero terminé siendo yo quien tenia miedo,no por todo esto.Sino miedo a que le suceda algo a él.Ya que esta no era la primera vez que paso una noche de luna llena acompañado.
Ahora nos encontrabamos bajo el campamento improvisado que Gumball había armado con un palo de hockey unido a un pedazo de carton que se usaba como apoyo y que sostenían las sábanas sobre nuestras cabezas.Estabamos cenando las minipizzas que habiamos preparado hace unas horas y ninguno de los de hablaba,ya que yo estaba nervioso a causa de que los demonios no dejaban de nombrar a Gumball y decir que le harían cosas horribles como a Billie.
Y...Gumball que creo no estaba tan nervioso como yo,creo que él estaba cansado de mi preocupacion extrema.
-Perdon.-se me ocurrio decir,ya que él no tendría que estar pasando un mal momento porque yo no sepa controlar mis emociones.
-No te disculpes -seguía comiendo su bocado sin verme- para eso están los amigos. -sonrio dirigiendome la mirada.
-Sobre eso...posiblemente quieras saber porqué me puse tan mal al ver a ese chico que apareció hace rato.-agache la cabeza un momento,esto sería dificil admitir.
-Bueno,teniendo en cuenta lo que dijeron los demonios y lo que balbuceabas...-hizo una pausa escuchando a los seres oscuros que gritaban cosas que no me tome la molestia de traducir.- era un amigo cercano a ti.Que intentó ayudarte con todo esto de los demonios,pero...que fue secuestrado y ejecutado por ellos...todo frente a tí.
Me asombre ante ello,Gumball estaba tan acertado que me ahorro contar la melodramatica historia de aquella noche que me encantaría olvidar.Simplemente asentí ante sus palabras y luego él dijo- tranquilo,eso no me sucederá.-sonrió con seguridad.
-Non tam certo princeps Bubba Gumball -la frase retumbo varias veces en mi cabeza,ahora ellos habían descubierto quien era Gumball especificamente.
-Mierda.-fue lo único que alcancé a decir.
-¿Co-como saben mi nombre? -Ahora sí podía ver el miedo en sus ojos rosados.
-Lo han averiguado.-suspire- ahora tendrás que cuidarte cada noche,de lo contrario...-tragué saliva duramente.
-¿Me-me sucedera lo que a Billie? -tembló en sus palabras,yo simplemente asentí y me golpee mentalmente por haber hecho otro amigo con el mismo final.
Suspire pesadamente,tenía que cambiar aunque sea un poco el tema de conversacion y quitarle peso al silencio que había entre nosotros.- Aparte de eso tedrás que soportarme casi tiempo completo,no te librarás de mí tan fácilmente .-sonreí burlonamente queriendo alivianar el abiente.
Soltó una pequeña risa y luego de un momento me contesto- lo positivo es que mañana tú dormiras en mi castillo y me enseñarás a protegerme ¿verdad? -noté que acercó su mano hacia la mía,pero que no la tomó.
-Claro que sí.Siempre estaré para ti,no lo olvides.-tomé su mano y la acaricie suavemente.
-Oye,Marshall...-apretó el agarre de nuestras manos y sentía que él comenzaba a temblar y también a sudar- ¿puedo decir algo sobre...el beso de hoy?
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