Y así transcurrió el resto de su fin de semana, Minseok siguió negándose a salir ni siquiera la insistencia de sus padres funciono, todo el tiempo estuvo encerrado en su habitación aislado de todo y todos, su mente no dio tregua en algún momento y eso le abrumaba, por un lado podría jurar que aún una parte de si extrañaba a Luhan y dolía inclusive mucho más el no tenerle a su lado como lo estuvo en el pasado, pero a pesar de ello las palabras de Yixing nuevamente se repetían en su mente calando profundo en si, “Tal vez deba intentarlo” pensó, ser egoísta por una vez estaría bien y Lay nunca jugaría con sus sentimientos, después de todo no solo era él presidente del club de arte, muchas veces el chino fue quien le escucho y ahora era la luz que brillaba débilmente en su desolado presente todo aquello por los sentimientos que guardaba muy profundo de si por Luhan.
No quiso darle más vueltas asunto, busco su teléfono y tomo rápidamente este, podría jurar que mientras marcaba el número del mayor sus dedos temblaron y eso no ayudaba en absoluto a calmar sus nervios.
–Sí ¿bueno?
–L-Lay…hola, lamento llamarte tan tarde…
–¿Xiumin?
Se hizo un pequeño silenció entre ambos que rápidamente Lay rompió, cuando Minseok escucho su risa.
–No es para nada tarde, me alegra que llamaras… ¿Me dirás a que debo este placer?
–Yo…recuerdas, hablo de lo que me dijiste en el planetario – Minseok bajo su voz entre la duda pero a la vez deseando llenarse de coraje –Acepto…
–Espera un momento ¿Qué has dicho? Creo que no te pude oír bien.
Claro que Lay había escuchado perfectamente, solo necesitaba asegurarse de que no estaba imaginando las cosas y mucho menos soñando, Minseok probablemente nunca se imaginaría lo feliz que aquellas palabras habían hecho a Yixing.
–Acepto salir contigo…
–Gracias por darme esta oportunidad, no te defraudare… Tu en verdad me gustas.
Ya que no estaba seguro de que responder emitió un leve “hum” como queriendo afirmar sus palabras, era obvio que esto no solo se trataba de olvidar a Luhan en verdad deseaba darle una oportunidad a Lay, pero estaba seguro de que sus sentimientos al menos ahora distaban demasiado, de amor por Yixing, a pesar de eso de verdad deseaba intentarlo , Lay era todo lo contrario al rubio y su sonrisa siempre le reconfortaba….sinceramente compararles no era nada sano, así que dejaría de pensarlo.
–Entonces, te veo mañana en la escuela. –Afirmo nerviosamente – Adiós Lay.
–Está bien, te esperare en la parada del auto bus, Adiós
Con su corazón desbocado por los nervios se animo a cortar su llamada, cerrando los ojos como si se hubiese quitado parte del peso sobre sus hombros, pero a la vez ganando uno extra, todo aquello mientras presionaba su teléfono contra su pecho, de verdad intentaba convencerse de que había hecho lo correcto, solo de esta forma podría recuperar su amista con Luhan y ambos serian los mismos de antes.
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A pesar de lo que había ocurrido entre ambos allí estaba Luhan y Kris hablaban como de costumbre, en la entrada de su aula, pues aun eran bastante temprano y él maestro no llegaría hasta pasadas las ocho, después de aquel encuentro en el departamento de Luhan parecía que ambos habían limado asperezas aparentemente. Tal vez sus bromas hubiese seguido de esa forma de no ser por lo sorprendido que se mostro Kris por un momento llamando de paso la atención de Luhan pues no era usual verle perder la compostura de aquella forma, pero tan pronto como se dio la vuelta se arrepintió, simplemente no estaba preparado para ver a su Baozi caminar de la mano con Yixing, allí estaba de nuevo aquella sensación amarga floreciendo en su pecho.
–Hola chicos
Minseok relmente se sentía nervioso y bueno como no estarlo cuando Luhan y Kris le observaban tan contrariados y sorprendidos y no solo ellos, los demás chicos en la escuela le habían vuelto el centro de atención y el cotilleo del día. Llegar a la escuela de la mano de Lay, desencadeno una serie de reacciones que nunca se imagino a tal magnitud.
–Baozi…
–Min! ¿Dónde te habías metido? Te llame el fin de semana pero no me contestabas.
–Yo estuve algo ocupado Kris…
–Eso veo, demasiado quizás ¿Cuánto tiempo pensabas ocultarnos que salías con alguien?
–No es así, nunca pensé en ocultarles nada, Luhan lo sabía…–Kris como siempre tan perceptivo, aquello le tenso y parecía que sus pobres excusas no servirían de mucho para defenderse. Por suerte pareció darse cuenta de ello y decidió intervenir.
–Es un placer por fin conocerles personalmente, Xiumin me ha hablado bastante de ustedes.
–Así que Yixing ¿verdad?
El nombrado asintió afirmando el agarre en la mano de Minseok y con su habitual tranquilidad encaro a Kris y Luhan por igual, ignorando la fría mirada que este último le estaba dando.
–Chicos creo que es mejor entrar a clases….
–Tienes razón, te esperamos adentro, adiós Yixing… camina Luhan – Sin decir más nada Kris tomo al rubio por los hombros y lo llevo consigo dentro del salón.
–Gracias por eso Lay…
–No tienes nada que agradecerme, el ambiente estaba muy tenso, tu amigo Kris parecía muy serio, algo me dice que no seré de su agrado y menos del de Luhan.
–No es eso, ellos están enojados conmigo, por favor discúlpalos.
–Xiumin, descuida todo está bien.... vendré por ti cuando acaben las clases, hoy no tendremos actividades con el club así que ¿por qué no tenemos una cita? – Pudo ver la sonrisa de Lay mientras él desarreglaba sus cabellos ligeramente y luego de ello se marcho a su respectiva aula.
–E-esta bien...Te veo después – tal vez el chino no podría escuchar su respuesta por lo bajo que respondió pero se sintió más tranquilo al decirlo.
Por alguna extraña razón su corazón dio un brusco salto en su pecho, no sabía si culpar por ello a lo que hacia poco había sucedido con sus amigos o si tan solo esto había sido a causa de que Lay le hubiese tomado desprevenido en ese momento. Al estar de vuelta en su aula, se mantuvo tan pensativo que no fue realmente consciente de la mirada fija que Luhan le dirigía, por un momento parecía que él rubio le siguió a cada paso que dio hasta su puesto.
Por supuesto las clases no transcurrieron con naturalidad como muchas otras veces, Minseok estaba consciente de que era objeto de las miradas no solo de Kris, por supuesto también de Luhan quien estaba a punto de crear un agujero en su cabeza por la forma en la que le observaba, logrando ponerle nervioso al causar mas de un escalofrió en su persona, por ello prefirió fingir que nada sucedía. El timbre sonó por última vez y Luhan se precipito rápidamente a guardar sus cosas pues había decidido abordar a Minseok antes de que prefiriese huir.
Al final se vio tan cerca pero tan lejos cuando su baozi paso deprisa por su lado dirigiéndose hacia la salida, perdiéndose entre algunos de sus compañeros de curso.
–Xiumin!
Minseok, Luhan y Kris, se detuvieron al escuchar aquella voz tan familiar, por su parte él castaño no había estado más feliz de ver a Yixing, fue como si sus ruegos hubiesen sido escuchados, un sonriente Lay estaba allí en la puerta del aula esperando por él.
–Lay… H-hola.
–¿Qué clase de saludo es ese? –Lay se tomo el atrevimiento de pasar pues no habían muchas personas en el aula y se acerco a Minseok sujetando su mano entre la suya, causando una fuerte impresión en sus amigos que aun en silenció les seguían observando.
–¿He? ¿A que te refieres?
–Estás demasiado serio –Lay poso uno de sus dedo sobre la frente de Minseok, apuntando a su ceño que estaba levemente fruncido y rió – ¿Acaso olvidaste nuestra cita?
–N-no.. no la olvide
–Perfecto, entonces te espero, quiero enseñarte algo.
–¿Enseñarme algo?
–Sí, pero basta de preguntas… será mejor que lo veas por ti mismo, prometo que te gustara.
–Está bien, solo dame un segundo y nos vamos – Minseok acomodo su maleta y tomo la correa de la misma dándole a entender que estaba listo para salir, así que ambos se marcharon juntos.
Claro que después de que su Baozi se marchara Luhan no se notaba muy feliz y a pesar de la insistencia de Kris para que fuesen a sus clubs, prefirió quedarse y ser espectador de primera fila, de cómo su mejor amigo le dejaba por Yixing… Era imposible deshacerse de aquel sentimiento de impotencia y un creciente odio por el chico de los hoyuelos.
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Todo parecía muy tranquilo para ser una primera “cita” si es que podía llamarlo de aquella forma contra todo pronóstico y las muchas cosas que se cruzaron por su mente en el camino, Minseok noto fácilmente lo bien que la pasaba junto a Yixing, fuera de la escuela, parecía ser que todo a su lado era más tranquilo inexplicablemente aquel peso desaparecería de sus hombros, esa fue una tarde bastante animada, tal vez por qué muy dentro de si Minseok pensó que Lay era capaz de leer su mente y anteponerse a todo lo que podría salir mal, y eso le gustaba. Después de un largo camino por el centro comercial y un par de adquisiciones tras visitar la tienda de arte, Yixing no perdió la oportunidad de caminar a su lado tomándose el atrevimiento de tomar su mano en as de una ocasión, ganando mas que sonrojos de parte de Minseok, era obvio lo nervioso que Lay lograba ponerle, extrañamente en esos momentos Luhan no rondaba su mente y nada entre los dos fue incomodo ni extraño.
–Espera… ¿en dónde estamos?
–No deberías preocuparte por eso, solo confía en mi– Lay no le permitió si quiera pensarlo , con algo de prisa le arrastro consigo por una pequeña calle sin retorno hasta la parte oculta de un callejón donde lo único que podría apreciarse era la pequeña entrara a un muy discreto café, Minseok no lograba entender quien podría trabajar en un lugar tan aislado, pero era obvio que el lugar tenia muy buena pinta aun a pesar de que no parecía el lugar más llamativo pero Minseok se sintió terriblemente cautivado por aquel olor tan familiar y sus pies siguieron los pasos de Lay sin darse cuenta.
Solo cruzar el umbral de la entrada escucharon el tintineo de las campanillas anunciando su llegado, logrando acaparar la atención de la única persona allí, un chico notoriamente mas alto que los dos que sonrió tan pronto como les vío.
–Lay! Valla sorpresa, ha pasado tiempo desde que viniste por aquí
–Hola, también es un gusto verte Yeol.
–Lamento esto, en verdad me alegra verte y….
–Xiumin…–Le llamo Yixing – Él es Chanyeol el mejor barman de todo Seúl y un buen amigo mío
–Hola es un gusto, soy Minseok pero todos me llaman Xiumin.
–El gusto es mío, todos los amigos de Lay son bienvenidos aquí en mi dulce morada.
–Gracias….pero…
–Estamos saliendo – fue Yixing que interrumpió a Minseok esta vez dejando las cosas mas claras asi probablemente su amigo no pondría mas nervioso al castaño.
–Oh! Cielos dejas de venir durante una semana y regresas con novio, nunca dejaras de sorprenderme al parecer, por favor pongansen cómodos ¿Qué les gustaría tomar? La casa invita
–No es necesario Yeol
–Claro que lo es! Hace mucho no te veía y tener a un nuevo invitado no esta nada mal y más si se trata de tu novio. Además por un momento pensé que me habías abandonado, tal vez mi café ya no era lo mismo para ti.
Minseok enrojeció violentamente, los colores se le subieron al rostro en un pestañeo por un momento deseo hundirse en su asiento o solo desvanecerse para no ser el centro de atención tal vez asi dejaría de sentirse cohibido.
–Estas siendo un poco exagerado, permíteme corregir tus sospechas pero no dejaría de beber tu café y creo que Xiumin tampoco lo hará después de hoy. Podrías traernos un par de capuccinos por favor.
–Entiendo, no me tardo.– tan rápido como si se tratara de un holograma la silueta del mas alto se perdió tras la barra dejándoles a solas.
–Disculpa por eso, a veces olvido lo eufórico que Chanyeol es.
–Descuida – Minseok sonrió más aliviado pensando entonces por un instante en sus amigos.
–Sabes, había esperado el momento indicado para enseñarte este lugar. De verdad espere a que algún día me acompañaras.
–¿yo?
–Si…se que no debí tener intenciones ocultas cuando te ofrecí mi ayuda se perfectamente que estuvo bastante mal , pero me has gustado desde hace un tiempo, me atrevo a decir que desde que nos vimos por primera vez en el club de arte, se que eres más de lo que Luhan no pudo ver y quiero demostrártelo… también espero que tu mismo lo creas.
Abrumado por su sincera confesión se vio obligado a bajar la mirada, estaba demasiado apenado para seguir observando a su ge, nunca antes alguien le había dedicado palabras así. Lay sin embargo no era el tipo de persona que solo se guardaba las cosas y como si aquellas palabras no hubiesen sido suficientes tomo su folder de arte y busco entre algunas de sus hojas, las cuales enseñaban todo tipo de dibujos y trazos, hasta detenerse satisfecho entre alguna de sus muchas paginas y giro el mismo para enseñarle aquella hoja a Minseok.
–Soy yo…
Lay asintió, por supuesto no era un boceto nuevo, pues aquel retrato de Xiumin llevaba mucho tiempo oculto entre sus muchos dibujos, y por supuesto nadie más que él y Minseok ahora sabían de su existencia.
–¿Por qué?
–No necesito una razón para esto, Xiumin… no puedo olvidar lo mucho que sonreías ese día, era la primera vez que te veía hacerlo de esa manera, por un momento hasta pensé que me cegarías. Para cuando termine de dibujarte me di cuenta que de verdad me gustabas mucho mas de lo que pensé.
–No se….gracias…
–No tienes que decir nada solo quería que lo supieras, por que pretendo robarte una sonrisa igual en algún momento… así que quiero que lo conserves, por favor.
Una sonrisa afloro en los labios de Lay, sin proponérselo había logrado que Minseok se sonrojara una vez mas, esta vez el crédito recaía completamente en él y eso era lo que le hacía sentir tan bien.
– Por favor… no digas cosas tan vergonzosas…
–Xiumin, ¿puedo besarte? –Su rostro era todo un poema entre las muchas tonalidades de rojo que le abordaron luego de aquella pregunta, no supo ni cuando ni como logro hacerse con un poco de valor en un último intento encararle mientras continuaba balbuceando, si bien aquella vez en el planetario le beso por sorpresa, esperaba que esta vez todo fuese diferente.
–V-vale…– Fue cuestión de segundos y pronto noto lo cerca que Lay estaba de su rostro, a medida que cerraba los ojos pudo sentir su cálido aliento sobre sus labios, terminando en la suavidad de de estos y una opresión leve en su pecho….que resulto muy diferente a cualquier otra que hubiese experimentado, a pesar de lo corto que había resultado.
“Lay…. “Algo en él parecía cambiar un poco ahora que su mente desplazaba lejos sus recuerdos permitiéndole a Lay hacerse un lugar en su corazón, sin ser consciente de ello.