A principios de diciembre Minseok se encontraba muy ocupado, al igual que Lay que ahora lucia bastante raro y apático algo impropio de él. Después de los exámenes finales y la fiesta de promoción del equipo de Kris, al que poco había visto ahora que lo pensaba detenidamente, cuando Luhan estaba a punto de irse a sus actividades del club, Minseok se animo a hablarle para invitarle a salir “Luhan ¿vendrías al centro de exposiciones conmigo?” él rubio parecía muy sorprendido no solo porque era la primera vez que su Baozi le invitaba salir sino porque su relación aun continuaba en ese punto indeterminado en el que no solo eran amigos si no algo más. Minseok al ver la expresión del rubio decidió continuar “pero… cuando termines las actividades del club, no te tienes porque sorprenderte tanto, te estaré esperando”
Luhan sabía que esa sería una oportunidad única, por ello jamás se negaría.
–Está bien –Dijo con una sonrisa despreocupada, algo típico en él –Podemos ir ahora mismo si quieres, en invierno lo único que hacemos en el club y calentar en el ginmasio hasta que él entrenador se canse de observarnos y hacer un montón de reuniones aburridas, no importa si me pierdo una.
Minseok por un instante llego a pensar que al parecer Luhan recaía en sus viejos hábitos, tal parecía que había malentendido sus palabras, incluso no importaba si ahora le trataba de forma distinta y valla que demasiado. Incluso últimamente le estaba poniendo a él como su prioridad en todo momento y ya no se veía con Luna, era extraño pero solo por hoy dejaría de darle tantas vueltas al asunto disfrutando por una vez de ser el centro de atención.
Los dos empezaron a caminar hacia la sala de exposiciones luego de dejar la escuela, al final el cuadro de Minseok había ganado un premio, para su propia vergüenza y sorpresa. Se había enterado en la ceremonia de premiación del club de arte por obra de Yixing que pareció muy emocionado al comentarle las buenas nuevas.
Hasta ahora nunca le había gustado enseñarle sus cuadros ni dibujos a ninguno de sus amigos y por eso le resultaba tan difícil pedirle a alguien más al tratarse del rubio que le acompañara hasta la exhibición solo para poder ver su trabajo en él que por supuesto LuHan fue su total inspiración. Pero esta vez quería mostrárselo a Luhan pasara lo que pasara, sabía bien que después de todo lo había sucedido no había más razón para huir y por ello se confesaría, sería un verdadero cobarde si no le dijera la verdad a su “amigo” a estas alturas.
A veces Luhan, no perdía ese lado tan infantil que poseía, preguntándole y berrinchudo que él ya conocía muy bien “ ¿Por qué Lay estaba tan cerca de ti?” Con una mirada de pocos amigos al fruncir sus labios con preocupación, pero nunca le respondió a fin de cuentas desde la noche de la fiesta Luhan ya sabía la verdad y la relación con Lay había vuelto sin mayores percances a lo que fue inicialmente. Había estado pensando como loco en todo esto, tomando la osada decisión de darle una conclusión a toda esta situación, no quería verse más como la victima.
Como era Lunes, no eran muchas las personas que frecuentaban el centro de exposiciones por eso el piso que contenía la exhibición estaba casi vacío y Minseok fue directo a su cuadro siendo el guía del rubio, mientras Luhan miraba a cada lado observando curiosamente su entorno del que obviamente no sabía nada.
–Es muy raro que me vallas a enseñar uno de tus cuadros, Baozi … incluso en el festival del instituto te enfadaste y me dijiste que no mirara.
–¿Mmmh? –Luhan no era tonto…. o no tanto, era obvio que empezaba a sospechar algo.
Minseok solo se detuvo frente a su pintura azul y Luhan silbo.
–¿Este es tu cuadro? Es asombroso!
Probablemente aun no se había percatado que la espalda azul que estaba observando en aquel cuadro era la suya y Minseok se vio en la obligación de romper el silencio.
–Eres tu– Susurro por fin mirando de reojo a Luhan.
–¿Yo? ¿Qué? ¿Hablas enserio, Baozi? ¿Ese soy yo? – Luhan miro al cuadro y a Minseok una y otra vez sintiéndose desconcertado y en parte feliz, entonces luego ese instante en el que se vio sumergido en el silenció por la sorpresa se decidió a mirar la placa que estaba bajo el cuadro –“Desire”
–Esta… esta es la imagen que tengo de ti, Luhan… es todo lo que siento por ti…
Minseok por fin se había confesado y Luhan no podía más que mirarlo.
–Pero se llama “Desire” ¿Qué significa eso?
–Que tú eres mi deseo…. Y-yo te quiero Luhan, la verdad es que te he querido desde hace mucho tiempo, mis sentimientos fueron mucho más de nuestra amistad hace mucho, mucho tiempo.
La boca de Luhan se fue abriendo conforme escuchaba, por su expresión parecía que él en verdad no tenía ni la menor idea de lo que había estado diciendo Minseok, eso no le sorprendía para nada. Pero al ver tan inesperada reacción Minseok no pudo evitar reír a carcajadas, estaba esforzándose por confesarse a Luhan con sus verdaderos sentimientos y ahora él idiota hacia esto, que cara más ridícula estaba poniendo!
–Espera un segundo, yo creía que tu y Lay…
–Eso… no era cierto, no me gustaba acostarme contigo así que bueno empecé a salir con él.
La expresión de Luhan cambio completamente, como si empezara a sentirse arrepentido después de todo el tiempo que había pasado, Minseok no parecía tenerle ni un poco de rencor por ello, lo que avivo la culpa en su interior.
–Yo… te quiero, así que tener sexo contigo era demasiado doloroso y difícil, porque tú no sentías lo mismo por mí.
–Tu… porque… ¿Por qué no me lo dijiste nunca?
–Claro como si tu lo fueras a entender… pensé que te daría asco nunca fui precisamente alguien muy extrovertido…además tenía miedo de que me odiarías y por eso no podríamos seguir siendo amigos.
Minseok no estaba muy lejos de la verdad y Luhan lo sabía, estaba experimentando toda una mezcla de sentimientos.
–Pero yo no te volveré a mentir, Luhan, sabía que tenía que decírtelo porque eres mi mejor amigo, no podemos siempre estar de la misma forma es estúpido… además si no lo dejamos ahora no creo que sea capaz de volver a enamorarme.
Claro que Minseok trato de sonar tranquilo y hasta feliz, pero por supuesto que él no estaba pensando para nada en volver a enamorarse de alguien.
–Así que no te preocupes, Luhan…No pienses que me has hecho algo terrible, es verdad que esa época fue muy dolorosa para mi, pero ahora siento que pudo haber sido algo mejor… incluso si fue por curiosidad, pude darte mi primera vez….
–No fue por curiosidad, Baozi –Luhan lo interrumpió en voz baja.
–¿Qué? ¿De qué hablas?
–Te dije que no fue por curiosidad! Lo fue al principio no lo niego, había imaginado como era estar contigo y si… quise ver como seria en realidad y como fue mejor de lo que me imagine alguna vez, yo solo no te quería dejar marchar, se que fui un idiota pero no quería admitirlo… tú te convertiste en alguien mucho mas valioso para mí.
–Luhan…
–No podía dejar de pensar en ti, sabes aun pienso en ti todo el tiempo, me pregunto si seré feliz con que los dos solo seamos amigos, me lo he estado preguntando hasta ahora y es molesto…por que no es lo que quiero, incluso pensé que cuando tuviese la oportunidad te alejaría de Lay, pensé en muchas formas de hacerlo.
Aun sin proponérselo Luhan volvía a ponerle nervioso.
–¿Pero qué dice? Tu tienes novia! ¿Acaso te olvidaste de Luna?
–Ella bueno veras… rompí con ella hace un tiempo, ella y yo no estábamos juntos cuando te encontré con Lay, esa noche lluviosa… lamento no haberte dicho esto antes.
–¿Qué? Tienes que estar bromeando!
Ahora era a Minseok a quien le temblaban los labios, no necesitaba preguntar de que día hablaba por supuesto que lo recordaba bastante bien, entonces ¿era esa la razón por la que no les volvió a ver juntos? ¿él era la razón? ¿Luhan le estaba diciendo que lo quería?
–Baozi, no me odies por esto, pero la verdad es que solo se me pone dura contigo. Minseok pestañeo un par de veces sin poder retener las lagrimas que se deslizaban por sus mejillas.
Incapaz de retener algunas lagrimas, Minseok pestañeo varias veces en vano.
–Tú, pervertido estúpido…
Luhan sonrió y asintió, acariciando los cabellos de Minseok con una de sus manos.
–Lo se, soy un pervertido.
–Pensé que el único pervertido era yo –Dijo Minseok con voz Temblorosa, sintiendo que su corazón explotaría en cualquier momento.
Luhan no lo pensó dos veces y dio un tiron para abrazarle, además de plantar un pequeño beso en su mejilla, por fin aquel peso que tenia sobre sus hombros había desaparecido completamente, dejando una refrescante calma en su interior algo muy difícil de explicar, todo gracias a su Baozi.
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“Una mala semana” Tres palabras que fueron como un desastroso mantra que se repetía sin fin en su mente, de verdad estaba haciendo su mejor esfuerzo por no perder la calma, es decir todas las personas solían tener momentos así en su vida, pero Kris no o no al menos con tanta frecuencia y por eso empezaba a pasarla muy mal, nada quedaba… ni siquiera la sombra del jugador estrella del equipo de basketball. Días después de aquel “incidente” en la fiesta, parecía que sus pases y tiros eran los peores del equipo, dejando por encima de si a los cuatro suplentes que realmente apestaban.
–Si no lo estuviese viendo no podría creerlo ¿Qué mierda sucede contigo, Kris? Nunca tuviste un juego tan malo, jamás! Se acabo tu polvo de hadas o tal vez no has podido echar un buen polvo?
Era ironico como los papeles se invertían y ahora él era quien estaba siendo ridiculizado por su equipo, pero se abstendría de poner a toda aquella panda de idiotas en su lugar, no valía la pena su posición en el equipo estaba en juego , sin mencionar que apenas podía pensar con claridad, pues aquellas palabras que en su momento no parecieron ser importantes ahora iban y venían cada vez de forma más contundente en su mente amenazando con desquiciarle, se suponía que esto no le sucedería, era Kris, el nunca en su vida tuvo que preocuparse por algo si quiera parecido, pero allí estaba inmerso en un gran arrepentimiento y frustrado pues Lay lo evitaba como todo un experto.
–Aprovéchenlo mientras puedan… no tendrán tanta suerte después –Susurro para después sonreír con soberbia frente a los demás, lanzando premeditadamente su pelota la cual impacto fuertemente el pecho de uno de los suplentes, dejándole sin aire y justo después se retiro del gimnasio.
Pese al gran esfuerzo que estaba haciendo para continuar con su vida “normal” y pretender que todo estaba bien, sabía que no podía ni convencerse a sí mismo a largo plazo se cansaría de fingir, por eso tomaría al toro por los cuernos y terminaría con el problema de raíz la única forma de hacerlo era ir a por él enano de los hoyuelos asegurándose por supuesto de que en esta ocasión no pudiese huir. Debido a su estatura con solo correr alrededor de cinco minutos se vio a si mismo frente a la sala de arte estupefacto, sin idea de que hacer aun cuando lo más obvio era irrumpir en el lugar.
Con su mano puesta en el pomo de la puerta sintió una ligera punzada en el pecho mientras deslizaba la misma lentamente como si la vida se le fuera en ello, al menos había estado de suerte y sus suposiciones no fueron erradas al encontrar en el solitario salón a Lay, muy ajeno a lo que sucedía mientras pintaba o eso le pareció al más alto, quien intento aproximarse sin prestar atención en su camino chocando con algunas bancas.
–Lo siento pero las actividades del club se sus…– Lay detuvo su comentario secamente al percatarse de quien se trataba una vez alzo su mirada.
–¿Qué haces aquí? Como puedes ver el club termino sus actividades y Xiumin no se encuentra.
–Te creí un poco más inteligente, no se necesita ser un genio para saber porque me encuentro aquí –Respondió al cruzarse de brazos.
–Parece que el único tonto aquí eres tú, si no mal recuerdo la última vez te dije que no quería volver a verte.
–Veo que te quieres pasar de listo, escucha no se me da para nada bien seguir ordenes cuando no estoy interesado. Menos aun cuando no me dan una razón como tú, cobarde ¿A que le temes?
–Primero no tengo por qué darte explicaciones de mis decisiones, segundo si supones que es a ti a lo que temo estas muy equivocado – Fue la última vez que Lay le encaro antes de continuar con su trazado.
–Pues deberías…
–Abre los ojos, no todo lo que desees pasara.
Kris se inclino discretamente a espaldas de Lay.
–Al menos dime ¿Por qué me besaste?
–No tiene importancia – Molesto por el acoso del mayor, Yixing presiono su sanguina entre sus dedos intentando mantenerse calmado.
–Estas acabando con mi paciencia pero te diré algo y escúchame bien porque será la primera y única vez que lo dire – Con ambas manos tomo sus hombros sintiendo el cuerpo del menor tensarse rápidamente – Si no me importara seguro no estaría siguiéndote como si fuese un acosador, has sido un terrible dolor de cabeza estos días, incluso los suplentes juegan mejor que yo….
–Y-yo…. ¿Qué tiene que ver eso conmigo?
–TU!...al menos escucha hasta que termine
Aguantando sus ganas de discutir y a regañadientes, Lay guardo silenció para no soportar mas de los reproches de Kris.
–No he podido dejar de pensar en lo que ocurrió durante la fiesta, más que eso sigo pensando en ti y tu… no dejaste de ignorarme y evitarme todo este tiempo, negándome cualquier oportunidad de hablar, te fuiste sin dejarme más alternativa ¿Cómo crees que me siento?
–Eso era lo mejor, las cosas ya estaban claras desde el principio, no quiero que vengas a buscarme por lastima y mucho menos para fastidiarme.
Emitiendo un gruñido producto de la rabía, Lay refunfuño palabras en verdad nada claro, siendo interrumpido nuevamente por él mayor.
–Si me vas a decir tantas tonterías sería justo que te des la vuelta y me lo digas de frente.
–Suficiente, no necesito mas sermones de este tipo y la verdad no quiero verte mas – Bajo ninguna circunstancia Lay quiso darse la vuelta.
–Lo siento, pero esta vez no me da la gana dejar que huyas.
No pasaron mas que un par de segundos probablemente cuando Kris se animo a ponerse en el camino de Lay obstaculizando la única salida de la sala y se cruzo de brazos, haciendo que Yixing se negara nuevamente a hablar.
–Kris! Deja de hacer esto es ridículo ¿Cuántos años tienes? Madura!
–Si tengo que ser ridículo lo haré y me escucharas, puedo ser infantil tal vez pero al menos no soy un cobarde.
–….
–Me gustaría que cooperaras un poco.
–No me queda de otra ¿verdad? Tu no me dejaras en paz – Mas que resignado Lay no tuvo de otra que mantenerse al margen, Kris era mucho mas terco de lo que pudo haber imaginado.
–Empezamos a entendernos… ahora dime ¿Por qué me besaste?¿Tanto bebiste? Yo creo que no o de lo contrario ni lo podrías recordar.
–¿Qué insinúas? Si piensas que nunca antes había bebido estas muy equivocado, además no te bese solo porque estaba bebiendo, eres bastante malo sacando conclusiones.
–Oye cálmate! Solo quiero arreglar las cosas no pretendía decir algo así. Mira hagamos esto por las buenas.
Estaba lo bastante cansado como para seguir discutiendo con él mayor, así que volvió a tumbarse en su asiento para al menos sentirse más a gusto e intentar llenarse de valor al menos para responder sin que sus palabras fuesen puestas en duda.
–Mira…. Kris la verdad creo que me gustas… ¿Bien? Yo nunca te vi como a Xiumin, por que puede que si estuviese un poco más animado por lo que bebí, pero al final me amine a hacerlo cuando tuve la oportunidad.
Lay intentaba mantenerse sereno a pesar de que su confesión le había costado un ligero sonrojo, Kris por su parte se mantenía incrédulo incapaz de convencerse de que no estaba alucinando o su imaginación le estaba jugando una mala pasada.
–No era tan difícil decirlo ¿ves?
–Deja de portarte de forma tan arrogante solo estoy respondiendo a tu pregunta asi que baja de la nube a la que vas.
–Lamentablemente no puedo ni quiero hacerlo, porque pasa que….creo que también me gustas– Dijo él mayor.
Para ambos fue muy difícil ignorar lo cerca que se encontraban, el silenció no era algo desagradable al contrario hacia las cosas menos tensas haciendo mucho mas natural para ambos lo que sucedió a continuación. Al menos para Lay no fue una sorpresa ser besado por Kris sus labios eran mucho mas suaves de lo que recordaba, ya era muy tarde para detenerlo mas aun cuando también había deseado besarle nuevamente, cosa que jamás admitiría no se atrevería a subir su ego ni un poco más.