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Tulipán amarillo por BE pez

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Notas del capitulo:

Muy buenas a tod@s! ^_^

Aquí voy con el segundo capítulo de este fic. 

Puede que aun cometa algunos fallos, o en según que momentos deseen tirarme a la olla, pero les pido paciencia T^T 

Como dije anteriormente, este fic fue creado por la convocatoria que creo Miky-san (tan hermosa y apapachable como siempre, mi Miky-swaaaan <3 <3)

Como bien saben, y para los que no ahora sí: Los personajes de One Piece no me pertenecen, son propiedad de Eiichiiro Oda-sama. Este Fanfic es parte de la Convocatoria de Parejas Crack organizado por El Burdel de Kida. Con el motivo de ver el mundo arder (....JA! nunca mejor dicho para este fic xD)

Ya sin más dilación, les dejo con Dalia. Disfrútenlo ^_^

 

Dalia 

 

En el otro extremo de la ciudad; en un bloque de pisos, ajenos del caos que sufría el hospital central de Enies Lobby, se encontraba sentado en su cama, y leyendo un libro, un desnudo moreno, con tatuajes en pecho y brazos.

-Maldito Mugywara-ya... ¿Cuánto más piensas hacerme esperar?-ahora eran las 00:00. Ya hacía dos horas y media que el joven Trafalgar yacía esperando a su novio; para pasar juntos una noche de diversión y desvelo... pero la jinda del pastel no venía. Se estaba demorando más de lo normal, y eso que Law le había dicho muchas veces que hoy no debía llegar tarde a casa.

A Law no parecía importarle estar como Dios lo trajo al mundo; lo que sí le molestaba era que SU novio le estuviese dando calabazas. Esta desde luego no se la iba a perdonar. No importaba que excusa le diese el menor, Law no iba a perdonarlo por ello.

Enfadado y molesto, el moreno-tatuado se levanto de la cama con las vergüenzas colgando y el torso al descubierto, para dirigirse a la nevera y tomar un poco de cerveza. Pero el intento de ahogar sus penas en alcohol aumentaron al ver el montón de comida que había preparado el cejitas-pervertido. Luffy nunca había rechazado a Law, y menos a la comida... tal vez había pasado algo y por eso su pequeño llegaba tarde, pero... ¿Que podía ser tan urgente que ni siquiera lo llamase al móvil? El moreno-tatuado empezó a preocuparse al ver que Luffy nunca llegaba. Necesitaba algo con lo que distraerse o de lo contrario, esa preocupación se convertirla en agonía.

El joven Trafalgar se dispuso a tomarse otra cerveza mientras veía la tele; cambiaba de cana constantemente para ver si hacían algo interesante... pero paró en seco cuando vio las noticias nacionales.

-...Mugywara-ya!!!

"Eso no... ¡Esa imagen otra vez no!" pero por mucho que Law rogase en silencio, el mismo lo había visto con sus propios ojos. Había visto primero un plano general del hospital en llamas, en donde podía distinguir de entre los camiones de bomberos los de W.O.F. No era una novedad que sus compañeros estuviesen ayudando a apagar un fuego... pero lo que sí perturbo al Law fue ver esa cosa en la azotea del hospital. Aquella maldita señal... aquella muestra de que el terror volvería a la ciudad de Enies Lobby una noche más...

En tiempo record, Law se había vestido y cogido lo necesario para ir hasta el hospital. Sabía que no podría ejercer de bombero con las ropas que llevaba, pero cuando aquel sujeto actuaba era mejor atender a los heridos y salvar al mayor número de gente posible. Law ya había abandonado la estancia y ahora bajar hasta su coche para ir directo al lugar de los hechos, pero con las prisas se había dejado la comida en la mesa y el televisor encendido.

Mientras Law bajaba las escaleras como alma que lleva el diablo, la tele aun seguía mostrando las imágenes que le habían hecho reaccionar; en la pantalla del televisor se podía ver a pacientes y doctores tirarse por las ventanas, algunos salían con heridas graves... otros no tenían la misma suerte. Otras imágenes mostraban a los bomberos, de distintos centros, enfrentándose al fuego con las mangueras. Pasaba una imagen tras de otra, hasta que por fin salió la azotea del hospital. Gracias a que el fuego aun no había llegado hasta el punto más alto del edificio algunas enfermeras, médicos, pacientes o personal del hospital estaban ahí arriba; a la espera de que los helicópteros llegasen para rescatarlos... pero aun con tanta gente ahí metida, aquella señal se veía perfectamente desde la cámara que la enfocaba: en el suelo de la azotea se veía dibujado un mensaje, pintado con spray rojo, donde claramente mostraba una sola letra: "A". 

--    --                           

-Habéis visto a nadie más en la 2n planta?!-preguntaba Shanks a Marco por la línea del walkie-talkie.

-Negativo! Pido permiso para subir a la 3r planta, Sr.-Marco respondió por la otra línea sin problemas.

-Permiso concedido! Tened cuidado y reuniros pronto con el--

-Que no lo hagan!

Shanks miro perplejo a Smoker. En la entrada a duras penas podías entrar o salir sin quemarte de pies a cabeza, y en la 1r planta ya no era seguro permanecer por más tiempo. El fuego subía con ferocidad y pronto invadiría la 2n planta; era un peligro permanecer ahí por  más tiempo.

-Pero que estás diciendo?! Están en la 2n planta; el fuego los atrapara, igual que a los de la 1r, si permanecen ahí por más tiempo!

-Aun no pueden subir! No hasta que los otros grupos lleguen a la 5t planta y los helicópteros de rescate vengan a por los de la azotea. Ese maldito pirómano ha quemado la base del hospital; si le ponemos todo el peso de la gente en la última planta, el edificio se debilitara y los techos flaquearan! Con eso solo conseguiremos que más gente muera quemada,  o peor aún: sepulcrada!

-Aun así, no podemos depender de los helicópteros! Ya hace rato que deberían haber llegado y--!

-Tu da la orden! Diles que vuelvan a hacer una última revisión. Yo me pondré en contacto con la base, por si ya enviado los helicópteros. Y si pasa algo, yo cargare con toda la responsabilidad.

Shanks vio como Smoker luchaba por no perder la calma; ya habían muerto un par de grupos en la entrada y en la 1r planta; no quería arriesgarse y perder a más hombres. Una de las muchas dificultades de ser bombero era que; cuando todo dependía de una sola decisión podías equivocarte, o bien salvar vidas. Y Smoker deseaba que fuese la segunda opción.

En los últimos incendios, causados por el pirómano "A", W.O.F. habían perdido a tantos bomberos que la 5t división se había disipado por completo.

Al final, Shanks dio la orden que Smoker le había impuesto. Marco accedió y ordeno a los de su escuadrón que volviesen a hacer una segunda revisión, pero esta vez en grupos de dos. Marco se enfrentó, junto a otro compañero de equipo, a las llamas que crecían por momentos y al humo que estas provocaban. Entre el toxico humo y el sofocante calor, el cabeza-de-piña se sentía como un pavo en noche vieja.  

--    --                           

Mientras tanto, las cosas a fuera del hospital no iban mejor; los médicos que habían logrado salir del hospital, más los que habían ido ahí para ver qué pasaba, más los bomberos con título de medicina (como Law), estaban atendiendo a las víctimas más necesitadas o con quemaduras graves. Los auxiliares se encargaban de los pacientes menos dañados y de vendar a los ya atendidos.

-Cuando vendrán las ambulancias?!-dijo el joven Trafalgar.

-Hace mucho que salieron del atasco; ya deberían estar aquí!-dijo un médico del hospital.

Si los que estaban dentro del hospital eran las ratas en la cocina, a fuera se sentía como si hubiese estallado una guerra. El servicio médico había dividido en dos grupos a los afectados; el 1r era el de las victimas por el fuego, y el 2n el de los que se habían salvado. En cada uno también los habían dividido por grupos; los que necesitaban de máquinas, como los bebes prematuros u otros, estaban en las pocas ambulancias que habían conseguido salvar, los ancianos o personas con problemas de respiración estaban junto a los inválidos o los que estaban en proceso de re-habilitación. Al lado de estos estaba el sector de pediatría, donde cada bebe o niño era atendido por un auxiliar o por sus padres.

En medio de los gritos de dolor o los llantos, Law iba de un lado para otro ayudando a quienes lo necesitase. Aquello era un completo caos ¿Cómo, en tan solo dos horas, las cosas se habían torcido tanto? Lo único bueno de todo eso era que, con tantas vueltas dadas, algo tenía en claro; su Luffy estaba bien.

-Alguien! Necesito a alguien que atienda a mi amigo! Ha perdido mucha sangre y tiene una herida muy grande en el pecho!

-Que ocurre?!-Law se giro para ver quién chillaba y lloriqueaba. En medio de aquel caos, ya solo faltaba que alborotadores como ese narizón molestasen a los médicos con sus.... espera; narizón?

- Tra-trafalgar!- los llorosos ojos de Usopp se encontraron con los grises de Law... pero el mayor entro en shock cuando vio a quien cargaba el nariz-larga.

-Es-es-es Luffy! Estábamos por subir a la 1r planta y reunirnos con Marco, cuando el fuego... Conseguimos sobrevivir gracias a unos extintores que había por ahí, pero sin darnos cuenta las llamas empezaron a crecer y Luffy... Luffy...¡Por favor, haz algo! Ya no lo oigo respirar!

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Smoker había acertado con su decisión; los helicópteros habían llegado a tiempo y ya se habían llevado a todas las víctimas del último piso. Ahora tan solo quedaban los bomberos que habían sobrevivido. Marco y su escuadrón habían perdido a un par de compañeros, pero el resto estaban ahí; junto a los otros escuadrones.

-Oye Thatch, has visto a Luffy?- pregunto muy preocupado Marco.

Desde que los habían separado en diferentes escuadrones que no sabía del menor. Por desgracia para el cabeza-de-piña, su amigo le negaba con la cabeza "Mierda, Luffy...!"

-Crees que tardaran mucho en llegar, amigo?

-Estaremos bien. Nuestros superiores no se han olvidado de nosotros. Somos sus hombres y, al igual que todos los que salvamos cada día, también tenemos una vida. Sé que vendrán a por nosotros- Marco dio un paso al frente y recibió toda la atención de sus compañeros y del resto-Confiemos en nuestros nakamas!

Con aquellas palabras, Marco había suavizado un poco la tensión en el ambiente. Ya no había tantos rostros de miedo o preocupación...  pero el tiempo parecía ir a cámara lenta; el humo del fuego ya los alcanzaba y las llamas no tardarían en hacer lo mismo. El ardiente elemento amenazaba con subir hasta tocar el cielo, y si eso pasaba, no muchos bomberos podrían salvarse. Ahí había más de tres escuadrones de bomberos (unos de W.O.F. y otros no). Siendo realistas; la cosa pintaba fatal...

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Habían pasado ya dos meses y medio desde lo ocurrido aquella noche, pero la ciudad de Enies Lobby no dejaba de hablar de ello. La mañana siguiente después del incendio, anunciaron por todos los medios las cifras de muertes por el incendio, la cual llegaba a unos 277 de fallecidos, sin contar con los servicios de rescate. De heridos hubo cerca de unas 600 personas. En total, aquella noche hubo más de cuatro mil personas  afectadas.

Ahora que la tormenta había cesado, detrás venía la calma para los habitantes de Enies Lobby. En W.O.F . seguían tan atareados como siempre, pero la rutina era deseada mil veces más que una noche como aquella. Pero dejando de lado todo eso, centrémonos ahora en nuestro joven cabeza-de-piña.

Marco iba dentro de su coche, junto a otros acompañantes; Thatch y Sabo. Los tres habían salido a comprar algo para ir a visitar a Law... el cual estaba al borde de la locura.

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La luz fue subiendo hasta pararse en el numero 7, entonces el ascensor se detuvo y se abrieron  puertas. Los tres ya estaban por tocar a la puerta del piso, pero recordaron que les habían dejado las llaves de repuesto. Sabo las saco de su riñonera y estuvo a punto de ponerlas en el cierre, cuando los mayores le detuvieron.

-No crees que deberíamos  llamar primero? Aun estando como está, no es motivo para irrumpir en su casa... ¿o sí?

-Thatch tiene razón, Sabo. Por muy preocupados que estemos... no lo veo motivo suficiente para entrar sin avisar.

-Sé a qué se refieren, pero... en serio creen que nos abrirá si tocamos la puerta? Desde lo ocurrido con Luffy que no ha dejado entrar a mucha gente-los mayores se miraron entre sí, hasta que terminaron rendidos y aceptaron. No sabían lo que pasaría tras abrir aquella puerta, pero aun así debían armarse de valor moral y hacerlo. Todo por el bien de...

-Te he dicho que no es para tanto... te prometo atarte con menos fuerza esta vez.

-No quiero! Estoy arto de que me tengas atado a la cama todo el día, Torao!- dijo Luffy mientras soltaba uno de sus característicos pucheros.

-Si te estuvieras quieto y reposando como es debido, no llegaría a tales extremos! Es tu culpa por ir de correcaminos por la casa!

-Eso es porque apenas me dejas salir a tomar aire!

-Eso no es verdad y lo sabes- el mayor de los morenos señalo con el dedo índice un muy bien decorado balcón.

-Mira! Te he preparado un buen sitio para que tomes el sol y sientas la brisa del aire, pero tú no le haces ni caso!

-Que te crees que soy? Una planta?! Necesito más espacio, Torao!

-Muy bien pues... ven a que te ponga la correa.

-Eh...?

-Sé cómo eres, Mugywara-ya. Si te pierdo de vista un solo minuto huiras y empezaras a corretear por ahí. Si te pongo una correa podre vigilarte de cerca.

-Ahora soy tu perro?! Me gusta que Torao me ate por las noches, pero me niego a esto! Antes tendrás que cogerme!

-Vuelve aquí ahora mismo! Si sigues corriendo así tu herida se abrirá de nuevo!

El menor de los morenos le hizo una careta de burla a Law y siguió corriendo sin cesar por el piso, dejando a tres de sus amigos sin habla.

-...Esta peor de lo que me imaginaba- decía Marco mientras se acariciaba la sien con la mano. Sabo y Thacht solo afirmaban con la cabeza.

Con lo posesivo y protector que se había vuelto Law después del accidente, apenas dejaba salir a Luffy de casa. Había usado sus "condiciones" de médico para cuidar del pequeño Mugywara en el hogar, pero eso era solo una excusa barata para tenerlo mejor vigilando. No soportaba la idea de que nadie se le acercase o lo revisase; su pequeño Luffy era suyo y solo ÉL tenía permitido tocarlo. Con todo aquel control que ejercía sobre el menor, Law se había vuelto como un marido que cuidaba de su esposa embarazada "O peor que eso..." pensaron Sabo, Marco y Thatch a la vez.

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-Eso no es justo, Marco! Prometiste acompañarme siempre que fuese a ver a Luffy ¿Es por lo que ocurrió ayer?

-No fue solo lo de ayer... es por TODOS y cada uno de los días que hemos ido a verlo.

-Vamos... tampoco fue tan malo ¿verdad Thatch-san?

-Claaaro que no, Sabo-kun... ¡Tan solo tuve que poner mi cabeza debajo de la pica para quitarme los restos de comida que había por mi pelo!

-Si... recuerdo que tuvimos que usar toda nuestra fuerza para que Luffy no se comiese tu cabeza- soltaron ambos rubios. Luego empezaron a descojonarse por la cara de cabreo que puso Thatch al ver a su hermoso tupé desbocado.

-Yo no le veo la gracia! Por un momento pensé que me iba aquedar calvo!

-Como cuando Marco rescato a aquellos niños del Zoo?

-Sí, exactamente! JAJAJAJAJAAJA- ahora eran Thatch y Sabo los que se reían de Marco.

Los tres pasaron un rato agradable en la cafetería de W.O.F., hasta que el menor de ellos les dejo solos; Shanks llamaba por megafonía a todos los miembros de la 1r división. Sabo ya se había alejado de la mesa donde se hallaban los mayores, pero Marco aun no apartaba la mirada de él.

-Hum... que interesante- dijo Thatch con una picara sonrisa en su rostro.

-El que...?- Marco había cambiado su semblante a uno de extrañez; nada iba bien cuando su amigo le hablaba en ese tono.

-Nada, nada... es solo que veo que Law-kun no es el único mami-gallina que hay en W.O.F.

-Ha? No entiendo a lo que te refieres- dijo aun más confuso el cabeza-de-piña.

-Vamos amigo, de veras esperas que te lo diga?

-Parece que lo estas deseando, así que dispara.

-Jajaja ¡Qué bien me conoces! Pero si tanto insistes, no veo el porqué ocultártelo...

-Ya déjate de misterio y di.

-Bueno, pues iré directo al grano: a ti te gusta Sabo. Y no me refiero al gustar entre amigos, no... Hablo de algo muuucho más profundo que eso.

Aquello si era ir directo al grano... La mente de Marco le impedía pensar con claridad y su corazón parecía que le iba a salir del pecho. Era como si Marco fuese el ladrón que es pillado infraganti por el guardia de seguridad, pero debía decir algo o sino Thatch tomaría su silencio como un "sí".

-N-no sé de qué me estás hablando. Ya te dije que Sabo es solo un amigo de la infancia.

-Puede que sí... o puede que no. Yo diría que es algo más  que "un amigo de la infancia".

-Tonterías. Jamás sería capaz de ver a Sabo de esa manera.

-Sabes que, a veces, tendemos a esconder la afirmación detrás la negación?

-Que quieres decir con eso?

-Pues que por una parte, tu corazón sabe que lo amas, pero tu razón le impide manifestarse. En pocas palabras; tratas de negar lo que sientes por él.

-Eso son solo ñoñerías filosóficas para enamorados.

-En serio crees eso? Entonces responde a lo siguiente: porqué desde que llego Sabo no has salido ni una sola noche de juerga? Porqué no me has vuelto a pedir que te consiga alguna mujer con la que compartir tu lecho? Porqué has pasado estas últimas noches viendo películas o cenando con Sabo? Porqué no te lo has llevado de fiesta contigo?... es que acaso temes verlo junto a otra persona? O es que no quieres que él te vea con otra persona?

Tuche! Thatch había dado en el clavo y ahora tenía a su amigo bien cogido de los cataplines. La cena que le debía Sabo a Marco se convirtió en un maratón de pelis en casa del menor, y desde aquella noche que ambos se habían ajuntado siempre que podían para ver alguna película los dos juntos. Otras veces solo cenaban mientras hablaban de cosas triviales o de cómo les había ido el día... pero el caso es que siempre que podían la pasaban juntos o con los amigos de W.O.F.

Ahora que caía en la cuenta, Marco ya llevaba casi tres meses sin tener sexo ¿Sería verdad que todo era debido a Sabo? Mientras aun le rondaba esa pregunta en su cabeza, Marco salto en su propia defensa, con una idea muy desesperada.

-Es porque ahora no salgo con chicas que voy tras mi amigo? Es eso a lo que te refieres?

-Entre otras cosas, sí.

"¿Entre otras cosas...?" -Bueno, eso tiene fácil arreglo; llama a una chica para que salga conmigo. Esta noche.

   --    --                       --    --                           

Marco se había propuesto demostrarle a Thatch que se equivocaba... pero en solo cinco minutos su cita estaba siendo un rollo. La muchacha era una pieza esculpida por dioses, pero no paraba de hablar de sí misma. Marco se dispuso a irse, pero no sin antes dejar a la chica en su casa. Podía ser una plasta-cuerpo-rico, pero Marco no perdería su caballerosidad por ello. 

-La verdad es que desde hace rato me siento algo mareada... ¿Te importaría llevarme a tu casa y dejar que tome un vaso de agua?

"O bueno, si solo es agua" Pero Marco había caído en la telaraña de aquella mujer. Sin duda, la chica iba a por todas; si no podía ganarse a Marco con el arte del habla, usaría su lengua para otras cosas...

Los dos salieron del bar donde habían acordado encontrarse y fueron directos para el choche del cabeza-de-piña; un mini azulado. Era un auto simple y cómodo a la vista, pero daba un aire de misterio y sutileza con aquel color azul grisáceo. Marco se puso al volante y la chica de copiloto. Durante todo el viaje la plasta-cuerpo-rico tampoco dejo de hablar, y a Marco ya empezaba a taladrarle la cabeza aquel tono de voz tan pijo que tenía. A este paso sería él quien necesitaría tomarse un vaso de agua con aspirina.

--    --

Cuando por fin llegaron al edificio la chica siguió a Marco, el cual fue hasta el ascensor y pico los botones tras verla entrar. A los pocos minutos ambos se encontraban delante de la puerta del cabeza-de-piña.

-Pasa, la estancia esta algo desordenada, pero no lo suficiente para--!

A Marco lo habían empotrado contra la puerta de su casa y ahora estaba siendo besado apasionadamente por aquella mujer. Como antes habían estado en un bar, Marco no se había percatado de su fuerte olor a perfume, pero lo compensaba con sus hábiles labios, los cuales le engullían la boca con ansias, pero aunque la llamada de la naturaleza lo reclamase, Macro no sentía estimulo alguno... no hasta que el recuerdo de aquel sueño le vino a la mente "¿Como sería si fuese con Sabo?"  y, como si de una invocación se tratase, delante de sus narices apareció el Sabo real.

-Ah... lo-lo siento...es que... había oído unos ruidos extraños y... pensaba que era...

-Bueno, pues somos nosotros. Así que seas quien seas, te importaría salir de aquí? Estamos ocupados con nuestras cosas.

Mientras la plasta-cuerpo-rico seguía quejándose, Sabo estaba demasiado lejos para mostrar señales de vida. Aquella escena le había dejado en estado de shock y no se atrevía a decir o hacer nada.

El menor estaba cabizbajo y con un coctel de emociones en su interior; primero sentía una mezcla entre vergüenza, rabí y celos, junto con seis gotas de envidia y un chorrito de profunda tristeza.

Los ojos de Marco no habían pasado por alto aquel adolorido y expresivo rostro. Sabía que debía actuar rápido, pero... ¿Qué podía decir?: ¿"Esto no es lo que parece"?, ¿"Es que ha tropezado y yo he amortiguado la caída"? o ¿"Al parece tiene complejo de aspiradora y quería succionarme la boca"?

Bien pensado, mejor no decir nada... Espera! ¿Porqué estaba buscando una excusa? Marco había salido esa noche para llevarse a aquella plasta-cuerpo-rico a la cama. Debía hacerlo o  de lo contrario tendría que aceptar que Thatch tenía razón y...

El cabeza-de-piña aun seguía plantado sin hacer nada, pero Sabo no iba a seguir su ejemplo. Había captado el mensaje; si alguien sobraba, era él. El menor se giro para darle la espalda a la empalagosa pareja y envolvió el picaporte de su puerta con su temblorosa mano. Aquella noche iba a pasarla en vela mientras se volvía bolita, en el suelo de su piso, y lloraba con desconsuelo... y todo porque a Sabo...

Notas finales:

Por si no me explique con claridad (que seguro que es eso u.u') Law trabaja en W.O.F. como bombero, pero este a demás del título de bombero, tiene el de medico... si ya les gustaba la idea de verlo con la bata blanca, ahora con el traje de bombero qué? >///.///< (si dejan review coméntenlo plis x33)

Ya se hacen una idea de quien puede ser el pirómano? Glu buububu...

Y qué opinan? Marco aceptara finalmente sus sentimientos? Y Sabo? Como enfrentara a nuestro cabeza-de-piña después de esta noche?

"A" volverá al ataque? Que vidas se llevara con él en la próxima noche de caos y muerte?

Bueno, por si ya son muchas preocupaciones, les digo una cosa más: puede que me demore en subir los prox. capítulos; antes quiero finalizar mi otro fic. Quiero terminarlo pronto por mi Law-sensei (Kida-san) y porque lo prometí... así que siguiendo el orden de promesas he de cumplir con el otro. 

Gracias miles a los que leísteis mi fic, y lo mismo para los que dejéis review y los que no TToTT

Espero que te haya gústalo la continuación de este fic dedicado a ti, Miky-san <3 <3

Besos y muchos choques de aleta a tod@s! >3<


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