Pero un momento, vale que me haya defendido pero… lo que no entiendo es ¿porque ese gilipollas se cree que estamos saliendo?, ¡MADRE MIA! Ese esta flipando.
- Chis, tráeme a ese inútil -¡ahora mismo! – dije mirando fijamente la puerta.
- ¡vale! Pero prométeme que no lo mataras, ni le pegaran y no se te ocurra levantarte de la camilla ¿entendido? – pues…no te prometo nada, ¡VENGA MUEVETE!
El rubio de mi hermano abrió la puerta, lentamente, mi sangre me hervía, ¿Cómo puede ser tan asqueroso? Yo creía que era mi amigo, pero bueno se va a enterar ese tontopolla.
Entro pacíficamente, pero la verdad es que no aguantaba las ganas para golpearle intensivamente.
- Hijo de puta – esa fue mi primera palabra - ¡ALEX! ¡NO DIGAS PALABROTAS EN EL HOSPITAL!- me grito él
- Mmm…!PUES¡… ¡HIJO DE TU MADRE!
- Vale…oky me lo merezco, pero sé que te gusto, admítelo – se sentó frete a mi.
- ¿QU…? ¿Cómo? – me levante de la camilla dispuesto a partirle la cara.
- ¡ALEX! ¡SIENTATE! – me volvió a gritar
Estuvimos hablando durante mucho tiempo, hasta que una enfermera nos interrumpió.
- Perdone, pero tu señorito acompáñame para hacerte unas pruebas de sangre y a firmar unos documentos, y después estarás listo para irte – terminado de hablar elegantemente con una cortical sonrisa.
- Está bien – bufe
Al irme eche un último vistazo antes de cerrar la puerta de la habitación donde estaban ellos dos.
POV: Christian
- Mira tío, no sé lo que te estas imaginado, pero te lo juro estabas “violando “la boca de mi hermano ¡enserio! Y esos hinchazones de tu cara no eran por ese gorila de la discoteca como tú dices, sino porque fui yo, para separarte de él. Entiéndelo, Edu…además Alex, no es gay – le mire directo a los ojos, se notaba que estaba en shock.
- Pe…pero eeehhh…yo tampoco soy gay - ¿Qué? Ya claro y me lo dice el que casi lo hace allí mismo con Alex,
- Mira, yo no tengo nada en contra con los gays, pero tío mi hermano…te lo pido con por favor, no vuelvas a acercarte a él, o al menos cuando bebas aléjate de mi hermano por el bien, suyo y tuyo.
- Chris…tío ¡DE VERDAD QUE NO LO SOY! Pero no sé porque la tome con tu hermano, sinceramente si fuera una tía, me casaría con ella. Pero honestamente tu hermano desde pequeño me era muy especial.
- Vale, vale…pero no lo vuelvas a hacer – dije chasqueando la lengua.
- Oye, mira y si hacemos un trato, porque sé que tú también (guiándome un ojo) te llevas demasiado bien con él y no me vengas con la excusa de que eres su hermano por…- lo interrumpí
- ¿de qué cojones hablas? – me estaba enervando.
- Tío, te vi, le bésate en su cumple, cuando él muy podre se quedó dormido, ¡eres demasiado pillín! Y después te quejas de mí – entre carcajadas.
- Pero… ¿ACASO ESTAS…? – no me lo creo ¿me vio? Mis pulsaciones subieron de inmediato, mi corazón palpitaba con una locomotora y un sabor amargo emanaba de mi boca.
- SHHHH... tranquilo…vamos a hacer un trato ¿okay? – joder y ahora que estará tramando? ¡ufff! Como se entere peluchito, me echa de la casa y podría ser que también me destroce mi coche o mis mangas y mi hentai ¡OOOHHH!
Cálmate, Christian, comportare seguro que si se lo dice, no lo cera y todo esto le hará caer aún más bajo por ser un mentiroso.
- A ver, te propongo que compitamos, con quien se quiere quedar Alexander ¿te parece bien? Pero no se valdrá dormir con él, hacerle la pelota, ni besarle, ni hacerle cariñitos, solo ser normales con él por una semana, empezando desde ahora ¿Qué te parece?
- Emm…perfecto, estará más que chupado y si gano yo, tú no te podrás acercarte a él a menos que yo te invite y tampoco acercarte a él a menos de diez metros – dije al final con una sonrisa malévola.
- Está bien, pero si Alex, me elige a mí – eso no va a ser posible – bueno ya lo veras, tú te iras de su casa, y solo lo podrás visitar si yo te lo ordeno ¿oky?
- Está bien
Nos dimos un apretón bien fuerte antes de que de nuevo nos interrumpiera la enfermera con peluchito, entrando de nuevo en la sala.