Not let fall you
Baekhyun meneó sus pies en el aire, mientras Chanyeol estaba recostado en la amplia cama. La mente del más bajito rememoraba imágenes del pasado; dolor y angustia. Sabe que no debería estar ni siquiera recordando todas las cosas malas que le habían pasado, pero era inevitable. Había esos momentos en donde Baekhyun pensaba que todo era un sueño y que pronto despertaría. Estaba muy asustado.
No tuvo una bonita adolescencia, lo sabe, pero no puede enmendar lo que había ocurrido ya hace mucho tiempo. Lo sabe, pero aun así no puede borrarlo por completo de su mente, porque tiene miedo de que todo lo que está viviendo ahora desaparezca, como una vez desapareció lo que lo hacía feliz.
Nunca fue su culpa, lo tiene claro, pero el recuerdo es tan doloroso que temé que se haga realidad, que vuelva a sufrir y pierda el sentido de la vida, como lo había sido antes que conociera a Chanyeol. Su gigante tonto sabía que había días en los que Baekhyun se deprimía por algo que había llevado cargado desde años y años.
Una vez, por sus mismos errores, estuvo a nada de perder a Chanyeol y él sabía que lo merecía. Le dolió en lo más profundo cuando miró la mirada decepcionada de Chanyeol y sabía que todo había estado perdido, que la felicidad no tenía cabida en su vida, pero entonces Chanyeol lo buscó aquella tarde cuando recogía sus pertenecías y le prometió nunca dejarlo ir. El miedo más grande de Baekhyun es volver a perder a Chanyeol y descubrir que el gigante se siente decepcionado de él.
¿Cuánto tiempo es para siempre? Se preguntaba todos los días. Tenía claro que el para siempre era ambiguo, ni siquiera hay para siempre y el temé porque quiere que Chanyeol y él sean un para siempre. El pasado lo asecha y carcome. Baekhyun tiene mucho miedo, pero Chanyeol está ahí con él para mantenerlo a flote.
— ¿Qué es? —cuestionó Chanyeol, llamando la atención de Baekhyun.
—Nada —respondió forzando una sonrisa el más bajito.
Chanyeol escudriñó con la mirada a su acompañante.
—Túmbate en la cama Baekhyun y deja de mentirme —ordenó el gigante.
—Bien —Baekhyun acató la orden, deslizándose en la cama para que finalmente quedar tumbado en la cama a lado de Chanyeol.
— ¿Qué es lo que te está agobiando, Baek? —volvió a preguntar Chanyeol, mientras acariciaba la mejilla del contrario.
—Tengo miedo —confesó —. Tengo miedo de perder esto que tenemos. Tengo miedo que me dejes atrás, no podría con ello, Channie —admitió el castaño.
—Nunca te dejaré Baekhyunnie —arrulló Chanyeol —, siempre estaré contigo, para toda la vida.
Baekhyun llevó sus pequeñas manos a las del gigante que aún se mantenía acariciando la blanquecina mejilla del castaño.
—No hay para siempre —soltó.
—Haremos nuestro para siempre —tranquilizó el gigante —. No voy a dejarte otra vez Baekhyun.
— ¿Me lo prometes?
—Te lo prometo.
—Y sí me hundo, ¿te hundes conmigo? —cuestionó el bajito.
—No —contestó Chanyeol, sorprendiendo a Baekhyun de sobremanera.
— ¿Cómo? —preguntó aturdido por la respuesta dada.
— ¿De verdad crees qué voy a dejar que te hundas? —preguntó Chanyeol, haciendo que Baekhyun comenzará a sollozar —. Déjalo ir, Baek, olvídate del pasado y vivamos el presente. Te amo y no lo dejaré de hacer nunca.
Entonces, Baekhyun comprendió que, a pesar de las malas vivencias de su pasado, los errores que había cometido y discusiones, Chanyeol estaría con él y, definitivamente, no lo dejaría caer.